Una gentil pareja con estirpe de
infantil
labradores,
él, nieto del « s e ñ o
Federico»
ella, la hija de Primi.
Els Llauradors fan cent anys Enguany serà la més bella entre el bàndol del cristià. Forca, gaiato i corbella faran en Alcoi gran mella que sempre es recordarà De les vespres l'alegria donen sorollós revol. La filà lo millor tria: el nap i la xirivia, la penca i la floricol.
Lluirà l'antiga gesta plena d'històrics fervors, perquè en nostra amada festa este any alçarà la cresta la filà dels Llauradors. A aplaudir-la vos invita quan desfile pel carrer. En el goig no tenen fita, que ha estat bona la collita i llarg l'esperit fester.
Tot això que l'aconhorta de les passades suors, puix l'ànima no està morta si la sèquia rega l'horta i no apreten les calors. Així menegen la fona estos hòmens faeners que un any,que el temps ja corona, tingueren al «tío Mona» capitanejant festers.
Del record no se li escapa
I en eixa alba tan ufana
son colp a l'alcoià vell:
que vos fa ariçar la pell,
¡aquella esplèndida capa
formareu en la Diana
que cobria la gualdrapa
amb la gràcia sobirana
d'una mula de Barxell!
del ben plisaí saragüell.
Aquell gest que diu de veres de la festa la ilusió, perquè per molí que el vegueres el vidre de les ulleres li espurnejava emoció.
La festa actual renova lo que fón antic esplet, conservant la gràcia tova que sempre posava a prova el llaurador Guillermet.
Aquell que portar solia 1' ensenya del banderí i que,de sobte,un mal dia, digué adéu a 1' alegria del santjordià frenesí. Però seguix en fileres la marxa del Llaurador. Vindran atres primaveres i abril alçarà banderes beneint vostra abundor.
J O A N VALLS
€€
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Saragüell »
Espardenya» D I S E Ñ O
Recuerdo con cierto regodeo, que hace unos años un amigo escritor — Antonio Revert— y Y ° metimos, en CIUDAD, con una cuestión apasionante y pintoresca que llevamos al terreno de la buena polémica, en torno los anacronismos de nuestras fiestas abrileñas. Proponía mi oponente — de una manera desenfadada - la posible creación de una nueva comparsa - q u e en tiempos pasados Y existió— denominada "Estudiantes". Yo defendía a capa y espada todo lo contrario, es decir, la no resurrección de la tal filada que consideraba - y considero cada vez más— fuera de todo lugar y escenario nuestro. En la polémica vinieron a romper lanzas unos terceros, y hasta cuartos, y aquello que alegremente se lanzó al periódico convirtióse en poco tiempo en una verdadera batalla literaria. Y vengo a referir todo esto aquí, en el Programa íntimo vuestro, amigos "llauradors", porque quiero reafirmarme en aquella postura a la par que defender y comentar bajo mi punto de vista vuestra presencia simpática, agradable, necesaria en nuestros impares actos sanjórgistas. Resulta agradable, por lo menos para mí, comprobar de una manera tajante, palmaria, que vuestro indumento de fiesta tiene una justificación lógica e histórica, un origen probado y, también hay que señalarlo, una realidad folklórica. No vamos a probar —no es este el lugar indicado todas las teorías tesis y antítesis que hablan y documentan que el regadío valenciano — levantino, puesto que hemos de incluir por fuerza a la región murciana— lo crearon los romanos, lo mantuvieron los pueblos que siguieron después de Roma y, por fin, lo incrementaron o renovaron los árabes. Sea lo que fuere, la verdad es que con la dominación musulmana la agricultura valenciana conoce un momento de verdadero esplendor, un momento, además, que no se circunscribe a unos años, sino que dura ocho siglos largos. Son los moros quienes introducen en la península Ibérica el cultivo del naranjo, del arroz, de la seda... -cultivos más o menos de origen próximo oriental-. En nuestra lengua existen una cantidad extraordinaria de vocablos de origen totalmente musulmán, palabras éstas, a mayor abundan
o
s
a
