AÑO 3 / NÚMERO 18 / BIMESTRAL $40.00
Grupo Expedición número 18 año 3 DIRECCIÓN Carlos Almanza - Oscar Estrada DISEÑO CORRECCIÓN DE TEXTOS Alejandro Ruelas RELACIONES COMERCIALES Miriam Ortíz Luis Omar Viloria 01 (55) 5553 5032 / 5553 2355 COLABORADORES Dr. Rogelio Villarreal, Arq. Héctor Flores, Carlos Martín del Campo, Alejandro Pérez Arteaga PORTADA Mario Hinojosa con captura de lobina, Presa Bacurato ASISTENCIA EDITORIAL Alejandro Ruelas
E
Editorial
n este número de Fishing & Boats nos vamos a Sinaloa, a la presa de Bacurato, el mejor lugar de México para la pesca de lobinas trofeo, para vivir el relato de un par de jornadas épicas. Luego navegamos hasta Mazatlán, para conocer a la flota BIBI Fleet y sus espectaculares servicios de pesca deportiva. En esas aguas acompañaremos al Arq. Héctor Flores en busca de magníficos dorados, mientras nos cuenta de la calidez y atención de los integrantes de BIBI Fleet. No podía faltar una revisión del Bisbee’s Black & Blue del año pasado, un torneo como ningún otro en el mundo. En aquella ocasión se batieron récords y se capturaron peces formidables, acompáñanos a recordarlo. Como siempre, te traemos una revisión de algunos de los mejores yates de pesca. Para esta ocasión escogimos el Hatteras GT 60 y el Spencer 66, embarcaciones imponentes. Así que prepara tu caña, el equipo y... ¡vamos a pescar!
Contenido 4 BACURATO
Fortaleza mexicana de grandes lobinas
secciones
20 SPENCER 66
ASISTENCIA EN DISEÑO Javier Balderas PREPRENSA E IMPRESIÓN Editorial de Impresos y Revistas S.A. de C.V. DISTRIBUCIÓN DIMSA
36 Hatteras GT 60
© DERECHOS RESERVADOS Todo el material de esta publicación no podrá ser reproducido en ninguna forma sin la autorización por escrito de su editor. Los puntos de vista de los artículos son responsabilidad exclusiva de sus autores y no necesariamente reflejan el punto de vista del editor responsable ni del personal que labora en la revista. La veracidad y contenido de los anuncios de esta revista es responsabilidad de los anunciantes.
EDITOR RESPONSABLE: Oscar Estrada Beltrán. Número de Certificado de Reserva otorgado por el Instituto Nacional del Derecho de Autor: 04-2009-081316304200-102. Número de Certificado de Licitud de Título en trámite. Número de Certificado de Licitud de Contenido en trámite. Domicilio de la publicación: Río Elba 10-402, Col. Cuauhtémoc, C.P. 06500, México, D.F. T. 01(55) 5553 2355, 5553 5032. expedicion@grupoexpedicion.com Imprenta: Editorial de Impresos y Revistas S.A. de C.V. Emilio Carranza 100, C.P. 03550, México, D.F. DIMSA, Mariano Escobedo 218 Col. Anáhuac, México D.F.
abril-mayo 2014
40 Capturas y premios colosales: Bisbee´s B & B 26 De pesca con la flota BiBi FLEET
en Mazatlán, Sinaloa
48 Sondas, receptores y GPS
BACURATO Por: Dr. Rogelio Villarreal y los amigos que poseen la pasión. Fotografía: Abelardo Saucedoy Javier Iván Estrada González.
Fortaleza mexicana de grandes lobinas PRESA BACURATO 10:59 am Domingo 30 de Junio 2013
L
& 4
a gota de sudor recorre mi cara desde la frente, por debajo de los lentes solares y continúa por la nariz hasta la punta de la misma para caer estrepitosamente en mi pie derecho. Están transcurriendo los últimos segundos de tres complicados días de pesca en Bacurato, Sinaloa. Otra gota de sudor inicia su camino en mi frente, corre por la nariz pero esta vez se desvía hacia la comisura de mi boca. Está salada, muy salada, así como esta visita en búsqueda de lobinas trofeo a este gran embalse, el mejor de México y, en opinión de muchos, el mejor del mundo. El grupo de cazadores de lobinas trofeo ya ha capturado sus premios, poderosas lobinas que habitan las aguas de esta presa. Han salido con mucho esfuerzo, pocas pero trofeos todas. En mi caso, no he sacado ninguna, tampoco se me ha escapado ningún trofeo, simplemente no han sido mis días. Exhalo un débil “uuuf”, signo inequívoco del cansancio y desesperación. Los segundos siguen corriendo. A las 11 de la mañana tenemos que estar de regreso al botadero y de allí a la
hermosa hacienda de pesca Big Bass Lodge Lake Baccarac para regresar a Monterrey. Solo 17 segundos para el final. El Güero Blas, guía que nos acompaña, me indica con su brazo hacia donde lanzar. Giro el cuerpo sosteniendo la caña con un arreglo en Texas y un grub de 7 pulgadas. Hago un último esfuerzo. El grub sale lanzado a muchos metros, más que cualquier tiro de todos los que he lanzado en este viaje de pesca. El señuelo hace contacto con el agua e inicia el rápido descenso. En el trayecto hacia el fondo, siento que se detiene. Es una sensación rara, diferente, se sale de la norma para la caída de un señuelo como este. Mario Hinojosa se levanta de su silla y dice “bueno Doctor, despídete de tu admirada presa”. “Espérame -le digo.- dame un segundo, un segundo más”. La línea cambia de dirección y ahora siento el peso, el peso, ese gran peso. “Un segundo, Mario”, susurro en voz baja. “Un segundo”, repito con voz más enérgica. ¡Viene el jalón! Se arma el grupo de cazadores de Lobinas Trofeo, ante la convocatoria de pescar Bacurato. Han pasado ya lista de presentes Mario Hinojosa, Everardo
& 5
Deliciosa
Rogelio Villarreal, Abelardo Saucedo y Mario Hinojosa rumbo a Culiacán Sinaloa.
comida del mar
Los Mariscos Rodríguez (de la curva) es un modesto restaurant a la orilla del boulevard principal de Culiacán. Mesas y sillas de plástico son utilizadas para servir grandes platos de callos y camarón aguachile de firme consistencia. Frescura y sabor distinguen la oferta de alimentos del mar del lugar.
& 6
Callo de Hacha en Los Mariscos Rodríguez, Culiacan, Sinaloa.
En la van tripulada por Iván Valdez conformamos el grupo Mario Hinojosa, Abelardo Saucedo, y Roberto Treviño.
