Aquí entre nos 9 2015

Page 1

Gaceta ta de comunicación interna de la DGDC Ciudad Universitaria, 15 de marzo de 2015. Número 9.

Los desafíos de la comunicación de la ciencia

Joaquín Gallo y el eclipse de Sol de 1923

Coloquio Latinoamericano de Cultura Científica y Museos

Universidad Nacional Autónoma de México • Dirección General de Divulgación de la Ciencia

1


Universidad Nacional Autónoma de México Rector

José Narro Robles

Secretario General

Eduardo Bárzana García

Secretario Administrativo Leopoldo Silva Gutiérrez

Coordinador de la Investigación Científica Carlos Arámburo de la Hoz

Dirección General de Divulgación de la Ciencia Director General José Franco

Aquí entre nos Coordinador General Rolando Ísita

Coordinador Editorial Juan Tonda

Coordinador de Información Javier Flores

Redacción

Gloria Valek Leticia Monroy

Diseño

Elizabeth Cruz

Acceso electrónico Esteban López

Foto de portada: C/Producciones Cristales de Naica, Chihuahua

© Aquí entre nos Publicación mensual de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM. Número 9, 15 de marzo de 2015.


Índice

Investigación • Los desafíos de la comunicación de la ciencia • Joaquín Gallo y el eclipse de Sol de 1923 • Cultura científica y museos, imágenes diversas

8 10 12

Comunicación pública de la ciencia • Demostraciones científicas • La máquina Universal

18 20

Medios • Imagen en la ciencia: una radio que se ve • La ciencia hasta tu plantel: Gira con Ciencia visita a jóvenes de bachillerato Exposiciones • Llevan arte y ciencia al aeropuerto • Naica: los cristales que han sorprendido al mundo visitan Universum • Inauguran la exposición Yo soy la nueva ciudad • Dime tus genes y te diré quién eres Presentaciones • Presentan libro sobre alimentación sustentable y hace llamado a transformar la investigación agrícola nacional Cursos • La UNAM va tu escuela propicia el acercamiento de niños al conocimiento • Un libro llamado Tierra

24 28

34 36 38 42

46

50 52



Editorial La DGDC transita por una buena etapa. En los últimos años ha incrementado sustancialmente su número de proyectos en todas las áreas y se están fraguando muchos más. Asimismo, la percepción de nuestra institución en el exterior, tanto a nivel nacional como en Latinoamérica es muy positiva.

Las solicitudes de apoyo para la formación y capacitación de profesionales de

la comunicación pública de la ciencia y de profesores de secundaria y bachillerato se han incrementado y vienen de todos lados. De instituciones del Distrito Federal, de universidades de los estados de la República, de Consejos Estatales de Ciencia y Tecnología y de varios países de América Latina.

La participación, sea como organizadores o colaboradores, se multiplica y cu-

bre todas las áreas de socialización de la ciencia. Esto se da tanto al interior de nuestra propia Universidad, como con otras instituciones, públicas y privadas, incluyendo a las Cámaras de Diputados y Senadores. Me da mucho gusto decirles que nuestra actividad es vasta y tiende a incrementarse.

Esto no sería posible si no fuera por nuestra convicción de compartir con la

sociedad todos los aspectos que constituyen a una cultura científica; tenemos una buena capacidad de concertación, creatividad, y habilidades y conocimientos que hemos desarrollado y fortalecido en el tiempo de vida de nuestra dependencia. Esto además se ha magnificado por el decidido apoyo que hemos recibido de la Coordinación de la Investigación Científica de la UNAM.

Sabemos que la situación del país no es tan halagüeña. Los arreglos y nego-

ciaciones de los países en los mercados financieros, y particularmente de combustibles, han tenido un impacto negativo en las prospectivas presupuestales, De hecho, la prensa ha informado de los recortes al gasto federal en diversos rubros, incluyendo al de ciencia y tecnología. No obstante, considerando los aumentos presupuestales que el sector científico y de educación superior han venido recibiendo los últimos dos años, hace que esta merma en el gasto sea manejable por CONACyT y la UNAM y no debe ser motivo de alarma.

En nuestro ámbito habremos de hacer un esfuerzo para eficientar el uso de

recursos humanos y materiales en todos nuestros proyectos. A fin de cuentas, los componentes más importantes en nuestro quehacer son la creatividad y la actitud positiva hacia el trabajo.

Un saludo afectuoso

José Franco


6


Investigaci贸n

7


Los desafíos de la comunicación de la ciencia Luz Olivia Badillo Especialistas en comunicación pública de la ciencia de la DGDC reflexionan en torno a los casi 50 años de la profesión.

En México la historia de la comunicación pública de la ciencia moderna se puede ubicar en un acontecimiento: el doctor en física Luis Estrada fundó de la revista Física en 1968 y la renombró en 1970 Naturaleza para abarcar otras ciencias; desde entonces, la profesión ha crecido y se ha ramificado; aunque generalmente ha estado ligada a la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), pues desde ahí se gestaron proyectos como el Museo de las Ciencias Universum, el primer museo interactivo en el país. 8

El artículo “Public communication of science in Mexico: past, present and future of a profession” cuenta parte de esa historia, casi desconocida, y reflexiona en torno a la evolución de la profesión. Fue escrito por las doctoras Carmen Sánchez Mora, Elaine Reynoso-Haynes, Ana María Sánchez Mora y Julia Tagüeña Parga, y publicado en la revista Public Understanding of Science (PUS) el 30 de abril de 2014.


