Caperucita Roja, un cuento clásico para tiempos modernos

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A quienes tienen la costumbre de compartir semillas, y a la Gente de la Tierra, que siembran horizontes tan vitales como necesarios‌




Perrault, Charles Caperucita : un cuento clásico para tiempos modernos / Charles Perrault ; adaptado por Martín Crespi y Diana Chereau ; ilustrado por Diana Chereau. - 1a ed ilustrada. - Ramos Mejía : Martín Crespi, 2019. 40 p. + Juegos : il. ; 15 x 20 cm. ISBN 978-987-783-593-9 1. Alteración del Ambiente. 2. Deforestación. 3. Cambio Climático. I. Crespi, Martín, adap. II. Chereau, Diana, adap. III. Chereau, Diana, ilus. IV. Título. CDD 577 * Caperucita Roja, un cuento clásico para tiempos modernos es una versión y una adaptación libre de Le Petit Chaperon Rouge, un relato popular publicado por Carles Perrault en 1697.

www.pachamamitalibros.com.ar Ilustraciones: Diana Chereau - dianachereau@gmail.com Desarrollo de Realidad Aumentada: Ezequiel Lobatto - ezequiel.lobatto@gmail.com Asesoramiento RA: Alicia Rosenthal - www.aliciarosenthal.com.ar narradiana@hotmail.com

Impreso en Guttenpress, Tabaré 1760, CABA, Argentina. Queda hecho el depósito que marca la ley 11.723 Libre reproducción en todos los formatos posibles de accesibilidad. Libre difusión e interpretación.



Había una vez una niña llamada Caperucita Roja. Una mañana su mamá le encargó llevar unos alimentos a la casa de su abuela porque estaba un poco enferma. - ¡Hija! Caperucita, prestá atención, no te distraigas por el camino y ten mucho cuidado con el Lobo. Porque el bosque encantado1 puede ser un lugar maravilloso, pero también puede ser un lugar muy, muy, muy peligroso.



Caperucita le mandó un mensaje a la abuela y salió camina que te camina, camina que te camina, camina que te camina… Llevaba una canasta llena de manzanas, naranjas, pomelos, nueces, ciruelas, bananas, castañas, almendras… El día estaba hermoso, el sol iluminaba el sendero que se perdía por el inmenso bosque. Los pájaros cantaban, las liebres se asomaban entre las plantas y las mariposas revoloteaban a su paso, acompañándola por el camino.





Mientras Caperucita caminaba y disfrutaba del paseo, apareció un Lobo vegano,2 que por el hambre que tenía, saboreaba de antemano, todas las galletitas de avena y de canela que estaban destinadas para la Abuela. - ¡Buenos días Caperucita! ¿A dónde vas tan temprano? - Le preguntó el Lobo vegano, que por el hambre que tenía ya le daba lo mismo hacerse vegetariano. - Voy a la casa de mi abuelita - Le respondió Caperucita. - ¿Por qué no eliges este camino? Zigzag, curvas, rectas, ¡sorpresas! es más largo. Sí. Si, si, si, es mucho más largo, pero es un camino tan colorido y lleno de flores, que si le llevas unas cuantas a tu abuela, se alegrará al verlas y también disfrutará olerlas. - Si, tienes razón Lobo. Si le llevo a la Abuelita un ramo de flores, se alegrará mucho y aliviará sus dolores. Entonces el Lobo apresuró su paso y se dirigió por el camino más corto.




Al llegar a la casa de la Abuelita, encontró un cartel pegado en la puerta, y pensó: ¡Hoy es mi día de suerte! El lobo aprovechó la ocasión, sacó el cartel de la puerta, se metió en la casa de la abuela, se disfrazó con sus ropas y se recostó en la cama para esperar a Caperucita.


Al poco tiempo se escuchó la voz de la niña y unos golpecitos suaves en la puerta. .- ¡Adelante querida! ¡Adelante! Gracias por visitarme en este bello día de verano – le dijo con entusiasmo el Lobo vegano, que ya estaba a punto de hacerse vegetariano. Y Caperucita le respondió un poco sorprendida: - ¡Pero qué voz tan rara tienes Abuela! Que voz tan rara… - Ay querida, querida… es por el resfrío, querida… - Pero… qué ojos tan grandes tienes! - Ay querida, querida… ¡Son para mirarte mejor! - ¡Y qué orejas tan grandes tienes! - Ahhh… querida, querida… Son para escucharte mejor. - Buaaauuu… Y qué boca tan, tan, ¡tan grande tienes! - Es para comerme todo mejoooor!!! Y en ese momento Caperucita se anticipó, pegó un salto y corrió velozmente.




