José Aníbal Insfrán Pelozo, Ph.D.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay. Evidencia de la Encuesta Permanente de Hogares 2002
185
186
JOSÉ ANÍBAL INSFRÁN PELOZO es Economista por la Universidad Nacional de Asunción. Realizó cursos de especialización en la Pontificia Universidad Católica de Chile y obtuvo el título de Especialista en Macroeconomía Aplicada (1990-1991); obtuvo el título de Master of Science en Economía (1993-1995), Master of Science en Finanzas (1996-1998) y Ph. D. en Economía (1993-1998) en la University of Illinois at Urbana-Champaign. Realizó curso sobre “Advanced Topics in Empirical Finance“ (2001) en Studienzentrum Gerzensee, Suiza.
La violencia, la delincuencia y los crímenes en general no siempre son vistos como desafíos para el análisis y la teoría, sino como amenazas para la riqueza y la vida de las personas. Estos actos anteriormente raros en Paraguay, hoy, junto con el desempleo, son considerados los principales problemas del país, dado su incremento en los últimos años1. La violencia se ha incrementado no solamente en el Paraguay, sino que ha aumentado en forma significativa en las últimas décadas en toda Latinoamérica, y hoy se la reconoce como un serio problema económico y social, en especial en las áreas urbanas de la región. Frecuentemente, los autores citan como causas fundamentales de este incremento la rápida urbanización, la persistencia de la pobreza y la desigualdad, la violencia política, la naturaleza más organizada de la delincuencia y la aparición del uso ilegal de drogas y el narcotráfico (Banco Mundial, 2003). Como resultado, las fuerzas vivas paraguayas han generado fuertes protestas para llevar adelante reformas radicales en el Código Penal, que hagan las penas más probables, más severas y más rápidas. Todos los niveles de la sociedad son afectados por este flagelo: los ricos y aún más los pobres, las mujeres y los hombres, los jóvenes y los ancianos. Los costos económicos de la violencia y los crímenes son altos, pues se estima que en América Latina los homicidios cuestan aproximadamente USD 27.737 millones anuales y que, con la violencia, la región pierde el 14% de su PIB (Guerrero, 1999). La delincuencia y la violencia urbanas también generan un clima de temor que se traduce en serias amenazas para la estabilidad y el clima social de las ciudades, para las inversiones productivas y el desarrollo económico sostenible, para la calidad de vida y los derechos humanos.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
1. Introducción
Esta situación genera la necesidad de un estudio más acabado de los fenómenos de violencia y crimen, de tal manera a entender sus motivaciones y causas subyacentes, y así poder combatirlos de la mejor manera posible. 1
En América Latina y el Caribe, la violencia se encuentra entre las cinco principales causas de muerte.
187
tabla 1 DELITO COMETIDO Robo o intento de robo
Agresión Agresión Actos Invasión Secuestro Otro o intento o intento de pato- o intento de o intento de de agresión de agresión terismo invasión secuestro física sexual
1998
25,639
1,004
787
1999
42,925
3,121
263
2000
50,311
4,327
2001
77,563
4,992
2002 206,928 Total 403,366
526
27,956
1,169
241
47,719
885
896
56,419
540
809
741
84,645
15,829
646
3,575
2,444
263
2,853 232,538
29,273
2,236
6,438
4,607
263
3,094 449,277
Fuente: DGEEC. Encuesta Permanente de Hogares 2002
La distribución de los tipos de crímenes o actos violetos en el Paraguay, en el periodo 1998-2002, se puede observar mejor a través del siguiente gráfico. Por lejos, los delitos más comunes son los de robo o intento de robo.
ilustración 1 Distribución de delitos
Fuente: DGEEC. Encuesta Permanente de Hogares 2002
2. Marco teórico El análisis de la causalidad del crimen y de la violencia se puede realizar desde una doble perspectiva: el enfoque objetivo o problema social (Rubio, 1999) y el enfoque de decisión individual o de aspectos económicos. 188
Total
El enfoque económico o de decisión individual del crimen ayuda a entender, de manera sorprendente, una gran fracción de las regularidades que se pueden observar en los delitos (Becker, 1995). Lo esencial del enfoque económico se refiere al hecho de que las personas deciden cometer o no un delito, comparando los costos y los beneficios de este. Por lo tanto, la probabilidad de delito es asociada a la recompensa esperada (nivel socioeconómico de la víctima) y al costo de cometerlo (severidad de sanción en tiempo y dinero, probabilidad de captura, etc.). El presente estudio del Paraguay, en base a datos disponibles, utilizará este enfoque. A partir del análisis seminal de Gary Becker (1968) de los aspectos económicos del crimen y la violencia, los economistas han expandido el análisis tanto en los aspectos teóricos como empíricos (Ehrlich, 1973; Block y Heineke, 1975; Ehrlich, 1975; Witte, 1980). De igual manera, la presencia de capital social en las comunidades ha sido documentada como un elemento importante en la reducción de la violencia en las comunidades (Moser y Holland, 1997). De hecho, este elemento de cohesión social se constituye en la clave del funcionamiento institucional adecuado y en un importante factor de estabilidad y prevención de la delincuencia violenta. Así, los lazos sociales o de pertenencia a ciertas comunidades o asociaciones proveen recursos, ventajas y oportunidades a sus miembros, que se traducen en comunidades con mejores condiciones de vida.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Cuando en el lenguaje académico se habla de las causas objetivas de la violencia, quiere expresarse que la violencia tiene un origen estructural: en la pobreza, en las desigualdades del ingreso y de la riqueza, en la pobreza de grandes grupos sociales, en los altos índices de desempleo, en las luchas por el poder político, en la falta de oportunidades –sociales, políticas o económicas– y en la débil presencia del Estado, tanto en la prevención (servicios de seguridad y Policía inadecuados y corruptos) como en la sanción de delitos (Poder Judicial ineficiente). Es decir, estos fenómenos sociales inducen a los agresores a cometer los crímenes y, por lo tanto, el delito es considerado como un fenómeno colectivo, con dinámica social propia, y desvinculado del individuo.
