
2 minute read
Jenny Benalcázar
Perfil. Jenny Benalcázar Mosquera es la primera mujer Gerente Encargada del Hospital Gineco Obstétrico Isidro Ayora (HGOIA)
Metas. La especialista de Ginecología - Obstetricia destaca que hay nuevos retos en su administración y que los asume sin miedo.
Advertisement
Carolina Mena de diag prepa tar co tente que ret E s m se l
La maternidad Isidro Ayora es la casa de salud donde se formó Jenny Benalcázar Mosquera desde hace 17 años. Su lugar de trabajo habitual eran los quirófanos y pasó a la oficina de la gerencia, convirtiéndose en la primera mujer que estará a la cabeza del Hospital en el que se atiende un promedio de 10 partos por día y a pesar de tener casos de embarazo de alto riesgo el objetivo es brindar felicidad a las pacientes, “pues es una especialidad que siempre da vida”, menciona la nueva gerenta encargada.
En el hospital laboran profesionales de alto nivel y especializados en cirugías de control de daños y unidades de diagnóstico fetal muy bien preparadas. Entonces al contar con un personal competente y responsable “yo creo que no tienes miedo, tienes retos nada más”, acota.
Es así como las nuevas metas que se avecinan se enfocan en mejorar la infraestructura y la cultura organizacional del hospital. Además, señala que es importante no restringir las visitas sino considerar extender el tiempo que tiene el familiar que la paciente haya escogido para ser acompañada durante el pre parto, parto y post parto ya que las mujeres necesitan sentirse más cuidadas. En este sentido, las visiones a futu- ro son grandes.
Cuando preguntamos sobre lo que se necesita para alcanzar equidad en las organizaciones, Jenny menciona que a lo largo de los años las mujeres ocupamos cada vez más cargos de liderazgo y somos partícipes activas en la toma de decisiones. “En mi hospital alrededor del 76,6% del personal es femenino”, dice.
El Hospital Gineco Obstétrico Isidro Ayora recibe diariamente mujeres que provienen de diversos contextos, sobretodo madres adolescentes que han sido violentadas; es en estos casos que se activa el código púrpura.
LAS CLAVES
Isidro Ayora, un hospital de referencia nacional para la atencion de pacientes de alto riesgo obstétrico y morbilidad maternal extremadamente grave.
A través de este código se garantiza que las mujeres en situación de vulnerabilidad tengan acceso a todos los servicios que incluye atención calificada, exámenes de laboratorio y la medicación que necesiten.
Según Jenny, el liderazgo que ejerce como mujer marca gratificación y afirma que se encamina hacia la representatividad. Prevalece a aquellas mujeres que albergan esperanzas y una visión de cambios al ver a otra mujer en espacios de dirección, pues se sienten más representadas, es por eso que para ella “el liderazgo es una oportunidad de generar grandes cambios y que le permitirá articular acciones para llegar a un bien común”.
La profesional insta a ejercer nuestros derechos sexuales y reproductivos e invita a todas las mujeres a que acudan a las áreas del Ministerio de Salud Pública para solicitar asesoría preconcepcional cuando decidan ser madres.
Jenny Benalcázar es doctora en Medicina y Cirugía, Especialista en Ginecología-Obstetricia, Coordinadora de la Sala de Partos del Hospital Gineco-obstétrico

Es coordinadora del Comité de Calidad de los estándares de complicaciones obstétricas. Miembro activo del Comité de Bioética. También ha participado en la elaboración y revi- sion del manual del formulario 051 implementando y capacitando a nivel nacional, participando en la realización del Manual de Procesos de la Salas de Parto para hospitales de tercer nivel a implementarse a nivel nacional, asi como también es revisora de actualizaciones de guías de practica clínica. Jenny promueve al personal de calidad que ha sabido brindar un excelen- te servicio, pues entiende que cada paciente es un mundo diferente con necesidades diferentes.
“El personal se convierte en aquel que te da un abrazo, te da un masaje, te escucha llorar, te escucha gritar. Yo creo que su trabajo es muy noble todos los días. Es por ello que siempre queremos dar un servicio de calidad”, finaliza.