Niño inmigrante pasó de sentirse excluido a convertirse en un héroe al salvar a tres compañeros

La familia Cabezas Mina se mudó a Charlotte buscando tranquilidad y con el propósito de construir una nueva vida, ajena a los problemas que vivieron en su natal Venezuela y luego en Chile; sin embargo, un accidente pondría a prueba el valor del su hijo menor, Juan Andrés, de 10 años de edad, y lo convertiría en un héroe, al salvar a tres de sus compañeros.

Juan se expuso a sí mismo para salvar a sus amigos Juan Andrés estudia en el quinto grado de la Escuela Primaria Windsor Park. El jueves 23 de marzo se encontraba en la parada del autobús escolar, cuando un accidente ocasionó que un vehículo impacte un poste de electricidad.

En ese instante, el niño de 10 años se apresuró para alejar a los tres estudiantes que se encontraban en la zona en donde iba a caer el pilar, al salvarlos a ellos se expuso a sí mismo y fue golpeado por el poste.

“Yo no dudé en hacerlo, ni lo pensé, solo los empujé para que se salvaran y eso fue lo que me desmayó. Lo que yo hice, no me lo creería ni yo mismo, porque ni pensé en hacerlo, solo lo hice”, recordó Juan.

Gracias a la ayuda de los transeúntes, Juan logró ser liberado del poste eléctrico y fue trasladado al hospital, en donde permaneció dos días internado.

“Yo estaba a 30 minutos del hospital cuando ocurrió el accidente y cuando me informaron, yo solo sabía que por unos segundos mi hijo perdió el conocimiento. Ni siquiera sabía que había salvado a sus compañeros y luego no pudo protegerse a sí mismo. Gracias a Dios, no tuvo fracturas, ni heridas muy graves por lo ocurrido”, recordó Yoheris Mina,

En cuatro años la familia Cabezas Mina tuvo que emigrar dos veces Para Yoheris, lo ocurrido en los últimos días le permitió hacer una reflexión sobre las experiencias que atravesaron para llegar a Estados Unidos. En Venezuela, la situación política y la crisis económica los forzó a tomar la decisión de emigrar a Chile, donde vivieron tres años.

“En Chile yo pude trabajar con mi profesión durante la pandemia, pero fueron tiempos muy fuertes. Decidimos emigrar de allí por la situación que se estaba viviendo hacia los venezolanos. Hubo mucha xenofobia y veíamos algunas situaciones que pasaban contra otros venezolanos, entonces nosotros para evitar que algún día pasáramos por una situación similar, decidimos irnos. Buscábamos tranquilidad, que uno pueda estar tranquilo al salir a trabajar sin tener la preocupación de que algo nos pueda pasar a nosotros o a nuestros hijos”, contó Mina a La Noticia.

Juan solo tenía 6 años cuando sus glés, pero nunca falta la amabilidad de las personas”, contó.

“Siempre que podemos ayudar a alguien, la ayudamos”

Juan asegura que para él, es importante el esfuerzo de sus padres y los valores que ellos le han inculcado. Uno de ellos es la amabilidad para ayudar a los demás.

“Siempre que podemos ayudar a alguien, ayudamos. Mi mamá siempre ha ayudado a las personas y me enseñaron que la amabilidad es buena y te puede ayudar en los momentos más difíciles y complicados. Lo que hice va a cambiar a las personas. En vez de haber más personas negativas, habrá más personas positivas”, expresó el joven héroe.

“Nosotros, mi esposo y yo, venimos de una vida muy dura y aunque tratamos de que nuestros hijos sean mejor que uno, queremos dejarle una enseñanza sobre cómo debe ser con el prójimo”, comentó la madre

Se sentían excluidos, ahora se sienten bienvenidos en Charlotte Para el niño, este gesto heroico de su parte fue recompensado con la misma amabilidad por parte de la comunidad y, especialmente, por sus compañeros de clases, quienes le han enviado cartas con mensajes positivos desde que se dio a conocer su hazaña.

“Me han enviado más de 800 cartas y solo he podido leer la mitad. Me han dicho que soy un ‘héroe’ en todos los idiomas. Me lo dijeron en inglés y en español en las cartas, como yo sé un poco de inglés, puede comprender a veces lo que dicen, pero me siento contento de todo lo que han hecho por mí”, expresó el niño.

La madre de Juan cree que la forma en la cual la comunidad ha tratado a su hijo, es el ánimo que necesitaban para finalmente sentirse bienvenidos en la ciudad.

“Para mí todo este agradecimiento que ha recibido mi hijo es algo maravilloso, es una motivación para los niños, que los encamina a una buena dirección”, agregó.

El 29 de marzo Juan fue sorprendido en la Escuela Primaria Windsor Park con un acto de reconocimiento, en el cual participaron oficiales del Departamento de Policía de Charlotte-Mecklenburg, miembros del Departamento de Bomberos de Charlotte, familiares y sus compañeros de clase.

Gracias a su acción, fue declarado “bombero junior honorario de Charlotte” y según informaron a la familia, la próxima semana será condecorado por la policía de Charlotte.