189
El capital social, como concepto, fue definido independientemente en los años ochenta por Pierre Bourdieu (1980) y por James Coleman (1988). Bourdieu afirma que el capital social es “el agregado de recursos potenciales o efectivos ligados a la posesión de una red más o menos institucionalizada de conocimiento mutuo o reconocimiento”. Por su parte, Coleman lo define como “la variedad de entidades con dos elementos en común: todas ellas consisten en ciertos aspectos de las estructuras sociales que facilitan ciertas acciones de los actores –ya sean personas o corporaciones– dentro de la misma estructura”. La diferencia básica entre estas dos definiciones se refiere a la razón subyacente para el desarrollo de los procesos sociales. Bourdieu argumenta que los procesos sociales son el producto de la organización económica, mientras que Coleman prefiere verlas como el resultado del ejercicio racional de la libertad individual. En la presente investigación no nos preocuparemos del origen o de la existencia de los lazos o instituciones que constituyen el capital social, sino que los veremos como datos o situaciones que permiten ciertos logros que serían imposibles o más difíciles sin su presencia. Lederman et al. (2002) indican que existen dos razones por las cuales el capital social podría tener una influencia positiva en la reducción del crimen y la violencia. Una de ellas se refiere a que las comunidades con más lazos de confianza y homogeneidad entre sus miembros se hallan en mejores condiciones para organizarse para su defensa y así superar el problema del polizón (“free rider”) que surge de la acción colectiva. El siguiente argumento se refiere a que el capital social disminuye los costos de transacción de las acciones sociales, que posteriormente pueden permitir una resolución pacífica de los conflictos. Por otra parte, es posible que el capital social tenga un efecto de favorecer el crimen y la violencia, debido a que la confianza y las redes pueden facilitar la formación de pandillas o grupos criminales.
190
Este estudio pretende responder empíricamente a las siguientes preguntas: a) ¿Existe influencia del capital social sobre la seguridad y la violencia en el Paraguay; es positiva o negativa?; b) ¿Puede ser visto el capital social como un factor de reducción de las denuncias de actos
violentos?; c) ¿Son las comunidades en las que existe mayor participación e interacción entre sus miembros, más seguras?; d) ¿Podría una política de mejoramiento del ambiente comunitario y de las redes de apoyo social ayudar a reducir los niveles de violencia a nivel urbano y/o rural?; e) ¿Cuál podría ser el efecto del capital social sobre una política de mayores gastos para combatir la violencia?
El presente estudio será uno de los primeros realizados en el país que analizan empíricamente el problema de violencia y capital social utilizando datos que miden sus componentes. El trabajo tendrá tres partes bien diferenciadas. En la primera parte se plantearán los problemas a ser analizados y se realizará una revisión bibliográfica. En la segunda se procederá a establecer los modelos a ser utilizados y a realizar las estimaciones empíricas. Finalmente, en la tercera parte se procederá a analizar las implicancias políticas de las estimaciones empíricas realizadas en la sección anterior y se resumirán las principales conclusiones del estudio.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Las respuestas a estas preguntas son de una gran relevancia porque pueden proveer pistas para una mejor decisión respecto a las medidas de política a ser implementadas, y así contribuir de manera duradera a reducir la violencia (que junto al desempleo constituyen dos de los mayores flagelos percibidos por la población paraguaya, de acuerdo a numerosas encuestas).
3. Revisión bibliográfica Como ya se ha indicado anteriormente, el enfoque a ser utilizado en el presente estudio es el económico, el cual será combinado con el concepto de capital social seguido por Coleman (1988), que considera la existencia de capital social como el resultado de la decisión individual. Por lo tanto, puede ser incorporado muy fácilmente como una variable explicativa del crimen desde el punto de vista económico. La búsqueda empírica y conceptual de los determinantes de la tasa de delincuencia y de la probabilidad de ser
191
víctima de un acto violento ha sido realizada por numerosos autores. Estudios empíricos relacionados a este enfoque indican que los crímenes cometidos por ciertos individuos pueden ser explicados por el capital humano que posee cada uno de ellos (educación). También se ha demostrado que, en general, la probabilidad de ser atrapado tiene mayor efecto disuasivo en la criminalidad que la severidad de las penas. La evidencia indica (Cote y Healy, 2001; Green et al., 2000; Halpern, 1999; Sampson et al., 1997) que altos niveles de capital social son asociados con tasas menores de crimen. Cote y Healy (2001), a partir de estudios realizados en los Estados Unidos, indican que aquellas comunidades caracterizadas por el anonimato y el conocimiento limitado entre sus miembros, la escasa supervisión de los adolescentes y bajos niveles de participación cívica, enfrentan mayores riesgos de ser víctimas del crimen y de la violencia. Por su parte, Sampson et al. (1997), utilizando datos de una encuesta a los vecindarios de Chicago, demuestran que la confianza mutua y el altruismo hacia los vecinos son factores claves para explicar las diferencias en las tasas de crimen en los diferentes vecindarios de Chicago. El mecanismo causal de este hecho lo constituye la “eficacia colectiva”, esto es, la habilidad de la comunidad para controlar a los precursores del crimen, niveles de confianza y respeto y autoestima dentro y entre los miembros de la comunidad. Esta eficacia colectiva actúa reduciendo el crimen, no porque hace que los vecinos se protejan mutuamente, sino porque actúa como elemento que desincentiva la agrupación de personas con fines delictivos (Halpern, 2001).
192
Green et al. (2000), en su estudio de capital social y salud en Yorkshire Sur, confirman que la seguridad de la comunidad es un tema central para los que responden a sus cuestionarios. Una solución tradicional a estos miedos es incrementar las medidas de seguridad. Por otra parte, otra estrategia sería incrementar los niveles de capital social, especialmente la confianza (trust), debido a que sus estudios demuestran que mayores niveles de confianza se hallan asociados a menores temores respecto a la seguridad.
4. Violencia, seguridad y capital social
Las fuerzas que surgen de la comunidad, basadas en la existencia de redes; la participación de los miembros en alguna forma de organización, asociación o grupo existente; el acceso a la información, la cohesión social, entre otros, pueden ser fuertes elementos que favorecen la generación de mecanismos formales e informales de prevención de actos violentos hacia miembros de la comunidad. En general, es posible afirmar que la sociedad en su conjunto paga un alto precio por los crímenes, la violencia y los conflictos, y de acuerdo a Moser y Holland (1997), en su trabajo en Jamaica han medido la importancia del nexo violencia-pobreza-instituciones sociales, afirmando que “la relación violencia y pobreza es reforzada o reducida a través de las instituciones sociales, que van desde la familia a instituciones informales, tales como clubes, asociaciones diversas, hasta organizaciones formales como las iglesias, los colegios y la Policía”.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
La falta de seguridad constituye uno de los principales inconvenientes de los últimos años y se halla relacionada en cierta manera con el empeoramiento de las condiciones económicas y de oportunidades de empleo. La superación de estos inconvenientes y el mejoramiento de las condiciones de vida de una comunidad pueden provenir tanto de fuerzas exógenas como endógenas, pero los resultados son duraderos cuando los deseos de cambio y superación de cada comunidad complementan las políticas implementadas por el Estado.
