HISTORIAS DE LAS RELIGIONES
Jorge Vega Gutiérrez
ÍNDICE 01.ANIMISMO 02.ZOROASTRISMO 03.RELIGIÓN EN LA ANTIGUA ANTIGUA MESOPOTAMIA 04.RELIGIÓN EN EL ANTIGUO EGIPTO 05.RELIGIÓN EN LA ANTIGUA GRECIA 06.RELIGIÓN EN LA ANTIGUA ROMA 07.JUDAÍSMO 08.BUDISMO 09.SINTOÍSMO 10.CONFUCIONISMO 11.TAOÍSMO 12.ISLAMISMO 13.CRISTIANISMO
Animismo El animismo (del latín alma) es un concepto que engloba diversas creencias en las que tanto los objetos (útiles de uso cotidiano o bien aquellos reservados a ocasiones especiales) como cualquier elemento del mundo natural (montañas, ríos, el cielo, la tierra, determinados lugares característicos, rocas, plantas, animales, árboles, etc.) están dotados de alma y son venerados o temidos como dioses. Si bien dentro de esta concepción cabrían múltiples variantes del fenómeno, como la creencia en seres espirituales, incluidas las almas humanas, en la práctica la definición se extiende a que seres sobrenaturales personificados, dotados de razón, inteligencia y voluntad, habitan los objetos inanimados y gobiernan su existencia. Esto se puede expresar simplemente como que todo está vivo, es consciente o tiene un alma. En África el animismo se encuentra en su versión más compleja y acabada, siendo así que incluye el concepto de o fuerza vital universal, que conecta a todos los seres animados, así como la creencia en una relación estrecha entre las almas de los vivos y los muertos. En otros lugares el animismo es en cambio la creencia en que los objetos (como animales, herramientas y fenómenos naturales) son o poseen expresiones de vida inteligente. Los neopaganos a veces describen como animista a su sistema de creencias; un ejemplo de esta idea es que la Diosa madre y el Dios coexisten en todas las cosas. Asimismo, los panteístas igualan a Dios con la existencia.
Características generales • • • • • • •
La vida de los ancestros continúa después de la muerte. Se puede interactuar directamente con los espíritus. Se reconoce la existencia de una gran variedad de espíritus y dioses. El alma puede abandonar el cuerpo durante trances o sueños. Se cree en la mediación de personas sagradas: chamanes, brujos. Hay seres espirituales que viven en el alma o espíritu del ser humano. Se fusionan conceptos: individuo-comunidad, presente-pasado, objeto-símbolo.
• Se realizan ofrendas o sacrificios expiatorio.
Zoroastrismo El zoroastrismo o mazdeísmo es el nombre de la religión y filosofía basada en las enseñanzas del profeta y reformador iraní Zoroastro(Zaratustra), que reconocen como divinidad a Ahura Mazda, considerado por Zoroastro como el único creador increado de todo.
El zoroastrismo posee una importancia única en la historia de las religiones a causa de sus enlaces con las tradiciones occidental abrahámica y oriental dhármica. Principios zoroastristas Los preceptos principales son:
Igualdad: igualdad de todos, al margen de diferencias de género, raza o religión. Respeto a todas las formas vivientes. Condena de la opresión del ser humano, y de la crueldad y sacrificio de animales. Ecologismo: la naturaleza es central en la práctica del zoroastrianismo y muchos importantes festivales son celebrados en la naturaleza: el día de año nuevo, el primer día de primavera, el festival de agua en verano, el festival de otoño al final de la estación y el festival de fuego de la mitad de invierno. Trabajo duro y caridad. Lealtad y fidelidad a la familia, la comunidad y el país.
