Advertisement

Share Public Profile
Lucita Aguilar
El trabajo es fuente de vida y constituye un deber indispensable para todo hombre: pobre o rico, sabio e ignorante, poderoso o dèbil; todo ciudadano ocioso es un ladròn.
El trabajo es fuente de vida y constituye un deber indispensable para todo hombre: pobre o rico, sabio e ignorante, poderoso o dèbil; todo ciudadano ocioso es un ladròn.