CONEXIONES DE BANDA ANCHA Podemos definir como conexión de banda ancha a la conexión que, sin ocupar toda la banda del medio, si que ocupa todo el ancho de banda asignado, pudiendo compartir este medio con otras comunicaciones. Como ejemplo, en una línea telefónica, el ancho de banda con una frecuencia por debajo de los 4KHz se utiliza para las transmisiones de voz (incluido Fax o datos que utilicen esta banda, como puede ser un módem analógico) y el ancho de banda de frecuencia superior (normalmente hasta los 30MHz) se dedica a datos, siendo este último el que se define como Banda ancha. Una conexión de red no se considera una conexión de banda ancha, ya que la conexión por este medio utiliza la totalidad de este para la comunicación (en ese caso se denomina Banda base). Comúnmente se asocian una serie de características a la banda ancha. Estas características, en lo que a Internet se refiere, son: - Conexión permanente, permitiendo a su vez la utilización de otra banda diferente del medio para otros fines (servicios de voz, TV...). - Conexión mediante TCP/IP de cara al cliente, conectando internamente por medios de alta velocidad del tipo ATM (Asynchronous Transfer Mode). - Ancho de banda dedicado de al menos 1Mbps (aunque por diferentes cuestiones se denominan conexiones de banda ancha a aquellas que van a velocidades superiores a los 256Kbps). - Conexión normalmente asincrónica, en la que la velocidad de bajada (tráfico de datos entre el operador y el cliente) es muy superior a la de subida (tráfico de datos entre el cliente y el operador). - Normalmente se asocia su conexión a una Tarifa plana, en la que se paga una cantidad fija por la conexión y por el ancho de banda contratado, independientemente del tráfico de datos que se realice. EVOLUCIÓN DE LOS USUARIOS DE BANDA ANCHA Año 2003 Mientras que los accesos conmutados aumentaron sus ingresos en dos millones de euros, los accesos de banda ancha crecieron en casi cuatrocientos millones de euros. Un gran número de usuarios de Internet de banda estrecha ha migrado hacia servicios de banda ancha.
Año 2004 El negocio de la banda ancha ha sido el más dinámico en 2004. A nivel mundial se añadieron 50 millones de líneas de banda ancha, la mayoría ofrecidas por ADSL, que es la tecnología de acceso dominante en el mundo. Incluso en EEUU el crecimiento de líneas ADSL a lo largo del año fue superior a las de cable. Similar tendencia se observa en la UE. En España el crecimiento de líneas de acceso con tecnología ADSL (1.008.224 nuevas líneas) y las de cable-módem (329.758 líneas nuevas) crecieron a tasas del 61 y del 64 por 100 respectivamente. Tres cuartas partes del mercado español de banda ancha están siendo suministradas por tecnología ADSL. En este contexto el marco regulatorio está sufriendo un proceso de cambio inducido por el paquete de Directivas 2002 que ha sido implementado en España a nivel normativo a través de la Ley 32/2003, de 3 noviembre, General de Telecomunicaciones, el Real Decreto 2296/2004, de 10 de diciembre, por el que se aprueba el Reglamento de comunicaciones electrónicas, acceso a las redes y numeración (Reglamento de mercados), y el Real Decreto 424/2005, de 15 de abril, por el que se aprueba el Reglamento sobre las condiciones para la prestación de servicios de comunicaciones electrónicas, el servicio universal y la protección de los usuarios. Año 2005 Los clientes de banda ancha aumentaron en 1,6 millones, situándose a diciembre de 2005 por encima de los cinco millones, lo que supone un incremento de más del 47% respecto a 2004, con el consiguiente aumento también de la penetración, que pasó de ocho líneas por cada 100 habitantes en 2004, a 11,6 líneas en 2005. En cualquier caso, la penetración en España está todavía por debajo de la media europea (UE 15), que se situó en 14,46 líneas por 100 habitantes a final de 2005. Esta brecha respecto a Europa se observa también en el incremento de la penetración, que en España fue de 3,7 líneas por 100 habitantes en 2005 y, por tanto, inferior al incremento registrado en la mayoría de países de la UE. Año 2006 Las conexiones de banda ancha aumentaron en el 2006 en 1.655.511 líneas, por lo que el parque de líneas se situó en 6.690.714, que representa el 33% más que en diciembre de 2005. El ritmo de crecimiento fue menor al producido en 2005, que fue del 50%. Este aumento del número de conexiones de Internet de banda ancha hizo que la penetración a finales de 2006 alcanzara las 15 líneas por cada 100 habitantes. Esta cifra todavía está algo por debajo de la media europea (UE25), que en octubre de 2006 era de 15,7 líneas. La penetración por hogar del acceso a Internet de banda ancha, según datos de Eurostat publicados por la Comisión Europea, es del 29% en España frente a la media europea (UE25) del 32%.