La doctora Carmen Sánchez, jefa de Unidad de Formación de Divulgadores de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC), comentó que aunque no se acostumbró durante mucho tiempo publicar en revistas arbitradas las experiencias sobre los productos que se desarrollaban en la universidad, se tienen aportaciones pioneras en diversos campos en la dependencia. “En la década de 1990 se hicieron muchas cosas novedosas, el ejemplo más significativo para mí es la creación y formación de anfitriones. En ese aspecto fuimos innovadores y motivo de inspiración en la formación de jóvenes para otros países de América Latina. Como Universum era un museo universitario podíamos captar estudiantes y tener acceso a la asesoría de los científicos.” La directora del Diplomado en Divulgación de la Ciencia de la DGDC, Elaine Reynoso ha sido testigo de los cambios que ha experimentado la comunicación pública de la ciencia, pues hace más de 40 años era una actividad que las personas –principalmente científicos– llevaban a cabo en su tiempo libre o de manera complementaria al trabajo en sus laboratorios, no se tomaba en serio; ahora no sólo es una profesión que tiene bases teóricas y metodológicas sino que se ha diversificado. “Hoy en día la improvisación es altamente criticable, ya no se valen expresiones como el ‘melate que va por ahí’. No hay que dirigirse a un público hipotético sino hacer investigaciones basadas

Fotos: Natalia Renter

ía N

ieto

en la evidencia. La profesión se está diversificando, se están abriendo nuevos campos, diferentes perfiles, diferentes necesidades. Hay nuevos medios y nuevas razones para comunicar la ciencia. Sin duda, es una profesión con mucho futuro”, dijo la doctora en pedagogía. En el artículo, publicado en la revista más importante de comunicación pública de la ciencia del mundo: PUS, no sólo se hace un recuento histórico de los principales productos y programas de comunicación pública de la ciencia, sino que las autoras señalan tres grandes desafíos para la profesión, los cuales consisten brevemente en: El primero, que la ciencia forma parte de la cultura y por tanto es necesario ampliar los medios para comunicarla e integrar a diversos sectores sociales bajo un modelo glocal de comunicación de la ciencia; el segundo punto tiene que ver con que los programas de comunicación de la ciencia sean vistos a largo plazo y se incorporen al proyecto institucional; por último, que los especialistas en el tema cuenten con el soporte de la institución a la que pertenecen y, por ende, que reciban apoyos para su constante actualización.

9


Foto: Natalia Rentería Nieto

Joaquín Gallo y el eclipse de Sol de 1923 Luz Olivia Badillo Un artículo publicado en Science Communication revive cómo un fenómeno natural y el liderazgo de un astrónomo pusieron los reflectores de la comunidad astronómica internacional sobre México.

El 10 de septiembre de 1923 un evento muy singular provocó que se trasladaran a Yerbanis, Durango, astrónomos investigadores, astrónomos aficionados, políticos y público en general para ser testigos del fenómeno que ocurriría: un eclipse solar. El espectáculo natural no sólo permitió a los especialistas estudiar las coronas solares, que en ese entonces sólo se podían observar en los eclipses totales, también sirvió para conseguir apoyo y reconocimiento nacional e internacional para el Observatorio Astronómico Nacional. A casi cien años de distancia, la doctora Susana Biro, especialista en historia de la astronomía en México, rescató del olvido aquel suceso para darle una nueva interpretación. Los resultados de su 10

investigación fueron publicados en la revista arbitrada Science Communication el 12 de octubre de 2014 con el título “Natural wonders and scientific performance: A mexican eclipse and it uses”. En el estudio, Biro destaca la figura de Joaquín Gallo, el director del Observatorio, quien jugó un papel muy importante para que se llevara a cabo la observación pues lideró los preparativos para trasladar la misión al norte del país. Desde 1919, Gallo y su equipo hicieron cálculos de la trayectoria del eclipse para hacer una deducción de los sitios donde se podría ver totalmente, mapearon las vías férreas y se consultó el estado del tiempo para que fuera posible la travesía.


3

2 19 o, g n ura nD e no rica ame o t n e Campam

Gallo consiguió con la Secretaría de Hacienda recursos para financiar la expedición, intercambió cartas con científicos tanto a nivel nacional como internacional —destacándose la asistencia de astrónomos estadounidenses— y preparó diferentes tipos de artículos para revistas como Popular Astronomy y otras para lectores no especializados, así como boletines de prensa para los medios de comunicación. La logística incluyó descuentos especiales para boletos del tren, así como acceso a agua y comida para los visitantes. El fin que perseguía Joaquín Gallo no sólo era divulgar el conocimiento que escondía ese fenómeno natural sino obtener apoyos para el Observatorio porque en esos años todavía se vivían brotes de violencia por la Revolución Mexicana y el observatorio no era una prioridad para los gobiernos en turno. El eclipse solar fue un éxito que sirvió al científico para obtener un mayor presupuesto para las actividades del Observatorio, se ganó el reconocimiento de la sociedad y el gobierno mexicanos y de la comunidad internacional de astrónomos. Tras tres años de investigación y de trabajar la información para diferentes seminarios y congresos, el artículo que reseña las faenas de Joaquín Gallo salió a la luz. Susana Biro indagó en los documentos del Fondo Observatorio Astronómico Nacional, en las Memorias de la Sociedad Científica Antonio Alzate; también buscó en los periódicos locales El

Porvenir, El Informador y a nivel nacional revisó El Universal, El Demócrata y Excélsior, entre otras fuentes. En torno a este personaje, la académica adscrita a la Dirección Académica de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia comentó que “Gallo era muy consciente de su historia; antes que él no se conservan muchos documentos y después de él tampoco, pero en su gestión conservó 200 cartas y guardaba copia de su correspondencia. Gracias a ello, vemos que el pasado se parece mucho al presente, la historia nos sirve como un modelo, como una manera de aprender a hacer comunicación de la ciencia y puede ayudarnos a mejorar lo que hacemos.” Mirando al pasado, Susana Biro encontró una forma para contribuir a una reflexión de la comunicación de la ciencia. “Empecé a hacer historia porque en cada congreso de la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica se hacían las mismas preguntas: quién debe divulgar, para quién se debe divulgar, cómo divulgar… Se me ocurrió que había que salirse de la práctica para encontrar esas respuestas y para ello me fui al pasado, donde encontré una gama de respuestas y ejemplos que pueden enriquecer la práctica”, dijo.

11


Durante el Coloquio “Cultura Científica y Museos” realizado los días 12 y 13 de febrero, se analizó desde diferentes enfoques el papel de los museos en el fomento de la cultura científica de la sociedad. A continuación se presentan algunas de las imágenes que surgieron en las mesas de trabajo de este evento organizado conjuntamente por la Red de Popularización de la Ciencia de Latinoamérica y el Caribe, la Sociedad Mexicana para la Divulgación de la Ciencia y la Técnica y el Museo de las Ciencias Universum, así como la DGDC de la UNAM.

