A TODO CRACK Brillante con la ‘Oranje’ Elia siempre se ha motivado especialmente con la zamarra de su selección. Desde que empezó con la Sub-19, ha ido subiendo peldaños hasta ser convocado con la absoluta para el Mundial. En su debut con el equipo de Van Marwijk dio dos asistencias y en su primer partido oficial consiguió el tanto de la victoria.
GALLOS DE PELEA “Lo que mal empieza, mal acaba”, dice un sabio refrán. La clasificación de Francia para el Mundial de Sudáfrica se logró a través de una clara mano de Henry que permitió a Gallas marcar el gol galo que dio el pase al torneo. Los ‘bleus’ entraron con polémica y salieron envueltos en un escándalo tan monumental, que la tensa situación de la selección se ha convertido hasta en un asunto de estado. La peor imagen del Mundial la ha ofrecido Francia. Las causas del conflicto tienen diversos orígenes. Se apunta la renovación generacional que no se produjo tras el fracaso de la Eurocopa 2008 y la controvertida continuidad de Domenech al frente del equipo. La ausencia de un aire fresco en el grupo provocó que el ambiente se envenerara aún más entre unos futbolistas que se creían por encima del bien y del mal.
BALONAZOS
Mejor joven de 2009 En un Twente cada vez más sobresaliente, Elia destacó, llevándose el trofeo al mejor jugador joven holandés de la Eredivisie 2008-09. Seedorf, Sneijder, Kluivert, Robben o Van Persie ya ganaron ese galardón en el pasado.
Ídolo en Hamburgo
ELJERO ELIA Eljero George Rinaldo Elia nació el 13 de febrero de 1987 en Vooburg, Holanda. Mide 1, 77 m, pesa 71 kg y juega como extremo. Tras jugar en SV Voorburg, Forum Sport y Tonegido durante su infancia, Elia firmó por el Ado Den Haag, su primer equipo profesional, a los nueve años. Allí estuvo hasta el 2000, año en que el Ajax se lo llevó. Tras un par de temporadas, regresó al Ado donde debutó con el primer equipo con 17 años (59 partidos y seis goles). En 2007, tras descender el equipo de la Haya, firmó por el incipiente Twente (64 partidos y 11 goles) donde realmente explotó como jugador. En 2009 el Hamburgo lo fichó por nueve millones (23 partidos y cinco goles) confirmándose como crack.
PUNTUACIÓN
Su juego irreverente y vertical no deja indiferente a nadie. Tras fichar por el Hamburgo por nueve millones de euros, rápidamente se hizo un hueco entre los predilectos de los fans alemanes. En numerosas ocasiones se le ha utilizado como revulsivo, logrando cambiar el signo de un partido.
ATAQUE: DEFENSA: PASE: DISPARO: REGATE: JUEGO AÉREO: CARÁCTER: TÁCTICA: VELOCIDAD: FALTAS:
Así juega Tremendamente veloz e incisivo, Elia es una pesadilla para los laterales rivales. Tiene un gran uno contra uno, es descarado y no se lo piensa a la hora de disparar.
Envíen sus cartas a DON BALÓN-ECUADOR a: Quito: Panamericana Norte 3 1/2. Por correo electrónico: db-america@email.com
EXPLOSIVIDAD Y VERTICALIDAD
MEDIA: Director Internacional ROGELIO RENGEL ROS Editor América Latina: R. Franco-Caputi Editora Ecuador: Lic. Juana López Asociados en Ecuador: LA HORA
En el grupo del Facebook de DB encontrarás más de mil amigos que comentan de fútbol. www.facebook.com/ donbalon
9 5 8 8 9 6 7 7 10 6
7,5
INFORME
Todo cambia, menos los árbitros ciegos 1966, Londres. En un escenario majestuoso como es Wembley, donde Inglaterra logró su primer y único título mundial. Lo consiguió derrotando a Alemania en una final que pasó a la historia después de que el delantero Hurst, a los 101 minutos y en la prórroga, lanzara sobre la meta germana y el balón botara sobre la línea de gol. Un juez de línea azerbayano le dijo al árbitro que el balón había traspasado la línea. El gol, el 3-2, abrió las puertas de la gloria para Inglaterra, que acabó ganando 4-2. Muchas cosas han cambiado en el mundo en 44 años. Menos de ellas en el fútbol, donde sigue teniendo cabida el error humano ante la insistencia de no utilizar la tecnología.