Adicionalmente, se ha visto al capital social como sustituto de corto plazo para la acción del Estado para prevenir la violencia; en algunos lugares han surgido tribunales informales ante la ineficacia de la acción gubernamental (Moser y Holland, op. cit.) y grupos vecinales para combatir el crimen, denominados en el Paraguay: “Vecinos en alerta”, “Vecinos en acción”, etc. Las personas se agrupan y generan sistemas de patrullaje privado y de control de acceso a los barrios. También el crimen y la violencia destruyen el capital social. Tal como lo define Robert Putnam en su trabajo sobre democracia y desarrollo en Italia, el capital social
193
se refiere a “aspectos de la organización social, tales como la confianza, normas y redes que pueden fortalecer los niveles de eficiencia de una sociedad facilitando la coordinación de acciones”. El delito tiende a devastar el capital social. Las normas de confianza y reciprocidad son reemplazadas por la “guerra de todos contra todos”. Las capacidades de los miembros de una comunidad para asociarse con otros se ven afectadas. En muchas áreas, los centros de cultura y recreación, salones de bailes, clubes juveniles e instalaciones deportivas pierden sus funciones bajo atmósferas delictivas. Por todo esto, son fundamentales la promoción y la difusión del conocimiento respecto al capital social. Como evidencia circunstancial de la respuesta de la sociedad civil ante el aumento percibido en la violencia en el Paraguay, se puede considerar el incremento considerable en los últimos años de los “barrios cerrados” en las áreas metropolitanas, así como también la aparición, cada vez en mayor número, de empresas de seguridad privada. Sin embargo, por no poseer datos específicos de estos, no serán incluidos en el presente estudio.
5. El enfoque económico del crimen Siguiendo a Becker (1993), nuestro enfoque asume que los individuos maximizan su utilidad o bienestar (sin importar si son egoístas, altruistas, leales, masoquistas, etc.). También tienen un comportamiento que mira hacia el futuro (forward-looking) y es consistente en el tiempo. Es decir, los individuos intentan anticipar de la mejor manera posible las inciertas consecuencias de sus acciones. Sin embargo, el comportamiento que mira hacia el futuro puede estar fundamentado en el pasado, debido a que el pasado puede moldear las actitudes y los valores de los individuos. Se asume que el criminal reacciona a diferentes estímulos e incentivos de una manera predecible o racional, tanto ante los retornos como los costos, en forma de castigos esperados. Este enfoque no considera que el criminal posee una mente enferma, irracionalidad o extrema 194
maldad, sino se lo considera un individuo racional en una situación de incertidumbre.
Las diferentes restricciones son importantes en situaciones específicas, pero la restricción más importante es el tiempo limitado. Las ciencias médica y económica han progresado enormemente y han logrado incrementar la expectativa de vida, pero el periodo físico del tiempo no puede ser modificado y cada individuo se halla limitado a veinticuatro horas por día. Esto es verdad para todos los individuos, en todos los países. Por lo tanto, las necesidades o los deseos permanecen insatisfechos, tanto en países ricos como pobres. La optimización que cada individuo realiza siempre se halla sujeta a restricciones limitantes; por lo tanto, el equilibrio alcanzado es siempre inferior al que se alcanzaría sin restricciones. Analicemos los beneficios de cometer crimen o violencia. Para el caso de actos contra la propiedad de las personas, los beneficios son los objetos robados (autos, bienes, dinero, etc.). También existen beneficios psíquicos (que son importantes para las personas con esas inclinaciones) obtenidos por los criminales de actos violentos, violación o mera destrucción de objetos.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
La maximización del bienestar se halla sujeta a restricciones de: ingreso, tiempo, memoria imperfecta, capacidades de trabajo y de computación, y cualesquiera otros recursos limitados. De igual manera, otro factor limitante lo constituyen las oportunidades existentes en la economía. Estas oportunidades son en gran medida determinadas por acciones privadas y colectivas de otros individuos y organizaciones.
Los costos del crimen son monetarios y no monetarios. Si las personas se hallan implicadas en crímenes, estas no realizan un trabajo legal; por lo tanto, el costo de oportunidad de no trabajar de manera legal es un costo. También existe una probabilidad de que las personas sean descubiertas y el castigo puede tomar numerosas formas, desde multas hasta encarcelamiento. La probabilidad de ser castigados también afecta el costo de la actividad criminal. De hecho, el comportamiento criminal es riesgoso, los retornos son inciertos y exis-
195
ten posibilidades de ser atrapados. Por lo tanto, pareciera que los criminales son amantes del riesgo. Si esto fuera cierto, lo más importante desde el punto de vista del análisis económico es la probabilidad de ser castigado, antes que su magnitud. Lastimosamente, la probabilidad de ser descubierto, capturado, declarado culpable en juicio y enviado a prisión es baja. Para Gran Bretaña, los datos indican que esta probabilidad es inferior al 2% (Becker, 1993). Para el Paraguay podríamos esperar que esta probabilidad sea aún menor. En el presente trabajo, el capital social es considerado como un factor que aumenta el costo de cometer el crimen, debido a que al existir lazos de confianza entre las personas y posibilidades de asociación mayores, hay mayores posibilidades de que se organicen grupos sociales para combatir el crimen, siendo complementos de la acción gubernamental o de la Policía en la materia. De igual manera, estos grupos pueden incrementar los costos psíquicos de cometer crímenes, generando sanciones morales para aquellos que los cometen. También el capital social actúa como un elemento que facilita los logros educativos y la posibilidad de obtener mejores salarios (Insfrán Pelozo, 2004); por lo tanto, incrementa el costo de oportunidad de no trabajar de manera legal. En síntesis, la decisión de cometer un delito depende de la percepción que el victimario tenga de la recompensa (beneficio) económica o psicológica obtenida por la ejecución del mismo y de los costos económicos, sociales y psicológicos incurridos por el agresor, ponderados por la probabilidad de ser capturado, juzgado y condenado. Las condiciones de tiempo (inercia) y espacio (interacción social) modificarían esta percepción de costos y beneficios del agresor. De esta forma, si el agresor percibe que la recompensa esperada es mayor que el costo probable de cometer el delito, entonces su decisión es positiva y lo lleva a cabo. En caso contrario, o sea, si su percepción es de que el cometer el delito implica un costo probable elevado (alta probabilidad de ser capturado y condenado; fuertes sanciones en dinero y reclusión penitenciaria), comparado con los beneficios esperados, entonces el agresor desistiría de cometerlo (Vélez et al., 1999). 196
6. Análisis de datos en base a la Encuesta Permanente de Hogares (EPH) 2002
Esta Encuesta selecciona una muestra aleatoria de hogares en varias zonas urbanas y rurales de todo el país, cuyos integrantes son encuestados (se excluyen únicamente los departamentos de Boquerón y Alto Paraguay, los cuales representan menos del 2% de la población total del país). Las informaciones en esta Encuesta cubren una gran variedad de aspectos acerca de las características individuales de los miembros de los hogares, tales como: características demográficas, salud de los niños, información educacional, higiene, actividades económicas y capital social.
