CHECKLIST — C I N E
En la piel de la primera dama ELEGANCIA, CLASE Y UN GRAN CÚMULO DE EMOCIONES, HAN HECHO QUE EL TRABAJO DE NATALIE PORTMAN EN JACKIE SEA UNO DE LOS MEJORES DEL AÑO; LA ACTRIZ COMPARTE CON NOSOTROS LOS SECRETOS DE CONVERTIRSE EN JACKIE KENNEDY. Por: Mariana Mijares
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acqueline Kennedy tiene el gesto serio, lágrimas secas y el icónico traje rosa de Chanel lleno de sangre, no ha podido procesar lo que acaba de ocurrir ese 22 de noviembre de 1963, en Dallas; ella sólo acompañaría a su esposo en una visita política por Texas; ni ella, ni el resto del país, imaginó siquiera que ese día el Presidente John F. Kennedy sería asesinado. Esa mirada profunda y un rostro que contiene cientos de emociones, son algunas de las cualidades que Natalie Portman supo capturar de la primera dama de Estados Unidos y que le valieron ya nominaciones al Golden Globe, al BAFTA, a los SAG y al Óscar, donde sería una de las principales favoritas. Durante el Festival Internacional de Cine de Toronto Film (TIFF), Natalie y el director de la cinta, Pablo Larraín, se sientan frente a Esquire para hablar de la cinta que muestra los días posteriores al asesinato de Kennedy; lo que ocurre en el mundo interior y exterior de Jackie, al tiempo que ella se sincera, por primera vez, con un periodista. ESQUIRE: Para ti, ¿quién es Jackie Kennedy?
NATALIE PORTMAN: Lo que recordamos de ella es que fue casi nuestra reina. Ella representa la elegancia, la clase; es todo un ícono. Los testimonios de las personas que la conocieron se enfocan mucho en su inteligencia y en su humor ingenioso y sarcástico. Ella es el tipo de persona con el que sería interesante coincidir en una cena; la que estaría diciendo las cosas más inteligentes y divertidas; quizás, hasta cosas desagradables, pero que hacen reír. Creo que Jackie estaba muy consciente de lo que el público esperaba de ella; también de lo que ella quería ser, y este personaje tenía que reflejar todas esas posibilidades. ESQ: ¿Cuál fue tu mayor temor durante la filmación?
NP: Aceptar este papel fue difícil, pero me gusta aceptar cosas que me asustan; salir de mi zona de confort. Algunas personas creen que soy muy perfeccionista, yo más bien creo que no tengo miedo a fracasar (risas). Obviamente no intento fracasar a propósito, pero si no funciona, evoluciono a lo que sigue. ESQ: ¿Qué tan difícil fue para ti tomar la postura, la voz y la forma de ser de Jackie? 86 E S Q U I R E • M a r
F OTO S : C O R T E S Í A D I A M O N D F I L M S Y F E ST I VA L I N T E R N AC I O N A L D E C I N E D E TO R O N TO F I L M ( T I F F )
NP: Creo que no necesariamente me miraba a mí misma y decía: “Oh, realmente me parezco a ella”, pero gracias a la ayuda de todos esos grandes artistas: maquillistas y gente de vestuario, logramos la apariencia del personaje. La parte física sí me ayudó a sentirme como ella, lo que me dio el valor para desempeñar el papel de un ícono tan conocido. ESQ: Obviamente investigaste sobre ella; ¿recuerdas algún video o momento específico que te haya marcado?
NP: Vi el tour de la Casa Blanca porque como lo replicaríamos idéntico, quería que fuera preciso. La verdad lo estudié de manera obsesiva y lo analicé para aprenderme su acento, la forma en que se movía y sus expresiones faciales. ESQ: ¿Cómo un acento puede ayudar a un actor a crear a su personaje?