12


Foto: Arturo Orta

Cultura científica y museos, imágenes diversas Mariana Dolores

La cultura científica La doctora Carmen Sánchez, académica de la Dirección Académica de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, partió de una pregunta: ¿cómo detectar la cultura científica y hasta dónde los museos generan un sistema integrado de valores sociales que promuevan la utilización de la ciencia? Para ello la experta propuso llevar el análisis más allá del individuo, “para hablar de cultura científica necesitamos hablar en un nivel institucional, y en un segundo nivel, de procesos sociales. Existe una teoría que propone analizar los conceptos construidos en sociedad. Esta teoría cuestiona las acciones sociales promovidas por los medios o museos.” Sin embargo, la doctora Sánchez indicó que es necesario saber cómo ocurre

la socialización del conocimiento, y para ello se requiere de mucha investigación y concluyó que se debe reconsiderar la función de los museos de ciencia a la luz de su contribución a la cultura científica.

La experiencia chilena La directora de educación del Museo Interactivo Mirador, en Chile (MIM), Luz Lindegaard, planteó durante su participación en el coloquio Cultura científica y museos realizado en el museo de ciencias Universum, la necesidad de hacer participes a los profesores que, desde su experiencia, no entienden el papel de los museos como parte de la enseñanza complementaria. “En el contexto de la educación chilena, las escuelas están obligadas a visitar lugares de educación no formal; sin embargo los profesores 13


14

Fotos: Arturo Orta


tienen un bajo nivel de preparación por lo que debemos modelar las clases para que ellos puedan reproducir el conocimiento, que deja de ser practico; es decir, enseñar ciencia, no es sólo hablar de ciencia, es hacer ciencia”, señaló la especialista. Con este propósito, la educadora habló de la formación de un programa nacional de formación continua a profesores, cuyo objetivo es enseñar a maestros la trasposición didáctica del conocimiento a manos de expertos en didáctica de la ciencia. Por su parte la directora de educación del MIM, compartió además anécdotas de éxito dentro del museo; aunque señaló que aún falta este tipo de ejercicios en Chile, un país que sólo cuenta con tres museos de ciencia, siendo el MIM uno de los más importantes del país; de ahí su relevancia en la labor de incentivar una cultura científica.

Una mirada colombiana Uno de los ejemplos de cómo los museos sobre ciencia evalúan su impacto en los visitantes es el museo “Parque explora” de la ciudad de Medellín, Colombia. Claudia Aguirre, directora de contenidos mencionó que existen distintas formas de evaluar el impacto de los museos, como cámaras, que acompañan al visitante en su recorrido, cuestionarios antes y después para medir la apropiación de contenidos. Pero sin duda para diseñar estas técnicas de evaluación, la maestra Aguirre dijo que es necesario pensar cómo el museo se plantea a sí mismo.

Parámetros Pero ¿cómo incentivar una cultura científica? ¿Existe algún parámetro para medirla? Según la directora del Centro Morelense de Comunicación de la Ciencia (CeMoCC), Luz del Carmen Colmenero,

sí existen parámetros para poder evaluar la cultura científica, los cuales están relacionados con el pensamiento critico. La especialista relató una experiencia realizada en la que puso a prueba los conocimientos de estudiantes de nivel licenciatura en las áreas de biología e ingeniería. Las pruebas se dividieron en dos: el primero evaluaba los conocimientos conceptuales y prácticos, mientras que el segundo evaluaba la capacidad para llegar a una conclusión y argumentarla.

El papel de los maestros Por su parte, la subdirectora de programas educativos del museo Universum, Mercedes Jiménez, apoyó la discusión sobre la participación de los profesores en las visitas guiadas sobre todo en Universum, y explicó que en el afán de cautivar al alumno hemos convertido al profesor en tan sólo un agente pasivo “(…) que no está presente ante las dudas de los alumnos y tampoco frente a las conexiones que pueden generar al resolver un problema”, por lo que sugirió cambiar el término de visitas guiadas por el de visitas de acompañamiento, en las cuales el profesor puede convertirse en un elemento activo y en un mediador más. Dentro de la evaluación del impacto de los museos en el público, se encuentra un elemento que se debe tomar en cuenta: los mediadores. Sobre este tema la estudiante de divulgación de la ciencia, Carmina de la Luz Ramírez, mostró los resultados de un estudio para determinar la percepción de los maestros hacia los anfitriones del museo Universum y viceversa. Concluyendo que la falta de participación por parte de los maestros abruma a los mediadores, quienes exigen una participación más activa de ese sector.

15


16


Comunicaci贸n p煤blica de la ciencia

17


Foto: Edgar Olguín

Demostraciones científicas* Javier Flores

En la presentación de los resultados de la investigación sobre el paradero de los estudiantes de la Normal de Ayotzinapa dados a conocer el pasado 27 de enero, se afirmó que los jóvenes estudiantes secuestrados en Iguala fueron llevados al basurero de Cocula, donde fueron asesinados, sus cuerpos quemados y los restos calcinados tirados en el río San Juan. Esa es la “verdad histórica”, dijo el procurador, quien en distintos momentos insistió en que los datos contaban con un soporte y validación científicos.

*Publicado en La Jornada el 3 de febrero de 2015. 18


Yo no conozco el expediente completo de este caso, por lo que me baso solamente en lo dicho por el procurador general, licenciado Jesús Murillo Karam, en una conferencia de prensa cuya versión completa se puede ver y escuchar en youtube. Se trata de un trabajo de investigación muy amplio que recurre a diferentes disciplinas. Lo dicho invita a algunas reflexiones, pero inevitablemente despierta también algunas dudas y objeciones en especial en lo que se refiere el respaldo científico de sus conclusiones. Doy sólo algunos ejemplos: El hallazgo de huellas de diesel y gasolina, latas, llantas y otros objetos quemados, restos óseos y dentales e incluso la transformación química de algunas piedras (de carbonato de calcio a calcita) muestran que efectivamente se alcanzaron temperaturas elevadas en algún punto, pero (y esta es una de las limitaciones principales de los resultados) no logran demostrar que eso haya sido un hecho generalizado en la zona de la conflagración. Los datos no son suficientes para afirmar que se alcanzaran altas temperaturas (de entre 900 y mil 600 grados centígrados, según se dijo) de manera homogénea en el sitio señalado. En otras palabras, en este ejemplo, los hallazgos presentados no constituyen una base científica sólida para demostrar que 43 cuerpos hayan sido reducidos a cenizas. Como ya se ha dicho en diversos medios, la identificación del perfil genético de uno de los jóvenes de la Normal de Ayotzinapa en la Universidad de Innsbruck, a partir de un fragmento óseo presumiblemente hallado en el río San Juan, no es una prueba científica suficiente para afirmar que los 42 estudiantes restantes hayan corrido la misma suerte. En este caso se trata de una extrapolación a partir de un solo dato, algo totalmente inadmisible como una prueba científica.