miento, íntimamente ligadas con el quehacer del agricultor, con el agro mismo: azud, azada, acequia... Lo curioso, empero, radica en el indumento que estos moros de los siglos XII, XIII, X I V y años posteriores, hasta la expulsión de los moriscos decretada por el entonces virrey Y obispo de Valencia - h o y San Juan de Ribera-, usaban de continuo en su vida familiar y común, indumento compuesto por la clásica «espardenya» y el «saragüell» - q u e es otro vocablo típicamente árabe y de plena actualidad-. Las mismas o muy parecidas prendas que hoy lucen nuestros «maseros» abrileños en su ancestral traje de «fester». Y , junto a estas prendas de su vestido, una especie de camisa o camisola blanca o de tonación clara, el bonetillo - n o montera- fabricada con pieles o ropas severas, las pieles procedentes de los animales domésticos, y, por si faltaba algo, el empleo de la manta¡ una manta policolora, de colores chillones, a franjas, con decoración geométrica más o menos regular, con sus adornos testimonio de la posición económica de quien la ostenta - a base de flecos, madroños, borlas, etc. Mantas propias de la artesanía y textilería árabe que hoy, incluso, con ligeras variantes unas veces, con cambios visibles otras, siguen fabricándose en el norte de África -Marruecos concretamente— u otros pueblos afroasiáticos. Hemos referido, de pasada, la expulsión de los moriscos del reino valenciano. La significación que tal medida tuvo política, cultural, religiosa y económicamente fue absoluta. Alejados de la tierra el campo y el huerto—, la mano de obra tuvo que buscarse entre los cristianos viejos - q u e ya se ocupaban en cierta forma de e l l o - , quienes de una manera completa y total tuvieron que ocuparse en serio de los problemas de su agricultura, antes un tanto abandonada en manos de los moriscos. El «saragüell», como era lógico, se mantiene en el uniforme del labrador valenciano. El campo de hortalizas y, sobre todo, los sembrados de arroz encharcados e inundados exigían, por supuesto, esta prenda de vestir, no la túnica, el calzón de otra forma a la que no fuera de amplio y vueloso pantalón, o el simple sayal. La justificación, pues, la presencia de "els llauradors" en el bando cristiano de nuestra comparsería está, creemos, más que probada. Cabe pensar, sin embargo, que quienes hace ciento Y pico de años crearon o fundaron la "fila" no recabaran estas razones más o menos historicistas, puede, no obstante, que sí, que las tuvieran presentes. Sea lo que fuere, en cualquiera de ambas creencias —o en otras que pudieran existir nosotros hemos querido interpretarlo así, sin desdeñar en absoluto y que quede bien claro para evitar desde ahora posibles "entuertos" lo folklórico, espontáneo y gracioso,esto es: lo típico y ancestral que, naturalmente pesa lo suyo, tanto o más que la rigidez y taxatividad de la historia misma. Y, nada más, amigos. La «fila» de «maseros» este año de 1966 quiere recordar efemérides y evocar tiempos idos. Me uno de buen grado a vosotros. Desde aquí mi enhorabuena Y mi apretado abrazo de "fester". ADRIÁN ESPÍ VALDÉS
«Mona» esta vez, no luce su traje de gala, de gran capitán de las huestes labradoras, aquel traje famosísimo, donde los botones eran dóblelas de oro, y l porte festero de «Mona» irradiaba en los años veinte un halo de singularidad y gracia alcoyanísima,- sino que aparece en su clásica vestimenta de «masero», con sus zaragüelles, recién planchados, con sus medias y esparteñas, escapulario, camisa blanca bien puesta, la manta al cuello, el pañuelo tocado y el cayado, en su lugar descanso. «Mona» fue un tipo de festero, cuyo recuerdo engrosa la vasta galería de festeros de pro: Graella, Samanta, Chava, Toni el Rey y tantos otros que dieron a la fiesta un aire popular, de fuerte arraigo alcoyano, con sal y garbo de esta tierra, de Moros y Cristianos, de campechanía sin límites, de esfuerzo continuado, de contrastes sin fin. Aquí aparece junto al ya fotógrafo Finezas -quizá padre del actual redactor gráfico valenciano-, con un tío con boina y Micalet el Cabo -Eliott Ness de la Guardia Municipal de aquellos tiempos-, posando para la inmortalidad, para que ahora, nosotros, avivemos el recuerdo y el afecto y lo reproduzcamos aquí, para ejemplo de generaciones festeras actuales y venideras, como un hombre que pasó por la fiesta, enalteciéndola al máximo, dándole todo su ser, con una entrega desinteresada, haciendo patria chica, poniendo los cimientos de estos Moros y Cristianos, que hoy tenemos, hechos espectáculo mundial, de gran fuste y boato, quizá, la mayor fiesta del mundo, como afirmaría el todo Alcoy. Desde estas páginas, repletas de emotividad para con la Filá de Labradores, nuestro recuerdo entrañable para aquel genuino festero que se llamó Antonio Jordá, más conocido por «Mona». e
Antonio REVERT CORTES
Recuerdos H a b l a r d e A l c o y y d e sus fiestas y no hacerlo d e la F i l a de
Labradores, es
cosa totalmente imposible y a q u e , a u n q u e todas tienen su historia la
nuestra, y con todos los respetos
y su tradición,
hacia las d e m á s , las supera a todas.
