Corte Suprema falla contra los latinos y pone trabas a las universidades, ¿se puede hacer algo?

La Corte Suprema prohibió la Acción Afirmativa, un programa creado para ayudar a que estudiantes de minorías ingresen a las universidades. Esto no solo impacta a las familias con niños en la escuela o en la secundaria, nos afectará a todos. A nivel nacional, uno de cada cuatro niños es latino, y limitarles el acceso a la universidad también reducirá las oportunidades de movilidad económica para nuestras comunidades. ¿Podemos hacer algo?

¿Por qué se prohibió la Acción Afirmativa?

Tras décadas de segregación racial, a finales de la década de 1970, la Acción Afirmativa se convirtió en parte de una serie de políticas que buscaban reducir la discriminación en programas educativos y oportunidades de empleo. Esto generó el repudio de grupos segregacionistas que en varias oportunidades intentaron eliminar esta práctica.

Finalmente, una demanda contra la Universidad de Carolina del Norte (UNC) en Chapel Hill y Harvard exigía eliminar la raza como uno de los criterios de elegibilidad para la admisión de estudiantes, lo que dio lugar a un amplio debate legal que concluyó con la decisión de la nueva Corte Suprema (de mayoría conservadora) el 29 de junio.

Los defensores de la eliminación de la Acción Afirmativa proponen que, en lugar de utilizar la raza, se utilicen otros criterios alternativos de elegibilidad, como el nivel socioeconómico. Sin embargo, esto deja en desventaja a minorías como los latinos. Hay más hogares anglosajones de bajos ingresos numéricamente que hogares afroamericanos o latinos de bajos ingresos combinados.

Trabas para un futuro mejor

Se ha mencionado hasta el hartazgo que obtener un título universitario es una de las mejores maneras de ascender en la escalera socioeconómica. Múltiples estudios señalan que aquellos que asistieron a la universidad tienen mejores salarios que aquellos

Barahona A.

que no lo hicieron. A pesar de esto, históricamente el acceso a estas instituciones ha sido restringido para las minorías.

Múltiples factores juegan en contra de los jóvenes latinos para que puedan acceder a la educación universitaria. Desde los elevados costos, pasando por la falta de involucramiento de los padres en el proceso (muchas veces debido al desconocimiento del sistema), hasta el limitado acceso a oportunidades.

Incluso cuando la acción afirmativa estaba vigente, los estudiantes latinos eran el grupo más pequeño en el Sistema de la Universidad de Carolina del Norte (UNC), después de los nativos americanos.

En sus 17 instituciones educativas, la UNC inscribió a cerca de 240,000 estudiantes para el otoño del 2022. De ellos, solo el 8.65% eran latinos, a pesar de que los latinos representan el 10.5% de la población del estado. Muchos temen que la eliminación de la Acción Afirmativa reduzca aún más estas cifras.

¿Se puede hacer algo?

Las universidades tienen trabajo por hacer, deben buscar maneras de mejorar la diversidad de sus alumnos y reflejar equitativamente la demografía del estado, esto es crucial para el futuro de todos. Se proyecta que para el año 2030, a nivel nacional uno de cada tres estudiantes K-12 será latino. No le beneficia a nadie poner trabas para que esta creciente comunidad acceda a las universidades, limando así sus oportunidades para que se destaquen en los negocios, en la ciencia, o en la política.

Si realmente el Sistema de la UNC quiere mantener su compromiso con la diversidad, hoy puede hacer algo: debe eliminar las restricciones en contra de los estudiantes amparados con la Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA). Nos encantaría ver que la UNC no solo defiende a las minorías de labios para afuera, sino con acciones concretas.