Religión en la Antigua Mesopotamia Mesopotamia (del griego: Μεσοποταµία, meso-potamía, ‘entre ríos’, traducción del antiguo persa Miyanrudan, ‘la tierra entre ríos’, o del arameo beth nahrin, ‘entre dos ríos’) es el nombre por el cual se conoce a la zona del Oriente Próximo ubicada entre los ríos Tigris y Éufrates, si bien se extiende a las zonas fértiles contiguas a la franja entre los dos ríos, y que coincide aproximadamente con las áreas no desérticas del actual Irak y la zona limítrofe del noreste de Siria. El término alude principalmente a esta zona en la Edad Antigua que se dividía en Asiria, al norte, y Babilonia al sur. Babilonia, a su vez, se dividía en Acadia (parte alta) y Sumeria (parte baja). Sus gobernantes eran llamados patesi. En el interior de Mesopotamia, la agricultura y la ganadería se impusieron entre el 6000 y el 5000 a. C., suponiendo la entrada de lleno al Neolítico. Durante este período, las nuevas técnicas de producción que se habían desarrollado en el área neolítica inicial se expandieron por las regiones de desarrollo más tardío, entre ellas la Mesopotamia interior.2 Este hecho conllevó el desarrollo de las ciudades. Algunas de las primeras fueron Buqras, Umm Dabaghiyah y Yarim y, más tardíamente, Tell es-Sawwan y Choga Mami, que formaron la llamada cultura Umm Dabaghiyah. Posteriormente ésta fue sustituida por las culturas de Hassuna-Samarra, entre el 5600 y el 5000 a. C., y por la cultura Halaf entre el 5600 y el 4000 a. C. (Halaf tardío). La religión era politeísta, en cada ciudad se adoraba a distintos dioses, aunque había algunos comunes. Entre estos podemos ver a: • • • • • • •
Anu: dios del cielo y padre de los dioses. Enki: dios de la Sabiduría Nannar: dios de la Luna Utu: dios del Sol (hacia el 5100 a. C. se llamaba Ninurta). Inanna: diosa Venus Ea: creador de los hombres Enlil: dios del viento.
Religión en el Antiguo Egipto La religión del Antiguo Egipto comprende las varias creencias religiosas y rituales practicados en el Antiguo Egipto por más de tres milenios: desde el período predinástico hasta la adopción del cristianismo en los primeros siglos de esta era. Estas creencias se centraban en la adoración de múltiples deidades que representaban varios aspectos de la naturaleza, simbolizando ideas y funciones de poder, expresados por medio de complejos y variados arquetipos. Durante la Dinastía XVIII, los faraones egipcios habían magnificado la condición de ciertas deidades singulares, como es el caso de Amón, a creadores universales con muchas manifestaciones, de manera similar a los conceptos trinitarios también encontrados en el cristianismo: la creencia de que un dios puede existir en más de una persona.1 Sin embargo, no se practicó el monoteísmo, excepto en el breve período del reinado de Ajenatón, el fundador del Atonismo. Estas deidades eran adoradas con ofrendas y oraciones por los faraones, en los santuarios de los templos. El pueblo los veneraba durante las procesiones, expuestos en templetes exteriores, sobre barcas rituales portadas por los sacerdotes. Apoyados por la realeza, destacaron diferentes dioses en diversos períodos de la historia egipcia y los mitos asociados con ellos cambiaron con el tiempo, así que Egipto nunca tuvo una jerarquía coherente de deidades o una mitología unificada; sin embargo, la religión contenía muchas creencias generales. Entre ellas se encuentra la divinidad del faraón, que ayudaba a unificar políticamente el país,2 y creencias más complejas sobre una vida más allá, que dio lugar a la elaboración de las complejas costumbres funerarias egipcias: embalsamamiento, momificación, enterramientos rituales en ricos complejos funerarios, con templos funerarios, pirámides, mastabas, etc.
Estatua de bronce con incrustaciones de oro (nielado) de Karomama: la divina adoratriz de Amón (sacerdotisa), hallada en Karnak. Dinastía XXVI de Egipto. Museo del Louvre
Religión en la Antigua Grecia La Religión de la Antigua Grecia abarca la colección de las creencias y rituales practicados en Antigua Grecia en la forma de prácticas cultuales, homólogas de la mitología griega. En el mundo griego, la práctica religiosa variaba lo suficiente como para poder hablar de religiones griegas. Las prácticas cultuales de los helenos se extendían más allá de la Grecia continental, a las islas y las costas de Jonia (en Asia Menor), a la Magna Grecia (Sicilia e Italia del sur), y a las colonias griegas dispersas por el Mediterráneo occidental, como Massilia. Ejemplos griegos moderados son el culto y las creencias etruscas y la religión romana. Hay una creencia entre los eruditos de que la primera religión griega provino de, o estuvo muy influenciada por el chamanismo de las estepas de Asia Central hasta la colonia griega de Olbia (en Escitia), en la orilla norte del Mar Negro, y de allí a Grecia. La sociedad griega antigua era radicalmente diferente de la nuestra. Nuestra palabra «religión» no existía en griego antiguo. Los conceptos que nos sirven para describir los fenómenos religiosos contemporáneos no están adaptados para el análisis de lo que era para los griegos lo divino. Los griegos eran politeístas: rendían culto a varias divinidades. Honraban principalmente a los dioses (theoi) y a los héroes. Cada uno de ellos podía ser invocado bajo diversos aspectos en función del lugar, del culto y de la función que cumplía. Estos dioses dotados de poderes sobrenaturales, bajo el mismo nombre, podían presentar una multiplicidad de aspectos. Los epítetos cultuales (las epíclesis), señalaban su naturaleza y su ámbito de intervención. Existía, por ejemplo, Zeus Kéraunos (tonante), Polieo (guardián del orden político, de la polis), Horkios (garante de los juramentos y de los pactos), Ktésios (protector de la propiedad), Herkeios (guardián del cercado, del redil), Xenios (protector de los huéspedes y de los extranjeros). Las otras figuras del panteón griego seguían también este esquema.
