Reforma curricular en la educación media de la Ciudad de Buenos Aires. 1. Antecedentes En el año 2009 el Consejo Federal de Educación (CFE) dictó la Resolución 93/09 en la que estipula que las jurisdicciones deberían adecuar sus modalidades educativas y planes de estudio conforme a los cambios introducidos por el CFE. Dichos cambios conforman un nuevo sistema de escuela media conformado de la siguiente manera:
Ciclo Básico: 1º y 2º año; Ciclo Orientado: 3º a 5º año; Formación Orientada; Formación General.
Las orientaciones prescriptas por la Resolución CFE 84/09 son bachillerato orientado en:
Ciencias Sociales o Ciencias Sociales y Humanidades; Ciencias Naturales; Economía y Administración; Lenguas; Agrario/Agro y Ambiente; Turismo; Comunicación; Informática; Educación Física; Arte.
Para cada orientación cada Jurisdicción debe definir un único plan de formación. Los Objetivos mencionados son: • El diseño de estrategias para mejorar las trayectorias escolares de los alumnos atendiendo a las problemáticas actuales de la escuela secundaria (deserción, repitencia, sobriedad entre otros);
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• Fortalecimiento de la Institución y los equipos de enseñanza (por ejemplo, concentración horaria en una misma escuela); • Adecuación de los diseños curriculares a las demandas y las exigencias de la sociedad del conocimiento (nueva estructura del mercado laboral, nuevas tecnologías, mundo interconectado, cambios en la estructura familiar, habilidades para el siglo XXI, de acuerdo a los documentos del Ministerio de Educación de la C.A.B.A.; • Ordenamiento y unificación de la oferta para garantizar la movilidad de los alumnos. En la actualidad existen alrededor de 160 planes de estudio. De acuerdo al Ministerio de Educación de la C.A.B.A., cuatro de cada diez inscriptos en el primer año no llegan al último de la formación. Aquellos planes que tienen menos carga horaria semanal que la establecida por el CFE para la secundaria orientada, deberán incrementarlas a 38 horas/cátedra semanales según lo establece el pre‐diseño curricular para la Nueva Secundaria Orientada (C.A.B.A.). Las que tengan más horas podrán mantenerlas. Las orientaciones serán elegidas, para el caso de las instituciones estatales, por cada una entre las diez establecidas. Para las privadas se fijarán disposiciones específicas desde la Dirección General de Educación de Gestión Privada (G.C.A.B.A.). Las escuelas podrán elegir la cantidad de orientaciones que el proyecto escuela requiera conforme al perfil que tiene. Los bachilleratos y comerciales vespertinos y nocturnos, y escuelas de reingreso, están convocadas a trabajar por separado. El CFE aún no ha establecido lineamientos específicos. En el caso de la materia Historia, ésta se incluye desde 1º a 3º año y en 4º año hay un espacio de opción institucional en Ciencias Sociales para el cual cada institución puede optar por: Historia, Geografía, Antropología o Economía. Para la Formación Ciudadana se prevén espacios curriculares de 1º a 4º año.
2. Críticas ‐ 2 ‐
La reforma se encuadra en la Ley Nacional de Educación, la Ley de Educación técnica y las resoluciones del CFE, que establecen la unificación de los planes de estudio. Para la Ciudad de Buenos Aires la adecuación de los planes de estudio implica que los títulos del área técnica y artística pierdan especificidad, con menos horas de materias técnico específicas (talleres y laboratorios), cambios en las cargas horarias y desaparición del turno noche. Así se licuarían las competencias laborales de los títulos. Las modalidades de perito mercantil, bachilleratos con orientación físico‐ matemático y el pedagógico de la Escuela Normal Superior, no están contemplados dentro de las diez orientaciones establecidas. Existe un problema de fragmentación consecuencia de los procesos de transferencia y la Ley Federal de Educación de los 90. La resolución 84/09 aprobada por el CFE y con voto afirmativo del gobierno de la Ciudad tiene las siguientes características: • Impone restricciones y condiciona las modificaciones de los planes de estudio; • Limita las orientaciones: en la C.A.B.A. hay en la actualidad 144 planes que deberán circunscribirse a diez orientaciones donde se mezclan materias propias del bachillerato con otras que parecen más cercanas a la educación técnico profesional; • Prescribe las asignaturas para la formación general común dejando poco margen para un diseño que pueda absorber la actual oferta de la C.A.B.A.; • Incorpora orientaciones para las que no existen en la actualidad Institutos de Formación Docente que capaciten a los docentes (por ejemplo turismo). Respecto de las Escuelas Técnicas es preciso mencionar las siguientes problemáticas:
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• En las resoluciones 4144‐4146‐4148‐4149‐4150‐4151 se aprueba un plan de estudios para las técnicas estatales y otro diferente para las privadas. Las diferencias están en la formación específica de los técnicos. Por ejemplo, los estudiantes de algunas especialidades deberán cursar en escuelas estatales con una mayor carga horaria y/o número de materias que en escuelas privadas; • En la resolución 34 (2013) el CFE aprobó la homologación de los títulos técnicos con las resoluciones de Ciudad; • El Ministerio de Educación de la Nación y el CFE establecen normas para homogeneizar la oferta educativa, pero homologan resoluciones para la CABA que fracturan el sistema diferenciando planes para estatal y privada; • En 2011 comenzó el proceso con las escuelas técnicas. Según los gremios se hace de manera inconsulta para anular el debate pedagógico y también ideológico imponiendo medidas. Finalmente son las escuelas quienes deben decidir las orientaciones en jornadas consultivas cuyos temarios son bajados verticalmente por el Ministerio de Educación de la C.A.B.A., decisiones que según los gremios no son tomadas en cuenta por los funcionarios. Las principales críticas de los gremios como Ademys se centran en: • Trabajo docente: se pondrán docentes en disponibilidad, estipulándose procesos de reconversión y formación de docentes, ampliación del horario escolar y carga horaria de profesores. Así no se supera la fragmentación del trabajo docente (régimen de profesores por cargo en la escuela); • Infraestructura edilicia: muchos edificios escolares no estarían en condiciones de ampliar la carga horaria y/o sumar modalidades; • Bachilleratos pedagógicos y escuelas normales: las escuelas normales son unidades académicas (van desde el jardín de infantes hasta profesorados). Tienen bachilleratos pedagógicos. Según Ademys estos podrían desaparecer si se aplica la reforma curricular a partir de los lineamientos de la nueva escuela secundaria orientada (resolución 84/09). Guillermo Zangrossi ‐ 4 ‐