El lobo apresurado la perseguía por toda la casa, siguiendo sus pasos y asechándola con sus garras afiladas. Caperucita, con gran agilidad, salió corriendo hacia el bosque y el lobo sin perder un instante la seguía persiguiendo con muchísima destreza. Hasta que en un momento determinado, llegaron a un lugar del bosque… y… y no podían creer lo que estaban viendo… No podían comprender lo que estaba ocurriendo… Todo el bosque había sido destruido. Todo el bosque había sido desmontado.3 Absolutamente todo había sido arrasado. Todos los árboles fueron talados y aniquilados.




De los inmensos y majestuosos árboles añosos no quedaba ninguno en pie. Los árboles más jóvenes y las variedades de plantas que había por todos lados, fueron aplastadas por unas topadoras con cadenas que arrastraban y arrancaban la vida del bosque. Mientras un ruido ensordecedor de motosierras se escuchaba a lo lejos, Caperucita y el Lobo miraban anonadados este terrible panorama. Modernas máquinas automáticas aserraban velozmente todos los troncos y los apilaban dejándolos bien acomodaditos. En algunas partes había fuego prendido para que el desmonte sea más rápido y no crezca nada. Los pájaros se alejaban espantados del lugar, sufriendo con cada árbol que escuchaban caer, y los animales se escapaban asustados sin saber qué hacer.




El Lobo y Caperucita se miraron por un instante y se dieron cuenta de que los dos estaban llorando en silencio. Unas lágrimas se escurrían por sus mejillas y caían lentamente al suelo. .- Ya no tendré bosque donde jugar, ni lugar para crecer – decía Caperucita entristecida. - Ya no tendré alimentos para comer, ni lugar para vivir – pensaba el Lobo para sus adentros.



Con la cola entre las patas y con la capa caĂ­da, decidieron volver pronto a la casa de la abuela. Cuando llegaron, la Abuelita los estaba esperando porque ya se habĂ­a enterado de la situaciĂłn.


Entonces agarraron unas pancartas y se marcharon rĂĄpido hacia el lugar donde seguĂ­an deforestando. En el camino se fueron sumando algunos campesinos y campesinas de la zona, que no podĂ­an creer lo que estaba ocurriendo.




Cuando llegaron, se plantaron frente a las topadoras y pidieron hablar con el capataz. - ¿Qué pasa abuela? ¿Qué pasa abuelita? No me diga que viene a hacer leña del árbol caído? - Le preguntó desafiante el encargado del lugar. - No señor. Estamos aquí por las mentiras. Porque las mentiras tienen patas cortas. - Abuelita, ¡no hay mal que por bien no venga! Yo solo cumplo órdenes. Usted sabe, vivo de esto. A mi me pagan por desmontar y yo solo desmonto… Además, ya se sabe que el cliente siempre tiene la razón! ¿Vio? Una mano lava a la otra, y las dos lavan la cara… La Abuela, con coraje y decisión apartó de la vista un gráfico con números y cálculos que le mostraba el encargado, y mirando detenidamente a los ojos de quienes estaban presentes, les preguntó con sinceridad:



- ¿Ustedes saben realmente lo que va a pasar cuando ya no queden más bosques? ¿Ustedes saben qué va a pasar cuando ya no queden más árboles naturales en la zona? ¿Saben qué va a pasar cuando su progreso se instale en la región? 4 ¿Se pusieron a pensar qué va a pasar cuando ya no queden más montes, ni bosques, ni selvas en este mundo? ¿Qué va a suceder con el clima? ¿Qué va a suceder si se rompe este equilibrio natural…? ¿Ustedes lo van a arreglar? ¿Qué va a pasar cuando sus pinos industriales nos sequen las tierras y nos contaminen el agua? ¿Qué va a pasar cuando5el río ya no cante, y se muera con la represa?6 ¿Qué va a pasar cuando ya no haya más bosques y aparezcan las inundaciones? ¡Díganme…! ¿Quién va a tomar el agua con agrotóxicos que usan para los pinos? ¿Quién va a tomar el agua con químicos que usan para el fracking?7 ¿Ustedes? ¿Ustedes van a tomar esa agua contaminada? La mayoría de los presentes bajaron la vista al piso y se quedaron reflexionando en silencio… - A buen entendedor, pocas palabras Abuela… - dijo el capataz de los leñadores. Y comprendieron que si destruían el bosque, también destruirían el sustento de sus trabajos. - Muy bien... – dijo la Abuela - Muy bien... ¡Es hora de hacer justicia! Es hora de sanar este territorio.


