¨La obra de Isaías Malavera se configura en una bitácora secreta de la luz, en espacios donde el tiempo se turba, ya que las escenas y los temas que se observan en cada pintura no pretenden ser una representación realista, los detalles están deliberadamente ausentes, no es interés del artista mostrar la materia de los cuerpos y las cosas, su volumen. Sino que estos sirven solo de excusa para mostrarnos una bitácora, una huella, un diario, de cómo la luz recorre los caminos de las cosas, para revelarnos finalmente su verdad¨.
Domingó