7. Índice de capital social2. Su cálculo
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
El conjunto de informaciones que serán utilizadas para la estimación de las funciones de probabilidad de ser víctima de actos de violencia está basado en la EPH/2002, llevada a cabo por la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos ya por varios años. Sin embargo, recién a partir de 2002 ha incorporado datos respecto al capital social.
Para el cálculo del Capital Social a ser utilizado como variable explicativa en la regresión de la probabilidad de ser víctima de actos de violencia, sigue la metodología establecida por Insfrán Pelozo (2004). Se utiliza un indicador numérico representativo del acervo de capital social para cada individuo. A este efecto utilizamos un índice de capital social construido en Insfrán Pelozo, op. cit., basado en si el individuo encuestado posee o no dicho capital (considerado como un acervo). 2 Para el cálculo del índice, se considera en la muestra a aquellos individuos que responden a todas las preguntas consideradas. 3 El valor entre paréntesis indica el número de preguntas analizadas en cada sección.
El índice mide si el individuo posee o no los elementos medidos en la EPH/2002, a saber3: Redes (5), Confianza y Solidaridad (8), Participación Ciudadana (4), Cohesión Social (6), Acceso a la Información (5) y Empoderamiento y Participación Política (9). Para ello se han seleccionado
197
algunas variables de la EPH/2002 en cada una de estas partes de la Sección 6 de Capital Social. Estas variables se hallan detalladas en el Apéndice 1 del presente estudio, el cual es una transcripción de Insfrán Pelozo, op. cit.. Se han generado variables binarias para cada una de las preguntas de la encuesta, y si el encuestado respondía sí o si poseía la característica que se pretendía medir, se asigna el valor de 1, y en caso contrario, un valor de cero. Después se suman las variables en cada una de las 6 categorías, y si el individuo tiene una puntuación superior al 50% del total de puntos posibles, se considera que el mismo posee esa parte del capital social medido, por ejemplo Redes. Posteriormente, cuando posee ese elemento, se asigna un valor de 1 que forma parte del índice; en caso contrario, 0. Seguidamente se analiza el elemento de Confianza y Solidaridad, y así sucesivamente para los 6 elementos. Por lo tanto, el valor del índice va de 0 a 6, indicando la presencia o no en cada individuo de las seis características consideradas. A continuación presentamos el Histograma del Índice de Capital Social en el Sector Rural.
ilustración 2 2400 Series: ÍNDICE Sample 1 8605 Observations 8605
2000 1600 1200 800
Mean Median Maximum Minimum Std. Dev. Skewness Kurtosis
1.839861 2.000000 6.000000 0.000000 1.453419 0.572977 2.647088
Jarque-Bera Probability
515.4964 0.000000
400 0 0
1
2
3
4
Fuente: DGEEC. Encuesta Permanente de Hogares 2002
198
5
6
8. Metodología Con este trabajo se busca contribuir a una mejor comprensión de los efectos del capital social en su conjunto o de parte del mismo, sobre la probabilidad de que una persona sea víctima de un acto de violencia, ya sea en su integridad física, en su vivienda, lugar de residencia o en sus pertenencias materiales. Todo esto basado en la teoría económica y utilizando métodos econométricos.
En esta parte del trabajo se determinará empíricamente la influencia del capital social sobre la probabilidad de ser víctima de actos violentos, básicamente a través del elemento de Cohesión Social como factor aglutinante de las comunidades. Se utilizarán las características de los individuos como variables de control. Se utilizará el instrumental teórico estándar, en el cual individuos que optimizan, deciden realizar actos violentos o criminales, dependiendo de las ganancias esperadas de dichos actos. Estas ganancias esperadas dependen de los retornos obtenidos, las posibilidades de obtener empleo en actividades lícitas, las preferencias de los individuos, los costos de dichas actividades criminales, asociados con las probabilidades de captura, juzgamiento y castigo.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
9. Estimación de la probabilidad de ser víctima de actos violentos con el capital social como regresor
La hipótesis del presente estudio es que la presencia del capital social aumenta los costos para los criminales y, por ende, reduce los retornos esperados de estos. Por tanto, con todo lo demás constante y bajo la hipótesis nula, la presencia de capital social reduce la violencia y los actos criminales. Dicha hipótesis será contrastada con la evidencia empírica obtenida a partir de la EPH/2002. La información existente permitirá estimar la probabilidad de ser o no víctima de dichos actos no solo a nivel de
199
todo el país, sino también a nivel de áreas geográficas, a fin de verificar la hipótesis de si en todas las áreas del país son las mismas características (y con el mismo efecto) las que determinan que un individuo pueda ser víctima de actos violentos. Adicionalmente, se puede disgregar el análisis por estratos socioeconómicos, basado en el ingreso familiar total. La ecuación a estimar es la siguiente: Pr (Víctimai = 1| β´Xi) = G (β0 + β1x1 +.... + βk xk) = G Pr (Víctimai = 0| β´Xi) =1 - G(β´Xi) ) X = (Indic,De,Se,In) Donde: 1
El Individuo ha sido víctima de un acto violento entre los años 1998 y 2002
0
En caso contrario
Víctima =
Indic = indicador del acervo de capital social De = variables demográficas Se = variables socioeconómicas In = individuales G es una función continua, estrictamente creciente, que toma un valor entre cero y uno: 0<G(z)<1 para todos los números reales z. De esta manera, es posible asegurar que las probabilidades a estimar se hallen estrictamente entre cero y uno. Las Xi son las características del individuo (variables explicativas del modelo). Dada la especificación anterior, podemos estimar los parámetros del modelo utilizando el método de máxima verosimilitud. La función de verosimilitud se puede escribir como:
200
Las condiciones de optimalidad de primer orden para esta función de verosimilitud son no lineales, por lo cual la obtención de estimadores de los parámetros requiere de una solución iterativa realizada sin mayores inconvenientes por los paquetes econométricos. Utilizamos en el proceso de estimación el programa econométrico Eviews 4.1; sin embargo, puede ser usado cualquier otro paquete, dado que esta estimación se ha vuelto una rutina estándar para casi todos los programas existentes en el mercado.