Me
explicaré. ¿ Q u e a l c o y a n o o a l c o y a n a d e pequeños no han me atrevo a decir q u e u n 90
vestido
su
indumentaria?,
y por eso, c u a n d o desfilamos en la Entrada
C r i s t i a n o s , muchos d e los espectadores, a l g u n o s d e ellos c o n trajes d e otras das, retroceden c o n el tiempo y se sitúan
en aquella
una barraca v a l e n c i a n a , una era, la F u e n t e R o j a , la S a n J o r g e , etc
etc. o simplemente una burrita
carroza q u e
del
adornada
Molinar, con
de
Fila-
representaba el
Puente
profusión
de
de cla-
veles y repartiendo nuestros versos e n v a l e n c i a n o , por ejemplo como este;
Tan tranquil com yo vivía cuan yo era fadrinet y ara en fe mártir la dona sempre demana
diners.
Encara no apunta el sol y obri els ulls la meua Inés ya en demana la pastora deconte donarme un bes. Y o que tan noble apellido vach eretar dels meus vells y ara sem peña la dona
en dirme
Q u i c o diners. siendo preciso que una lágrima baje por sus mejillas pues son recuerdos d e a n t a ño y d e grata memoria y d e su juventud. Por eso al abrir sus arcanos y ver esos sarahuellets o ese ajuar d e v a l e n c i a n a , sus recuerdos han d e evocar tiempos pasados q u e s e g ú n el d e c i r han sido s i e m pre mejores y desearán vestir otra v e z ese traje d e M a s e r o o d e V a l e n c i a n a q u e tanto a m a n y poder gritar con toda la fuerza de sus pulmones.
¡VIVA SAN JORGE! ¡VIVA ALCOY! ¡VIVA LA FILA DELS MASEROS! HERNÁNDEZ
Para conmemorar el Centenario
de la
reaparición de esta Fila de Labradores, el próximo día 21 de abril, a las
8'30
de la mañana, se celebrará en la Iglesia de S a n Jorge una Misa
con
motetes,
terminada la cual, se cantará
solemne
Responso por todos los individuos difuntos que
han pertenecido
desde su fundación.
a la misma
Domingo 10 A las ocho y media, de la mañana, después de ir a " L a Rambla" a "per sebes y ansalaes", se reunirán
"els llaura-
dors", y algunos que no lo son, para celebrar el
tradicional
Almuerzo de Gloria a continuación todos a vestir al gloriero, que este año será, con autorización del Primer Tró, el gran R O V I R A .
A
las
diez de la mañana, la
Gloria todos
en franca
camaradería a seguir
el
itinerario
del
desfile. Por la tarde, y a la hora de costumbre, con permiso de don Paco Boronat, iremos a su borrera a la "berena de Pascua", y cuando ya estemos todos bien alimentados y... lo demás, se iniciará la primera "entraeta" de este año (con caballo y todo), que para eso celebramos el I Centenario. Una vez en la plaza, cada cual a su casa, que
mañana es
lunes y quien más y quien menos ha de madrugar,
y
por
si faltaba, Eduardo ha de ir a Monterrey a coger el autobús, que para eso vive en Santa Rosa.
Lunes 11 A las 8 de la tarde, todo el mundo a recoger el cirio. H a y que acompañar a Sant Jordi el "Xicotet" en su traslado a la Parroquia de Santa María, para celebrar el en su honor.
novenario
DEPOSITO L E G A L 67- 1966.
GRテ:ICAS PASCUAL. - S .
LORENZO, 3 2 - ALCOY