GRANUJA
COLECCION CRISIS
GRANUJA Editorial
ANTONIO LAU PIÑA
UN LUGAR DONDE ARDER
Primera edición | México | 2022
Piña, Antonio Lau
Soy cebra / Antonio Lau Piña – Guanajuato : Granuja editorial, 2022 63 p. ; 20.5 X 13.5 – (Colección Crisis | Poesía)
D.R. del texto: ©Antonio Lau Piña D.R. de la edición: ©Granuja editorial Facebook @granujarevista Instagram @gra_n_uja @gra_n_uja_editorial granujarevista@gmail.com Cuidado y diseño editorial: Andrés Gómez
Paratodosmisamigos quefueronsuccionados porelolvido.
-Eresunexpatriado.Hasperdidoelcontactocontusuelonatal. Bebescomosiquisierasmatarte.Hasdejadoqueelsexoseconvierta enunaobsesión.Tehaspasadolavidapensando,notrabajas. Vasdeuncaféaotro. -Bueno,pareceunavidabastanteagradable¿No?
Ernest Hemingway, Fiesta. Youcan’tgobackhometoyourfamily, backhometoyourchildhood...backhometoayoungman’sdreams ofgloryandoffame...backhometoplacesinthecountry, backhometotheoldformsandsystemsofthingswhich onceseemedeverlasting,butwhicharechangingallthetime –backhometotheescapesofTimeandMemory
Thomas Wolfe, You can’t go home again Unoessupasadoysupresentealmismotiempo, peroelfuturodeentoncesyapasó, ynonosdimoscuenta.
Federico Campbell, Tijuanenses
Si pudiera elegir quién soy sería el Hombresinnombre que personifica Clint Eastwood en sus películas Western para ir por la vida dándole tiros a quien sea sin arrepentimientos o preocupaciones morales de ningún tipo, nada de nada, por ejemplo, no me preocuparía por la inflación o de que mi sueldo no me alcanza lo suficiente que no tengo dinero para ir al psicólogo de nuevo que le sigo debiendo unos cuantos pesos y promesas al futuro que alguna vez dije que haría mío, cosas como esas. Ahora soy la mancha de cloro en la ropa que nadie quiere ver, exiliado del exilio, nada relevante, simplemente cada vez cayendo más profundo, (sin encontrar fondo con el cual
Clint Eastwood
pueda impulsarme de vuelta a la superficie es un cuento para niños)
El Hombre sin nombre no se preocupaba por fondos o precipicios o exilios ni nada de eso, pegaba tiros cobraba recompensas y se salía con la suya al final de cada película como quizás todos quisiéramos hacer con nuestras monótonas vidas en algún momento que exista fuera del tiempo porque por ahora estamos demasiado ocupados viendo las últimas series que ha sacado Netflix para hacer más soportable nuestra no-vida.
Pero no yo si tengo nombre y uno muy sucio que no me gusta que me golpea que es una mancha que me escupe que cambio constantemente por apodos.
Un nombre del que no existe detergente capaz de borrar.
Llevo años viviendo con delirios de escape yendo de aquí hacia allá esperando encontrar algo que no sea mi reflejo ni nada que me recuerde a los charcos que se hacían en los baches de Tijuana cuando llovía uno nunca sabe que tan profundos realmente son, me pone nostálgico, pensar, por ejemplo, como es que durante la última inundación se taparon las alcantarillas como siempre sucede provocando que el agua se acumulara por las avenidas creando un violento rio que a su paso se llevó: autos, árboles, perros, gatos, al sol, señales de stop, y a mis amigos, a todos ellos, cada uno de nosotros fue arrastrado como hojas otoñales por el cauce
Barco de papel
directo al naufragio.
Por eso hice mi propio barco de papel para colarme por la primera alcantarilla abierta que encontrase sin tripulación ni alimentos a bordo y escapar de nuevo como lo he hecho durante años a cualquier sitio en donde poco valga lo que sea que vivimos en el pasado.
Cuando digo que todo está bien es porque nada está bien, y cuando digo que nada está bien es porque todo está peor. El suicidio no es una alternativa más rápida para acercarse a la muerte, es un modo de vida, un trabajo de tiempo completo en el que uno tiene que aprender a decir cosas que no siente como que el reflujo de esta mañana es por mala alimentación y no por abuso de alcohol o que uno no está con nadie simplemente porque no quiere y no porque no sepa amar.
que matarse
Todo es mentira, siempre la mentira alrededor de nuestras vidas y de los demás, emporcándonos haciéndonos más viles sin saber qué es realidad y qué no lo es.