A ARGENTINA LE FACILITAN EL PASE A CUARTOS Otro grave error arbitral en este Mundial –esta vez del italiano Roberto Rosetti–, permitió a la Argentina de Maradona encarrilar un encuentro en el que México estaba ofreciendo mejor cara. Al borde de la media hora de partido, Tévez adelantó a la albiceleste en clara posición de fuera de juego. Los once hombres de la selección mexicana llevaron en volandas al árbitro hacia la posición de su asistente, pero ni las protestas de los desesperados jugadores de Aguirre ni el evidente fuera de juego que se reponía una y otra vez en los videomarcadores del estadio evitaron la atrocidad futbolística que se cometió contra México dando validez al gol del 'Apache'.
"Nosotros hemos tenido errores, pero el árbitro ha cometido el más grave de este Mundial" Fabio Capello
INCREÍBLE... PERO CIERTO Es una de esas citas recurrentes y manidas que de cuando en cuando se lleva a la boca cualquier aficionado al fútbol. La firmó el ex futbolista inglés Lineker y dice que el fútbol es un deporte inventado por los ingleses y en el que siempre ganan los alemanes. Encierra frustración por tantos choques frontales y fatídicos contra un enemigo viejo e indómito, metáfora de competitividad en grado supremo. Así sigue siendo esta vieja nueva Alemania. Joven, jugona y multicultural, sí. Pero Alemania: orgullosa y ganadora. Y de esa mezcla sale un equipo que es un trueno y que está en cuartos con vitola de aspirante con todos los honores a convertirse en campeón del Mundo. Pero, Inglaterra también sufre por errores arbitrales... como la recordada Mano de Dios (de Maradona), en el Mundial de 1986. Esta vez, en el transcurso de un intercambio de alto voltaje, Lampard hizo un disparo terrible que reventó el larguero, la pelota botó casi ¡un metro dentro de la portería! y salió despedida fuera de ella. Ese gol era el empate 2-2. Pero, el árbitro uruguayo Jorge Larrionda no dio el gol e Inglaterra y revivió una pesadilla invertida: lo que le lanzó al título en 1966 –un gol polémico contra los alemanes, en la final– le robó su penúltimo hálito de vida en 2010. Con esa jugada acabó el partido y comenzó una controversia que ya forma parte de las historia de los mundiales. Todo el estadio y millones de espectadores a través de la TV, vieron el gol... menos los árbitros.
Este error de terror debería servir para cambiar las reglas: árbitros detrás de las porterías o que se acepten oficialmente las repeticiones de las jugadas más cerradas.
INFORME Las calles de HOLANDA se tiñen de color naranja
La “Oranje” vuelve a rebelarse contra el destino CON LA RELATIVA TRANQUILIDAD SOCIAL QUE LES CONCEDE SU EJEMPLAR RESISTENCIA A LA CRISIS QUE AZOTA AL PLANETA, LOS HOLANDESES VUELVEN A FROTARSE LAS MANOS EN UNA COPA DEL MUNDO. FIELES A SU CARÁCTER HISTÓRICO, INTENTAN APARTAR LOS REVESES DEL PASADO PARA CREER SIN RESERVAS EN LAS POSIBILIDADES DE UN EQUIPO JOVEN Y FUERTE EN TODOS LOS FRENTES. Casi cuatro décadas después, los neerlandeses siguen sin ponerse de acuerdo sobre lo sucedido el 7 de julio de 1974. Unos dicen que fue exceso de confianza, convertido en prepotencia cuando Neeskens hizo el 1-0 antes de que ningún alemán tocase el balón. Los ‘oranje’ se dedicaron a pavonearse de su rival, gustándose en la evidencia de su superioridad hasta el punto de considerar prescindible acrecentar su mínima ventaja. Otros culpan al árbitro inglés John Taylor, por caer en la trampa de Bernd Holzenbein y señalar el inexistente penalti del empate; o al improvisado defensa Arie Haan, incapaz de frenar la jugada con la que Gerd Müller consumó la remontada de la RFA. Los hay que hablan de miedo a ganar, ése que jamás han sufrido los germanos, y que impidió a los de Rinus Michels mover el marcador en el segundo tiempo. Y queda quien apunta a la tensión generada por los rumores publicados en la prensa local en vísperas de aquella final de la Copa del Mundo. ‘Bild’ destapaba una fiesta subida de tono en la piscina del hotel de concentración de Holanda, con cuatro jugadores, cuatro jóvenes alemanas y muy poca ropa de por medio. Con fiesta erótica o sin ella, lo cierto es que esa derrota forjó el carácter holandés en las grandes citas mundialistas: su espíritu colectivo, su amor innegociable por el juego bonito, su incapacidad manifiesta para sentenciar en los momentos decisivos y, sobre todo, su ardiente rivalidad con Alemania. Si bien es cierto que las generaciones holandesas posteriores a la Segunda Gran Guerra bebieron del sentimiento antigermano de sus antepasados, el golpe encajado en 1974 dolió tanto como lo hizo por el puro convencimiento deportivo de que los Cruyff y Neeskens eran mejores que los Müller y Beckenbauer. Ya sin el mítico ‘14’, la primera ‘Naranja Mecánica’ de la historia reinterpretó su papel fatal en Argentina’78. Su manera de caer fue incluso más dramática,