El gran y todo poderoso Zeus
Religión en la Antigua Roma La religión romana originaria rendía culto a seres sobrenaturales de carácter indefinido llamados numina como Flora, Fauno, etc. Los de la vivienda familiar eran los Forculus (que guardaban las puertas), Los Limentinus (que guardaban los umbrales), Cardea (de los goznes), etc. Era obligado rendir culto a los dioses de la casa (lares, manes y penates), en forma de fuego del hogar, mientras no se extinguiera la familia. Su sacerdote era el Pater familias, y se celebraba en el lararium. Había dioses específicos para la vida cotidiana. El campesino invocaba al dios del barbecho, de la labor, de los surcos, sementeras, al de segar, trillar. Entre los dioses agrícolas están Rucina, Messia, Tutulina, Terensis, Apulino, Tellumo vervactor, Tellumo occator, Tellumo Messor, etc. Los ganaderos tenían sus divinidades propias. También se rendía culto a las almas de los muertos o manes. Los romanos creían que las almas de los muertos bajaban como sombras donde estaba el cuerpo del difunto, y después volvían al fondo de los abismos, sin comunicación con el mundo de los vivos. La religión romana dictaba para los difuntos la necesidad de incineración.1 Existían además dioses considerados negativos. Los pontífices se encargaban del culto público dirigidos por el Pontifex Maximus. Literalmente los constructores de puentes, formaban el calendario, los días de fiesta, los días propicios, las solemnidades, los días de culto y los destinados la justicia, y concedían la palabra en reuniones y otros actos. Con el tiempo los pontífices fueron los guardianes supremos del culto y sus anexos. El Colegio de los Pontífices era elegido entre personajes respetados por todos. También había sacerdotes sometidos a duras reglas y que estaban consagrados a un dios (Flamen). Así al dios Marte le correspondía el Flamen Martialis, a Quirino el Flamen Quirinalis y a Júpiter el Flamen Dialis. A los dioses se les dedicaron santuarios (Aedicula) y Templos (Templum), y en algunos de ellos se encontraba la estatua del dios correspondiente. Para su mantenimiento los diversos templos disponían de tierras propias, y contaban además con los ingresos procedentes de los depósitos judiciales.
Judaísmo La palabra judaísmo se refiere a la religión o creencias, la tradición y la cultura del pueblo judío. Es la más antigua de las tres religiones monoteístas más difundidas (junto con el cristianismo y el islam), conocidas también como «religiones del libro» o «abrahámicas», y la menor de ellas en número de fieles. Del judaísmo se desglosaron, históricamente, las otras dos religiones. Aunque no existe un cuerpo único que sistematice y fije el contenido dogmático del judaísmo, su práctica se basa en las enseñanzas de la Torá, también llamada Pentateuco, compuesto, como su nombre lo indica, por cinco libros. La Torá o el Pentateuco, a su vez, es uno de los tres libros que conforman el Tanaj (o Antiguo Testamento, según el cristianismo), a los que se atribuye inspiración divina. El rasgo principal de la fe judía es la creencia en un Dios omnisciente, omnipotente y providente, que habría creado el universo y elegido al pueblo judío para revelarle la ley contenida en los Diez Mandamientos y las prescripciones rituales de los libros tercero y cuarto de la Torá. Consecuentemente, las normas derivadas de tales textos y de la tradición oral constituyen la guía de vida de los judíos, aunque la observancia de las mismas varía mucho de unos grupos a otros. Otra de las características del judaísmo, que lo diferencia de las otras religiones monoteístas, radica en que se considera no sólo como una religión, sino también como una tradición y una cultura. Las otras religiones trascienden varias naciones y culturas, mientras que el judaísmo se considera la religión y la cultura de un pueblo específico. El judaísmo no exige de los no judíos unirse al pueblo judío ni adoptar su religión. La religión, la cultura y el pueblo judío pueden considerarse conceptos separados, pero están estrechamente interrelacionados. La tradición y la cultura judía son muy diversas y heterogéneas, ya que se desarrollaron de modos distintos en las diferentes comunidades, y cada comunidad local incorporó elementos culturales de los distintos países en los que vivieron los judíos a partir de la dispersión.