Respecto a la variable binaria dependiente, se considerará el valor 1 cuando cualquiera de los integrantes del hogar ha sido víctima de uno o más actos de violencia, y 0 cuando no ha sido víctima. El conjunto de regresores incluye al capital social, variables demográficas y socioeconómicas. Así, para el capital social se construirá un índice que representa la cohesión social de la comunidad en la cual cada individuo habita.
4 El logit, constituye el logaritmo natural de la razón de probabilidades entre ser víctima de un acto violento y de no serlo. Es decir, el logaritmo del ratio de casos favorables a no favorables. Esto tiene la ventaja de que mapea probabilidades del rango (0,1) a todos los números reales (-∞,+∞). 5 De hecho, se ha intentado determinar la significancia estadística y econométrica del índice global de capital social y de cada uno de sus seis componentes. Sin embargo, solamente el indicador de Cohesión Social ha sido el único que reunía las características estadísticas apropiadas.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Para la función G emplearemos la función logística, lo cual se conoce en la literatura como modelo logit. Para fines de estimación, escribimos nuestra ecuación logística de la siguiente manera4.
Respecto a las variables demográficas y socioeconómicas se consideran: tipo de hogar, edad, sexo, estado civil, empleo, ingreso familiar mensual y la pertenencia del individuo al sector terciario o de servicios. Adicionalmente, se han utilizado otras, pero estas han resultado no significativas. En resumen: esta metodología se utilizará para estimar empíricamente la probabilidad de ser (o no) víctima de un acto de violencia en diferentes regiones o para diferentes grupos sociales, y para analizar la significancia o no de la variable indicadora de Cohesión Social como parte del capital social5. Adicionalmente, se podrá establecer empíricamente la significancia estadística de otras variables socioeconómicas.
201
10. Descripción de variables y signos esperados La estimación es realizada a partir de datos de la EPH/ 2002 y se analizan varios grupos, en que se destacan los que consideran los individuos que se hallan en áreas rurales, los de áreas urbanas y ambos grupos en su conjunto. De igual manera, se han realizado estimaciones utilizando diferentes deciles de ingreso familiar. A continuación presentamos una descripción de las variables a ser consideradas en nuestro estudio y que han resultado significativas y con los signos apropiados, de acuerdo a las conjeturas esbozadas a continuación: Variable Binaria Dependiente. A partir de las respuestas a las 5 preguntas de la Página 28, Sección 6: Parte A Vivienda e Inventario de Bienes Duraderos, las cuales textualmente expresan:
tabla 2 En los últimos 5 años (1998-2002), ¿alguna vez un miembro del hogar fue víctima de algún acto de violencia? En los últimos 5 años (1998-2002), ¿alguna vez la vivienda fue víctima de algún acto de violencia? En los últimos 5 años (1998-2002), ¿alguna vez la tierra fue víctima de algún acto de violencia? En los últimos 5 años (1998-2002), ¿alguna vez algún vehículo fue víctima de algún acto de violencia? En los últimos 5 años (1998-2002), ¿alguna vez algún animal fue víctima de algún acto de violencia?
Se ha considerado con un valor de 1 cuando se ha respondido positivamente a cualquiera de estas preguntas y, en caso contrario, con un valor de 0. Las características de la variable dependiente se presentan en el Anexo 2. Variable Indicadora de Capital Social. Se han utilizado tanto el índice general como los índices de cada una de las seis áreas medidas de capital social en la EPH/2002 y ha resultado significativo y con los signos adecuados únicamente el indicador de Cohesión Social, para el sector rural. Cuando se han utilizado la muestra completa y 202
SV01 SV50 SV51 SV52 SV53
la del área urbana no se han logrado resultados significativos estadísticamente y con los signos apropiados. Variables Demográficas: sexo, edad, estado civil y tipo de hogar. Variables Socioeconómicas: ingresos mensuales del hogar, si el encuestado se halla empleado o no y el sector económico en el que se halla la empresa en la cual trabaja.
La variable indicadora de Capital Social debería tener un signo negativo, de manera que un aumento en el acervo de dicha variable implique para un individuo un descenso de la probabilidad estudiada. Específicamente, la variable que representa Cohesión Social se vuelve un elemento importante para reducir la violencia. De hecho, se espera que aquellas comunidades con menores diferencias religiosas, políticas y/o étnicas sean más seguras. Los coeficientes de edad, sexo y estado civil no poseen a priori un signo “correcto”, dado que se puede argumentar a favor de cualquiera de los signos y la decisión dependerá de los resultados empíricos obtenidos a partir de la muestra analizada. Por su parte, los coeficientes de Empleo (indica si la persona se halla empleada o no) y de Ingreso Familiar Mensual deberían tener un signo positivo, indicando que los que se hallan empleados y poseen ingresos superiores tienen mayor probabilidad de ser víctimas de un acto violento.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
En relación a los signos esperados para los coeficientes de los regresores en nuestra formulación de la probabilidad de ser víctima de un acto violento, podemos afirmar lo siguiente:
11. Resultados empíricos Tal como se ha dicho anteriormente, se han hecho numerosas agrupaciones o submuestras de individuos de acuerdo al área en que vivían y a deciles de su ingreso familiar mensual. También se han utilizado los seis componentes de capital social que son medidos en la EPH/02.
203
Sin embargo, únicamente para el caso de la muestra que considera datos de las áreas rurales y con el índice de Cohesión Social fue posible estimar una regresión de la probabilidad de ser víctima de un acto violento, cuyos regresores tenían los signos adecuados y que han superado todos los tests estadísticos y econométricos estándares. Adicionalmente, estos resultados son consistentes con la estructura teórica desarrollada en esta investigación. De igual manera, Lederman et al. (2002) encuentran resultados similares en su estudio y que el componente de capital social medido por la confianza en miembros de la comunidad es el único que tiene el efecto de reducir los crímenes violentos. En todos los otros casos no se han logrado resultados significativos en términos estadísticos y coherentes con la teoría enunciada previamente. Esto puede ser debido a algunos de los siguientes factores o una combinación de ellos: muestras limitadas, dificultades de medición de las variables y la imposibilidad de distinguir los efectos del capital social sobre el crimen y la violencia desde el punto de vista de toda la sociedad y los efectos específicos para ciertos grupos sociales. Sería interesante avanzar en estudios que incorporen efectos macroeconómicos y de series de tiempo, de tal manera a lograr una mejor comprensión de las causas de los actos violentos. En la tabla 3 se presentan los resultados econométricos obtenidos para el caso del área rural, en la cual el coeficiente de cohesión social (indicador de capital social) ha resultado con el signo esperado y significativo del 7,9%. Como es posible observar, todos los coeficientes tienen los signos que a priori se habían considerado como razonables. El estadístico LR de significancia conjunta de los coeficientes, con 8 grados de libertad, es de 99,29, lo cual indica que se rechaza la hipótesis nula de que todos los coeficientes son simultáneamente iguales a cero, dado que los valores críticos chi-cuadrados son 11,0705 y 15,0863, al 5% y al 1%, respectivamente6.