Bien lo dijo Céline: “Hay que escoger: morir o mentir. Yo no nunca me he podido matar.”
Al Igual que todos nosotros.
Es más fácil mentirse
Cansado de esperar a que las oportunidades perdidas regresaran de milagro decide ir a buscarlas al fin del mundo solo para encontrarse con que alguien más ya les ha puesto un precio más alto del que estaba dispuesto a robar.
Soldier of fortune
Todo lo que debería durar para siempre apenas dura tres segundos lo que resta es pura nostalgia (esa si es duradera).
Si la eternidad fuera verdad
La otra noche Vincent me dijo que ya comenzaba a sentir los estragos de la edad el no poder despertarse después de una noche de borrachera y seguir bebiendo durante otros tres días seguidos como si uno pudiese soportarlo todo como si nuestro cuerpo estuviese hecho de Adamantium y se regenerara cada mañana cuerpo y alma mente y espíritu y seguir con nuestra cuesta en picada hasta nuestros actuales veinticinco cuando ya nos vamos directo a dormir después de diez cervezas y nuestra memoria es cada día más frágil endeble y todos nuestros amigos se han ido a morir al silencio de la verdad al fin de ninguna parte en algún trabajo en el que les paguen una bofetada a la semana y encima de ello
de los veinte
Crisis de mitad
deban sentirse agradecidos con su jefe.
Los veinticinco son duros me dice, bebemos hace frío nuestras barrigas miden el triple de lo que median a nuestros veinte, ninguno de los dos ha cumplido alguno de sus sueños, estamos en un bache, mañana hay que ir a trabajar.
A veces imagino un clavo enterrado en una llanta girando y girando por la carretera hasta hacerla reventar.
*PUM* REVENTAR Yo soy la llanta. También el clavo.
Soy mi propia tragedia
La mitad del tiempo me siento triste la otra mitad nomesiento.
Some kind of particular feeling
El espejo solo nos regresa la mirada para lamentarse de lo que nos convertimos.
sobre espejos
Otro poema cliché
Bastanteantes,bastanteantesdequealguiensedécuenta, yamehabréidodeaquí.
Raymond CarverA como mi nueva vida comienza me pregunto si podré ser capaz de dejar de ser lo que soy y lo que he sido durante años y años sin remedio solo con un chasquido de dedos mágicamente cambiar, pensando, claro, que el cambio es indispensable para continuar viviendo.
Simplemente, pienso en poner un pie en un lugar nuevo y comenzar a hacer algo de polvo con mis viejas botas que han caminado sin parar por todo el país a través de un montón de lugares horribles como picaderos y bares oscuros donde el sol nunca brilla sobre nuestras cabezas ebrias.
Algunos lugares pueden envenenar tu mente y alma. Algunas personas también.
Imaginé, por muchos años, como sería empezar desde cero en un lugar donde nadie me conociera y pudiese ser como un camaleón
Menos que cero
y pretender que nunca hice nada malo en mi vida como si hubiese sido bendecido por el mismísimo Jesucristo en su cruz y sangrado por aquellos que alguna vez me amaron tanto cuando me necesitaron.
Comenzar desde cero ser cero un contenedor vacío donde mi nuevo mundo me llene con su cariño y ternura. Pero como bien sabemos las cosas nunca suceden conforme quisiéramos, como si el mundo estuviese siempre contra nosotros incluso si no le importamos al mundo, y por esa misma razón sé que seré el mismo de siempre con mis mismos viejos errores y mis eternas ganas de esfumarme de un lugar al siguiente y comenzar todas las nuevas vidas que sean necesarias para olvidarme de mi mismo y de las personas que me rodean y luego desaparecer de nuevo de la faz de la tierra justo como un chasquido de dedos.