Estrella de David
Budismo El budismo es una religión no teísta perteneciente a la familia dhármica y, según la filosofía induista-védica, de tipo nastika. El budismo ha ido evolucionando en la historia hasta adquirir la gran diversidad actual de escuelas y prácticas. En Occidente ha habido ciertas dificultades para definir el budismo. El budismo se desarrolló a partir de las enseñanzas difundidas por su fundador Siddhartha Gautama, alrededor del siglo V a. C. en el noreste de la India. Inició una rápida expansión hasta llegar a ser la religión predominante en India en el siglo III a. C. En este siglo, el emperador indio Asoka lo hace religión oficial de su enorme imperio, mandando embajadas de monjes budistas a todo el mundo conocido entonces. No será hasta el siglo VII d.C. cuando iniciará su declive en su tierra de origen, aunque para entonces ya se habrá expandido a muchos territorios. En el siglo XIII había llegado a su casi completa desaparición de la India, pero se había propagado con éxito por la mayoría del continente asiático. El budismo ha ayudado en la difusión del lenguaje, y la adopción de valores humanistas y universalistas. Es una filosofía importante en Asia donde se encuentra presente en la totalidad de sus países. Desde el siglo pasado se ha expandido también por el resto del mundo. Al carecer de una deidad suprema pero mostrar a la vez su carácter salvífico y universalista, ha sido descrita también como fenómeno transcultural, filosofía, o método de trasformación. El budismo es en número de seguidores una de las grandes religiones del planeta.Contiene una gran variedad de escuelas, doctrinas y prácticas que históricamente se han clasificado en budismo Theravāda, Mahāyāna y Vajrayāna.
Rueda de Dharma
Sintoísmo Sintoísmo1 (del japonés Shinto (神道 shintō?), a veces llamado shintoísmo, es el nombre de la religión original, nativa de Japón. Incluye la adoración de los kami o espíritus de la naturaleza. Algunos kami son locales y son conocidos como espíritus o genios de un lugar en particular, pero otros representan objetos naturales mayores y procesos, por ejemplo, Amaterasu, la diosa del Sol. Actualmente el Sintoísmo constituye la primera religión con mayor número de fieles de Japón. El número de practicantes varía desde los 108 millones (84% de la población en 2003) que tienen prácticas y/o influencias sintoistas hasta los 4 millones (3,3%) que lo practican regularmente y se identifican con la forma oficial del Shinto. El término Shinto se refiere a las actividades desarrolladas por los japoneses para venerar a todas las deidades del cielo y la tierra; su origen se remonta a los comienzos del Japón. Es considerada la religión originaria de Japón, un culto popular que puede describirse como una forma sofisticada de animismo naturalista con veneración a los antepasados, profundamente identificada con la cultura japonesa. En un principio, esta religión étnica, indígena no tenía nombre; hasta la introducción del budismo en Japón (durante el siglo VI) desde Corea. Una de las denominaciones que recibió el budismo fue Butsudo, que significa "la Vía del Buda". A fin de poder diferenciar el budismo de la religión nativa, ésta pronto llegó a ser conocida por el nombre de shinto. Este nombre, Shin-to, procede de una antigua palabra china que significa El camino de los Dioses. Los japoneses escogieron utilizar un nombre chino para su religión porque en ese tiempo (hace más de un milenio), el chino era la única lengua que tenía escritura en Japón, ya que no se había desarrollado aún la escritura de su propio idioma. La frase que significa Shinto en japonés es Kami no michi.