González, Everardo González Jr., Víctor González, Antonio Morales, Roberto Treviño, Abelardo Saucedo, Iván González Estrada y el Dr. Villarreal Nos reunimos para revisar la lista de señuelos sugeridos para esta ocasión: paletones, salamandras, senkos, chatterbaits y flukes. La salida es a las 11:00 a.m., vuelo directo, y gracias a la diferencia de horario estaremos arribando a la 11:00 a.m., tiempo de Culiacán, Sinaloa. El vuelo arriba puntual y ya nos esperan Iván Valdez y Honorato Elizalde, administrador en jefe de la Hacienda de pesca Lake Baccarac Fishing Lodge. Ellos nos llevaran por tierra a la hacienda en Bacurato. Saliendo del aeropuerto le pregunto a Iván Valdés, “¿sabes dónde están los mariscos de la curva?” Iván responde con un “claro que sí, allí siempre hay mucha gente”. Los Mariscos Rodríguez (de la curva) es un modesto restaurant a la orilla del boulevard principal de Culiacán. Mesas y sillas de plástico son utilizadas para servir grandes platos de callos y camarón aguachile de firme consistencia. Frescura y sabor distinguen la oferta de alimentos del mar del lugar. El grupo disfruta la primera sorpresa de Sinaloa acabando con todas las raciones de mariscos y tostadas. Terminando el desayuno-comida del mar, salimos en la van rumbo a Bacubirito, poblado donde se encuentra ubicada la famosa presa Bacurato. En la van tripulada por Iván Valdez, conformamos el grupo Mario Hinojosa, Abelardo Saucedo, y Roberto Treviño. El equipo bombardea a Iván Valdez con preguntas: ¿Cuántos años tiene la presa? ¿Cuál es el récord de lobina? ¿Qué capacidad tiene? ¿Cuál es la mejor época del año para trofeos? Iván es hijo de Felipe Valdez (q.e.p.d.), amigo personal y leyenda de la pesca de lobinas trofeo. Tiene en su historial más de 500 lobinas trofeo por arriba de las 10 libras. Iván Jr. trae en la sangre la pasión por la pesca de lobina y la vocación de servicio al cliente que tenía su padre. Iván ataja las preguntas una a una y va contestando con seguridad. La presa Bacurato tiene 26 años de antigüe-
& 7
dad. “Fue en 1987 que mi papá se vino para acá, conoció a mi mama y nací yo, pues”, responde con ese clásico acento sinaloense. “Entonces la presa y yo tenemos la misma edad”. La mejor época para la pesca aquí es en febrero y marzo, sin embargo, durante todo el año Bacurato presenta oportunidad para obtener lobinas trofeo. El recorrido por tierra es de 3 horas, 2 de las cuales son por autopista y 1 hora por trayecto carretero sencillo y en condiciones promedio hasta llegar a Bacubirito. Iniciamos un sinuoso trayecto entre riscos. Ya me siento cerca. “A la izquierda -comenta Iván- pueden ver los tanques de producción de tilapia”. La producción de tilapia de la pesa Gustavo Díaz Ordaz (Bacurato) es de gran escala y la cooperativa de pescadores se distingue por su potencial de trabajo y organización. Pescadores deportivos y comerciales conviven en las aguas de este embalse sin injerencia de unos sobre otros, y la lobina es muy respetada por los pescadores comerciales. Por fin aparece el embalse, es hermoso. Otra vez en Bacurato, fortaleza que alberga a las mejores lobinas de México y del mundo.
Esta es la quinta ocasión que pesco en Bacurato. Me ha tocado de todo: lobinas trofeo destrozando señuelos de superficie, bolsas de senkos totalmente vacías debido a la incesante actividad, swimbaits con profundas heridas laterales llenas de pegamento para plástico, paletones con tercias dobladas, desniveladas y hasta faltantes, lobinas flotando con tilapias de medio kilo atoradas en las agallas y los atardeceres más espectaculares que haya presenciado. Se distingue ya la Hacienda y, en primera fila, Lulú, amiga y coordinadora de la atención personalizada de esta hacienda. Lulú está en todo: habitaciones, bebida, cocina y necesidades de cada uno de los pescadores. Ella y su equipo de trabajo hacen de la estancia en esta hacienda una experiencia muy gratificante. Las habitaciones se distribuyen, el equipo se baja de las camionetas, se arma y se forman los grupos de pesca, los cuales se rotarán para que los cazadores de lobinas trofeo convivan, aprendan y disfruten de la pasión con cada uno de los miembros del grupo. Al llegar al botadero, los cazadores se
van acercando a sus guías y embarcaciones. Subo a una loma y visualizo la escena. Las casacas Lobina Trofeo hacen un artístico contraste con el fondo de la presa. Respiro hondo. Estoy contento, satisfecho y listo para empezar. Declaro inaugurado el inicio de esta aventura, de esta aventura en México, buscando lobinas trofeo en Bacurato. Los guías están listos e impacientes. La dinámica para esta salida consistirá en intercambio de pescadores en cada sesión para así aprender de los demás y convivir todos buscando las grandes lobinas trofeo de este embalse. En la primera sesión me toca hacer pareja con Honorato Elizalde, Administrador de la Hacienda de pesca Big Bass Lake Baccarac Fishing Lodge. Iniciamos la tarde probando suerte, yo con mis senkos en wacky y Honorato con un fluke en carolina. Los lances son incesantes, cubriendo todas las áreas con potencial para albergar lobinas trofeo. A medida que pasa el tiempo, empiezo a sentir que la pesca va a estar difícil. No hemos tenido ningún enganche, ni si quiera algún signo de actividad de las lobinas en toda la tarde. La otras embarcaciones están tenien-
Lances
incesantes
Los lances son incesantes, cubriendo todas las áreas con potencial para albergar lobinas trofeo. A medida que pasa el tiempo, empiezo a sentir que la pesca va a estar difícil. No hemos tenido ningún enganche, ni si quiera algún signo de actividad de las lobinas en toda la tarde.
& 8
Presa Bacurato (Gustavo Díaz Ordaz).
Mario Hinojosa.
& 9
do también una tarde difícil, solo Mario Hinojosa ha logrado capturar una buena lobina. El trofeo atacó con furia su salamandra, mostrando la fuerza que poseen las lobinas de Bacurato. Mario la sube a la lancha y muestra con orgullo su trofeo que, debido a las difíciles condiciones de pesca, tiene aún más valor. El sol poco a poco nos va anunciando la llegada de la hora de regreso y enfilamos la panga en dirección del botadero donde ya nos esperan los demás cazadores de lobinas trofeo. Intercambiamos de regreso experiencias dentro del agua de esta sesión donde el común denominador resultan las dificultades con que se nos ha presentado el embalse en esta sesión de pesca. Gran número de alevines fueron avistados, así como abundante tilapia, condiciones que podrían estar afectando el comportamiento de la lobina hacia los señuelos que estuvimos trabajando. De regreso en la Hacienda, ya nos espera Lulú y su equipo para recibirnos con una sopa de tortilla que inmediatamente deja ver el excelente sazón de la cocina del Big Bass Lake Baccarac
Fishing Lodge. La exquisita entrada es seguida de un cortadillo de diezmillo que también embruja los paladares de todos los miembros de Lobinas Trofeo, quienes comentan con frecuencia el buen sabor del platillo y van consumiéndolo hasta dejar limpio el plato. Nieve con duraznos en almibar y café dan el cerrojo a la estupenda experiencia gastronómica que degustamos esta noche. Mañana estaremos listos a las 5 de la mañana para intentar nuevamente vencer a las grandes lobinas trofeo que habitan las aguas de esta gran fortaleza mexicana, de este gran embalse Bacurato. Bacurato, 5:00 a.m. Como siempre, me adelanto a la alarma del reloj. Los olores nos remontan a las cocinas de la abuela. El café, las tortillas de harina y la manteca de puerco nos llaman a la reunión en torno al desayuno. Los ánimos andan bien, los cazadores de lobinas trofeo traen ya objetivos bien definidos y cada quién semblantea su estrategia para el día de hoy. Abelardo define las parejas, abordamos la van y nos dirigimos hacia el botadero. En el camino, del lado derecho,
alcanzo a ver una sombra, un hombre de estatura mediana, sin camisa y en bermudas. Iván Valdés me dice “mire nomás quien lo vino a recibir Doctor. ¡Es el Tigre!”. No lo puedo creer, El Tigre fue por muchos años mi guía en bacurato. Compartimos experiencias de pesca inigualables y nos hicimos verdaderos amigos. Me bajo de la camioneta y nos saludamos efusivamente. Y aún cuando El Tigre no se dedica más a guiar a pescadores, ha sido considerado uno de los mejores guías de pesca de lobina de Bacurato. Fue en Junio del 2004, un día del padre, cuando junto con El Tigre capturé mi lobina más grande, mi lobina trofeo. Un día antes, pescando Bacurato con el Tigre. “Tigre, necesito pescar una lobina por arriba de 10 libras. Si me pones donde está y la saco, te voy a dar una buena propina”, le dije. El Tigre me contestó muy serio. “No doctor, no quiero su propina”. Volteo. “¿Cómo Tigre? ¡Es una compensación por tu trabajo!”, le respondí. “No Doctor”, revira él, “no es eso lo que quiero. Lo que quiero es su grabadora con todos los discos que trae”. Me quedo pensando y le contesto. “Va, Tigre. Va.”
