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¿ESTÁS PASANDO POR UN MOMENTO DIFÍCIL? ¿TE SIENTES DESANIMADO?
Queremos
Alguien dijo que el desánimo es como el resfrío, en algún momento de la vida te va a dar. El asunto es que, así como el resfrío para algunos es más frecuente, el desánimo para muchas personas en general también lo es. ¿Te sientes desanimado o triste en este momento? Pues hoy tengo un mensaje para ti. ¿Tú sabias que todos los personajes bíblicos también pasaron por este difícil momento? Porque en la vida en algún momento nos vamos a desanimar, el problema es que en el desánimo a veces desistimos y ese es un problema mayor. Yo recuerdo que en la biblia encuentro a Jacob, por ejemplo, cuando salió de casa y se fue allí a cruzar todo ese desierto para llegar a casa de su tío, vivió un desanimo. ¿Recuerdas a Moisés 40 años en el desierto? ¿Recuerdas a Elías, allí en una cueva? ¿Recuerdas a los discípulos después que Jesús murió? estaban decepcionados. El desánimo forma parte de la experiencia, el problema es cómo nosotros reaccionamos ante el desánimo. Y hoy quiero que juntos reflexionemos en una promesa, el libro de Salmos capítulo 31:24 dice así: “Esforzaos todos vosotros los que esperáis en Jehová, y tome aliento tu corazón”. Me encanta porque esa palabra, esa expresión ALIENTO, es: fuerza, fortaleza, vida, toma aliento porque estas muriendo. Y obviamente cuando uno está desanimado, está mirando siempre hacia abajo, es difícil mirar hacia arriba. Cuando uno esta desanimado, sientes que los hombros caen, sientes una carga encima y sientes que el desánimo comienza a aplastar tu sonrisa y comienza a carcomer tu interior. Ahora, la promesa de Dios es: “Esfuérzate y tome aliento tu corazón”. Hay cosas que tú debes entender cuando estás en ese proceso o cuando el desánimo toque tu vida.
Número uno, lo primero que tienes que hacer es preguntarte: ¿Por qué estoy desanimado? Puede ser que tu desánimo es por una causa biológica, puede ser que estés enfermo, o que estés entrando en una crisis por algún problema que te está pasando. Comienza a evaluar. Puede ser que estés cansado y es hora de que tengas que hacer pausas en tu vida, hay exceso de trabajo, no estás dedicando tiempo para tu salud, tu familia, o tus hijos. Puede ser que eso te lleve a un agotamiento, y el agotamiento te haga sentir pesado, desanimado, sin visión en el futuro, sin ganas de poder despertar y vivir, sin motivación. Cada día despiertas y parece que solamente funcionas en automático porque ya no hay más motivación en ti. Pregúntate, ¿por qué? ¿Hay hábitos que he descuidado que son hábitos o cosas que están afectando mi salud física o mental?
Si deseas que oremos por ti o quieres conocer y aprender más de Dios; escríbenos a: malenagondra@ gmail.com o llámanos al 832.855.4473
Segunda pregunta que tienes que hacerte es: ¿Hay alguna culpa que esta pesando en mi cabeza? Tú sabes que la culpa hace que nosotros podamos cargar una piedra innecesaria sobre nuestros hombros. Dios ya la cargó, tú ya no necesitas cargar tu pasado, solo necesitas entregárselo a Dios. Si tú estás desanimado porque miras tu pasado y vez todo oscuro, te da vergüenza o miedo, aprende a colocar tus culpas en las manos de Dios. Pide perdón a Dios y dile: Señor, hoy quiero ser LIBRE.
Número 3: Tienes que aprender que las cosas en la vida son temporales, cuando voy a 2 de Corintios 4:16 dice: No desmayemos, no nos desanimemos, porque aunque nuestro exterior se va desgastando, nuestro interior se va renovando, este es el secreto, mi interior no puede desgastarse, tiene que ir renovándose en la esperanza y la fe. Puede ser que te está desanimando alguna cosa que está fuera de tu control, y esto es lo siguiente que tienes que entender: Dios tiene el control de las cosas. Cuando tú haces de la oración el recurso diario de tu vida, va a hacer que en el momento del desánimo, cuando tu mente pueda dirigirse a Dios, puedas encontrar la fortaleza que viene de Dios. Comienza a enfocarte en las cosas positivas, en las cosas buenas que Dios te da y que tienes en este momento. Puede ser que tu visión de la vida esté borrosa simplemente porque necesitas buscar el foco, estás desenfocado y hoy necesitas enfocarte en lo importante y verás que siempre habrá mil y un motivos para sonreír, continuar, levantarse y para vivir con esperanza y gratitud. Mientras nuestro exterior pueda ir desgastándose, nuestro interior tiene que ir renovándose. ¿Estás desanimado hoy? No sé por qué circunstancias estás pasando, pero recuerda la promesa: Dios te sustenta, Dios te levanta y Él tiene el control.
Frente al desánimo y la tristeza, pregúntate: ¿Por qué? Puede ser: culpa, desgaste. Entrega tu problema o desánimo a Dios, recuerda que todo es temporal, recuerda que Dios tiene el control y enfócate en aquello que Dios te da. Confía y espera en Dios y tome aliento tu corazón.
Un abrazo y que Dios te bendiga.
Pastor Joel flores.
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