LA RANITA VERDE
Tras las huellas del Conde Lucanor Por Soledad Díaz Cobos, 2º B
LA RANITA VERDE Por Soledad Díaz Cobos Estaba un día Sam como de costumbre hablando con su libro mágico cuando : -Li- así llamaba Sam a su libro-tengo una amiga a la que le pasa lo siguiente: No hace favores a nadie porque no la dan nada a cambio en ese mismo instante y le intento explicar que no hace falta dar algo a cambio para hacer favores, ¿cómo la podría convencer?- dijo Sam, mientras se sentaba en la cama con Li. -Con un cuento lo entenderás y ella entenderá mucho mejor… Cuando Li le contó el cuento, Sam le dio las gracias y se fue corriendo a contárselo a su amiga Alba. -Un día estaba una ranita verde tan tranquila
en una charca encima de una piedra , medio aburrida, a la orilla de la charca cuando un grupo de moscas pasaron por allí, la rana , a toda prisa intentó cazar , falló; lo volvió a intentar cuando una mosca un poco miedosa se acercó y le dijo << por favor, por favor no nos coma a ninguna, si no lo hace, podrá pedirnos ayuda cuando lo necesite>> y así le respondió la rana << yo no necesito, ni necesitaré ayuda de ningún insecto como vosotras >> la rana se carcajeaba de ellas. Al cabo de unas semanas la rana cayó en un agujero, que anteriormente unos niños que estaban de excursión habían hecho, la rana pidió ayuda una y otra vez sin que nadie se acercara a a ayudarla cuando el grupo de moscas la oyó y la ayudó a salir; la rana muy agradecida les dijo << muchas gracias creía que no podría salir jamás>>.
Y la moraleja adecuada es: trata a los demás como quieres que te traten a ti .