Por otra parte, la acumulación de “pruebas” provenientes de distintas disciplinas, como los datos biológicos sobre el tiempo de crecimiento de algunas plantas, o entomológicos sobre el desarrollo de algunas especies (atribuidas al Instituto de Biología de la UNAM), revelan solamente que algo se quemó y luego creció en tiempos compatibles con la fecha de encendido de una hoguera, pero no dice nada acerca de los hechos centrales, es decir el sacrificio de 43 personas. La acumulación de pruebas de otras disciplinas como las fotográficas, sicológicas, balísticas, arquitectura, ingeniería, audio, tránsito terrestre, contabilidad y hasta traducciones, pueden impresionar a algunos, pero no logran dar un sustento científico a las conclusiones, pues la certeza de un hecho no puede estar basada en el número de disciplinas involucradas, sino en los elementos sustanciales que aporten, que en este caso son muy pobres. En síntesis, como lo saben los estudiantes de cualquier disciplina científica: a) no es posible aceptar que algo es verdadero sólo por el dicho de que está sustentado científicamente y b) no es suficiente que se diga que algo tiene una base científica para probar que realmente la tiene. A propósito de la verdad histórica o la verdad sin adjetivos, en la ciencia se trata más bien de una aspiración, una especie de utopía. Como se sabe especialmente a partir de Khun, una demostración científica por más rigurosa que sea, es a fin de cuentas resultado del consenso que surge en una comunidad científica en un tiempo y circunstancias determinadas, y generalmente se trata de una verdad transitoria pues puede modificarse en la medida que aparecen nuevos hallazgos o pruebas. Hablar de una verdad histórica parece algo excesivo.

19


20


La máquina Universal* Martín Bonfil Olivera

Son raras las películas comerciales protagonizadas por científicos de la vida real. Y es rarísimo que haya dos de ellas exhibiéndose simultáneamente. Sin embargo, junto con La teoría de todo, ya comentada aquí, que narra la vida de Stephen Hawking, hoy está en cartelera El código enigma (2014, Morten Tyldum), basada en la vida del padre de la computación, el matemático inglés Alan M. Turing (1912-1954). El código enigma es protagonizada por Benedict Cumberbatch, conocido por la serie televisiva Sherlock Holmes. En mi opinión, es una gran película: muy bien hecha, con un excelente guión, profunda, estimulante, conmovedora. Una delicia. Y no solo por presentar la vida de uno de los grandes genios del siglo XX, cuyas aportaciones van de la filosofía de las matemáticas y los fundamentos de la computación al desarrollo de las computadoras, e incluso a campos como la biología teórica. También porque presenta la vida torturada de una persona con excepcionales capacidades de pensamiento lógico, pero al mismo tiempo con severas dificultades para relacionarse con los demás. Un individuo que, además, cargaba el estigma de ser homosexual en una sociedad

que criminalizaba dicha orientación sexual. La cinta se centra en el drama de la batalla intelectual por resolver la clave de la máquina Enigma, utilizada por los nazis para encriptar sus transmisiones por radio. Fue el genio de Turing lo que permitió descifrarlo y ganar así la guerra. Nos presenta a Turing como el personaje genial, trágico y revolucionario que realmente fue: nos permite experimentar directamente el triple drama de su soledad, la injusticia de que sus aportaciones durante la guerra no fueran reconocidas, por ser parte de un proyecto secreto, y la infamia de su juicio y condena a la castración química por ser homosexual, que lo llevó al suicidio. Alguno de mis contactos en Facebook comentaba que quizá la veta de hacer películas sobre científicos apenas esté comenzando. No me molestaría ver cintas biográficas sobre Watson y Crick, Linus Pauling, Erwin Schrödinger, Kurt Gödel, Marie Curie, Edison o Fleming. Quizá con un poco de suerte las películas sobre científicos se conviertan en moda. ¡Soñar no cuesta nada! *Publicado en Milenio Diario el 11 de febrero, 2015

21


22


Medios

23


Cumple 10 aテアos al aire el programa realizado por Rolando テ行ita y Vanessa Rendテウn

24


Imagen en la ciencia:

Una radio que se ve

Mariana Dolores

Por allá de 2005, cuando aún los programas de radio científico eran incipientes, surgió un programa que presenta la ciencia en la radio como un cúmulo de historias, que no simplemente eran relatadas bajo la voz de un locutor único, estas tenían una voz activa, y eran por sí solas protagonistas de la acción. En su nombre lleva su propósito, Imagen en la Ciencia, por pura curiosidad, inició hace diez años con un único objetivo (quizá el más importante de entre otros) sorprender. “Y es que la ciencia es por naturaleza rebelde”; y así nos lo dice en entrevista, uno de los primeros conceptualizadores de este programa, Rolando Ísita Tornell. “Yo venía de hacer una radio que provocaba emociones y la clave para este proyecto fue presentar los contenidos quitándole la solemnidad. Uno hace chistes de las cosas que conoce y que entiende; deduzco que el éxito de los programas se reduce a esto”. Aunque la manera en la que se estructuró este programa no era nuevo,

pues ya existía este modelo de revista radiofónica; la manera de presentarla sí. “Las cosas se explicaban con trucos de sonido, para revelar cómo suceden en la naturaleza, y hablábamos sobre temas que no se sabían más que en círculos cerrados”, comentó el conductor de dicho programa quien advirtió que a lo largo de este tiempo no ha habido cambios en la estructura. Una de las secciones del programa que derriba las barreras del pensamiento sobre que la ciencia es inalcanzable, complicadísima y que sólo la pueden llevar a cabo los genios, son las charlas con los investigadores, pues según Ísita Tornell, esto permite acercar la ciencia al radioescucha, “al hablarle de tú al doctor se hace la ciencia más cercana, y la gente puede pensar que la ciencia es suya; y lo es, por su universalidad, todos podemos hacer ciencia”. Así que después de diez años de transmisión en una empresa privada, existen ciertos elementos que deben de tomarse en cuenta para el éxito de un 25