NP: El acento es casi como un diagrama de su entorno. Ella tiene este lado muy neoyorquino, el tipo de mundo de los excéntricos buvettes, y luego un tipo de acento como de la escuela de buenos modales; y es esa extraña combinación de ambos lo que ayuda a darle vida. ESQ: ¿Por qué crees que Jackie se convirtió en un ícono?
NP: Cuando Jackie estaba haciendo campaña, realmente sintió que todos la veían como alguien lejana. La criticaban porque era una mujer de mucho mundo, con gran noción sobre la moda; y que hablaba francés y tenía todo ese cabello bombachón. A las mujeres no les gustaba que no se la pasara cocinando todo el día. Y de repente, cuando Kennedy ganó la presidencia, todas las mujeres empezaron a copiar su peinado, su forma de vestir o a aprender francés. Cuando la pareja visitó Francia, la gente les gritaba en la calle: “¡Jackie, Jackie!”; por eso, JFK tiene esa famosa broma de que él sólo era el tipo que acompañó a Jackie Kennedy a París… ESQ: ¿Cómo fue tu proceso de trabajo con Pablo Larraín?
NP: Fue un proceso muy disfrutable pues Pablo sabía exactamente lo que quería pero también me dio mucha libertad; siempre se siente bien tener a alguien que sabe ser líder pero que te abre la puerta para que aportes. FOTOS: DIAMOND FILMS, TIFF Y ARCHIVO ESQUIRE
“CREO QUE JACKIE ESTABA MUY CONSCIENTE DE LO QUE EL PÚBLICO ESPERABA DE ELLA; DE LO QUE ELLA QUERÍA SER, Y ESTE PERSONAJE TENÍA QUE REFLEJAR TODAS ESAS POSIBILIDADES ”.
DATOS CURIOSOS La película incluye la recreación de momentos reales de los que no se tiene registro: el juramento del vicepresidente Lyndon B. Johnson en el Air Force One, el funeral de estado del Presidente y el entierro en el cementerio de Arlington. Aunque no se dice su nombre en la película, el periodista que platicó con Jackie fue Theodore H. White, de la revista LIFE. Para el guionista del filme, Noah Oppenheim, más que por su estilismo, Jackie merece crédito por su excepcional comprensión de la imagen, las relaciones públicas, y por crear el concepto de ‘Camelot’ después de la muerte de JFK. Esta idea se originó en las letras del musical del mismo nombre:”Don’t let it be forgot, that once there was a spot, for one brief shining moment, that was known as Camelot…” Y precisamente, Jackie le hizo referencia en su entrevista con White: “There will be great presidents again, but there will never be another Camelot”.
A veces no estaba de acuerdo con cómo me dirigía, pero confié en él y me dejé ir obteniendo como resultado algo mucho más interesante de lo que se me hubiera ocurrido a mí sola. Esa es la belleza de hacer una película, crear algo especial con un grupo de personas en donde cada uno aporta algo único y especial. ESQ: ¿Qué crees que aprenderá el público que vea Jackie?
NP: Cuando interpretas a un personaje real tienes la responsabilidad de que no haya mucha discordancia con lo que ocurrió en la vida real, pero una película como esta obviamente no puede incluir sólo datos reales, una sola versión de lo que pasó. Al investigar a este personaje fue interesante descubrir cómo la propia Jackie editaba sus entrevistas y reportajes; ella misma dejaba cosas a la imaginación. No hay que tomar esta versión como un documental histórico, sino como una idea de quién fue esta persona, una mujer tan compleja. ESQ: ¿Qué hace para ti lo especial a esta película?
NP: Lo increíble es que tendrán la oportunidad de ver a Jackie en muchas tonalidades diferentes y conocer aspectos distintos de su personalidad; creo que es muy raro encontrar eso en una película. RECORDANDO A J.F.K. Sin duda uno de los presidentes norteamericanos más celebrados de la historia. Esta edición de Esquire US fue publicada en noviembre de 1973, exactamente 10 años después de ser asesinado en la ciudad de Dallas, Texas.
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