al que se lo tragó el cielo
Es una noche tibia de lunes escucho a los gatos rompiendo bolsas de basura en el patio de nuevo, pero esta vez no los detendré, pueden comer hasta atascarse por hoy; no quiero levantarme del sofá y buscar algo de vida en la nevera prefiero quedarme aquí, contemplando las manchas de la loseta, porque esta noche tengo la sensación de que algo se desvanece, algo que ya rebasé hace mucho tiempo que ya dejé atrás, la sensación de ser feliz o algo parecido; puedo decir que esta noche en particular pienso en mis amigos y lo único que me viene a la mente es cómo la mitad de ellos han desaparecido; Alberto, por ejemplo, se esfumó sin dejar ni una nota, ni despedirse de nadie, fue como si el cielo se hubiese abierto y se lo tragara, no lo he visto en dos años cuando menos, ni sé nada de él, lo tengo en mente con constancia, de cómo nos embriagamos y reíamos escuchando viejas canciones de Héroes del Silencio, ahora solo espero que donde sea que esté, se encuentre bien, feliz, que haya encontrado la paz y felicidad que tanto buscaba, que en realidad, es lo único que todos estamos buscando, quizás el secreto está ahí, en hacer como él,
Poema para A. B.
desvanecerse de la faz de la tierra y cambiar amigos, casa, novia, trabajo, absolutamente todo, sin mirar atrás, sin arrepentirse de una sola cosa, volverse polvo comenzar una nueva vida, y tal vez no parezca la gran cosa pero tal vez sí lo sea, porque ahora, cuando miro a mi alrededor y veo a mis amigos, los que tampoco están aquí, que permanecen en una especie de una ausencia presencial que tienen fracturas en las rodillas desde hace años, que están en relaciones que no van a ninguna parte, por los suelos, bebiendo a las tres de la tarde en algún bar de la Zona Norte, intentando terminar la universidad, intentando no tomar más de cinco pastillas de un solo trago cuando llegan los viernes por la noche, haciendo excursiones al Valle de Guadalupe, trabajando en empleos que no merecen o que no los merecen a ellos, “metidos” en la política, corruptos, sin nada en las venas o en el corazón más que gusanos hambrientos, con agujeros en las suelas de los zapatos, con VIH, sífilis, gonorrea, deudas en el banco o en cualquier otro lugar, viviendo de recuerdos,
haciéndose pasar por algo o alguien que no son pero que tal vez les hubiese gustado haber sido cuando eran pequeños, es entonces cuando creo que Alberto tomó la mejor decisión que pudo haber tomado.
Ya voy, ya vamos, espero encontrarte en el camino entre ningún lugar y donde sea que estés.
Es viernes por la noche y me encuentro con algunos amigos bebiendo en un bar en el centro de la ciudad, no hablamos de nada en especial solo nos ponemos al día y nos enteramos de lo que ha sido de nuestras no-vidas, contamos nuestras rutinas, hablamos de la monotonía que nos ahoga el corazón y los pulmones sin soltar lágrima; la conversación fluye como fluyen los tragos eso, hasta que empezamos con las historias, la maldita nostalgia haciendo de las suyas y pasándonos malas jugadas, pensar que hubo tiempos mejores nos envenena el alma y hace aún más agrio nuestro presente, tiempos que ahora están muertos, más no olvidados, las historias que comenzamos a platicar están todas distorsionadas poco o nada tienen que ver con la realidad, con lo que en verdad pasó, la verdad es que nadie puede saber nunca cómo, por qué, y en qué orden suceden las cosas, y aún menos si el ochenta porciento de estas historias comienzan con un “es como aquella vez que estábamos borrachos y…”; estos pocos recuerdos que nos quedan es todo lo que tenemos, estos pequeños flashazos de luz nos sostienen
Memorias
mantienen pegados nuestros cuerpos rotos, nos salvan de la inexistencia, el problema está en que cuando queremos traer estos recuerdos de vuelta uno tiende a minimizar o exagerar ciertas cuestiones particulares, por eso no suelo tomar muy en serio las historias, de cualquier manera mañana despertaremos con resaca y tal vez aun un poco ebrios y nadie sabrá qué demonios hizo o dijo esta noche, será otro sábado en el que despertaremos sin memoria, para después ir reconstruyéndolo todo poco a poco juntando fragmentos poniendo las piezas del rompecabezas en los lugares en donde no van, para así tener algo de que hablar la próxima vez que veamos a nuestros muy queridos amigos.
Todo lo que pertenece al pasado lo veo como si estuviese rodeado de una densa bruma y apenas puedo distinguir uno que otro retazo de
Completa la palabra faltante
Nos separamos como perros viejos que deben buscar su propia comida en los basureros de los restaurantes porque compartir desgracia nunca es buena idea;
cada quién por su lado it’s over, we said, con viseras en los laterales de los ojos como caballos de carreras no para llegar a alguna meta porque no teníamos ninguna sino para no vernos ni por asomo.