26

En la foto, Ro

lando テ行ita

En la foto, Vane ss a Ren dテウn


proyecto sobre divulgación de la ciencia en la radio: “(…) primero, hay que tener muy claro que no hay que confundir los medios públicos de comunicación con las aulas, porque no lo son; así que no pretendamos enseñarle nada al público. Los mexicanos tienen la obligación de asistir a la escuela, en cambio no tengo que sintonizar la radio, lo hago porque me da la gana. En segundo lugar, nosotros no definimos el tipo de público al que vamos dirigido; sino el nivel, ya que el promedio de escolaridad son los 8 años de estudio, pues apuntamos a un público de segundo grado de secundaria hacia arriba, y así se puede definir el tratamiento de los contenidos”. Por su parte, la productora del programa, Vanessa Rendón, comentó que una de sus tareas principales es darle elementos a la población para que puedan tomar posturas acerca de temas importantes, como el calentamiento global o los alimentos transgénicos, pues para que el país avance se necesita ciencia y educación. Así, la decisión de los temas solo está basada en la relación del periodismo con la ciencia. “Hay dos cuestiones que se deben trabajar: Divulgar la ciencia, hacer accesible su conocimiento, que los ciudadanos conozcan qué se está haciendo y hacer atractiva la información, pues existe una agenda setting que es la teoría donde los medios marcan qué es importante para ellos. Entonces hay que hacer que los temas sean interesantes para los medios y que les den espacio”, dijo Vanessa, quien señaló que el hecho de que este programa lleve diez años en una radio comercial como lo es Grupo Imagen, significa que la ciencia sí vende.

Entre sus satisfacciones a lo largo de estos años, Rendón indicó la desmitificación, eliminar la idea de que el quehacer científico es aburrido, y además busca motivar a jóvenes periodistas para que incursionen en la labor de la comunicación de la ciencia. Finalmente, entre las experiencias de Rolando Isita, que le dejan buen sabor de boca; se encuentra haber visto el nacimiento del programa justo cuando se necesitaba crear una oficina de información pública, en el Instituto de Astronomía, pues este evento significó el inició de la institucionalización de la divulgación de la ciencia lo que provocó que se replicara en otros institutos de la UNAM. En segundo lugar, poder entrevistar a casi todos los rectores de la UNAM y profesores eméritos. Por último, avistar que el nacimiento del espacio en la radio se dio por una discusión entre la ciencia y la pseudociencia. Sin duda, Imagen en la Ciencia, por pura curiosidad, es un programa de radio que sorprende, y comunica la ciencia. Después de todo, como bien diría Rolando Isita: “¡Disfrútalo, no te haremos un examen! Y si aprendes algo, bueno, eso es un efecto colateral del programa.” Albricias por un programa que en febrero de 2005 dio sus primeros pasos, fuertes y constantes.

27


La ciencia hasta tu plantel: Gira con Ciencia visita a jóvenes de nivel bachillerato

El programa recorre en promedio una escuela por mes llevando hasta 90 actividades que preparan y presentan diversos entidades de la UNAM.

28

Gira con Ciencia pronto comenzará a llevar la ciencia al resto de la ciudad de México de manera gratuita.

Fotos: Cortesía de Gira con Ciencia

Carla Ramírez Torres


Con el propósito de acercar la ciencia a los jóvenes, un grupo de la Dirección General de Divulgación de la Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México (DGDC/UNAM) organiza charlas, conferencias, exposiciones, obras de teatro, talleres, concursos y cuentos, entre otros, en los Colegios de Ciencias y Humanidades (CCH) y las preparatorias de la UNAM. En entrevista José Luis Vázquez, Subdirector de Producción de medios de la DGDC, explicó que Gira con Ciencia nació para cumplir una de las misiones de la UNAM: “El desarrollo de una cultura científica en el país, por medio de proyectos conjuntos con otras instituciones y con la utilización de todos los medios de comunicación, exposiciones temporales y la colaboración con museos afines. En ese sentido, la difusión de la ciencia que se realiza en la UNAM se convertirá en un instrumento educacional, con el fin de acrecentar la cultura científica del país”. El recorrido por los planteles inició en agosto de 2014 y en promedio se visita una escuela por mes llevando hasta 90 actividades que preparan y presentan diversas dependencias de la comunidad científica de la UNAM entre las que destacan: Universum, Museo de la Luz, el Programa Universitario de Alimentos, el Programa Universitario de Medio Ambiente, el Centro de Ciencias de la Atmósfera, la Facultad de Psicología, el Instituto de Biología y el Instituto de Física, entre otros. El subdirector de Producción de Medios de la DGDC, explicó que las propuestas se construyen en conjunto con el plantel que van a visitar ya que “la mejor manera de informar a los jóvenes es hacerlo mediante quienes conocen su propia comunidad estudiantil.”

Los talleres y charlas propician –empleando un lenguaje muy accesible para la comunidad estudiantil– que los jóvenes hagan conciencia de su entorno. Una de las actividades que han tenido mayor éxito ha sido la obra de teatro Me látex mucho, presentada por Universum; también el Programa Universitario de Alimentos ofrece un taller para que los jóvenes aprendan cómo alimentarse de manera saludable; el Programa Universitario de Estudios de Genero ofrece un taller sobre violencia de género y la Facultad de Medicina ofrece charlas sobre adicciones.

Una Gira por la ciudad José Luis Vázquez explicó que el reto de Gira con Ciencia es cerrar el recorrido por las escuelas de nivel bachillerato de la UNAM y adelantó que ya se está trabajando en el siguiente reto: un camión que pretende llevar no sólo a los planteles de la UNAM las actividades de difusión científica, sino salir al resto de la ciudad llevando demostraciones, exposiciones, obras de teatro y muchas actividades más con el objetivo de difundir la ciencia no sólo para los estudiantes de la institución, sino también para los ciudadanos en general y de manera gratuita. “La idea de este programa es acercar parte de Ciudad Universitaria a los jóvenes de planteles más lejanos. La UNAM te ofrece miles de cosas y cada vez se suman más exposiciones de cada vez más institutos. Es un trabajo conjunto entre investigadores y las escuelas, y es muy gratificante que compartan esa pasión por su labor. Estamos muy emocionados porque para mediados de año estará listo este camión: es la UNAM en movimiento, la ciencia en movimiento”, finalizó José Luis Vázquez. 29


Cristales de Naica en Chihuahua 30


31


32


Exposiciones

33


Marco Polo Pé rez Fotos: Cortesía de

En el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México se muestran las fotografías ganadoras del Concurso de Fotografía Científica organizado por la Dirección General de Divulgación de las Ciencias de la UNAM.

