>EDUCANDO
AL CONSUMIDOR:
LO QUE CONSUMIMOS,
¿SON EN REALIDAD ALIMENTOS FUNCIONALES? Ruth Martínez Espinosa, María Paulina Torres Castro Centro de Transferencia de Tecnología e Investigación Agroindustrial CETTIA Universidad Técnica Particular de Loja
El efecto funcional debe demostrarse satisfactoriamente y puede consistir en la mejoría de las funciones fisiológicas o en la prevención de desarrollar enfermedades crónicas relacionadas con la alimentación. Durante los últimos años la sociedad está viviendo una creciente tendencia por todo lo natural, la atención se ha centrado en los efectos beneficiosos de consumir productos alimenticios seguros y saludables. Nuestra mayor expectativa de vida nos lleva, además, a preocuparnos más allá de nuestra adecuada nutrición, también queremos “ganar” salud y bienestar. La fibra dietaria, antioxidantes, probióticos, ácidos grasos poli insaturados (omega 3, omega 6) son los más comunes e importantes ingredientes de una nueva generación de productos alimenticios saludables que cada día
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son más demandados por los consumidores, orientados a disminuir en la población el riesgo de padecer enfermedades crónicas no transmisibles (ECNT) relacionadas con la alimentación, como el cáncer de colon, obesidad, diabetes, enfermedades cardiovasculares, entre otras (1). Los Alimentos Funcionales ganan cada vez más adeptos y participación en el mercado. Según el Consejo de Alimentación y Nutrición de la Academia de Ciencias de los Estados Unidos, los define como “alimentos modificados o que contienen ingredientes que demuestren acciones que
incrementen el bienestar del individuo o que disminuyan el riesgo de enfermedades, más allá de la función tradicional de los ingredientes que contiene”, mientras que el Centro de Información Internacional de Alimentos (IFIC) de la Unión Europea los define como “aquellos productos a los cuales intencionalmente y en forma controlada se les adiciona un compuesto específico para incrementar sus propiedades saludables” (3). Pero, es importante recalcar que los beneficios deben ser demostrados, tal como lo indica la definición operativa FUFOSE (Functional Food Science in Europe) 1999: UE-ILSI