Y para cuando regresamos de las guerras psiquicas como veteranos condecorados con la chamarra pesada por tanto adorno y con un letrero entre las cejas que decía “sobreviviente”
ya no éramos los mismos, apenas nos reconocíamos unos a otros como fantasmas de otros tiempos que siguen vagando por cualquier lugar esperando encontrar cierta redención en las pocas buenas acciones que hicieron sin querer durante su vida.
Y uno se pregunta con sospecha y sin esperar nada si será verdad que todo este chiste de combatir a los demonios privados en los espacios públicos sirvió acaso de algo.
the psychic wars
Veteran of
Toda la tristeza del mundo cabe en un estómago.
Numb
I’mleavingsoon Theothersarealreadythere Blue Öyster Cult
Me están esperando del otro lado del río, alguien espera pacientemente mientras fuma un frajo con una mueca en el rostro y piensa que alguien a quien no conoce aún también lo está esperando del otro lado del río.
¿Qué nos aguarda?
Nuncapenséquelaideademímismo dependieratantodellugardondeestoy […]EchodemenosToronto,noporquemisamigos ymifamiliaesténallí,sinoporquesédóndeencajar, EnToronto, sé quién soy.
Soma (Videojuego)
“Estoy tratando de empezar todo de nuevo.”
Me pregunto cuántas personas han dicho esas palabras en la historia de la humanidad.
Me pregunto cuántos de ellos han fracasado en sus esfuerzos.
Me pregunto cuántas veces yo mismo he fracasado en mis propios esfuerzos.
Aquí, los días van tan lento como mi respiración en un domingo por la mañana después de una noche de fumadera.
Kennia me manda mensajes y me pregunta cómo lo estoy llevando, cómo estoy. No lo sé. Nunca lo sé. Le digo que estoy bien, que nada ha cambiado en realidad, que sigo siendo el mismo de siempre, solo que un poco mejor, que estoy tratando de ser mejor.
Ervin me dice que no debería enfocarme en las cosas malas, sino en las buenas, como que estoy tratando,
sean necesarias
Todas las veces que
que estoy haciendo mi mejor esfuerzo, incluso si mi mejor esfuerzo no es suficiente.
Vaya cliché. But it is what it is.
Cada mañana, un rayo de sol se cuela por mi cortina y me despierta. El día va a comenzar.
Mis sabanas esconden un cadáver dentro de ellas.
Estoy muy lejos de casa en una ciudad que no es mi ciudad solo tratando como un montón de personas han hecho antes que yo de empezar todo de nuevo.
Inthisterrifyingworld, all we have are the connections we make. Bojack Horseman
A veces me pregunto a dónde es que fueron todos esos amigos que perdí en el camino, qué es lo que hacen de sus vidas, si son felices o si, en cambio, siguen luchando contra los mismos demonios de hace algunos años, si de verdad todo ese cariño que nos mostramos en algún momento dejo cicatrices lo suficientemente hondas como para que se vean a simple vista en relieve para hacernos recordar todo aquello que se nos escapó o las tardes que parecían no tener fin cuando éramos más jóvenes y delgados y guapos y encantadores.
Me pregunto que será de todos ellos si seguirán cargando su pasado en su presente sin esperar ya nada más de su futuro más que desaparecer de la faz de la tierra como lo hicieron ya un par de veces anteriormente, como lo hice yo, como lo haremos todos al final.
Demasiados fantasmas por aquí
Iwouldrathernotgo
Back to the old house
There’stoomanybadmemories Toomanymemoriesthere.
The Smihs
Cuando regresé a Tijuana después de mudarme a otra ciudad esperaba verme con todos mis viejos amigos y hablar y emborracharnos y tener aventuras como solíamos hacerlo, pero, lo único que encontré fueron fantasmas un montón de ellos en bares, esquinas, cines, casas antiguas, restaurantes, calles cafeterías, bazares, etcetera, etcetera, los veía en todos lados, todos mis viejos amigos lucían como extraños, aquellos con los que ya no hablo o tengo contacto, es como si todo el amor se hubiese ido al sur.
Tijuana la horrible
Veo fantasmas de mi mismo y de mis errores y no me gusta verlos, es como ver a un muerto viviente, una no-persona que ahora está enterrada bajo tierra.
De algún modo es como una ciudad muerta donde todos han desaparecido de nuestras vidas incluso si es no es así, todas las personas que conocí alguna vez ahora están tomando su camino hacia el olvido y no hay camino de vuelta de ahí.
