Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page II
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page III
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page IV
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 1
CUENTOS PARA N IÑOS NO TAN BUENOS JACQUES P RÉVERT Ilustraciones:
E LSA H ENRIQUEZ
Tr aducción:
J UAN G ABRIE L L ÓPEZ G UIX
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:58
Page 2
Título original: Contes pour enfants pas sages © 1963, del texto: Éditions Gallimard Este texto ha sido extraído de «Historias» (Histoires) de Jacques Prévert. © 2007, de las ilustraciones: Gallimard Jeunesse © 2011, de esta edición: Libros del Zorro Rojo Barcelona – Madrid / www.librosdelzorrorojo.com Traducción: Juan Gabriel López Guix Dirección editorial: Fernando Diego García Dirección de arte: Sebastián García Schnetzer Edición: Carolina Lesa Brown Primera edición: septiembre de 2011 ISBN: 978-84-92412-91-4 Depósito legal: B - 2 8 0 4 9 - 2 0 1 1
Impreso en Barcelona por Llob 3
Esta obra se benefició de los Programas de ayuda para la publicación del Institut français / Ministerio francés de Asuntos Exteriores y Europeos. Cet ouvrage a bénéficié du soutien des Programmes d’aide à la publication de l’Institut français / Ministère français des Affaires étrangères et européennes.
Esta obra ha sido publicada con una subvención de la Dirección General del Libro, Archivos y Bibliotecas del Ministerio de Cultura, para su préstamo público en Bibliotecas Públicas, de acuerdo con lo previsto en el artículo 37.2 de la Ley de Propiedad Intelectual. No se permite la reproducción total o parcial de este libro, ni su transmisión en cualquier forma o por cualquier medio, sin el permiso previo y por escrito de los titulares del copyright. La infracción de los derechos mencionados puede ser constitutiva de delito contra la propiedad intelectual (arts. 270 y siguientes del Código Penal).
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 3
CUENTOS PARA N IÑOS NO TAN BUENOS JACQUES P RÉVERT Ilustraciones:
E LSA H ENRIQUEZ
Tr a d u c c i ó n :
J UAN GABR I E L L ÓPEZ G UIX
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 4
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 5
E L AVESTRUZ
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 6
E L AVESTRUZ uando Pulgarcito internándose en el bosque dejaba piedrecitas para volver a encontrar el camino de vuelta, poco sospechaba que un avestruz lo seguía y las iba devorando una tras otra. Esta es la verdadera historia, y es así cómo sucedió: Pulgarcito se da la vuelta: ¡ni rastro de las piedras! Está completamente perdido. Sin piedras, no hay camino de vuelta; sin camino de vuelta, no hay casa; sin casa, no hay papá ni mamá. —Esto es un desastre —dice entre dientes.
C
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 7
De pronto, oye unas risas, luego un repique de campanas y ruidos de un torrente y de trompetas. Escucha una verdadera orquesta, una tormenta de sonidos, una música brutal y extraña, pero en absoluto desagradable y completamente nueva para él. Mete entonces la cabeza entre los matorrales y ve un avestruz que baila, lo mira, deja de bailar, y le dice: A VESTRUZ: —Soy yo quien hace este ruido. Estoy contenta porque tengo un estómago estupendo y puedo comer cualquier cosa. Esta mañana, he comido dos campanas con sus badajos, dos trompetas, tres docenas de huevos, una ensalada con su ensaladera y, también, me he comido las piedras blancas que
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 8
tirabas. Ven, súbete a mi lomo. ¡Corro muy deprisa! Viajaremos juntos. P ULGARCITO: —Pero, entonces, ¿ya no veré nunca más a mi padre ni a mi madre? A VESTRUZ: —Si te han abandonado es que no tenían muchas ganas de verte por un tiempo. P ULGARCITO: —Es posible que lleve usted algo de razón, doña Avestruz. A VE STRUZ: —No me llames «doña» que me duelen las alas, llámame «Avestruz» a secas. P ULGARCITO: —De acuerdo, Avestruz, pero, de todos modos, mi madre… A VESTRUZ (enfadada): —Tu madre, ¿qué? Ya me estás sacando de quicio y, además, por si lo quieres saber, tu
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:29
Page 9
E L A VE S TR U Z
madre no me cae muy bien con esa manía que tiene siempre de ponerse plumas de avestruz en el sombrero. P ULGARCITO: —La verdad es que eso cuesta muy caro… pero siempre hace gastos para deslumbrar a los vecinos. A VESTRUZ: —En vez de deslumbrar a los vecinos, más habría valido que se ocupara de ti. A veces, he visto que te daba alguna bofetada. P ULGARCITO: —Mi padre también me pegaba. A VESTRUZ: —Vaya, así que el señor Pulgar te pegaba. ¡Eso es inadmisible! Los hijos no pegan a los padres, entonces ¿por qué los padres tienen que pegar a los hijos? Además, el señor Pulgar tampoco es una lumbrera, ¿sabes lo que
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:30
Page 10
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:30
Page 11
E L A VE S TR U Z
dijo la primera vez que vio un huevo de avestruz? P ULGARCITO: —No. A VESTRUZ: —Pues dijo: «¡Qué buena tortilla me haría!». P ULGARCITO (soñador): —Me acuerdo de que la primera vez que vio el mar, se quedó pensando un instante y dijo: «Qué barreño tan grande, lástima que no haya puentes». Todo el mundo se echó a reír, pero a mí me dieron ganas de llorar; entonces mi madre me tiró de las orejas y me dijo: «¿No te puedes reír como los demás cuando tu padre hace un chiste?». No es mi culpa, no me gustan los chistes de los mayores.
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:30
Page 12
Book-Prevert:Layout 1
13/7/11
17:14
Page 13
E L A VE S TR U Z
A VESTRUZ: —A mí tampoco. Vamos,
súbete a mi lomo. Ya no verás más a tus padres, verás mundo. P ULGARCITO: —De acuerdo. A triple galope el ave y el niño arrancan a correr, y se levanta una gran nube de polvo. En el umbral de sus casas, los campesinos sacuden la cabeza y dicen: —¡Otro automóvil asqueroso! Pero las campesinas oyen al avestruz repicando mientras galopa: —¿Oís las campanas? —dicen santiguándose—, es una iglesia que se escapa, seguro que la persigue el demonio. Y todos van a encerrarse hasta la mañana siguiente, pero a la mañana siguiente, el avestruz y el niño ya están demasiado lejos.
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:30
Page 14
Book-Prevert:Layout 1
13/7/11
17:14
Page V
J ACQUES P RÉVERT
(Neuilly-sur-Seine, 1900 – Omonville-la-Petite, 1977)
Autor teatral, guionista cinematográfico, y ante todo, poeta. Su estilo satírico, colmado de fantasía y sentido del humor da testimonio de su compromiso y compasión por los más humildes. Sus ataques verbales contra los gobernantes y las instituciones acreditan la imagen de un poeta libertario, sensible a los acontecimientos del mundo, que se rebela ante cualquier forma de opresión social. Malabarista de las palabras, Prévert utilizó en su escritura todos los trucos del idioma. Desde la publicación de Palabras (1945), su obra es una de las más celebradas de la literatura francesa y sus poemas se enseñan en las escuelas y muchas de ellas, llevan su nombre, así como también, plazas y calles. Jacques Prévert es autor de seis obras destinadas al público infantil, Cuentos para niños no tan buenos (1947) es la primera de ellas.
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:33
Page VI
Book-Prevert:Layout 1
8/7/11
10:33
Page VII