Otra forma de vida es posible
Elena Ordinas Managing Editor
12 MALLORCA CAPRICE
L
a resaca pandémica de meses anteriores ha dado paso a una relativa calma, a pesar de los temidos altibajos que ya conocemos, pero una relativa calma que celebramos –¡cómo no!–. Cada vez estamos más cerca de alcanzar tierra firme y, ¿sabéis lo mejor?, que hay hueco para todos. Nuestra querida isla, esa que hemos tenido oportunidad de redescubrir apasionadamente, ofrece innumerables lugares donde sentirse a salvo, donde coger aire, donde recuperar ese sosiego que tanto se ha visto sacudido. Con este propósito, el de reconquistar el equilibrio, Mallorca Caprice ha querido reunir en esta edición una cuidada selección de hermosas calas y playas. Convendréis conmigo en que nos merecemos volver a disfrutar de los pequeños placeres, de nuestro tiempo y entorno, del presente. Y no se nos ocurre mejor forma de hacerlo que desde el temple y el más profundo respeto medioambiental, que ya reivindicamos en 2020 con “Our lovely blue”. Seguro que os resulta familiar el término ‘slow living’, esa filosofía alternativa de vida que busca rescatar el ritmo natural de las cosas. A nosotros nos ha
enganchado y te invitamos a adentrarte en ella a través de nuestras páginas. ¡Es muy probable que a ti también te atrape! Y, quién sabe, tal vez a tu hermano, tu vecina, tu compañero de trabajo… Levantar el pie del acelerador para ser más felices suena a receta antigua pero hoy más que nunca se vuelve ineludible. Por tu bien, por el de todos, por el del planeta. Nos gustaría volver a escuchar, y disfrutar, los latidos del saber vivir.
Another way of life is possible
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he pandemic hangover of previous months has given way to a relative calm, despite the dreaded ups and downs that we already know, but a relative calm that we celebrate -of course!-. We are getting closer to reaching solid ground and, do you know the best part? There is room for everyone. Our beloved island, the one that we have had the opportunity to passionately rediscover, offers countless places to feel safe, to catch a breath, to regain that peace that has been shaken so much.