Torii
Torii flotante
Confucionismo El confucianismo, a veces también llamado confucionismo,1 es el conjunto de doctrinas morales y religiosas predicadas por Confucio. El nombre en chino de su escuela podría ser traducido por ‘escuela de los letrados’. El confucianismo ha ejercido una gran influencia sobre China, Corea, Vietnam y Japón. Fue la religión oficial de China hasta el siglo VII. El canon de la filosofía confuciana lo componen los Cuatro libros. Su pensamiento se formó durante un largo período que abarca las épocas de Primaveras y Otoños y Reinos Combatientes (siglos VII al III a. C.). Cuando China fue reunificada por Qin Shi Huang (221 a. C.), ya era una doctrina perfectamente formada y definida, con muchos seguidores y un gran corpus textual. Luego de la breve dinastía Qin, su núcleo fundamental se ha mantenido intacto, excepto por posibles errores de transmisión e interpolaciones que sólo afectan lo accidental. Como para la mayor parte de sus contemporáneos, los confucianos ven al cosmos como algo armónico que regula las estaciones, la vida animal, la vegetal y la humana. Si esta armonía era trastornada, habría graves consecuencias. Un ejemplo común que utiliza el confucianismo es el del mal gobernante que conduce a su pueblo a la ruina mediante su conducta. El mal gobierno contradiría el orden natural y viola el Mandato del Cielo. El gobernante que se conduce así pierde su legitimidad y puede ser depuesto por otro que recibirá este mandato. Los confucianos eran practicantes de un culto que giraba alrededor de la adoración a los antepasados y de poderes entre los cuales el Cielo era el más claro. El Señor de lo Alto (Shangdi), que es a veces mencionado, era algo más arcaico. Cuando aparece en los textos de los Cuatro Libros, el Cielo es un poder superior, que no está ni personalizado ni tan separado del mundo. No es algo pasivo, pues de él vienen los mandatos y acciones, pero no es un dios del tipo judeocristiano. El Señor de lo Alto aparece como una divinidad suprema en los huesos adivinatorios de la dinastía Zhou. Los textos confucianos, al remontarse a épocas de la Antigüedad, lo mencionan a veces.
Confucio
Taoísmo El taoísmo es una tradición filosófica y religiosa que lleva más de dos milenios ejerciendo su influencia en los pueblos del Extremo Oriente. El taoísmo filosófico se desarrolló a partir de los escritos de Laozi y Zhuangzi. Según la leyenda china, Laozi vivió durante el siglo VI a. C. y tradicionalmente se fecha en ese siglo la redacción del Dàodéjing, aunque según algunas investigaciones actuales es bastante posterior. La esencia de la filosofía taoísta se encuentra en el Daodejing (el libro de la vía y el poder, o del camino y la virtud). El taoísmo religioso se fundó en el siglo III a. C.,[cita requerida] pero no se convirtió en un movimiento religioso organizado hasta el siglo II d. C. El objetivo fundamental de los taoístas es alcanzar la inmortalidad, si bien, a veces no se entiende esta literalmente, sino como longevidad en plenitud. De la misma manera, se decía que las personas que vivían en armonía con la naturaleza eran inmortales. Laozi fue deificado como dios taoísta ―un inmortal―, encabezando un enorme panteón de héroes folclóricos, generales famosos y sabios, todos los cuales alcanzaron la inmortalidad. Sin embargo, la antigua forma del taoísmo era la de una corriente filosófica y no una religión, por lo que los antiguos pensadores interpretaban por «inmortalidad» el hecho de autosuperación del propio ser en comunidad con el entorno, lo que implica buscar la superación y el progreso personal y colectivo, de acuerdo con la mutación constante que enseña el taoísmo. Posteriormente, el taoísmo se mezcló con elementos del confucianismo, el budismo y la religión folclórica. La forma concreta de religión taoísta que fue llevada a Taiwán hace unos 300 años es típica de esta tradición. La característica más distintiva de la práctica actual es la adoración de los antepasados, junto con las deidades taoístas, lo que muestra el claro elemento tradicionalista del confucianismo y el culto religioso de las creencias míticas de Asia, las cuales ambas no eran válidas para los antiguos pensadores taoístas como Chuang Tsé.