Al día siguiente el Tigre estaba por mí a las 4:00 a.m. Esta vez sí me ganó a la levantada. Entró sigilosamente al cuarto. “Doctor, Doctor, ya lo está esperando la lobina”, dijo. El tigre ya tenía todo arriba de la lancha. Reviso que todo esté completo. Al revisar la hielera me doy cuenta que está repleta de cerveza y hielo. “No hay refrescos aquí, Tigre, ni agua tampoco”. Con una gran sonrisa me contestó. “Después de la lobina que va a sacar, Doctor, nos vamos a tomar esas cervezas usted y yo”. En medio de una profunda obscuridad El Tigre arranca la embarcación. Como si fuera murciélago, va esquivando obstáculos: piedras, ramas, islas. Conoce el embalse como la palma de su mano. Media hora después, llegamos al punto seleccionado. Es una pequeña cañada que termina en punta de la falda de una montaña hacia el embalse. El Tigre dirige la panga sigilosamente hasta llegar a la punta de la cañada, abordándola por su parte lateral. Volteo y le digo, “Tigre, vas espantar a las lobinas”. El Tigre sigue callado hasta
que tocamos tierra. Voltea conmigo. “Doctor, el tiro va a ser de la orilla hacia el vaso de la cañada. Aquí hay un profundo de muchos metros. No quiero que le ponga ninguna de sus novedades de esas chinas y esas chin…” Yo no aguanto la risa. “Le va a poner una Cachorra, la más grande que tenga. De un color natural, muy natural. La lobina grande no es tonta, solamente en raras ocasiones ataca señuelos con colores destellantes”. Saco una salamandra de 8 pulgadas en watermelon seed y la pongo en arreglo Texas. El Tigre me señala con el brazo hacia dónde va el lance. Todavía con el manto de obscuridad, se escucha la línea saliendo rápidamente del carrete. “Déjela caer, Doctor. Déjela que pise fondo. La va estar mo-
viendo suavemente, sienta el fondo de la presa, sienta cómo va desplazándose el señuelo sobre el fondo. Sigo las indicaciones de El Tigre. No se escucha nada en la presa. Completo silencio. “Es el momento de las lobinas trofeo”, pienso. Con pequeños movimientos para mover la salamandra, voy recobrando lentamente hasta tener el señuelo de nuevo fuera del agua. “No se desespere Doctor”, me dice El Tigre. “Aquí no hay lobinas chicas. En el primer cambio de dirección de la línea o comportamiento anormal usted le va a dar un buen enganche, sólido y bien puesto”. Así pasan varias horas sin movernos del lugar. En el siguiente lance, El Tigre me indica hacia otra sección del canal que estamos trabajando. Lanzo con
& 10
Honorato Elizalde.
Mario Hinojosa, Rogelio Villarreal y el Güero Blas.
& 11
Emprendemos en el regreso a Monterrey, no sin antes dejar constancia de nuestras capturas en el impresionante diario de la Hacienda Big Bass Lake Baccarac.
& 12
fuerza y precisión al punto, el señuelo cae rápidamente hasta tocar fondo. Lo trabajo con las recomendaciones de El Tigre. Repentinamente, la línea hace un extraño y comienza a cambiar de dirección. Viene un jalón de la lobina, seco y sólido, muy pero muy pesado. Me levanto de la silla y le doy un buen enganche. “¡Bien pegao!” dice El Tigre, y le sube a la grabadora. “Ya se vino, Doctor, ya se vino. ¡No le afloje!” La gran lobina se siente ya atrapada y comienza a sacar línea buscando aguas todavía más profundas. La estrella del carrete está a casi todo y la lobina me sigue sacando línea. La caña, doblada al máximo. El Tigre abre la primera cerveza y le sube más a la grabadora. Yo me concentro, no puedo perder esta lobina. La trabajo y la trabajo, como me enseñó mi tía Eva, de Sabinas Hidalgo, N.L. La batalla continúa por varios minutos. ¡Fue una batalla inolvidable! El Tigre, sin siquiera voltear a ver la
lobina me dice, “ya la cansó Doctor”, y toma ágilmente la red. Acerco la lobina a la panga y El Tigre, en un solo movimiento, la hace entrar y la levanta rápidamente. Sale de la red parte de la región caudal del cuerpo y toda la cola. Los dos nos que damos mirándola en el piso de la embarcación. El Tigre voltea conmigo. “Ya se fregó la grabadora y los CD’s, Doctor. ¡15 libras!”. Después de despedirme de El Tigre, abordo la camioneta y permanezco en silencio hasta llegar al botadero. Mi cara refleja un estado mental de recuerdos, del recuerdo de la gran lobina, de mi lobina de 15 libras que capturé en compañía de él en esta misma presa, en bacurato. El ruido de las cañas y cajas de pesca al depositarlas en las embarcaciones, me ubican de nuevo. Cambio el semblante y me apresto a subir a la panga. Volteo con el guía y le digo “¡vamos por los trofeos! Hoy es cuando van a salir”.
Me acompaña en esta sesión Roberto Treviño, quien recientemente se integró otra vez a la pesca de lobina. Tiene una clara inclinación hacia la búsqueda de trofeos, con varias lobinas monstruo en su haber. Yo continúo teniéndole fe a los senkos en wacky mientras que Treviño se apresta a utilizar un paletón en color tilapia. Llegamos a un área con cobertura que inicia con un bajo a 8 pies, cayendo rápidamente a 20 pies. Treviño empieza a atacar la zona con su paletón. El fondo es rocoso y los golpes con las piedras se reflejan hacia la caña de Roberto. En uno de esos choques contra las piedras del fondo, viene el encontronazo. La lobina toma el paletón con agresividad e intenta desplazarse hacia aguas aún más profundas. Roberto le responde con un buen manejo y recobra hasta que la cansa y la puede subir a la lancha. Un hermoso ejemplar de Bacurato.
