Viernes 13 de septiembre de 2013 Neuquén, Argentina
Se suele escuchar decir que en algunos de los viajes a Villa La Angostura no se puede regresar sin haber conocido el único bosque de arrayanes transitable del mundo. Un paseo lacustre, un sendero entre grandes árboles y un descanso para degustar algo rico es una opción inolvidable. páginas | 4 y 5
Arrayanes