Existen en la actualidad múltiples alternativas tecnológicas que constituyen el soporte de las conexiones de banda ancha desde redes fijas: tecnologías ADSL sobre el par de cobre, redes de cable, tecnologías inalámbricas, como LMDS, WiMAX y Wi-Fi, redes ópticas, tecnologías PLC sobre las líneas de suministro eléctrico, etc. No obstante, el mayor avance lo protagonizaron las líneas de ADSL, que en diciembre de 2006 superaron los cinco millones, una cifra un 35,7% superior a la correspondiente al año 2005, gracias a la incorporación de 1.370.000 nuevas líneas. En el caso de las conexiones a través de redes de cable, se contabilizaron 1.435.000 líneas a finales de 2006, el 22,7% más que en el año anterior. La tecnología dominante, un año más, continúa siendo ADSL, al igual que en la mayor parte de Estados miembros de la UE, aunque el cable sigue avanzando. El resto de tecnologías continuaron siendo bastante minoritarias, contándose al cierre de 2006 algo más de 35.000 líneas, fundamentalmente de accesos LMDS, WiMAX y Wi-Fi. En total, a finales de 2006 se contabilizaron 5,2 millones de líneas de acceso a Internet de banda ancha en el segmento residencial, frente a 1,4 millones de líneas en el segmento de negocios.
Año 2007 Favorecido por tendencias positivas en las condiciones económicas generales a lo largo de 2007, el sector de las comunicaciones electrónicas incrementó su facturación mundial en un 6,2%6. Las tendencias generales del sector fueron similares en las distintas áreas del mundo: 1) un alto crecimiento de la telefonía móvil; 2) un aumento de la demanda de conexiones de banda ancha, y 3) una caída en los ingresos de los servicios de voz prestados sobre redes fijas que, sin embargo, se vio compensada por el aumento de la facturación del servicio de banda ancha. En el sector de la telefonía fija también cabe destacar el incremento en 2007 de la base de abonados a servicios de VoIP. Estos abonados representaron el 19% del total de abonados a servicios de banda ancha. En 2007 continuó disminuyendo el número de usuarios de servicios de acceso a internet de banda estrecha y fue notable el aumento de la demanda de accesos de banda ancha, un 24,01%. Como consecuencia de este crecimiento, los ingresos derivados del servicio de banda ancha aumentaron un 17%. La evolución positiva de los servicios por redes móviles y de banda ancha dio lugar a un crecimiento de los ingresos totales del sector en la UE del 5,5%. Este crecimiento es menor que el registrado en 2006. En España se registró un crecimiento de los ingresos totales del 3,8%. En 2007 la banda ancha por redes fijas fue, junto con la telefonía móvil, el motor de crecimiento de los ingresos del sector en Europa. La penetración de este servicio creció significativamente en la UE donde pasó de 16,3 líneas por 100 habitantes en 2006 a 20 líneas por 100 habitantes en 2007. La mayor parte de los países que ya presentaban altas penetraciones de banda ancha crecieron, pero con menor intensidad que en 2006. Por el contrario, los países donde era menor la implantación de la banda ancha tendieron a crecer a tasas mayores que la media europea. En España el parque de líneas de banda ancha aumentó un 20,3%, situando la penetración, según datos de la Comisión
Europea, en 18,3 líneas por 100 habitantes, algo por debajo de la media de la UE En 2007 el 45% de los hogares españoles disponía de acceso a Internet, bien conmutado o bien de banda ancha. El 39,2% de los hogares en España contó con conexión de banda ancha, es decir, aproximadamente 5,8 millones de viviendas9. Esto supuso un aumento del 10% con respecto a 2006. Aun así, la penetración por hogares de la banda ancha en España se situó ligeramente por debajo de la media de la UE, que en 2007 fue del 42%. El servicio de banda estrecha continúa siendo demandado por el 5,8% de los hogares españoles, aunque sus usuarios disminuyen año tras año.