Rogelio Villarreal.
La paciencia
una buena aliada
& 14
Escudriño todas y cada una de las áreas que pudieran albergar una lobina trofeo. Mi senko en wacky no ha tenido los resultados esperados. Cambio a un gran grub de 8 pulgadas, negro con cola roja. Lance tras lance, los mismos resultados. Una completa inactividad de las lobinas, ni siquiera lobinas promedio están saliendo. Las horas transcurren lentamente debido a la poca acción
Escudriño todas y cada una de las áreas que pudieran albergar una lobina trofeo. Mi senko en wacky no ha tenido los resultados esperados. Cambio a un gran grub de 8 pulgadas, negro con cola roja. Lance tras lance, los mismos resultados. Una completa inactividad de las lobinas, ni siquiera lobinas promedio están saliendo. Las horas transcurren lentamente debido a la poca acción, las otras embarcaciones están sufriendo las mismas condiciones de pesca. Llega la hora de regreso para la comida. Callados emprendemos a toda velocidad hacia la hacienda para una buena comida y una reponedora siesta en preparación para la jornada vespertina. Los camarones resultan exquisitos y todo el grupo termina sus platos completamente. Estamos cansados, ha sido una larga mañana de poca acción por lo que decidimos tomar una buena siesta antes de atacar la sesión por la tarde. El calor es agobiante, todos decidimos esperar hasta las 4 p.m. para entrar de nuevo al agua. Mi compañero de esta sesión es Everardo González Jr., experimentado cazador de lobinas trofeo quien a acompañado al grupo en muchas salidas de pesca buscando las grandes lobinas mexicanas. Everardo es apasionado de los paletones y la mayoría de sus lobinas trofeo han sido obtenidas con este señuelo. Inicia la sesión con su paletón preferido, con mucha enjundia. Everardo le pone ganas, muchas ganas, sin embargo, los oponentes ni se inmutan. No hay actividad, simplemente las lobinas están en mute. Yo le sigo teniendo confianza a los senkos en Texas, sin peso y en wacky con los mismos resultados. Ni un solo piquete, nula actividad. Las horas pasan y el sol inicia su descenso hasta prácticamente besar las aguas de Bacurato, una imagen inolvidable. Repentinamente se inicia una andanada de rayos presagiando una buena tormenta. Los hilos plateados hacen un contraste espectacular con el cielo anaranjado del atardecer en Bacurato. Son imágenes inigualables. Bajo la lluvia, emprendemos el regreso hacia la hacienda Lake Baccarac
& 15
Roberto Treviño y Rogelio Villarreal.
& 16
donde ya nos espera otra sorpresa gastronómica que compensa el desencanto de la tarde de hoy. El enorme T-Bone denota un asado perfecto, medio arrebatado, bien marcado por fuera y jugoso por dentro. Acompañado de unos deliciosos frijoles a la charra combina perfectamente con unas enormes tortillas de harina y una salsa recién molcajeteada. Estamos cansados, verdaderamente agotados después de una intensa sesión de pesca sin los resultados esperados. Everardo González padre comenta “así es la pesca de lobina. Es un asunto muy dinámico y cambiante, ese es el verdadero reto de pescar esta especie”. El comentario es secundado
con poco entusiasmo por todos en la mesa, acompañados de café y nieve de vainilla como postre. Llega la hora de ir a descansar. Mañana será la última sesión de este complicado y difícil episodio de “Tour Mexicano Buscando Lobinas Trofeo”. En el camino hacia las habitaciones, Mario Hinojosa se me acerca y me dice “Doc, nos toca pescar juntos mañana. ¿Qué plan de pesca traes?”. “La verdad, no sé”, le contesto. “Está demasiado inactiva la lobina. De acuerdo a los condiciones de mañana pues a ver que aplica”. Nos despedimos y caigo rendido en la cama con la intención de estar al 100% para la última oportunidad de obtener
mi lobina trofeo de Bacurato. A las 5:00 a.m. ya estamos desayunando huevos al gusto y pancakes con un energizante café negro. Los miembros del grupo denotan cansancio, sin embargo se reportan listos para la última sesión del viaje. Ya en el botadero, todos nos deseamos suerte y las embarcaciones arrancan en diferentes direcciones buscando los mejores puntos de la mañana. A nosotros nos acompaña el Güero Blas como guía, quien dirige la panga hacia una retirada punta que cae abruptamente hacia el lecho del embalse. Aquí iniciamos el día de pesca. Vuelvo a amarrar un senko en wacky y Mario un gran paletón. La actividad de
casteo es incesante, sin suerte. Los minutos pasan y se acumulan en horas. Hemos intentado ya diferentes señuelos que en otras ocasiones nos han brindado enormes lobinas y los resultados siguen siendo los mismos. La gota de sudor recorre mi cara desde la frente, por debajo de los lentes solares y continúa por la nariz hasta la punta de la misma para caer estrepitosamente en mi pie derecho. Están transcurriendo los últimos segundos de tres complicados días de pesca en Bacurato, Sinaloa. Otra gota de sudor inicia su camino en mi frente, corre por la nariz pero esta vez se desvía hacia la comisura de mi boca. Esta salada, muy salada, así como esta visita en búsqueda de lobinas trofeo a este gran embalse, el mejor de México y, en opinión de muchos, el mejor del mundo. El grupo de cazadores de lobinas trofeo ya ha capturado sus premios, poderosas lobinas que habitan las aguas de esta presa. Han salido con mucho esfuerzo, pocas pero trofeos todas. En mi caso, no he sacado ninguna, tampoco se me ha escapado ningún trofeo, simplemente no han sido mis días. Exhalo un débil “¡uuuf!”, signo inequívoco del cansancio y desesperación. Los segundos siguen corriendo. A las 11 de la mañana tenemos que estar de regreso al botadero y de allí a la hermosa hacienda de pesca Big Bass Lodge Lake Baccarac para regresar a Monterrey. Solo 17 segundos para el final. El Güero Blas, guía que nos acompaña, me indica con su brazo hacia donde lanzar. Giro el cuerpo sosteniendo la caña con un arreglo en Texas y un grub de 7 pulgadas. Hago un último esfuerzo. El grub sale lanzado a muchos metros, más que cualquier tiro de todos los que he lanzado en este viaje de pesca. El señuelo hace contacto con el agua e inicia el rápido descenso. En el trayecto hacia el fondo, siento que se detiene. Es una sensación rara, diferente, se sale de la norma para la caída de un señuelo como este. Mario Hinojosa se levanta de su silla y dice “bueno Doctor, despídete de tu admirada presa”. “Espérame -le digo.- dame un segundo, un segundo más”. La línea cambia
de dirección y ahora siento el peso, el peso, ese gran peso. “Un segundo, Mario”, susurro en voz baja. “Un segundo”, repito con voz más enérgica. ¡Viene el jalón! La lobina responde con gran energía y comienza a sacar línea. “¡Eso, Doctor!”, corea Mario Hinojosa. “¡Que no se le vaya!”. La trabajo lo mejor que puedo, recordando aquel momento con El Tigre y la gran lobina de Bacurato. Al fin la lobina se cansa y la acerco a la panga, el Güero Blas la coloca en la red y la levanta hacia la embarcación. ¡Por fin! ¡La lobina trofeo de Bacurato, y en los últimos segundos de pesca! Una experiencia inolvidable.