204
El signo del coeficiente de Cohesión Social es negativo; por lo tanto, un incremento en el valor de dicho índice genera una disminución en la probabilidad de ser víctima de un acto de violencia. Por su parte, los factores sociodemográficos, el tipo de hogar y la edad poseen coeficien-
6 De igual manera, el P-value es bajísimo, casi cero.
tabla 3
Variable COHESI TIPOHOGA EDAD SEX ESTCIV EMPLEO LOG(INGREM) SERVI C Mean dependent var S.E. of regression Sum squared resid Log likelihood Restr. log likelihood LR statistic (8 df) Probability(LR stat) Obs with Dep=0 Obs with Dep=1
Coefficient -0.172270 0.096079 0.008292 -0.124088 -0.230697 0.338807 0.233504 0.243804 -4.664175 0.296828 0.451105 735.8396 -2154.906 -2204.552 99.29170 0.000000 2549 1076
Std. Error z-Statistic 0.095570 -1.802553 0.034820 2.759341 0.002365 3.506944 0.089061 -1.393287 0.082807 -2.785972 0.093497 3.623713 0.039005 5.986589 0.090526 2.693190 0.527471 -8.842530 S.D. dependent var Akaike info criterion Schwarz criterion Hannan-Quinn criter. Avg. log likelihood McFadden R-squared Total obs
Prob. 0.0715 0.0058 0.0005 0.1635 0.0053 0.0003 0.0000 0.0071 0.0000 0.456923 1.193879 1.209262 1.199359 -0.594457 0.022520 3625
Fuente: Cálculos del autor con datos de la EPH/2002
tes positivos, indicando una incidencia positiva en la variable dependiente. Es decir, a medida que se pasa de uno individual a otro extendido y cuando el individuo tiene más edad, aumentan las probabilidades de ser víctima de violencia. Respecto a variables económicas, los indicadores de si la persona se halla empleada, el ingreso mensual disponible y la pertenencia al sector servicios presentan signos positivos, lo cual indica que aquellas personas con mayores ingresos tienen mayor probabilidad de ser víctimas. Todo esto es consecuente con los datos de la mala distribución de ingreso en el Paraguay, que puede generar numerosos conflictos. Adicionalmente se puede medir el cambio en el logit estimado por una unidad de cambio en cada regresor, asumiendo los demás regresores constantes, interpretando cada coeficiente como una derivada parcial. Así, por un
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Dependent Variable: VÍCTIMA DE UN ACTO VIOLENTO Method: ML - Binary Logit (Quadratic hill climbing) Sample: 1 3625 Convergence achieved alter 5 iterations Covariance matrix computed using second derivatives
205
aumento de 1 unidad en el valor del indicador de Cohesión Social, existe una caída de 0,172 en el logaritmo natural de las probabilidades de ser víctima de un acto de violencia frente a la de no ser víctima. Tomando el antilogaritmo del valor de este coeficiente, se obtiene 0,841, lo cual representa una caída de 15,82% en la razón de las probabilidades. A continuación se presenta el mismo cálculo para todas las variables explicativas del modelo.
tabla 4 Variable COHESI TIPOHOGA EDAD SEX ESTCIV EMPLEO LOG(INGREM) SERVI
Coeficiente (A)
Antilog (B)
(B) -1 (C)
Var. en % (D)
-0.17227 0.096079 0.008292 -0.124088 -0.230697 0.338807 0.233504 0.243804
0.8417519 1.100846 1.0083265 0.8833021 0.79398 1.4032725 1.2630179 1.2760942
-0.158248 0.100846 0.0083265 -0.116698 -0.20602 0.4032725 0.2630179 0.2760942
-15.82481 10.084603 0.8326474 -11.66979 -20.602 40.327249 26.301788 27.609419
Fuente: Cálculo del autor a partir de datos de la Tabla 3
Un hecho que puede resultar llamativo es el resultado de que los elementos del capital social, como Redes, Confianza y Solidaridad, Participación Ciudadana, Acceso a la Información y Empoderamiento y Participación Política, no aparecen con efecto significativo sobre la violencia y el crimen, y también que se haya dado esto en todos los subgrupos de individuos. Esto podría deberse a que con las preguntas de la EPH/2002 no se puede distinguir, por ejemplo, entre la participación en organizaciones tradicionales y seculares (como Iglesia y partidos políticos) y la participación espontánea y voluntaria en organizaciones sociales. Probablemente, solamente la participación espontánea y voluntaria es la que puede servir de base para generar acción colectiva que sirva como elemento disuasivo de la violencia y el crimen.
206
Por otra parte, el capital social puede ser visto como un acervo a nivel de la sociedad en su conjunto, y es este tipo de capital social el que tiene mayores efectos disuasivos sobre la violencia. Sin embargo, el indicador o índice usado en este estudio capta o mide el capital social, pero con un acervo para un individuo, o se lo puede ver para gru-
También es importante resaltar que los resultados obtenidos con las otras muestras han sido en algunos casos contradictorios o no concluyentes respecto a lo obtenido con la muestra de individuos que habitan las áreas rurales. Por lo cual las lecciones y conclusiones de este estudio no deben ser consideradas concluyentes, y se debe continuar analizando el problema. Especialmente sería interesante contar con un panel de datos que permitan analizar conjuntamente aquellos factores que determinan la violencia y que varían a lo largo del tiempo, así como aquellos factores que varían entre individuos en un mismo periodo de tiempo. Un hecho trascendente es que únicamente ciertos tipos de capital social, especialmente Cohesión Social y en alguna manera Confianza, son los factores que ayudan a disminuir la probabilidad de ser víctima de un crimen violento. Esto último se halla documentado en Lederman et al. (2002) y en Kennedy et al. (1998). Un importante desafío para las investigaciones futuras es generar un índice de capital social capaz de capturar y diferenciar entre el capital social como un acervo a nivel de la sociedad en su conjunto y el capital social específico para ciertos grupos sociales. El índice elaborado en Insfrán Pelozo (2004) puede ser el punto de partida para ello, dado que considera al capital social para los individuos como un acervo. A partir de este índice se puede mejorar ostensiblemente nuestra comprensión de la influencia del capital social, en sus diversas facetas, sobre la violencia.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
pos específicos pequeños, con lo cual puede no ser un elemento capaz de capturar toda la potencialidad disuasiva del capital social para la violencia. De hecho, los resultados en algunos casos son consistentes con que el capital social tiene efectos negativos sobre la probabilidad de ser víctima de un acto de violencia.