Como sea, aun los amo, a cada uno de mis viejos amigos, e incluso amo la ausencia que han dejado en mi vida, amo las risas, las conversaciones largas, las peleas, todo eso, los mantengo en un lugar especial en mi corazón a donde puedo ir cada vez que necesito algo de calor.
Oh,fantasmaperdidoyafligido porelviento,vuelveotravez. Thomas Wolfe
1. Los días de invierno pasan lentamente cuando no se tiene a nadie a quien ver y platicar con un vaso de cerveza entre las manos en algún bar repleto de luces delicadas mientras la conversación hace que uno se sienta con ganas de seguir existiendo.
2. Mi madre me pregunta la razón por la cual no he salido en toda la semana, ni la semana pasada, y los sábados me limito a vagar solo por las calles del Centro esperando encontrar a “alguien” para nunca encontrar a nadie e ir derrotado a comer a algún restaurante que tenga mesas en la avenida para ver a la gente pasar y sentirme menos solitario.
3. Regresamos del exilio para encontrarnos con que no había nada a lo que regresar.
Invierno
4.
Tengo dificultades en concentrarme en algo que no sea en losviejostiempos , en la nostalgia que me derrite el cerebro y me roba el presente y el futuro y todo lo demás;
leo libros antiguos que se quedaron almacenados en cajas de colores en la casa de mi madre, nada en específico, solo paso los ojos y los dedos por donde alguna vez pasé un lápiz para remarcar aquello que me interesaba, pero ya no me interesa nada de eso, todo se siente como un recuerdo de una vida que nunca tuve.
5.
Veo a los pájaros volar desde mi ventana, y más allá el muro fronterizo, la border , y casas construidas sobre la falda del cerro en una de las colonias populares de la ciudad, pienso en que quisiera volar como esos pájaros cruzar la border y llegar lejos, hasta el norte, muy al norte, a Montana y una vez ahí ponerme un sombrero, botas y una chamarra Levi’s para ser un verdadero vaquero como los que se ven en las películas, y así, olvidarme de todos los que se olvidaron de mí.
6. Ha dejado de lastimarme el sonido de la alarma por las mañanas, ahora la recibo con alegría pues sé, que cada vez que suena estoy más cerca de largarme de aquí, a una ciudad a la cual escapo por segunda vez, en donde me espera un departamento vacío un escritorio con pendientes una renta que pagar cervezas frías en el refrigerador y la oportunidad de que mi soledad no dependa de nadie más que de mí.
7. Esta vez cuando me vaya nadie llorará por mí ni hará una gran fiesta de despedida deseándome buen viaje diciéndome que vuelva pronto y prometiéndome nada más que un recuerdo constante, no habrá nada de eso, solo una terminal de aeropuerto fría donde las personas se conglomeran molestas porque el avión se ha retrasado dos horas más de lo previsto.
Extraño
las noches de intoxicaciones etílicas en Tijuana cuando Ferruzca leía en voz alta a Bohórquez mientras que Vitaly se llevaba el trago de Tonayán con Fresca a la boca una y otra vez para luego servirse más y yo sentado en la orilla de la cama ebrio hasta límites insospechados comenzaba a disociar hasta que terminaba en lágrimas por alguna razón y por todas las que pueden haber para que luego ambos me tuviesen que arrullar entre sus brazos y secarme el llanto con más dolor.
cuando estábamos pedos
No sé si sea algo digno de extrañar, lo que sí sé es que cuando uno está muriendo de esa manera es cuando más vivo se siente.
Siempre leíamos poemas
Unoquiereviviraquíporquenohacefrío. Porqueaquíestánsusamigosycomodecía HenryMiller,porquesetienealmenos unarelaciónimportanteconalguno de sus habitantes.