34


Llevan arte y ciencia al aeropuerto Luz Olivia Badillo

Esperar un vuelo en el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (AICM) ya no tiene por qué ser aburrido, los viajeros pueden visitar mientras tanto el Centro de Exposiciones, ubicado entre las puertas 4 y 5 de la Terminal 1, donde se muestran 89 fotografías que han participado en el concurso de Fotografía Científica que organiza la Coordinación de Investigación Científica y la Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC) de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM). Las imágenes invitan a los cerca de 250 mil pasajeros que transitan a diario por las dos terminales a conocer de cerca el trabajo que se hace en los laboratorios de los institutos de la UNAM y apreciar la belleza que esconde la naturaleza. Hay fotografías de muy diversas temáticas, desde astronomía hasta zootecnia. Las hay de animales u objetos de tamaño real y otras del micro y macrocosmos, mundos que no se pueden observar a simple vista, sólo con poderosos microscopios y telescopios. Ese conocimiento generado ahora está al alcance de la sociedad. El coordinador de la Investigación Científica de la UNAM, Carlos Arámburo, explicó que las imágenes son una selección de tres concursos de fotografía que se han realizado hasta la fecha y es producto del material con el que trabajan investigadores y alumnos de posgrado; las fotos han sido en primera

instancia objeto de investigación y luego han servido para ser apreciadas por su componente estética. El doctor José Franco, director general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM y coordinador del Foro Consultivo Científico y Tecnológico expresó su agradecimiento a las autoridades del AICM por haber aceptado a la muestra itinerante: “arte y ciencia son los dos pilares del conocimiento y deben ser los dos pilares de la educación formal, dentro de las aulas, y la educación informal en exposiciones, museos, planetarios... Es una gran delicia que se muestre en el aeropuerto porque por aquí caminan millones de personas”, dijo. Por su parte, el poeta y divulgador Nemesio Chávez Arredondo, curador de la muestra, parte de la premisa de que “la fotografía no es una imagen muda. Si se mira con cuidado, pronto suena el rumor de las voces y el eco de los pensamientos que apresó su parpadeo. Si se la escucha más cerca, se llenará de sones y retumbos de antiguos comienzos, podría incluso herirnos con su estruendo.” Al acto inaugural asistió el director Adjunto Comercial y de Servicios del AICM, Carlos Hugo Álvarez Luna quien consideró la muestra “un disfrute para la vista”. La exposición Fotografía Científica se podrá visitar hasta el 27 de marzo.

35


36


Naica: los cristales que han

sorprendido al mundo visitan Universum Carla Ramírez Torres

El portavoz del proyecto hace un llamado a preservar la cueva, la cual actualmente no cuenta con garantías legales que la protejan de una explotación industrial.

Una de las maravillas con las que cuenta México se encuentra al norte del país y es uno de los lugares que necesitan mayor atención para su preservación. La cueva de Naica, en el estado de Chihuahua, se ha convertido en uno de los descubrimientos geológicos más importantes del mundo. Durante la inauguración de la exposición temporal Naica, viaje a la cueva de los cristales, llevada a cabo este 18 de febrero en el museo de ciencias Universum, Gonzalo Infante, director de C/Producciones y de la película Naica, hizo una petición para que todos los mexicanos “empujemos un poco porque Naica se preserve. Es un lugar que legalmente no tiene alguna garantía; hay que hacer que estas leyes tomen en cuenta las cuevas y salga de manos de una explotación industrial. Hagamos que Naica sea de los mexicanos”, insistió. Por su parte el director general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM, José Franco, explicó que esta exposición

que cuenta con 36 fotografías y ejemplares de cristales de selenita de la colección Proyecto Naica y del Museo de Geología de la UNAM, es un trabajo de colaboración muy importante, que dio inicio hace 10 años y ahora muestra los grandes resultados. La muestra incluye también trajes especiales que utilizaron los investigadores para el estudio de la cueva que se encuentra a 300 metros de profundidad, los cuales los protegían de una temperatura promedio de 50°C y una humedad de casi 100%, condiciones que no permiten que el ser humano sobreviva por más de dos horas en la cueva. El proyecto Naica es una iniciativa de un grupo mexicano multidisciplinario integrado por científicos, técnicos, exploradores y artistas, que también participaron en la realización de la película Naica, la cual se proyectará durante las seis semanas que la exposición visitará el museo.

37


“Cuando se habla de sustentabilidad pocas veces pensamos en el papel de la ciudadanía para mantenerla y generarla en todos sus actos”. José Franco

38


Inauguran la exposición

Yo soy la nueva ciudad Carla Ramírez Torres

En México, 7 de cada 10 habitantes viven en ciudades; por ellos, resulta de gran importancia entender su funcionamiento, transformación e impactos. La exposición Yo soy la nueva ciudad inaugurada el miércoles 4 de febrero en el museo de las ciencias, Universum, destaca la importancia de la transformación hacia una ciudad sustentable. El director general de Divulgación de la Ciencia de la Universidad Nacional Autónoma de México, destacó durante la ceremonia inaugural que la sustentabilidad, ecología y las ciudades inteligentes son parte del futuro. Esta exposición tiene una dimensión social de gran relevancia. “Generalmente cuando se habla de sustentabilidad le damos un visto ecológico, y pocas veces pensamos en el papel de la ciudadanía en mantener y generar la sustentabilidad en todos nuestros actos”, declaró. El también director de Divulgación de Ciencia de la UNAM, resaltó la importancia que ha tenido la relación con Francia en el tema de divulgación de la ciencia y espera sea el primer paso para futuras colaboraciones con el Instituto Francés de Investigación para el Desarrollo en México (IRD, por sus siglas en francés).