12. Implicancias de política Dado que existe evidencia de efectos positivos del capital social sobre la violencia, se deberían implementar programas a nivel comunitario que promuevan la cohe-
207
sión social de los diferentes barrios. De hecho, esto podría actuar como elemento de prevención de la violencia y resultará finalmente en menores costos económicos para la sociedad. En este orden de cosas, las comisiones barriales de prevención de violencia pueden ser consideradas como partes integrantes de un sistema de seguridad barrial, el cual debe estar coordinado con las fiscalías y la policía de cada zona. Adicionalmente, la promoción de actividades con orientación comunitaria (un ejemplo es Big Brother/Big Sister of America) podría generar lazos duraderos entre los integrantes de las comunidades y un mayor sentimiento de pertenencia, con lo cual se facilitaría la formación del capital social útil para prevenir la violencia, el consumo de drogas entre los niños pequeños y, en general, reducir la probabilidad de que existan más delincuentes. Por ejemplo, los programas recreativos comunitarios después de la escuela podrían disminuir la criminalidad local juvenil. Otro posible rol de grupos comunitarios que surgen de mayor cohesión y acercamiento podría ser el de vigilancia a grupos de jóvenes pandilleros, que existen en diversos barrios. Todo esto en estricta coordinación con la Policía y el Ministerio Público. Sin embargo, es importante tener en cuenta que para lograr una drástica reducción de los niveles de inseguridad y violencia, el rol del capital social es complementario a las medidas generales de aumento del número y equipamiento de la Policía y los órganos de seguridad estatales.
13. Conclusiones Se presenta una medida empírica de la influencia del capital social sobre la seguridad y violencia en las comunidades del Paraguay, específicamente en las áreas rurales, a partir de los datos de la Encuesta Permanente de Hogares 2002. Adicionalmente, se estima la interacción del capital social con los otros determinantes de la variable dependiente. 208
En relación a las medidas de política apropiadas para potenciar el capital social, como factor que ayude a disminuir la violencia, se deberían implementar programas a nivel comunitario que promuevan la cohesión social de los diferentes barrios. Esto es de especial importancia para facilitar la labor de la Policía y de los órganos estatales. Adicionalmente, puede ayudar a reducir los costos de incrementar la seguridad y el nivel de vida de las comunidades, a través de la identificación de la cohesión social como factor que reduce el crimen y la violencia y que puede ayudar a una mayor cooperación y complementariedad entre los esfuerzos del sector público y del sector privado.
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
El aspecto resaltante de este estudio es que únicamente la Cohesión Social (una parte del capital social) y en alguna manera la Confianza son factores que ayudan a disminuir la probabilidad de ser víctima de un crimen violento. Sin embargo, los resultados no son concluyentes y se necesita realizar más estudios para lograr una mejor comprensión de las diferentes aristas existentes en la relación capital social y violencia e inseguridad.
Bibliografía
BANCO MUNDIAL: Guía Didáctica para Municipios: Prevención de la Delincuencia y la Violencia a Nivel Comunitario en las Ciudades de América Latina. Región de América Latina y el Caribe LCSFP (Departamento de Finanzas, Infraestructura y Sector Privado), abril 2003. BECKER, Gary: Crime and Punishment: An Economic Approach. Journal of Political Economy. 72(2), pp. 169217, marzo/abril 1968. BECKER, Gary: Nobel Lecture: The Economic Way of Looking at Behavior. Journal of Political Economy. 101, pp. 385-409, 1993. BECKER, Gary: The Economics of Crime. Cross Sections. Federal Reserve Bank of Richmond’s Economic Lecture Series. Fall. 1995. BLOCK, M.K. y HEINEKE, J.M.: A Labor Theoretical Analysis of Criminal Choice. American Economic Review. 65(3), pp.314-25, junio 1975. BOURDIEU, Pierre: The Forms of Capital, en: J.G. RICHARDSON (ed.): Handbook of Theory and Research for the Sociology of Education. Connecticut. Greenwood Press, 1985. 209
COLEMAN, James: Social capital in the creation of human capital. American Journal of Sociology. 94 (supplement), s95-s120, 1988. COTE, S. y HEALY, T.: The Well-being of Nations. The role of human and social capital. Organisation for Economic Co-operation and Development. París, 2001. EHRLICH, Isaac: Participation in Illegitimate Activities: A Theoretical and Empirical Investigation. Journal of Political Economy, 81(3), pp. 521-65, mayo/junio 1973. EHRLICH, Isaac: Deterrent Effect of Capital Punishment: A Question of Life and Death. American Economic Review. 65(3), pp.397-417, junio 1975. HALPERN, D.: Social capital: the new golden goose. Faculty of Social and Political Sciences, Cambridge University. Unpublished. 1999. HALPERN, D.: Moral values, social trust and inequality - Can values explain crime? British Journal of Criminology, 41:236-251. 2001. GREEN G.; GRIMSLEY, M.; SUOKAS, A.; PRESCOTT, M. y JOWITT, LINACRE R.: Social Capital, Health and Economy in South Yorkshire Coalfield Communities. Sheffield Hallam University, 2000. GUERRERO, R.: Violence Prevention - Technical Note 8: Violence Control at the Municipal Level. Sustainable Development Department. IDB, Washington, D.C., 1999. HOLLAND, Jerem y MOSER, Caroline: Urban Poverty and Violence in Jamaica. World Bank, octubre 1997. INSFRÁN PELOZO, José Aníbal: El Capital Social y su influencia en el Empleo y en el Atraso en la Escolaridad. Evidencia de la Encuesta Permanente de Hogares 2002. Manuscrito aún no publicado de la Dirección General de Estadística, Encuestas y Censos. Paraguay, 2004. KENNEDY, B.P.; KAWACHI, I.; PROTHROW-STITH, D.; LOCHNER, K. y GUPTA, V.: Social capital, income inequality, and firearm violent crime. Soc. Sci. Med. 47(1):7-17, julio 1998. LEDERMAN, Daniel; LOAYZA, Norman y MENÉNDEZ, Ana María: Violent Crime: Does Social Capital Matter? Economic Development and Cultural Change, Vol. 50, Issue 3, 2002. RUBIO, Mauricio: Crimen e Impunidad. Tercer Mundo Editores. CEDE, 1999. SAMPSON, R.; RAUDENBUSH, S.W. y EARL, S.: Neighbourhoods and violent crime: A multilevel study of collective efficacy, quoted in: HALPERN, D.: Social capital: The new golden goose, 1999. Faculty of Social and Political Sciences, Cambridge University. Unpublished review, 1997. VÉLEZ, Luis Fernando; ESPITIA, Victoria Eugenia; BANGUERO, Harold; MÉNDEZ, Fabián; MUÑOZ, Edgar; ROTAWINSKY, William; VANEGAS, Gildardo y ESPINOZA, Rafael: Victimización en Colombia: Un análisis exploratorio del caso de la ciudad de Cali. World Bank Project on Crime in LAC Cities, pp. 4-9. Cali, Colombia, octubre 1999. WITTE, Ann Dryden: Estimating the Economic Model of Crime with Individual Data. Quarterly Journal of Economics. 94(1), pp. 57-84, febrero 1980.