Emprendemos el regreso a Monterrey, no sin antes dejar constancia de nuestras capturas en el impresionante diario de la Hacienda Big Bass Lake Baccarac. ¡Saludos desde Monterrey! Dr. Rogelio Villarreal drvillarreal2000@yahoo.com Info Big Bass Lake Baccarac Lodge Doug King: (480) 861-5021 (USA) Ivan Valdés: (673) 861-5021 (México) www.mexicofishing.net Fotografía: Abelardo Saucedo abelardo@bassdays.tv Javier Iván González javierivan1@gmail.com
& 17
Potente.
Este barco puede acelerar de 0 a 20 nudos en tan solo 8 segundos. Así que pon el acelerador en el fondo y siente cómo te vas hacia atrás. No sólo por eso podrías irte de espaldas, sus interiores, totalmente rediseñados, tienen tal fineza de acabados que te asombrará.
& 20
Spencer 66
Spencer se ha dedicado a innovar en el mundo de los yates. Amantes de la pesca deportiva, los integrantes del equipo de Paul, nombre de pila del fundador cuya compañía lleva su apellido, se regocijan en, modelo a modelo, tomar algo que ya parecía impecablemente bien
hecho y lo modifican un poco para enseñarnos que, cuando pensábamos que la calidad de manufactura e ingeniería habían llegado a su tope, estábamos equivocados. Además del músculo que muestra para llegar a una velocidad de crucero de 33 nudos, los cuales al-
www.spenceryachtsinc.com
& 21
ESPECIFICACIONES
& 22
Eslora:
66’ (20.22m)
Capacidad de combustible: 2,050 gal
Manga:
18’6” (6m)
Desplazamiento:
Calado:
6’6” (1.98m)
Motor:
canza sin mayores aspavientos, el Spencer 66 puede convertirse en un cazador furtivo en completo control de sus habilidades. Pon el motor de troleo en marcha, lanza la carnada al agua y muévete a 3.2 nudos, acechando a tu presa. Para seguirla y darle alcance, puedes desplazarte a 8 nudos sin alborotar demasiado la superficie. Cuando pique uno grande, puedes moverte un poco más despacio mientras peleas para traerlo abordo y a la sala de trofeos. El casco está hecho de un empare-
68,000 lbs
2x T 1825 hp CAT C32 ACERTs
dado de Core-Cell y fibra de vidrio, moldeado en frío, para lograr una estructura sólida que no se amedrenta cuando tiene el oleaje de frente. De hecho, para estas situaciones es posible cambiar la disposición de la proa, logrando un ataque de la marea mucho más seguro. El cuarto de máquinas no podría tener un acceso más sencillo, con una puerta en la popa que hará el mantenimiento de su máquina asombrosamente sencillo. Desde este compartimiento de superficies lustrosas, se
nota el extraordinario trabajo y cuidado a los detalles que pusieron en cada centímetros de los interiores. El trabajo de la madera para los terminados de gavetas, ventanas y pisos es soberbio. Tiene una cocina muy espaciosa para el tamaño del barco y, a pesar de que su comedor no puede acomodar a más de 4 personas cómodamente sentadas, la sala en C, de frente al televisor, entretendrá plácidamente al resto de los invitados mientras esperan su turno a la mesa. Elegante en todas sus facetas, fino por dentro, sólido por fuera y con un desempeño formidable bajo cubierta, el Spencer 66 podría volverse uno de los grandes favoritos de quienes gustan de la pesca deportiva con el mejor estilo.
& 23
De pesca con la flota
Texto y fotos: Arq. Héctor Flores L. Pesca Costera México. http://pescacosteramexico.blogspot.mx/
en Mazatlán Mucha acción y recuerdos con la primera compañía de pesca deportiva en Mazatlán, fundada en 1946.
& 26 32
Hank Aaron (al centro), famoso jugador de béisbol de las Grandes Ligas, pescando con la flota BiBi FLEET, 1971.
La Historia El pasado mes de julio estuve de vacaciones con mi familia en el bello puerto de Mazatlán, Sinaloa, y tuve la oportunidad de recordar viejos tiempos, cuando salí por primera vez a una pesca de altura con mi abuelo y mi señor padre, que Dios los tenga en su gloria. La fecha fue el verano de 1974, el prestador de servicios, la Flota BIBI Fleet. En aquella ocasión fueron 6 velas capturados, de los cuales se liberaron 3, más un marlín negro que peleó mi padre por 4 horas, pero ya era tarde y el regreso largo, por lo que cortó la piola. De nueva cuenta volvimos a Mazatlán el verano del 77. Ahí fue mi segunda salida de pesca con la Flota BIBI. En una mañana muy tranquila, sacamos un par de dorados más dos barriletes. Vimos un marlín azul bollado que no quiso picar, más un ataque fallido de vela y regresamos a puerto después de una buena pesca. La Flota BIBI Fleet inicio en 1946, después de la Segunda Guerra Mun-
dial. Fue la primera compañía de pesca deportiva en Mazatlán, fundada por el señor Ernesto Coppel, que eligió este destino porque, junto con Perú, eran los principales puntos de atracción para la pesca de marlín azul, marlín negro y pez vela. En aquel entonces, por tal motivo, existía una fuerte demanda de una chartera de pesca deportiva de altura que brindara excelente servicio a los pescadores nacionales y extranjeros, la cual perdura hasta nuestros días. El Reencuentro Después de 36 años de mi última salida con esta organización, me puse en contacto con Tadeo Hernández Kelly, representante de la misma, para programar una salida a pescar. La Luna no estaba ayudando en nada, pero eso no fue inconveniente. Fijamos el día y la hora. Como parte de su servicio, un trasporte fue envido a mi hotel para recogerme.
El reloj marcaba la 6 de la mañana cuando suena el teléfono en mi cuarto para avisarme que me estaban esperado para llevarme a la Marina Mazatlán. La oficina de la Flota BIBI Fleet está ubicada en la Marina del Sol, local número 8. Ahí saludé a Tadeo, con el que platiqué un rato mientras alistaban la lancha. No pude negarme a un rico café recién preparado para comenzar el día con el pie derecho. La Embarcación Caminé en compañía de Tadeo hasta el muelle donde me esperaba una súper panga de 26 pies de longitud, consola central con su T Top, equipada con tangones, porta cañas, vivero para carnada viva, dos hieleras, GPS, sonar, un motor de 150 caballos Yamaha de 4 tiempos y todos las medidas de seguridad que exige capitanía de puerto. Se presentó el capitán y planteamos la estrategia para el día. Primero buscaríamos los dorados en las boyas que
& 27
se encuentran desperdigadas por todo el sector. Estos artefactos consisten en un par de botellas de plástico amarradas a una hoja de palma o un madero que funciona como sombra y, a su vez, atrae carnada, principalmente cocineros, como yo los conozco. En Mazatlán les dicen chiles verdes (Green Jack). Donde hay carnada, hay predadores, después trolearíamos en busca de picudos.
