Brite, Poppy Z.
La Música de los Vampiros
LA MUSICA DE LOS VAMPIROS POPPY Z. BRITE
Prólogo Prímera parte Segunda parte Epílogo
Agradecimientos Debo una gratitud muy especial a Monica C. Kendrick. Dos de los personajes de La música de los vampiros, Arkady y Ashley Raventon, son hijos de su cerebro. Monica ha tenido la amabilidad de permitir que aparecieran como estrellas invitadas en estas páginas. Mi gratitud también al brillante y arrebatador señor John Skipp, al cortés y siempre ingenioso señor Dan Simmons, y al impresionantemente dotado y generoso señor Harían Blusón. Esos soberbios escritores, que son personas todavía más soberbias, forman mi trío de santos patrás, y quiero muchísimo a los tres. También expreso mi gratitud a Richard Curtis, mi agente, y a todas las personas maravillosas que trabajan en Richard Curtis Associates; a Jeanne Cávelos, mi directora de publicaciones; a David B. Silva y The Horror Show..., sigo echando de menos esa revista y siempre lo haré; a otro excelente escritor y amigo, Brian Hodge, por creer en La música de los vampiros desde el comienzo; a Doug Winter, porque fue el primero que me animó a escribir el maldito libro; a Ed Bryant y a Tom Monteleone por actos y palabras maravillosas; a todos los de Iniquities. A Craig Spector, Lisa Wimberger, Linda Marotta, Kathryn Ptacek, A. J. Mayhew, J. R. McHone, Jodie y Steve Forrest, Pat Johnson, John Gillespie, John Hughes; Brad y Forrest Cahoon y John Ross por la ayuda que me prestaron cuando tuve que tratar con ordenadores temperamentales; a todos los fetos del Nantahala Street Compound por apartarme de mi trabajo y apoyarme para que continuara con él; a Paul, el clon-
-1-