210
Pregunta ¿Recurrió Ud. a alguien por esa necesidad? Recurrir allí, ¿le solucionó totalmente el problema o la necesidad? Durante el año 2002, ¿hubo personas que recurrieron a usted para pedir ayuda o asistencia? ¿Respondió Ud. oportunamente a la solicitud de ayuda? ¿Cuántos amigos íntimos tiene Ud.? Durante el año 2002, ¿prestó dinero o algún tipo de bien a otros que no viven con Ud.? ¿Le han devuelto lo que prestó? Según Ud., ¿le devolvieron a tiempo el dinero o el bien que prestó? Según Ud., ¿le devolvieron el dinero o el bien en la misma cantidad o estado que usted prestó? ¿Estuvo conforme con lo que le devolvieron? ¿Cree Ud. que en este barrio/comunidad la gente puede generalmente confiar una en otra, en términos de algún tipo de ayuda? Si un proyecto de la comunidad no le beneficia directamente, pero tiene beneficios para otros en su comunidad, ¿contribuiría Ud. con tiempo para el proyecto? Si un proyecto de la comunidad no le beneficia directamente, pero tiene beneficios para otros en su comunidad, ¿contribuiría Ud. con dinero para el proyecto? ¿Pertenece Ud. a un grupo o asociación? En este grupo o asociación, ¿participa Ud. como ...? Las decisiones que generalmente se toman... Este grupo, ¿se relaciona con algún otro grupo? En su comunidad o barrio, ¿existen diferencias entre las personas que se deben por ej.: a religión, partido político o clase social? En el último mes, ¿se ha reunido con otras personas para comer o beber, en su casa o en un lugar público? En algunas de estas reuniones, ¿participaron personas de diferente partido político? En algunas de estas reuniones, ¿participaron personas de diferente clase social? En algunas de estas reuniones, ¿participaron personas de diferente religión? En la última semana, ¿con qué frecuencia leyó algún periódico o diario, o alguien leyó para Ud.? En la última semana, ¿con qué frecuencia escuchó una emisora de noticias?
Variable CA02 CA04
Sección Redes Redes
CA06
Redes
CA07 CA08 CB01
Redes Redes Confianza y Solidaridad
CB02 CB03
Confianza y Solidaridad Confianza y Solidaridad
CB04
Confianza y Solidaridad
CB05 CB07
Confianza y Solidaridad Confianza y Solidaridad
CB08
Confianza y Solidaridad
CB09
Confianza y Solidaridad
CC01 CC03 CC10 CC12 CD01
Participación Ciudadana Participación Ciudadana Participación Ciudadana Participación Ciudadana Cohesión Social
CD05
Cohesión Social
CD06
Cohesión Social
CD07
Cohesión Social
CD08
Cohesión Social
CE01
Acceso a la Información
CE02
Acceso a la Información
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Anexo 1 Variables utilizadas en el Índice de Capital Social
211
Pregunta En la última semana, ¿con qué frecuencia vio la televisión? ¿Accede a otra fuente de información? ¿Tiene conocimiento sobre programas actuales de gobierno, como por ej. Crédito Agrícola, vacunación, salud materna, infantil, etc.? ¿Sobre cuántas decisiones tiene usted control en su hogar?
212
Variable CE03 CE04 CE06
Sección Acceso a la Información Acceso a la Información Acceso a la Información
CF01
Empoderamiento y Participación Política Empoderamiento y Participación Política Empoderamiento y Participación Política Empoderamiento y Participación Política Empoderamiento y Participación Política
En general, ¿cuánta influencia tiene Ud. para hacer que el barrio sea un mejor lugar para vivir? Durante el año 2002, ¿participó Ud. de alguna reunión de asociación, movimiento o partido político? ¿Votó Ud. en las últimas elecciones municipales?
CF02
¿Se trasladó por iniciativa propia o lo llevaron a través de operadores políticos?
CF10
CF08 CF09
Anexo 2
VÍCTIMA DE UN ACTO VIOLENTO - Muestra conjunta Valor
Frecuencia
Porcentaje
Válidos
0,00
5.843
67,9
67,9
Porcentaje acumulado 67,9 100,0
1,00
2.762
32,1
32,1
Total
8.605
100,0
100,0
Víctima de un acto violento Muestra rural
El capital social y su influencia en la violencia de las comunidades del Paraguay
Víctima de un acto violento Muestra conjunta
VÍCTIMA DE UN ACTO VIOLENTO - Muestra rural Valor
Frecuencia
Porcentaje
Válidos
0,00
2.549
70,3
70,3
Porcentaje acumulado 70,3
1,00
1.076
29,7
29,7
100,0
Total
3.625
100,0
100,0
213
Víctima de un acto violento Muestra urbana
VÍCTIMA DE UN ACTO VIOLENTO - Muestra urbana
214
Valor
Frecuencia
Porcentaje
Válidos
0,00
3.294
66,1
66,1
Porcentaje acumulado 66,1
1,00
1.686
33,9
33,9
100,0
Total
4.980
100,0
100,0