Lejanía y allá quedó mi pueblo con la boca gastada de palabras eclipsando porvenires perdura perfumado con el clima ciclotímico de siempre su tierra desgarrada por el hierro el viento con su lengua modera la cabellera dorada del trigo y desplomado el sol la leña es atrapada por el fuego la escarcha se regenera sobre la hierba indemne y yo distante pecaminoso en el abandono le abro el pecho convertido en un arquetipo del egoísmo todos mis días cortándome la piel con una lágrima
Medianoche me come la noche me comen las balas esparcidas en el asfalto ajeno en un hielo temeroso
alada la oscuridad es un manto áspero que invade los cuerpos frágiles poseyéndolos tétrica e indisoluble fría y tibia de cuándo en cuándo amante del espanto y del amor sofocante me come y nos come hasta el próximo sol Huida el tiempo está exhausto y tropezamos en sus arrugas la vida aleatoria nos deja inmóviles en su trajín día y noche quedamos sin aire somos aves extraviadas que no descubren tierra ni mar el azar es tan antónimo del azahar y el villero es tan villero para los ciegos... oxímoron herrumbroso viceversa que viene y va así nos regurgita el instante aunque tratamos de huir
con las sienes aladas De cacharros y posesiones traéme los remansos del río que vera tu casa el camino enchastrado al que se lanzan tus pies mientras las aves besan las partículas de tu aliento y desnudo como Inacayal esperás día a día la muerte lejos de los enfrascados rescatás los sedimentos de una miseria que harapienta cubre todos los desencantos quiero sobreponer lo empírico los sonidos que emiten tus platos de lata tus cacharros la memoria del viento que te enlaza el pelo pastoso tu pequeño puño cabe en mi palma y llevándolo en alto se convierte en rebeldía en querer cambiar pero es tan difícil que caemos y cada vez nos cuesta más seguir aunque no paramos ni pararemos si estamos imantados tal vez se derrumbe la estética y se rompa la cara contra esa pared la que los acumuladores evitan a más no tener
hasta que trastabillen con sus mismas porquerías sin que les queden siquiera pasillos para seguir la vida o la esclavitud que sus posesiones les imponen Y allí seguiremos nosotros inclaudicables a los manotazos tratando de conservar las pequeñas cosas a los manotazos con el amor Vamos yendo fuimos desmigajando la vida dejando heridas cicatrizadas que multiplicaron la experiencia fuimos desperdigando amigos leyendo otras vidas trajimos los bártulos cargados de impostores que creímos eran lo que creímos trajimos inocentes manos entre las nuestras sueños vagabundos no acudimos a los rezos ni lloramos contra puertas comidas solo fuimos hacia allá sí hacia allá sí ya sé que hay murallones ya sé que hay musgo en las piedras que el mar no está calmo que escupe sal sé que ese colofón no está cerca pero
ahí vamos ahí vamos
Canario dijo que no sosteniendo contra la mesa la única pluma que dejó el canario de tantos años dijo que no al viento a nosotros que quisimos arrojarla a la basura nos dijo que el ave de oro padeció el desgarro para que con ella nos acariciemos la nostalgia
El inventor Duerme un manojo de hielo negro sobre el sitio en que aguardo el porvenir donde se exhuman las palabras donde los fantasmas pertenecen a los muertos soy un vate que rescata sortilegios libre y demócrata
oculto entre minúsculas de marginados llevo un índice marcado en la sien la flama del disidente un ceño de quien no es llevo una amapola mal juzgada un atisbo a la dicha y a la incoherencia e invento sentimientos para hacer feliz
Desorbitado tengo la oscuridad pegada en los párpados el desgarro de querer ser camino entre lodo y heces perfumado de indiferencias roído por garras humanas hediento de represión resignado como un rumiante dispuesto a morir la carne tensa los hijos quemándome el corazón en tanto la injusticia se levanta a cada puñetazo me persigue pero resisto igual que ella ¡ no me traigan más muerte! déjenme ser imperfecto y feliz déjenme caer en el abismo de mis principios no vean mi estética piérdanse en el intrincado escondrijo en mi propio yo ¡ solo estoy pidiendo un favor un tiro de gracia de la compasión! mi niño está escondido en su laberinto taciturno por no hallar el camino
perdónenme por la mímica de querer parecerme a todos para agradar aún conservo ideas de acero y pies de azúcar me derrumbo en cada zancada esquivo el manotazo de la incomprensión
pero no me meto en atuendos de víctima escarbo desesperado terrón por terrón hundo la nariz cabeza hombros toda mi existencia pero sigo sin encontrar las exequias del amor
Gastón Sequeira nació el 30 de noviembre de 1975 en Coronel Pringles, provincia de Buenos Aires, Argentina. Actualmente está radicado en la ciudad de Mar del Plata. Comenzó a escribir en el año 2007 a los 31 años de edad. En 2014 publicó su primer libro de poemas: “ La lengua del poeta” ( Edit. Alma de Diamante) y en 2015 su plaquette: “Como buzo ante un pez globo y otro poemas” ( La Garza Mora). Formó parte de diversos grupos literarios. Algunos de sus textos han sido publicados en revistas literarias y antologías del país, blog Mispoetascontemporaneos2. del poeta Gustavo Tisocco, ILA Magazine ( Marruecos) y en sitios Web. Metaforología Gaceta Literaria, ha difundido su poesía en latinoamérica y España. Obtuvo el Segundo Premio en poesía del “Certamen Literario Internacional Ediciones Alma de Diamante”. Participó en la Feria del Libro Mar del Plata Puerto de Lectura en los años 2011, 2013, 2014 y 2015. Además, fue poeta invitado en la 1ª Feria del Libro de Villa Mercedes, San Luis 2013 y recientemente convocado a participar del Festival Azabache 2015. En 2014 fue co-organizador de Bodega literaria, en la Bodega del teatro Auditorium de Mar del Plata. Contactos con el autor:gastonpringas1@outlook.com