Cuatro novedades en innovación http://www.cotizalia.com/tribuna/2011/cuatro-novedades-innovacion-20110219-4940.html Portada El Confidencial
Portada Cotizalia
Tribuna Libre, Luis Cubría Falla* CONFIDENCIAL-COTIZALIA 19/2/2011
@Luis Cubría Falla* 19/02/2011 06:00h La gestión de la innovación está, como no podía ser menos, en continuo cambio. Ahora mismo las empresas disponen de herramientas y metodologías bien construidas (como es el caso de la UNE 166002 ), y de numerosas vías de apoyo institucional. Pero al tiempo es necesario mantener los ojos bien abiertos para no perder la pista de las novedades en el único factor que puede salvar a la industria europea. Así, en este artículo se resumen cuatro conceptos que se han publicado o “refrescado” en los últimos meses en el ámbito de la innovación. 1º. El que más gasta no es el que más innova. El artículo de Barry Jaruzelski y Kevin Dehoff , que resume un estudio de la consultora Booz & Company, señala que no hay una relación absoluta entre intensidad en la innovación y el éxito de la misma. La complejidad del proceso hace que compañías como Apple (que es el benchmark), se sitúe en primera posición de la innovación con un gasto de tan solo el 3,1% de las ventas, lo que contrasta con compañías también innovadoras, como Intel o Microsoft, pero que consumen un 15% o un 16% de sus ventas en inversión en I+D. El papel del liderazgo, la búsqueda de valor aportado, y la coherencia de la estrategia de la empresa son factores aún más importantes que el simple gasto en innovación. Los siguientes puntos apoyan esta conclusión. 2º. Innovación inversa (reverse innovation): los países emergentes nos enseñan. Los países emergentes nos comen el terreno con menores costes, y además nos recuerdan buenas prácticas en innovación.
Como señala Vijay Govindarajan , de la Tuck School of Business, mientras en las empresas occidentales más avanzadas se organizan grupos específicos y aislados para la gestión de la innovación, las empresas de India o China utilizan a personal cercano al proceso productivo, con un sistema de cambio de abajo a arriba. Antes, los pobres demandaban productos innovadores a los ricos, y ahora los pobres están comprando lo que producen por sí mismos, así que exprimen las oportunidades que les da su conocimiento y sus limitados fondos de I+D para mejorar, aportando el máximo valor. 3º. Aha!, el proceso de innovación es más difícil de programar de lo que pensábamos. El profesor de la Universidad de Columbia, William Dugan , recoge los últimos estudios sobre la forma en la que pensamos y la utiliza para proponer nuevas técnicas de innovación. Parece ser que las mejores ideas no surgen de un proceso de reflexión racional, sino que, por el contrario, se manifiestan de repente, en un momento de lúcida inspiración. El motivo es que nuestro cerebro accede a espacios inconscientes de nuestra memoria, buscando soluciones que encajen con los retos que nos preocupan. so explica que muchas buenas ideas se nos ocurran en momentos de relajación, como en la ducha por la mañana. Por ese motivo, el autor propone complementar el análisis racional y el brainstorming (los dos mecanismos tradicionales) con una búsqueda de soluciones que en el pasado ha utilizado la empresa, o cualquier otra organización o persona, para resolver problemas. La primera parte de laconferencia de Steve Jobs en Standford en el año 2005, “connecting the dots”, nos ilustra con una aplicación. 4ª. Outside Innovation: más allá de la Innovación abierta. El concepto de innovación abierta, creado por Henry Chesbrough , de Berkeley, en 2003, es ya un clásico. Propugna la combinación de tus propias capacidades de innovación con la de agentes externos. Los Centros Tecnológicos y las Oficinas de Transferencia son ejemplos tangibles y consolidados de ese concepto. Pero hay otras fórmulas que no miran hacia centros de excelencia, sino que se centran en la propia clientela. Patricia Seybold promueve el concepto de “outside innovation” en la que la clientela de la compañía impulsa medidas de innovación. De acuerdo con esta autora, “el 50% del catálogo de nuestras innovaciones debiera proceder de las iniciadas por la clientela”. Para ello, propone una serie de medidas, centrada en comunicarse con los usuarios de nuestros productos, dándoles la oportunidad de participar en el diseño de los mismos, y reclutando nuevos clientes que canibalicen nuestros productos actuales. Luis Cubría Falla, Director para Cantabria de la consultora S&F.