Hágase La Luz Fría, desolada y estéril, Como un sepulcro vacío, Gira la atmósfera a oscuras En constante remolino. Gira y dibuja en su forma, Un gran espiral rojizo, Que se abre aterrador, En ancho y perfecto círculo. Como si fuese una boca Sofocada por el grito, Un gran hueco impenetrable, Un hoyo negro, un abismo, Un útero gigantesco Por donde va a ser parido Con dolor el Universo, Tras infernales designios. Y allí puja y allí espera, Como un animal herido, Como leona en su jaula Que ruge a cada latido. Y ruge y puja y espera En un profético rito, Hasta que el tiempo se cumpla Y cuando se haya cumplido, Tras un rugido inmortal ¡¡Tierra y Luz, habrán nacido!!
Adán y Eva Bajo tu brazo despierta Como un ave acurruca, Desnuda, frágil, fecunda, Hembra primera y profana. Tibia la piel de sus senos Sobre tu cuerpo descansan Y vas sintiendo en el tuyo Que se clavan como garras. Un calor que va creciendo, Que arde como dos llagas Y un deseo incontrastable Que te flagela y amansa.