ORACIÓN FINAL
Padre: En nuestros mejores momentos, por Tu gracia, no estamos dormidos en Getsemaní. Estamos despiertos escuchando la oración de Tu Hijo. En el fondo, Él sabe que debe sufrir, pero en Su humanidad perfecta, clama: “Si es Tu voluntad, aparta de Mí esta copa”. De la misma forma, sabemos, en el fondo, que has ordenado esta pandemia en Tu sabiduría, con propósitos buenos y necesarios. Nosotros también debemos sufrir. Tu Hijo era inocente. Nosotros no lo somos. Sin embargo, en nuestra humanidad imperfecta, también clamamos junto con Él: “Si es Tu voluntad, aparta de mí esta copa”. Oh Señor, lleva a cabo pronto la obra dolorosa, justa y misericordiosa que has decidido hacer. No prolongues Tu juicio. No retrases Tu compasión. Recuerda a los pobres, oh Señor, conforme a Tu misericordia. No olvides el clamor de los afligidos. Concede la recuperación. Concede una cura. Libéranos —a Tus criaturas pobres e inútiles— de estos dolores, te lo pedimos. 99