H. P. Lovecraft

Howard Phillips Lovecraft nunca fue muy concreto al describir sus horrores literarios. En sus textos optaba por monstruosidades reptantes, por horrores babeantes, por criaturas que espantaban por su indefinición. Fue esta capacidad de sugerencia, con la que maldijo a las mentes superadas de sus protagonistas enloquecidos, desgraciados que tenían que lidiar con seres que iban más allá de toda comprensión racional, la que incrementó el potencial terrorífico de sus cuentos, y la que le elevó también a la altura de maestro del género.