Y todo el mundo se puso a plantar árboles nativos y plantas del lugar… De a poco, muy de a poco, los árboles empezaron a crecer y los animales comenzaron a volver. Muy lentamente, de a poquito, con mucho respeto y muchos cuidados, pudieron recuperar el espíritu del bosque. Y el equilibrio natural retomó a su estado original. Y así, Caperucita y el Lobo, pudieron volver a disfrutar de ese maravilloso lugar, que volvió a ser nuevamente un bosque lleno de encanto, y por supuesto, volvió a ser un bosque lleno de vida.





GLOSARIO 1-BOSQUE ENCANTADO: amplio terreno donde hay árboles, arbustos y plantas de todo tipo; por lo general existe una tendencia a desmontarlos y arrasarlos. Son lugares tan maravillosos que resulta difícil describirlos con palabras, hay que vivenciarlos y sentirlos para darse cuenta de su encanto. Quienes tienen la suerte de transitarlos o vivir en ellos, perciben y sienten el tiempo de una manera muy distinta a la gente que anda todo el día corriendo en las ciudades. 2-LOBO VEGANO: son aquellos lobos que no comen ningún tipo de carnes, menos que menos la de los humanos. Se alimentan de lo que tengan a mano y tarde o temprano, por el hambre que tienen, se terminan haciendo vegetarianos. 3-DESMONTE / DEFORESTACIÓN: arrasar los bosques y las selvas de la Tierra de forma masiva, causando un inmenso daño a los suelos y al ambiente en general. No hay que olvidarse que la deforestación es también un factor importante del cambio climático. Los suelos de los bosques son húmedos, pero sin la protección de los árboles, se secan rápidamente. Los árboles también ayudan a evaporar el agua a la atmósfera. Sin árboles que cumplan esa función, gran parte de las selvas y bosques pueden convertirse rápidamente en zonas desérticas. En muchos países la deforestación causa extinción de especies, inundaciones, cambios en las condiciones climáticas, desertifica-


ción y desplazamiento de pueblos originarios que viven en equilibrio y protegiendo la naturaleza. La deforestación es un proceso antiguo pero ha crecido y se ha incrementado en los últimos 300 años. En Argentina la deforestación es constante y alarmante...! Un reciente informe de la FAO ubica a nuestro país entre los 10 países que más desmontaron en los últimos 25 años. Existe una Ley de Bosques que debería protegerlos, peeero… ya se sabe que hecha la ley, hecha la trampa.” 4-PROGRESO: mejora o avance que experimenta una persona, también podría ser el desarrollo continuo de una sociedad en distintos aspectos. La palabra progreso, es una palabra mágica y media tramposa, siempre suena linda y es bien recibida. Se la utiliza para llevar adelante cualquier mega-emprendimiento o modelo productivo; por ejemplo, siempre se dice que hace falta progreso, desarrollo y trabajo, sin tener en cuenta como queda el ambiente y como termina viviendo la gente. 5-PINOS INDUSTRIALES: son aquellos pinos que se plantan con la finalidad de producir pasta de celulosa, super super esponjosa. Para producir pinos industriales, (que en poquito tiempo serán transgénicos) se utilizan algunos agrotóxicos. Se plantan siempre en fila y derechitos. Si los ven por la ruta se van a dar cuenta enseguida. No son bosques, porque no hay biodiversidad, ni siquiera los pájaros anidan en esos lugares. Son bosques artificiales donde siempre hay silencio. Absorben mucha agua y desmejoran los suelos con facilidad.


6-MEGA-REPRESAS: son grandes construcciones que se hacen para retener y re gular el caudal de agua de los ríos. Si generan electricidad se las conoce con el nombre de centrales hidroeléctricas. Donde se instalan, inundan la zona impactando de forma negativa al ambiente y afectando a la gente. Nunca, nunca, nunca...tienen en cuenta la vida de los ríos. 7-MODERNA TÉCNICA DEL FRACKING: también conocida como fractura hidráulica, consiste en hacer pozos y perforar la tierra a gran profundidad, primero en forma vertical, para luego perforarla en forma horizontal (primero para abajo y después para los costados). Se extrae gas y petróleo no convencional que está entre las rocas, inyectando agua, arena y varios químicos que resultan bastante tóxicos. Esta técnica está prohibida en muchos países del mundo, porque contaminan las aguas subterráneas, afectando al ambiente y enfermando a la gente.























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