Por otra parte, Alessandro Rizzo, representante del IRD, explicó que esta exposición es el resultado de una larga colaboración entre la UNAM y su organismo, en especial la investigación científica tiene un papel muy importante en la participación y definición de políticas públicas: “por esta razón estamos desarrollando un programa de investigación sobre las dinámicas urbanas y metropolitanas, las cuales incluyen temáticas clave como la política habitacional, el transporte e incluso la gobernanza de la ciudades”. En la inauguración, Alejandro Nieto, Subsecretario de Desarrollo Urbano y Vivienda de la Secretaría de Desarrollo Agrario, Territorial y Urbano (SEDATU), declaró que la política del gobierno federal está atrasada y que está señalada en documentos de planeación nacional, la cual plantea la necesidad de tener mejores ciudades que sean sustentables, productivas, competitivas, influyentes, seguras y resilientes frente a los temas de cambio climático. También estuvieron presentes la embajadora de Francia en México, Maryse Bossier y Carlos Arámburo de la Hoz, coordinador de la Investigación Científica 39


Fotos: Arturo Or

ta

40


de la UNAM, quien subrayó que uno de los enfoques es involucrar a niños y jóvenes en el ámbito de desarrollo sustentable, “sembrar esa semilla y hacerles entender de manera clara, sencilla e incluso lúdica la posibilidad de concebir cómo generar conductas, enfoques, aproximaciones, decisiones para el desarrollo de su vida en el entorno individual, familiar y colectivo.” El tema de desarrollo sustentable es central para la UNAM y se refleja con la creación del Centro del Cambio Global y Sustentabilidad en el sureste de México, así como en la reciente aprobación de la transformación del Centro de Investigación en Ecosistemas al Instituto de Investigación en Sistemas en Sustentabilidad y una reunión donde se aprobó el programa de maestría y doctorado en Ciencias de la Sustentabilidad, entre nuevas acciones. De igual forma, la UNAM, la SEDATU y el IRD han unido esfuerzos para la difusión de esta exposición a propósito del acuerdo sobre el desarrollo urbano sustentable firmado por la SEDATU y el Ministerio de Vivienda e Igualdad de Territorios y Ruralidad, durante la visita de estado en México que realizó el presidente de Francia, François Hollande el año pasado, con el objetivo de concretar acciones de investigación y divulgación científica a favor de la ciudad sustentable. Durante el recorrido por la nueva exposición en el museo de ciencias, Catherine Paquette Vassalli, urbanista, investigadora del IRD, y coordinadora científica de esta exposición, explicó que “el punto de partida del trabajo es

que hoy en día escuchamos cada vez más del tema de ciudad sustentable (...) lo que queremos mostrar es que ahora y aquí podemos avanzar y transitar hacia ciudades más transitables. Esta exposición es realista y optimista al mismo tiempo”, finalizó. La exposición está compuesta por tres secciones: la primera muestra el proceso de construcción del concepto de desarrollo sustentable y proyectos que se están desarrollando en el presente; la segunda sección muestra cómo funciona una ciudad, los actores que la componen, cómo interactúan, entre otros; la tercera, explica los caminos hacia una ciudad sustentable, proyectos que existen y pueden utilizarse actualmente. El próximo 23 de febrero Yo soy la nueva ciudad, comenzará un recorrido por provincia, iniciando por Campeche, donde el IRD comenzará una primera etapa de cooperación franco-mexicana para elaborar un proyecto de ciudad piloto en ese estado.

41


42 42


Dime tus genes y te diré quién eres El Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT) realizó del 18 al 23 de noviembre de 2014 la 21º Semana Nacional de la Ciencia y la Tecnología. En esta ocasión el evento se realizó en la 1º sección del Bosque de Chapultepec en la Ciudad de México donde, además de otros participantes, asistieron diversos centros y museos de ciencia. La Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC) participó con varias actividades, una de ellas fue la exposición Dime tus genes y te diré quién eres realizada por la Dirección de Exposiciones y por el Instituto Nacional de Medicina Genómica (INMEGEN). La exposición consta de dos secciones: la primera tiene la intención de introducir al visitante en el tema de la genómica por lo que, a través de distintos equipos interactivos, se presentan algunos de los siguientes temas: cómo son las células humanas, dónde está el ADN, qué son los genes y cómo pequeños cambios o mutaciones en uno o varios genes dan lugar a distintas características o padecimientos. Existe un modelo, de casi 3 metros, para mostrar la estructura de la molécula del ADN.

En animaciones 3D se representan los procesos de replicación, transcripción y traducción del ADN. Además, en un multimedio, el visitante podrá completar una secuencia de ADN e interpretar la música del ADN. En la segunda sección existen equipos interactivos que invitan al visitante a reflexionar sobre su estilo de vida, ya que aunque los genes determinan muchas de nuestras características físicas y programan nuestra susceptibilidad a enfermedades (ciertos tipos de cáncer, obesidad, diabetes) puede ser mitigada por factores como la alimentación, el ejercicio, evitar el tabaco, etc. Utilizando la poesía slam se presenta el tema de genómica de la población mexicana. También hay una zona de demostraciones donde con un sketch se realiza la extracción del ADN de la fresa y se habla de la investigación de la medicina genómica en México. Para la realización de Dime tus genes y te diré quién eres se obtuvo financiamiento del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (CONACYT).