Federico Campbell
Yo no vivo en la Ciudad de México vivo en un cuarto que está en un departamento en un complejo de edificios en el que mi ventana da hacia otra ventana,
nunca llega el sol a mi estancia solo el sonido de los autos pasando por la calle contigua, estoy lejos de todo lo que puede parecer cercano el metro no es un trasportador de materia Bellas Artes está tan alejado de mi como lo está mi propio talón, apenas conozco dos o tres calles que me son familiares, no me preguntes por referencias GoogleMaps hace todo el trabajo, cuando camino por sus calles mis pasos se borran tan rápido como los nombres tallados en los árboles, aquí soy una mota de polvo insignificante y nunca me había sentido tan bien con ello.
no escribir un poema sobre CDMX
Y eso que había prometido
Hice todo este drama de irme y regresar para luego decirme dude whatthahellI’mdoinghere? y desaparecer de nuevo como Houdini dejando polvo detrás mío para que les entre en boca y ojos a todos los fantasmas que ya no veo ni toco ni oigo como los tres monos y luego rodar y rodar likearollingstone para terminar de una vez por todas y para siempre en alguna colina en la que un Sísifo cualquiera que bien podría llamarse Antonio tenga que empujar la carga día a día de A A b b b b i a i a r j r j r o r o a o a o y luego repetir el proceso durante toda la eternidad
Sísifo
sin aprender lección alguna de ello hasta que los pies sangren y llegar hasta el tuétano volvernos cal cabalgar el viento prometer nunca más volver para al final de cuentas terminar volviendo.
Aquí,misamigos(¿dijemisamigos?)nomeseguirán. ¿Ydóndenosjuntaremos?Ahorayanohay,entrenosotros, posibilidaddeintercambioocomunicación.
Jaques RigautUn tipo cualquiera va a un que no conoce, comienza a encontrarse con personas nuevas y estas personas lo tratan con afecto y hospitalidad tantísimo afecto, lo hacen sentir como en casa le prenden una especie de llama de la misma manera que se prende un viejo boiler de gas lo hacen pensar que tal vez valga la pena vivir y empezar desde cero las veces que sean necesarias escapar de todo y de todos de las ganas de tirarse por el puente que está cruzando la avenida justo antes de ver a sus viejos amigos un reinicio con otro nombre y si Dios lo quiere o la gracia salvadora o quien sea que nos esté viendo allá arriba, otra vida también no estaría nada mal en la que trate de ser un poco mejor de lo que fue anteriormente con errores menos costosos y consecuencias menos dolorosas y malditamente largas y agotadoras como que las que experimentó en el pasado,
Un lugar donde arder
eso sería bueno, para empezar;
y este tipo comenzaría su nueva vida o lo que sea yendo al río que cruza la ciudad, ese pequeño río donde se reúnen los cuervos los perros y toda clase de animales que buscan comida entre las bolsas de basura y los cuerpos de los suicidas,
ajá, irá hacía allá con una mochila en la espalda rellena con todas las cosas que ha tenido que estar cargando durante todos estos años como piedras, y luego se sentaría a la orilla para fumar un cigarro con la mente en blanco para después aventar la mochila al cauce de la misma manera que se avientan a los gatitos recién nacidos que nadie quiere para que se ahoguen, y mirará como es que la corriente se la lleva hasta que desaparece de su vista,
así lo hará, para después irse y seguir con su reinicio con su nueva vida con su nuevo nombre sabiendo que ha encontrado el lugar perfecto para arder.
Existe la tentación de dejar solo a este hombre, volver a casa, el dolor está ahí, es indispensable para la acción, y quizá exista alguna respuesta para nosotros hoy.
Dadadadadada
Hace seis días que estoy acá el cuarto es amplio y luminoso aunque la mayor parte del tiempo tengo las cortinas cerradas, me gusta acostarme y mirar al techo sin moverme, solo escuchando el sonido de mi respiración escapándose de mi cuerpo, esta noche en específico mientras contemplo los orificios de las paredes pienso en “los viejos tiempos”, que parecen tan distantes, en las fiestas que dábamos cada fin de semana, a las que siempre íbamos los mismos 4 amigos y nos emborrachábamos de más a veces durante dos o tres días seguidos y luego cuando llegaba el lunes nos íbamos así a la Universidad porque simplemente no nos importaba nada lo suficiente, así éramos, felices, y cuando uno es feliz no le interesa preguntarse por qué lo es, ahora lo sé, ya que han pasado algunos años y todos nosotros nos esparcimos en cuatro direcciones distintas, como un mapa cardinal, norte oeste este sur
Los viejos tiempos