& 28
La Pesca Con todo listo, abordé la súper panga y tomamos el canal de salida de la marina, pasando por la marina el Cid. Aquí es muy buena la pesca de corvina en el horario nocturno, cuando ya no hay trafico de embarcaciones, pero esa es otra historia que luego les platico. El mar estaba como un plato, totalmente calmo. Marcamos rumbo en el GPS a una boya a 12 millas de distancia. Cuando llegamos, lo primero fue
conseguir carnada viva para el vivero. El capitán preparo una caña con un sabiky rig, arreglo que consiste en de 6 a 8 anzuelos pequeños con una pequeña pluma imitando a un diminuto pez o camarón. Mientras tanto, yo preparaba mi equipo: una caña Shimano Trevala de 6”6 de longitud aunada a un carrete Okuma Cortez CZ-10CS, cortesía de mis amigos de www.curicanes.com, cargado con 400 yardas de línea Power Pro de 50 libras, con un top shot de monofilamento de 50 libras, más líder de 80 libras de flurocarbono. Con dos bajadas del sabiky, 5 cocineros o chiles verdes nadaban en el vivero, pero al tercer intento el rig fue arrancado violentamente. Pude ver una cola amarilla de un buen dorado que se retiraba. Había tomado uno de los cocineros atrapados. De inmediato, puse un Buck Tail Banjo Jig de 1 onza, marca Williamson. Lo dejé caer. No pasó
mucho cuando un fuerte golpe y una pequeña corrida nos hicieron perderlo. Dimos varias vueltas sin suerte a esta boya con carnada viva y plumas. Lo más desesperante era ver los dorados que seguían los señuelos pero no concretaban sus ataques. Por decisión unánime, preferimos buscar fortuna en otro sitio. Nos dirigimos hacía el sur rumbo a Mármol en busca de una nueva boya. Tardamos unos minutos en encontrarla. De pronto, saltó un enorme dorado que nos sorprendió. De nueva cuenta el capitán puso una caña con un chile verde prendido de la nariz, y en lo personal intenté con un señuelo marca DUO el Tide Minnow Advance Line Slim 175 Flyer. Pero los dorados ni en cuenta. Así pasaron las primeras horas de la mañana hasta las 9:30, cuando decidimos trolear en un patrón más abierto de la boya, con una carnada viva y una escribano muerto, también conocido
Los dorados se pusieron
difíciles
Con dos bajadas del sabiky, 5 cocineros o chiles verdes nadaban en el vivero, pero al tercer intento el rig fue arrancado violentamente. Pude ver una cola amarilla de un buen dorado que se retiraba.
& 29
Preparados y listos
para salir
& 30
El mar estaba como un plato, totalmente calmo. Marcamos rumbo en el GPS a una boya a 12 millas de distancia. Cuando llegamos, lo primero fue conseguir carnada viva para el vivero. El capitán preparo una caña con un sabiky rig, arreglo que consiste en de 6 a 8 anzuelos pequeños con una pequeña pluma imitando a un diminuto pez o camarón.
como pajarito o Ballyhoo. Los anzuelos de la marca Lazer Sharp Live Bait por Eagle Claw (www.eagleclaw.com) no fallan, se los recomiendo altamente. La caña con el escribano se encontraba en uno de los portacañas del lado izquierdo de la lancha, con la línea puesta en el tangón correspondiente a ese lado. De repente la línea se suelta del tangón y el carrete empieza a sonar. De inmediato le paso mi caña con la carnada viva al capitán y tomo la segunda. Dos corridas muy buenas y el animal empieza a ceder. Sin mucha premura lo acerco al costado de la lancha. Ahí, el capitán dio un golpe certero con el gancho para vencer al primer dorado de la mañana. Llegó la hora de tomar decisiones: seguir buscando los dorados o colocar las cuatro líneas en el agua y trolear en busca de los picudos. Decidí dar una vuelta más con la carnada viva para luego ponernos a trolear con escribanos y mechudos. Prendido de la nariz con un anzuelo circular de la marca Lazer Sharp para agua salda, fue al agua el cocinero o chile verde mas grande que todavía estaba vivo. Esto fue una muy buena elección porque solo habían trascurrido algunos minutos cuando mi carnada empezó a actuar extraño. Le di línea para que el dorado pudiera comer con mas facilidad y esperé unos segundos para subir la punta de la caña. Ahí el Cortez empezó a chillar de lo lindo. Tres brincos espectaculares nos revelo un dorado macho de muy buen tamaño. El capitán le calculaba un peso de 15 a 20 kilos. ¡Vaya! estaba disfrutando mucho esta pelea. Poco a poco el animal fue cediendo bajo la presión de 20 libras de drag aplicadas por el Cortez. El capitán se preparo con el gancho, ya que solo faltaban escasos metros para tenerlo a distancia. Pero la pesca no es una ciencia exacta. El animal dio un último cabeceó y se pudo liberar, y yo recuperé todo mi arreglo, incluyendo el anzuelo. Un poco molesto por no haber podido aterrizar este bello ejemplar, preferí celebrar el hecho de que estaría disponible para pelear otro día. Por supuesto, me tuve que tomar una bien fría como brindis por el suceso. Tomé el timón de la lancha mientras el capitán prepara las cuatro líneas, se-
& 31
Gratos
recuerdos
& 14 38 32
En el bello puerto de Mazatlán tuve la oportunidad de recordar viejos tiempos, cuando salí por primera vez a una pesca de altura con mi abuelo y mi señor padre, que Dios los tenga en su gloria. La fecha fue el verano de 1974, el prestador de servicios, la Flota BIBI Fleet.
ñuelos en los tangones, más dos carnadas de escribano o pajarito. Ajusté la velocidad de la embarcación y tracé un curso para buscar a los picudos. Pasé una hora sin resultados, solamente vimos un pez vela boyado pero no quiso las carnadas. Por el radio reportaban otras embarcaciones que no habían visto picudos, solamente dos reportaron capturas de pez vela. Una tortuga caguama estaba boyada muy cerca de nuestro curso, por lo que traté de tomarle algunas fotografías. Me da gusto que los esfuerzos de conservación están dando frutos, pero no podemos bajar la guardia. Por favor, no consuman huevos de tortugas marinas es una mentira vil decir que tienen facultades afrodisiacas.
