¿Cómo conciliar la enseñanza, el aprendizaje, el currículo y la organización escolar?
Coincido totalmente en lo que expone la lectura, pues es cierto que normalmente y lo he vivido de manera personal durante las jornadas de práctica; cuando un alumno no logra aprender lo que el docente busca enseñarle, este errónea e inmediatamente indaga sobre que está fallando pero de manera directa con el alumno, sin detenerse a pensar que puede ser el mismo y su práctica lo que impide el logro de aprendizajes. Así pues, debemos tener en claro qué es lo que queremos enseñar, pero sobretodo a quien le queremos enseñar, para poder tener conciencia de las adecuaciones curriculares que se requieren emplear para lograr que el niño en su individualidad aprenda de manera significativa. Desde luego que dichas adecuaciones pueden ser de diversa índole, en referencia al currículo serán físicas; en cuanto a recursos y materiales o bien, de comunicación que se enfoca más a las técnicas de enseñanza. Las adecuaciones curriculares rescatan pues, ese valor flexible del que tanto presume el plan de estudios, permitiendo modificar la forma en que se apropiará del aprendizaje cada alumno de forma individual, en referencia a sus capacidades y/o necesidades, modificando además la técnica, el material pero sin perder de vista el objetivo a alcanzar, o en su caso el aprendizaje esperado. Finalmente es importante aclarar, que este tipo de adaptaciones o adecuaciones no existen únicamente para niños con NEE, sino para la comunidad estudiantil en general, buscando potenciar las habilidades que poseen y desarrollando las que aún no están presentes. Concluyo con una frase que resume en su totalidad lo que antes mencione:
Todo esfuerzo por defender la instrucción es vano, cuando no se acomoda la enseñanza a las necesidades, naturaleza y porvenir del que la recibe…. José Martí