pero todos coincidieron en que mucho menos dolorosa. No estaba Cruyff. No era Alemania. La historia de la grandeza naranja no comienza a escribirse hasta mediados de los 50. Con dos décadas de retraso respecto a otras potencias, el fútbol ‘oranje’ alcanza la profesionalización en 1954. Aunque los motivos de tan tardío progreso son abundantes y de diversa índole, uno de ellos destaca por encima del resto: la invasión nazi, conflicto que abrió una profunda herida en el pequeño país del norte de Europa. No sólo en los planos político y económico; sino también, y de forma acentuada, en el social. La ocupación alemana, violando la histórica neutralidad bélica neerlandesa, trazó un sangriento reguero de vidas humanas durante los cinco años que duró. Sin embargo, para mediados de los 60, Holanda había protagonizado un auténtico milagro económico. En tiempo récord, había florecido el bienestar sobre las cenizas del conflicto, gracias al carácter pragmático y trabajador de toda una nación. Las nuevas generaciones, alejadas de las duras tareas de la posguerra, muestran una inquietud filosófica y una rebeldía social irrefrenable, que sólo tendría parangón en Europa un par de años más tarde, en el Mayo del 68 francés. Y mientras la juventud del Viejo Continente se identificaba con las canciones inglesas de los Beatles, en los Países Bajos emergía la figura de un ídolo local. Un imberbe melenudo nacido en Amsterdam, contumaz como los ‘Provos’, empeñado como ellos en cambiar la historia cuestionando lo establecido. Su nombre: Johan Cruyff.
Y LLEGÓ EL ‘FÚTBOL TOTAL’ El prodigio socioeconómico holandés había encontrado su reflejo en el fútbol. Las dos figuras clave en la gestación del ‘fútbol total’ son exponentes de sus respectivas generaciones: el díscolo Cruyff, todo carisma y talento individual; y el
entrenador Rinus Michels, exigente e innovador. Si con esos ingredientes el país había pasado de la depresión al auge, de la mano del dúo el balompié saltó casi directamente de la mediocridad y el anonimato europeo a sentar las bases del juego moderno. Primero, con el Ajax tricampeón de Europa entre 1971 y 1973; después, perfeccionando ese equipo con las estrellas del mejor Feyenoord de todos los tiempos para formar el inolvidable combinado ‘oranje’ del Mundial de 1974. Sería ese torneo el que marcaría la peculiar manera de vivir el fútbol del aficionado y el jugador holandés: su identidad, sus virtudes, sus defectos, su rivalidad más acérrima. Todo nace en Alemania’74. Era la primera fase final de una Copa del Mundo que Holanda disputaba desde 1938. Consecuentemente, era la primera vez que la nación podía vibrar con los suyos en una gran cita a través del televisor. La fiebre naranja no tardó en desatarse cuando los de Michels, que había tomado las riendas de la selección tan sólo tres meses antes del inicio del campeonato, superaron la pri-
mera fase de grupos. Pero la locura llegó con la segunda: Cruyff y compañía arrollaron a Argentina (4-0), vencieron con comodidad a la República Democrática Alemana (2-0) y dejaron en la cuneta a Brasil, vigente campeona (2-0). Enamorando a todo un planeta con su juego preciosista, dinámico y ultraofensivo, Holanda se
la figura
ROBBEN El ‘Galgo de Bedum’ es el jugador más desequilibrante del equipo. Velocidad, desborde y gol son sus armas; su fragilidad física, su gran hándicap. Holanda necesita su mejor versión para llegar lejos. Incluso lesionado y entrando en los segundos tiempos, es un futbolista que puede marcar un gol desde fuera del área o dar un pase de genio para que otro compañero perfore las redes.
plantó en la final. La anfitriona República Federal era el último escollo en su camino hacia el título. El desenlace es conocido.