El Regreso El tiempo se nos acabó y nos enfilamos a la marina. Faltando unas dos millas, localizamos una boya con algo de movimiento. Solo bajamos una línea con un escribano. Apenas tocó el agua, fue atacado por un dorado, el segundo del día. La pelea duró muy poco pero fue muy divertida. De regreso en la marina, Tadeo nos estaba esperando. Fue un buen día de pesca, si consideramos el efecto de la luna llena. Mi par de dorados fueron fileteados a la perfección: 4 longas embolsadas y en hielo para que me las llevara. Los dos vela reportados estaban colgados, uno de ellos de muy buen tamaño. En lo personal prefiero el C&R
pero hay ocasiones, cuando el animal se gancha del buche y su oportunidad de vida es casi nula, que no tiene sentido soltarlo, es preferible aprovecharlo. Quisiera darle las gracias a Tadeo por sus finísimas atenciones, así como a la Flota BIBI Fleet por traerme recueros que atesoro con mucho cariño. Señores, no le fallará esta organización con 60 años de experiencia los respalda. A propósito, por falta de tiempo no pude salir con ellos a pescar a los manglares. Espero que próximamente les traiga ese reportaje. En la Cocina ¿Quieren saber cómo terminaron esos filetes de dorado? Aquí les dejo las recetas:
& 33
Ceviche de dorado Ingredientes: - Filete de dorado finamente rebanado y picado - Media cebolla morada picada muy fina - Un tallo de apio finamente picado - Medio chile chilaca finamente picado - Un tomate huaje picado en cubitos - Cilantro finamente picado - Limón agrio, el necesario - Aceite de oliva de buena calidad - El jugo media lima, el resto cortado en rodajas para decorar - Sal de mar y pimienta al gusto
& 34
Preparación: En un recipiente coloque el pescado ya picado y la verdura picada. Mezcle bien. Luego vierta el jugo de los limones más el aceite de olivo, y vuelva a mezclar. Sazone con sal y pimienta al gusto. Ponga el jugo de la media lima y decore. Tape el recipiente y colóquelo en el refrigerador o hielera de 2 a 4 horas. Saque y acompañe con tostadas o galleta saladas, más una cerveza bien fría.
Cubos de dorado a la plancha Ingredientes: - Filete de dorado rebanado en cubos - Aceite de olivo de buena calidad - De 4 a 6 dientes de ajo finamente picados - Sazonador de finas hierbas - Sal marina y pimienta molida gruesa al gusto - Limón rebanado par adornar Preparación: En un sartén se pone el aceite de oliva hasta que esté bien caliente. Se agrega el ajo picado. El pescado, ya en cubos, se sazona con la sal y pimienta más el toque de finas hierbas para luego colocar en la sartén hasta que esté al punto. Poner los limones en mitades o en gajos alrededor del plato de servir. Acompañe con una guarnición de verduras al vapor o a la mantequilla y un buen vino blanco o rosado bien frío.
Si están interesados en contratar los servicios de la Flota BIBI Fleet, los pueden contactar en: www.bibifleet.com y www.fishmazatlan.com. • Síguelos en Facebook: http://www.facebook.com/home.php#!/profile.php?id=1600194302 • Síguelos en Twitter: http://twitter.com/BibiFleet • Síguelos en YouTube: http://www.youtube.com/BibiFleet • Conviértete en un Fan: http://www.facebook.com/#!/pages/ Bibi-Fleet-Sportfishing/137021479712109 • Teléfonos: 01- 669-148-2055, 01- 669-913-1060.
Me despido con un cordial saludo de todos mis lectores, y mucha suerte en su próximo viaje de pesca. Pesca Costera México. http://pescacosteramexico.blogspot.mx/
Arq. Hector Flores L. Eagle Claw Pro Staff.
A
lo largo de los años, Hatteras se ha hecho un nombre por construir algunos de los botes más bonitos del mercado. Grandes, fuertes y con una elegancia regia característica. Este yate, aunque no es uno de los más imponentes, traslada perfectamente esa gracia de líneas para una aparien-
cia simplemente estupenda. Este diseño nació en 2007 y se perfeccionó a lo largo de los dos años siguientes, en una época de crisis económica mundial. No obstante las dificultades monetarias, Hatteras invirtió lo necesario para darle al GT 60 más que una cara bonita.
De un tamaño intermedio entre los pequeños pesqueros y los grandes yates que más bien parecen cruceros, mueve sus 60 pies de eslora con facilidad insospechada. Su maniobrabilidad parece prestada de un bote mucho más pequeño y, a pesar de no ser tan corpulento, se mueve bastan-
Hatteras GT 60 & 36
www.hatterasyachts.com
& 37
ESPECIFICACIONES
& 28 38
Eslora:
59’10” (18.20m)
Capacidad de combustible: 1,500 gal
Manga:
19’ (5.78m)
Desplazamiento:
Calado:
4’9” (1.44m)
Motor:
te menos sobre el oleaje de lo que podría pensarse. Está equipado con un par de motores Caterpillar C32 ACERT, cada uno con 1900 caballos de fuerza, que lo levantan de 0 a tope en escasos 90 segundos. Además tiene una asombrosa capacidad para detenerse. Aún a buena velocidad, por encima de los 7 nudos, cambia a reversa y te detendrás casi en el mismo punto, lo cual es sumamente útil cuando ves un pez de buen tamaño y debes reaccionar cuanto antes. En la popa tiene un espacio perfecto
89,500 lbs 2x CAT C32 Diesel
para pescar. Es amplia, equipada a la altura de un bote de mayor tamaño, con varios pies libres que hacen del catch and release una opción práctica por el espacio que tienes para volver a echar al pez al agua. Por si fuera poco, este santuario de pescadores es personalizable. El comprador puede diseñar el mezzanine a su gusto, lo que le da un sello particular a cada bote parecido que pudiera encontrarse en la marina. Puente abierto o cerrado, cualquiera es opción al comprar un GT 60. Aquí se puede acomodar la consola de
mando en dos disposiciones: de lado, con un solo pasillo, o central, con la consola un poco más pequeña y dos pasillos laterales. Cualquiera que sea la elección, el espacio de almacenamiento es más que suficiente, y los asientos también son adecuados para albergar, con lujo y sofisticación, a varias personas. Los acabados interiores ya se los puede imaginar, hechos para satisfacer los estándares de la marca. Sin embargo, son un tanto más sencillos, con líneas agraciadas, con perfecto cuidado del detalle pero sin atiborrar de decoración, lo que le da un aspecto más serio que algunos de sus predecesores. Con su tamaño mediano, este lindo yate promete llenar las expectativas de todo pescador con un gusto por lo estilizado y elegantemente sobrio.
& 39
Bisbee´s Texto: Alex Ruelas.