Taijitu
Islamismo El islam1 [ zˈlan, hˈlan] (en árabe: مالسإلا, al-Islām (?·i)) es una religión monoteísta abrahámica cuyo dogma se basa en el libro del Corán, el cual establece como premisa fundamental para sus creyentes que «No hay más Dios que Alá2 y que Mahoma es el último mensajero de Alá».3 La palabra árabe Allah, hispanizada como Alá, significa ‘Dios’ y su etimología es la misma de la palabra semítica El, con la que se nombra a Dios en la Biblia. Los eruditos islámicos definen al islam como: «La sumisión a Dios el Altísimo a través del monoteísmo, la obediencia y el abandono de la idolatría».4 El libro sagrado del islam es el Corán,5 dictado por Alá a Mahoma a través de Yibril (el arcángel Gabriel). Los seguidores del islam se denominan musulmanes (del árabe muslim ملسم, 'que se somete'). Atestiguan que Mahoma es el último de los profetas enviados por Dios y sello de la Profecía.6 Se aceptan como profetas principalmente (pero no limitándose) a Adán, Noé, Abraham, Moisés, Salomón y Jesús. Además del Corán, los musulmanes de tradición sunita siguen asimismo los hadices y la sunna del profeta Mahoma, que conforman el Registro histórico de las acciones y las enseñanzas del Profeta. Se aceptan también como libros sagrados la Torá (el Antiguo Testamento de los cristianos), los Libros de Salomón y los Evangelios (el Nuevo Testamento). El islam es una religión abrahámica monoteísta que adora exclusivamente a Alá sin copartícipes. Se estima que hay en la actualidad entre 1.000 y 1.200 millones de musulmanes en el mundo. Según el Vaticano, el islam (conjuntamente con todas sus ramificaciones) es la religión más extendida del mundo, ya que recientemente ha superado el número de católicos,7 y la segunda religión del mundo si se suma el número de fieles de las distintas confesiones del cristianismo. El islam se inició con la predicación de Mahoma en el año 622 en La Meca (en la actual Arabia Saudita). Bajo el liderazgo de Mahoma y sus sucesores, el islam se extendió rápidamente. Existe discrepancia entre los musulmanes y no musulmanes de si se extendió por imposición religiosa o militar, o por conversión de los pueblos al islam.
Islam
Cristianismo El Cristianismo (del griego Χριστός, Christós, «Cristo», literalmente «Ungido») es una religión abrahámica monoteísta basada en la vida y enseñanzas atribuidas a Jesús de Nazaret, presentadas en el canon bíblico y otras escrituras del Nuevo Testamento. Los cristianos creen que Jesús es el hijo de Dios, así como el Mesías (o Cristo) profetizado en el Antiguo Testamento, que murió para la redención de los pecados del género humano, y que resucitó tres días después de su muerte. Algunos de los escritos sagrados cristianos son compartidos con el judaísmo. El Tanaj constituye, junto con la Biblia Septuaginta (más antigua que el Tanaj en su forma actual), la base y la fuente para el Antiguo Testamento de las diferentes Biblias cristianas. Por este motivo el cristianismo es considerado una religión abrahámica, junto con el judaísmo y con el islam. Sus inicios datan de la primera mitad del Siglo I de la Era Cristiana. (Ya desde el siglo XX, algunos estudiosos no toman como fecha incontrovertible el año 33 d.C. para la muerte de Jesucristo. Sugieren que hay un desfase de 4 a 8 años entre el inicio del cómputo de la Era cristiana y la fecha precisa del nacimiento de Jesús de Nazaret, llamado Cristo.3 Y en adición a esto, no hay clara certeza ni consenso entre estos autores de que éste haya muerto a la edad de 33 años, tal como algunos textos bíblicos parecen mostrar. Confróntese al respecto Jn 2:20, Jn 8:57 y Lc 3:23)4 En sus primeras décadas, el cristianismo era considerado como una doctrina sectaria más entre las tradiciones judías e israelitas, al igual que otros cuerpos de ideas y creencias de esa parte del mundo.5 Desde que el cristianismo se convirtió en la religión oficial del Imperio romano en el siglo IV, ha influido de manera significativa en la cultura occidental y en muchas otras. La palabra «cristianismo» proviene del griego χριστιανός, christianós, ‘cristiano’, la cual a su vez proviene del nombre propio Χριστός, Christós, ‘Cristo’, traducción del hebreo «Mesías» que significa ‘Ungido’. El origen del término se indica en el libro de Hechos de los Apóstoles:
Arriba, el símbolo ichtus o ichthys (en griego, en letras mayúsculas, IXΘΥΣ). El vocablo significa «pez», pero constituye además un acrónimo: «Ἰησοῦς Χριστός, Θεοῦ Υἱός, Σωτήρ», (Iēsoûs Christós, Theoû Hyiós, Sōtḗr), que se traduce al español como «Jesús Cristo, Hijo de Dios, Salvador». El ichtus o ichthys fue uno de los primeros símbolos cristianos,1 y se convirtió en emblema del cristianismo primitivo.2 Abajo, el término IXΘΥΣ labrado en mármol, en las ruinas de Éfeso.
☺ FIN ☺