TODO UN PAÍS NARANJA Aunque sin la insultante superioridad de aquella época, Holanda está en Sudáfrica envuelta en una atmósfera similar a la del 74. Es la misma que rodeó a la generación de Van Basten, logrando un insuficiente consuelo con la conquista de la Eurocopa de 1988; y la misma que pocos años después abrazó al grupo liderado por Dennis Bergkamp, condenado en la tanda de penaltis en dos europeos y un Mundial. Los ‘oranje supporters’ vuelven a confiar ciegamente en los suyos, y más después de una impecable fase de clasificación y de la primea ronda del Mundial. La Copa del Mundo despierta una gran pasión. Las calles vuelven a teñirse de naranja y los medios no hablan de otra cosa. A Bert van Marwijk y sus hombres les corresponde reescribir el final de la leyenda. DB
y ojo con... VAN BRONCKHORST El veterano capitán es la prolongación del seleccionador sobre el terreno de juego.
VAN PERSIE Es indiscutible en el once titular. Polivalente y con un disparo demoledor.
el seleccionador
BERT VAN MARWIJK Seleccionador desde 2008, se ha granjeado la confianza de la prensa y los aficionados con un pleno de triunfos en la fase de clasificación. Sus ayudantes son Frank de Boer y Phillip Cocu.
INFORME
ÖZIL -MÜLLER
LA NUEVA ALEMANIA LA JUVENTUD Y LA GLOBALIZACIÓN SON EL SELLO DE IDENTIDAD DE LA NUEVA ALEMANIA DE
SU APELLIDO ES SINÓNIMO DE GOL Thomas Gerd Müller lleva
JOACHIM LÖW. OZIL, MÜLLER, BADSTUBER Y COMPAÑÍA PIDEN PASO. ES UN EQUIPO MUY
el gol en la sangre
JOVEN... CAPAZ DE PERDER POR UN GOL COMO GANAR POR GOLEADA.
estilo opuesto al
pese a tener un de Gerd Müller. Se
Por Ricard Brincau / Fotos: Cordon Press
mueve muy bien en ataque, no es
La selección germana se ha puesto el mono de trabajo como casi siempre. Como de costumbre. En 2002 sucedió algo parecido y llegó a la gran final que perdió frente a Brasil. Pero la Alemania actual se asemeja poco a aquella selección que se quedó a un paso de la gloria en tierras asiáticas... Empezando por la ausencia de Michael Ballack, la estrella germana en el Mundial de hace ocho años, y que no está en Sudáfrica debido a una lesión. Otros veteranos de aquel equipo como Kahn, Linke, Ramelow, Ziege, Hamann, Jeremies, Schneider, Bode, Neuville o Bierhoff se han retirado o están en el ocaso de su carreras. La Alemania de 2002 tenía sus puntos fuertes en la competitividad, el despliegue físico y el juego directo, es decir, el estilo que siempre ha caracterizado a la mannschaft. Era un equipo experimentado, muy físico y casi 100% alemán.
25 AÑOS, LA MEDIA DE EDAD La presente selección teutona presenta uno de los planteles más jóvenes del campeonato: 25 años es la media de edad de los 23 convocados. La cifra aún podría ser inferior de no ser por Butt (36 años), Klose (32) y Friedrich (31), que son los tres únicos jugadores que superan la treintena. Luego encontramos a la generación intermedia formada por Lahm, Schweinsteiger, Podolski, Mario Gómez, Trochowski, Jansen, Mertesacker o Kiessling. Todos ellos ven como los jóvenes suben con fuerza: desde los futbolistas del Bayern de Múnich (club que aporta siete jugadores) como Müller o Badstuber a los centrocampistas del Werder Bremen Özil y Marin. A los cuatro citados tenemos que añadirles a Boateng, Khe-
egoísta y puede disparar con ambas piernas.
dira, Kroos, Aogo y Tasci, todos ellos nacidos de 1987 hacia adelante.
