Los lépticos queremos vengarnos de la apatía apuñalándola con imaginación, envenenar la inseguridad con amor y despreciar el conformismo con reflexión. Queremos querernos sin más y formar un todo, crearnos a nosotros mismos y recrearnos en una obra de arte sin más interes que el de seguir creciendo siempre niños y siempre libres.