son cosas que pasan cada uno debe de hacer su vida por separado es inevitable, como no, pero incluso ahora recuerdo aquella reunión que hicimos, una de las últimas que sabíamos sería de las últimas en la que nos dijimos cosas salidas del corazón o de quien sabe dónde cosas que solo salen cuando uno está borracho y sentimental, nos dijimos que el tiempo se nos había acabado y así era pero fuera de ello y pese a todo estábamos contentos con haber compartido cuatro años de nuestras vidas juntos, que la memoria no desvanece sino que se acrecienta con el tiempo, aun justo en este momento escucho sus risas borrachas y sus discusiones, los escucho en el cuarto de a lado unas voces que se hacen cada vez más y más fuertes…
mistakes
Durante mi primer día de vuelta a Ciudad de México bebo con mi amiga Marcela y le digo lo que ha sido de mí en mis vacaciones, las cosas que he hecho, las cosas que me han hecho, me mira con una sonrisa partida como queriendo decir algo que no debería decir, solo compasión o incomodidad no importa; le digo entre los humores del alcohol las cosas que hice la navidad pasada cosas horribles innombrables entre risas aunque no haya nada de gracioso en ello más bien es preocupante yo me preocuparía si tuviera amor propio pero el amor propio lo perdí aquella tarde cuando tenía diez años y Marianita me dijo que no quería ser mi novia porque era feo y siempre estaba metido en la oficina de la directora por toda clase de problemas
New me, same old
por eso ahora camino por las orillas del mundo medio rengo y tuerto mientras me río de mí del borde de todos sobre todo de mi para que los demás rían a mis expensas, esperando a que en cualquier momento de un paso en acierto y caiga como lo he prometido tantas veces para ya no volver a resurgir.
Volver a una ciudad que no es tu ciudad para dormir en una cama que no es tu cama y chingarle día y noche esperando a que el día de mañana no sea un horror como todos los anteriores quizás sea mejor que quedarse en un lugar donde a uno ya no lo quieren ni pertenece y que nunca supo hacer suyo.
Siempre lo mismo
Burlarse de uno mismo es el primer paso a la iluminación.
(Guamuchil, Sinaloa, México 1997). Licenciado en Relaciones Internacionales. Tijuanense por adopción. Es director editorial de la revista El Morador del Umbral. Autor de los poemarios Poemalos con Formalina (2020, ediciones Awita de Chale), y Emesis (2021, Metaletras editorial). Es parte del Dossier de Poesía No Consagrada no. 8 de Granuja editorial. Ha colaborado con poesía en diversas revistas online e impresas como Revista Plástico, Granuja, Monolito, La letra sangra, Revista Phantasma, Seattle Escribe, Tintero Blanco, etc. De igual modo ha participado en lecturas poéticas en congresos y encuentros literarios, así como en el Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL). Es todo lo que le digan menos poeta. Considerado por muchos como el peor anarquista de la historia.
Antonio Lau Piñaun lugar donde arder de antonio lau piña se terminó de imprimir en el año dos mil veintidos en los talleres de editorial granuja carretera silao-guanajuato, km. cinco; silao, guanajuato consta de un tiraje de cien ejemplares el cuidado de la edición estuvo a cargo de andrés gómez
Toda la tristeza / del mundo / cabe / en un / estómago
Este conjunto de poemas tienen en común un tema: el pesimismo. El autor nos encara con la realidad desde una perspectiva, si bien dolorosa, también nos da la oportunidad, aunque no la veamos dentro de los versos, o tal vez sí, si en realidad somos demasiados sensibles para notarlo, de encontrar esa contraparte: la dulzura de lo terrible, de lo subterráneo, de lo que nos atormenta pero de lo que nos aferramos porque no podemos o no queremos vivir sin ello. Antonio Lau Piña no se aleja de la tradición literaria –es imposible para ningún autor alejarse de la tradición literaria- en cambio su particular punto de vista, su estilo, su manera de contarnos las cosas es lo que nos mantiene leyendo un poema tras otro. Su cercanía a Bukowski es notable aunque también, si leemos entre líneas, podemos encontrar a aquellos autores de novela negra que relataban la decadencia de las ciudades con atmósferas oscuras y terribles describiendo personajes sin bondad y sin moral. Autores como Jim Thompson, Chester Himes, Raymond Chandler. Creo, más bien, estoy seguro, que Antonio Lau Piña logra crear con maestría poema tras poema este ambiente oscuro donde ese yo lírico va hundiéndose cada vez más ¿en el infierno?, ¿en el cielo?, ¿en Tijuana?, ¿en una botella de cerveza?. Celebro la publicación de Un lugar donde arder. Estoy seguro que los lectores arderán hasta consumirse cuando lean este poemario. Atiéndanse a las consecuencias. La editorial no se hace responsable. Iván Mata