LA ‘MANNSCHAFT’ MÁS GLOBALIZADA La juventud germana se refleja en el descaro y el atrevimiento de sus futbolistas. Pero éste no es el único toque distintivo del equipo. Hay un dato que habla por sí solo: 11 de los 23 jugadores tienen un origen foráneo. La lista es larga y encontramos desde un delantero nacido en Brasil como Cacau a otro como Marin, nacido en Bosnia-Herzegovina. Tampoco podemos olvidarnos del trío polaco formado por Klose, Podolski y Trochowski. Basta con recordar a ‘Poldi’ pidiendo perdón a su país natal después de marcarle dos tantos en el Polonia-Alemania de la pasada Eurocopa. Özil y Tasci (raíces turcas), Mario Gómez (padre español), Khedira (madre tunecina), Jerome Boateng (padre ghanés) o Aogo (progenitor nigeriano) completan la Alemania más multicultural de todos los tiempos. Apellidos como Badstuber, Schweinsteiger o Müller se codean con los Marin, Özil o Tasci. Los nombres ‘foráneos’ aún podrían ser más: Kuranyi, Asamoah, Owomoyela, Odonkor, Kevin-Prince Boateng, Choupo-Moting, Nuri Sahin... por suerte para la despreciable ultraderecha germana, Sahin, Boateng y Moting han preferido defender a otra selección diferente a la alemana, mientras que los otros cuatro ya no cuentan para Löw. Celozzi, Contento, Adler, Hummels, Beck, Träsch y Sukuta-Pasu no están en Sudáfrica por distintas razones, pero cumplen el perfil de esta Alemania que se ha ganado portadas por méritos propios: todos son jóvenes y algunos tienen raíces extranjeras. Al gen competitivo teutón se le está sumando el talento más propio de otros países: una mezcla prometedora. Esta Alemania no tiene límites. Ahora sólo falta por ver cuándo ofrecerá su mejor versión. La experiencia adquirida en Sudáfrica les puede ir muy bien de cara a la Eurocopa de 2012 que se disputará en Polonia y Ucrania o el próximo Mundial que organizará Brasil dentro de cuatro años. Aun así, parece que los Özil, Müller y compañía son inconformistas y no quieren dejar para mañana lo que pueden hacer hoy. DB
CAPITÁN LAHM UNA ‘VIEJA GUARDIA’ MUY JOVEN La lesión de Michael Ballack ha provocado un cambio de liderazgo en la ‘mannschaft’: Philipp Lahm y Bastian Schweinsteiger (nacidos en 1983 y 1984, respectivamente) se han convertido en los dos primeros capitanes de Alemania. Ambos son dos de los pilares del equipo junto al tándem Lukas PodolskiMiroslav Klose. Estos dos últimos han demostrado a lo largo de los últimos años que se crecen cuando se enfundan la zamarra teutona. Si bien Klose ya tiene 32 años, el trío Podolski-Lahm-Schweinsteiger es joven pero a su vez lo suficientemente maduro como para guiar a los nuevos talentos. Hay quienes piensan que la ausencia del siempre influyente Ballack ha sido una bendición.
los ‘otros’... SAMI KHEDIRA Técnico y con buena visión de juego, tampoco tiene reparos en meter la pierna si es necesario. Buena distribución de balón, gran planta (1’89 m.) y facilidad para anotar.
HOLGER BADSTUBER Del filial del Bayern al Mundial en menos de un año. Su proyección ha sido más meteórica que la de Busquets. Defensor muy completo que rinde de central o de lateral zurdo.
MARKO MARIN Velocidad, descaro y calidad para enlazar con el ataque al servicio del seleccionador teutón. Él y Özil ya han hecho diabluras en Bremen y quieren repetir con la ‘mannschaft’.
SERDAR TASCI Demuestra un temperamento y una colocación impropia en un central de 23 años. Su mayor virtud es que domina todas las facetas del juego. Bastante duro.
TODO TALENTO El centrocampista del Werder Bremen, Mezut Ozil, posee dos grandes virtudes: suma técnica más velocidad en los uno contra uno y conduce con el balón pegado al pie. Magnífica visión de juego y gran capacidad de pase. Tiene que mejorar en la definición.
JEROME BOATENG Löw tiene un defensor de primer nivel en la recámara, ya sea de central o de lateral. Expeditivo, inexpugnable por alto y atento al corte, brilló en el Europeo sub-21 de 2009.
CARAS
Un pintoresco fanático de Argelia contrasta con la imagen de modelo de una bella hincha “catracha”... demostrando que Honduras tuvo mejor participación en las tribunas que en la cancha. Miles de alemanes se reunieron en una plaza de Berlin, para ver en pantalla gigante como la selección germana aplastaba a Inglaterra. Un argentino demasiado serio –quizás no comparte el optimismo de Maradona– y un eufórico presidente de Brasil, Lula, gritando un gol de la “canarinha”.