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PIEDRAS CHINAS
QUISHI Colección particular de Jesús Texto y Fotos:
Revuelta y María Rosa Bonet María Rosa Bonet
Es una de las piedras que expuso Pius Notter en Lenzburg y la que hizo que me fijara en ellas. Le puse el nombre de “Cisnes en el lago”. Si se mira detenidamente se ven los tres cisnes que están con la cabeza dentro del agua.
Detalle de la peana donde se aprecia un insecto libando en la flor del nenúfar.
En el Congreso Europeo de Bonsái y Suiseki de Lenzburg de 1.999, Pius Notter expuso unas piedras chinas de su colección, nunca había visto o reparado hasta entonces en ellas, me fascinaron. Algunas son sugerentes, enigmáticas, grotescas, de colores llamativos, otras tienen una exquisita sensibilidad, formadas netamente por la naturaleza, aunque en
ocasiones retocadas por el hombre. pero todas ellas tienen una característica, la demostración de la fuerza espiritual que nos transmite la naturaleza . Su nombre originario SANSUI-SEKI (escenario o piedra paisaje), así lo demuestra Sus shi-zuo ( daiza, base o pedestal), muchos de ellos extremadamente recargados, son verdaderas joyas de talla de
madera, no hay nada improvisado en ellos, sino, al contrarío es una sola unidad con la piedra, todo está coordinado y el tallador lo tiene todo pensado y estudiado, con sus gubias, nos esculpe un paisaje, nos traslada a una estación o como no, nos hace vivir una quimera, lo mismo que un pintor con su pincel, traslada su imaginación al lienzo.
3 Esta piedra es una de mis favoritas, transmite claramente una noche de luna llena, con un cielo totalmente estrellado y con un fuerte oleaje. Su nombre poético es “Luna nel Mar”. Sus medidas son 40 cm x 36 cm x 18 cm.
Detalle de las olas talladas en la madera que refuerzan la imagen de un temporal e indican la dirección de las olas.
Expuesta en el Congreso Europeo de Bonsái y Suiseki de Alberobello del 2006, donde fue galardonada con el premio de la Associacione Italiana Amatori Suiseki- AIAS.
4 Esta fotografĂa de Mariano Fagiani, ilustra el libro Migliori BonsĂĄi e Suiseki 2006 de la Unione Bonsaisti Italiani.
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Detalle de la parte trasera de la piedra donde se ven árboles tallados en la madera. Piedra con un intenso color anaranjado dejándonos imaginar que es una isla con árboles bañados por la luz del sol al atardecer. La peana de 5 cm x 22 cm x14 cm, tiene tallados unos crisantemos en la parte delantera, podríamos decir que el artesano a querido trasmitirnos que es otoño, época que florecen.
Puesta de sol en la playa de Liencres, cuyos tonos inciden directamente en la isla.
Fragmento o parte de los crisantemos donde podemos apreciar con detalle las flores, hojas y los diminutos capullos. La flor del crisantemo simboliza “larga vida”.
6 En este paisaje, la escalera une la peana con la piedra a modo de camino. Sus medidas 17cm x12 cm x7 cm.
Detalle de las hojas.
En la peana podemos observar como una de las ramas del pino cruza un pequeĂąo rĂo. En la parte trasera de la piedra estĂĄn talladas unas flores de camelia, que florecen en invierno.
Flor de camelia.
7 Otra puesta de sol de la playa de Liencres, la coloración depende de las nubes, en este caso el cielo estaba totalmente despejado.
Esta piedra de 22 cm x 20 cm x 17 cm y tenue coloración anaranjada es otra de las clásicas piedra paisaje. EL shi-zuo de la piedra tiene una altura de 6 cm, alto x 21 largo x16 cm. ancho, es de una madera tosca y clara, se puede apreciar el tinte rojo que le han dado y luego un acabado muy oscuro. Tiene un hueco de 4 cm. de profundidad para albergar mejor la piedra.
La roca también tiene una escalera, lo mismo que los talladores las imprimen en las peanas. Detalle de la escalera que sube desde el mar y nuevamente un pino que esta vez extiende su rama hacia la derecha. En la cultura oriental el pino es símbolo de longevidad. En la parte de atrás de la piedra, están talladas unas flores, que podrían ser de camelia, prunus o chaenomeles estas variedades florecen en invierno.
8 Esta pequeña piedra de cálida coloración y tan solo 10 cm x 8 cm. representa una flor en primavera, Fue un obsequio de Salvador Reyes en el XX Congreso Nacional de Bonsái de Benalmadena , con motivo de nuestra jubilación, esto no tendría importancia sino fuera que se desprendiera de ella para obsequiárnosla , después de haberla comprado para él en China; para mi es símbolo de gran generosidad y siempre que la contemplamos tanto Xus como yo, nos acordamos de él. Se desvanece Un color sin ser visto: El de la flor que guarda el corazón De los hombres del mundo
Ono no Komachi
Parte posterior de la piedra. Apreciamos en el shi-zuo su forma de cáliz ensamblándose perfectamente con la flor, seguido por el tallo y las hojas.
Detalle del shi-zuo.
9 Es una piedra de llamativos colores, lo mĂĄs importante en ella es su base de madera tallada a modo de bambĂş Sus medias son 15 cm x 17 cm x 15 cm.
Detalle de la peana y de la coloraciĂłn de la piedra.
Parte de la talla donde se aprecia donde va posada la piedra. El shi-zuo mide 2 cm x 30 cm x13 cm.
10 Esta piedra de gran dureza, un tanto grotesca con concavidades y agujeros pronunciados, no deja de sugerirnos una gran roca en el mar, azotada brutalmente por las olas y el viento. Sus medidas 20 cm x 17 cm x 12 cm.
Peana un tanto pesada, para aguantar el contrapeso. Sus medidas son 7 cm x16 cm x10 cm.
11 Siempre son verdes los pinos, pero llega la primavera y el color de los pinos es un poco más verde. Minamoto no Muneyuki
Es una piedra de porte majestuoso, que nos traslada a través de ella y de su shi-zuo, a un paisaje montañoso. Sus medidas son 38 cm x36 cm x14 cm.
Detalle de una piña.
En este fragmento podemos ver la coloración de la piedra y como discurre con fuerza un río que baja de la montaña y lo cruza una rama de pino con una piña en su extremo, al lado otro árbol.
12 Flor de la wisteria, que florece a principios de la primavera.
Parte trasera de la piedra, su shi-zuo es diferente pero de igual belleza.
Detalle de la talla donde se aprecia el trabajo de una wIsteria.
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Fragmento de la talla del bambĂş
Detalle de un mini bambĂş japonĂŠs.