BLACK & BLUE Capturas y premios colosales
& 40
L
a bolsa garantizada era de 2 millones 750 mil dólares. Al sonar el disparo de salida, 105 equipos zarparon en busca del primer premio de la edición 33 del Bisbee’s Black and Blue, el torneo de pesca más acaudalado del planeta. A pesar de la voluntad de los equipos, apenas dos de ellos atraparon marlines el primer día, ninguno de los cuales cumplió el estándar de 300 libras para contender por el premio. Esto dejó un millón 698 mil 500 dólares disponibles para la segunda jornada. Los tripulantes de las embarcaciones pelearon por largas horas pero ninguno logró sacar el pez que les diera la victoria. En este, el torneo que más dinero reparte, sólo califican marlines azules o negros, hábiles y fuertes creaturas marinas. Aunque el primero no fue un día especialmente productivo, la esperanza se mantenía para las siguientes jornadas. “Las coordenadas G-3 y G-5 tienen formaciones rocosas con mucho alimento, así como viento y corrientes suaves. La pesca debe ser buena ahí los próximos días”, aseguró Axel Valdez, encargado de las transmisiones radiofónicas del Bisbee’s Black & Blue por los últimos 5 años. Las palabras de Valdez fueron premonitorias. El segundo día estaba aderezado con emoción y expectativa. Los botes salieron a buscar fortuna en la segunda jornada y fue Martha McNaab, a bordo de su Viking 61 llamado Retriever, quien la encontró. Fue precisamente en la coordenada G-5, como lo anticipara Axel Valdez, donde sacó un marlín azul de 525 libras, con el cual luchó por poco más de una hora. “Había muchos voladores alrededor y después este pez cayó. En realidad, tuvimos un muy buen día. Esta mañana liberamos tres rayados y después atrapamos el azul”, dijo McNaab luego de que el pesaje la colocara como líder temporal de la competencia. Su colosal captura midió 109 pulgadas desde la mandíbula a la bifurcación de la cola, y registró una circunferencia de 62 pulgadas. “Esperamos 8 años por este marlín. Soñaba con él”, dijo emocionado Tony Araiza, comandante del Retriever. El día también favoreció a otros 2 equipos. El equipo japonés Go Deep sacó otro azul de 323 libras, mientras James Long, a bordo del
& 41
El marlín:
Una presa de antología
Queen, capturó uno negro de 342 libras. El tercer y último día del torneo comenzó con el equipo Retriever como favorito en las apuestas. Tenían un buen marlín, sin embargo, la historia cambió repentinamente. Estaba por terminar la jornada cuando Linda Williams, quien llevaba dos horas peleando con un pez enorme a bordo del II Success, un Hatteras 60, sacó del agua el marlín más grande jamás capturado por una mujer en la historia del Black&Blue. El marlín azul se presentó en la báscula ante el asombro de la multitud. Pesó 774 libras. “Esta semana mostramos de lo que somos capaces las mujeres pescadoras en este deporte –dijo Williams–. Fue la pesca de una vez en la vida y definitivamente la uno en mi lista de metas, en especial por suceder en el Black & Blue”.
& 42
Bisbee’s Offshore Se trata del “Pequeño Bisbee’s”, como le conocen con cariño sus participantes. Es una especie de calentamiento para el torneo grande, una convivencia con ambiente de camaradería en la que los pescadores se ponen a punto y prueban suerte de
Grande, fuerte, veloz, el marlín es uno de los máximos trofeos para cualquier pescador de agua salada, un verdadero reto que nada sigiloso y elusivo para las embarcaciones. Este animal es el símbolo de los torneos Bisbee´s.
&
& 43
& 44
cara al Black&Blue. No obstante no contar con tantos reflectores como su hermano mayor, el Bisbee’s Offshore gusta de otorgar buenos premios. En su edición de 2013 comenzó con una bolsa garantizada por la friolera de 621 mil 350 dólares. La mayor parte del premio se dividió entre dos equipos que acapararon la competencia: North Star y Ultra Seal. Los representantes de la estrella del norte se llevaron un premio de 110 mil 075 dólares. El Ultra Seal se llevó la misma cantidad de billetes verdes, ellos por la pesca de su comandante Bon Burts de un fantástico dorado de 33 libras. Por su parte David Whittier y su equipo ganaron el mejor atún del torneo con un ejemplar de 201 libras. “Tuvimos un gran torneo. Gracias a todos los equipos participantes y a la generosidad de nuestros patrocinadores: Cabo Riviera, Baja Cantina y el Windham Resort”, dijo Trisha Bisbee al finalizar el evento. Ya sea en su versión más llamativa, o en la más intima convivencia del OffShore, los torneos Bisbee’s siempre tienen algún fantástico momento que recordar.
& 45 45
¿Tienes una buena historia de pesca?...
ANUNCIO PAGINA 46
Compártela con nosotros y vela publicada en
Sólo tienes que escribir tu relato en WORD o directamente en tu navegador de internet, acompañarlo con fotos con peso de 800 KB en adelante y enviarlo al mail: expedicion@grupoexpedicion.com Si tienes tus fotos impresas puedes enviarlas junto con tu relato a la siguiente dirección: Río Elba 10-402, Col. Cuauhtémoc, C.P. 06500, México D.F., con atención a Grupo Expedición. Para dudas y comentarios comunícate con nosotros al 01 (55) 5553 2355 o lada sin costo 01 800 570 1984.
echoMAPTM 50s
echoMAP 50s es una combinación de plotter y sonda con una pantalla de 5” y sonda HD-ID™. El receptor de alta sensibilidad Garmin GPS/GLONASS de 10 Hz actualiza la posición y la dirección 10 veces por segundo para mostrar un movimiento fluido de la embarcación, lo que mejora de manera espectacular la capacidad de marcar con precisión y navegar hacia 5.000 waypoints. También incluye grabación de sonda, que coordina el tiempo de los datos de la sonda con la posición de la embarcación y guarda información digital en el mapa. Ofrece conectividad inalámbrica Wi-Fi y tiene preinstalado un mapa base mundial. Consigue que la pesca sea casi demasiado fácil. Casi.
quatix El único reloj de
VHF 200
El receptor náutico VHF 200 permite comunicaciones de radio, posee un diseño intuitivo y proporciona comodidad y seguridad a los navegantes de todo el mundo. El VHF 200 viene de serie con un sistema de megafonía bidireccional y, al ser compatible con NMEA 0183 y NMEA 2000, le proporciona la mayor flexibilidad y funcionalidad a bordo. Hable con confianza. Con una potencia de hasta 25 vatios al alcance de su mano, podrá comunicarse desde cualquier rincón del océano. El VHF 200 viene de serie con un sistema de micrófono y altavoces extraíble, así como con un sistema de megafonía de 20 vatios compatible con el megáfono y los altavoces externos de la cubierta o de la torre. El VHF 200 incorpora también un micrófono GHS 10 que confiere un control total de radio desde cualquier lugar por remoto que sea. Esté donde esté y sea cual sea su rumbo, siempre contará con la tranquilidad y la seguridad de disponer de una línea de comunicación abierta.
& 48
navegación náutica con GPS Viene con reloj náutico de alta sensibilidad con GPS, altímetro, barómetro y brújula de tres ejes, transmisión de datos NMEA 2000¹, funciones de competición náutica especiales y funciones de mando a distancia de piloto automático náutico de Garmin, así como detección automática de hombre al agua. Diseñado para los apasionados navegadores de todos los tipos, desde regatistas y kayaquistas hasta los capitanes y marinos de yates, quatix es un reloj para navegación marítima con tecnología GPS de alta sensibilidad. Es el único dispositivo con tecnología GPS que entrega un impresionante abanico de funciones de navegación marítima, incluyendo detector automático de “hombre al agua” (MOB, por sus siglas en inglés), control remoto del equipo Garmin, y transmisión de datos NMEA 2000® hacia un reloj marítimo en navegación. Un reloj de gran exactitud, incluye además características nunca antes combinadas en un reloj, tales como temporizador de cuenta atrás para carreras, línea de salida virtual, ayuda de virada e información sobre mareas. También está equipado con altímetro y barómetro con calibración automática, brújula de 3 ejes, sensor de temperatura e información sobre mareas. Además, transmite datos en forma inalámbrica hacia y desde otras aplicaciones Garmin compatibles.
Para más información visita www.garmin.com/es-MX/explore/enelagua