FRENTE UNIVERSITARIO EN DEFENSA DE LA AUTONOMÍA DE LA UJED
IÓN PRES X E DE ANO G R Ó FENSA DEL FRENTE EN DE
#80 Año 7
POR LA AUTO NOMÍA DE LA UJED Victoria de Durango, Dgo., segunda quincena de agosto de 2017
Editor: Enrique Arrieta Silva
COOPERACIÓN VOLUNTARIA
Erasmo Navar, el rostro de Herrera Caldera en la UJED Se cumplirán siete años del más grave atentado contra la Universidad Juárez del Estado de Durango, las consecuencias de éste aún siguen dañando. Siete años en que la Universidad y varias de las instituciones de Durango, se vieron envueltas en una vorágine de abusos y caprichos por parte de un grupo de farsantes y canallas. En contraparte, un año en que los duranguenses se decidieron por un cambio, por la justicia y el castigo y, en esto, se incluyó a la UJED; cambio en el que los universitarios han contribuido y esperan que la Máxima Casa de Estudios retome el camino de la legalidad y la ética. No se ha olvidado la forma burda en que el ex gobernador Jorge Herrera Caldera se apoderó de la vida académica y política de la UJED. Uno de los instrumentos que usó es Erasmo Navar García, que hasta el 2012 era el contralor de su gabinete y amigo de confianza. Confianza y servilismo manifestado en múltiples ocasiones y en diferentes formas, dejando de lado la identidad pública y autónoma de la Universidad; no se diga de los principios Juaristas con tal de satisfacer al amo que lo había escogido para rector del Alma Mater. Las promesas del candidato José Aispuro Torres de limpiar las instituciones, castigar a los malandros sin que “le tiemble la mano”, hacer de Durango un mejor lugar, en algunos casos se están cumpliendo. La orden de aprensión contra los responsables del erario público en la Secretaria de Salud, el hacer público la complicidad de algunas empresarias, han sido de las más esperadas. Pero aún hay pendientes para con la UJED, Erasmo Navar sigue siendo bastión de Herrera Caldera, las
relaciones entre el aún “rector” y los Herrera Caldera no terminaron cuando JHC dejó de ser gobernador de Durango. Navar García debió dejar la rectoría el 6 de junio del 2016, simplemente por dignidad, tan sólo por haber sido designado tan arbitrariamente como rector por su amigo y jefe político. Debió dejar de ser rector por no tener la confianza de los universitarios, por no haber hecho ningún esfuerzo, ni presentado proyecto ni pedir un voto. No debió por vergüenza, acercarse al Gobernador Aispuro Torres, ya que organizó un evento político en el que auspició y forzó a que los universitarios fuesen puestos a las órdenes del candidato de Herrera Caldera. Erasmo debió haber dejado la rectoría por principios y no jugar a la negociación entre su grupo político y el nuevo gobierno exponiendo una vez más a la UJED como botín en subasta. No debió pasarse de listo y obligar al gobernador Aispuro a aparentar que lo apoyaba. ¿Que puso sobre la mesa su renuncia? ¿Cuál mesa? Qué no sabe el “rector” que la renuncia debe ser ante los universitarios. No, no lo sabe, a él lo mandaron desde el despacho del Bicentenario. Debió irse antes de hacer uso de actos porriles, herramienta preferida de los golpistas universitarios forjados por los Herrera Caldera, pero no, se quedó y llevó indignamente a los porros a cuidar sus pertenencias políticas y procesos electorales incluyendo el del SPAUJED. Actos y actitudes en que se escucha el nombre de Erasmo Navar pero se ven el rostro y las manos de Jorge Herrera Caldera. Navar intenta convencer que es un rector legítimo.
MEA.
Hay memoria histórica y él es un residuo de las atrocidades sociales y políticas del sexenio de Herrera Caldera. El daño moral a la UJED se tiene que resarcir. Erasmo no debe esperar que se le pida la renuncia y
menos el gobernador, no es persona de fiar, no tardaría en salir pregonando que el Ejecutivo no respeta la autonomía. Erasmo debe dejar la rectoría por obligación universitaria y social. Mostrar que sabe la diferencia entre el deber y obedecer.
Erasmo Navar García no se debe quedar en la rectoría por ser parte del proyecto de gobierno de Herrera Caldera, caracterizado por el autoritarismo, la ilegalidad y la permanente violación a la Máxima Casa de Estudios en el Estado.