43


44


Presentaciones

45


“El problema es el abandono de la investigación agrícola del país desde hace 45 o 50 años” dijo José Sarukhán durante la presentación del libro Alimentos sustentables: de la tierra a la mesa en donde el coordinador de la Comisión Nacional para el Conocimiento y uso de la Biodiversidad (CONABIO), estuvo acompañado por el director general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM José Franco, la tarde del pasado jueves 5 de febrero en el museo de ciencias, Universum. 46


Presentan libro sobre alimentación sustentable y hacen llamado a transformar la investigación agrícola nacional Carla Ramírez Torres La sustentabilidad en el campo y la alimentación cada día han estado más al frente de los medios y este libro está escrito para que la ciudadanía se apropie del libro, expresó el también director general de Divulgación de la Ciencia de la UNAM. Marta Elena García y Guillermo Bermúdez, periodistas y autores de la obra, explicaron que los problemas de salud como diabetes, hipertensión, colesterol, entre otros, se han multiplicado de manera alarmante en los últimos años, lo que los llevó a realizar una investigación que ahonda no sólo en los alimentos industrializados, sino en la agricultura moderna que está llena de plaguicidas y otros productos dañinos para los consumidores. A lo largo de 6 capítulos se observa un recorrido por la alimentación mexicana desde nuestros antepasados, hasta las grandes corporaciones que han desplazado a los alimentos frescos. “Existen nuevas formas a través de una agricultura sustentable. Todo comenzó cuando irrumpió en el campo mexicano la Revolución Verde. La milpa, uno de los sistemas de cultivo más sustentables del mundo, fue desplazada por la sobreexplotación agraria en los monocultivos, con su caudal creciente de agroquímicos y tractores”, expuso Marta Elena García. Por otro lado, Luis Alberto Vargas Guadarrama, destacado investigador del Instituto de Investigaciones Antropológicas, recordó que los antiguos mayas pudieron

resolver su problema alimentario con toda una cultura que hasta hoy es utilizada. ”Ellos aprovecharon sus tierras con capital humano, construyeron canales y crearon su sistema. También resolvieron el abasto de alimentos para su vida y ahora nos sentimos atados de manos por los productos industrializados”, declaró. Por su parte, Héctor Bourges Rodríguez, director de nutrición del Instituto Nacional de Ciencias Médicas y Nutrición “Salvador Zubirán”, alertó que la población de ahora come 90 gramos de una alimentación basada en verduras, cuando lo deseable es consumir 400 gramos diarios. Finalmente José Sarukhán, ex rector de la UNAM, hizo un llamado a valorar y aprovechar la diversidad biológica, ecológica y natural de nuestro país y resaltó que “lo que hay que defender es nuestro elemento de adaptación (…). Si no se cambia la investigación agrícola en el país, no tendremos soberanía alimentaria”. Respecto al tema de la sustentabilidad alimentaria, el doctor Franco expuso que dentro del Foro Consultivo Científico y Tecnológico se encuentra el Consejo Nacional Agropecuario y ellos tendrán que dar la pauta para que sea posible adoptar un nuevo modelo de agricultura. “En este momento se están estableciendo los proyectos, aunque aun no hay nada concreto, al ser parte del Foro sabremos de eso muy pronto” finalizó.

47


48


Cursos

49


La UNAM va a tu escuela propicia el acercamiento de niños al conocimiento Carla Ramírez Torres El programa dirigido por Guillermina de Francisco en el que participan estudiantes, profesores e investigadores se propone llevar el conocimiento de la universidad a las escuelas primarias.

Nivel educativo Porcentaje de mexicanos sin el nivel de competencia básico diversas áreas educativas

En 2012 México reveló un rezago de dos años de escolaridad de acuerdo con los resultados del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes. Matemáticas

Mejor nivel

1

Lectura

De 65 lugares México xico obtuvo los siguientes lugares gares :

52 en comprensión prensión de lectura 53 en matemáticas temáticas 55 en ell área ciencias

Mayores deficiencias

65

Es un programa que apoya la educación básica a través de conferencias de divulgación científica 24 escuelas primarias de la delegación Coyoacán

50

Ciencias


De mo str aci ón en la

plát ica “ un co che d ísica. e aire”, del Dr. Héctor Riveros del Instituto de F

Dentro de las actividades que realiza la Dirección General de Divulgación de la Ciencia (DGDC), nace La UNAM va a tu escuela, un proyecto piloto que promete el acercamiento de niños de educación básica y sus profesores con el conocimiento y las investigaciones que se realizan en la Universidad Nacional Autónoma de México. La portavoz de este proyecto, Guillermina de Francisco, encargada de Programas al exterior de la DGDC, explicó que la idea surgió por el programa Jóvenes hacia la investigación, el cual tiene como propósito acercar a los estudiantes y profesores de bachillerato con investigadores en su labor cotidiana, pero ahora son los universitarios los que van a las escuelas buscando a los más jóvenes. Lo que ha comenzado como un programa piloto ha impulsado a gran número de investigadores, profesores y alumnos a presentar sus trabajos de manera clara y didáctica a niños de educación primaria. De acuerdo con los resultados del Programa Internacional para la Evaluación de Estudiantes (por sus siglas en inglés PISA), en 2012 México se colocó en el lugar 53 de 65 en el área de matemáticas; en el lugar 55 en ciencias, mientras que en comprensión de lectura en el lugar 52. Lo anterior revela un rezago de dos años de escolaridad en el país. Por esta razón, programas como La UNAM va a tu escuela se convierten en una magnífica opción para apoyar a la educación básica, a través de conferencias y otras actividades de divulgación científica.

La prueba PISA también mostró que el 55% de los mexicanos no alcanza el nivel de competencia básico en matemáticas, el 47% en ciencias y el 41% en lectura. Lo anterior es un tema que requiere la intervención de programas que propicien soluciones a este problema, como el que se planteó en la Agenda Ciudadana de Ciencia, Tecnología e Innovación, consulta que se llevó a cabo entre 2012-2013 con el objetivo de crear políticas públicas para el desarrollo de México hacia el horizonte 2030, basadas en la investigación científica, en la cual el tema educativo ocupó el primer lugar entre las preocupaciones de la población que fue consultada. Sobre La UNAM va a tu escuela, Guillermina de Francisco expresó que: “Este proyecto es para crecer. Se tocan temas como salud y nutrición, cuidado del medio ambiente, matemáticas, lectura y comprensión y otros temas como astronomía, minerales, dinosaurios, etcétera. Todos son temas que se enlazan unos con otros. Se destaca la importancia de la multidisciplina y se hace saber que todos somos una misma ciencia, lo cual es crucial para la educación”. Hasta ahora este proyecto se ha desarrollado en 24 escuelas primarias de la delegación Coyoacán, y se espera que para 2015 se eleve considerablemente el número de planteles visitados.

51


19° Curso de Divulgación Científica para profesores de bachillerato, secundaria y periodistas.

Los cursos: una herramienta para que los profesores hagan de sus clases de ciencia algo atractivo, sorprendente e interesante.

52


inscritos 80 profesores

Un libro llamado Tierra Los profesores están llamados a cumplir importante papel para impulsar una cultura científca, frente a las supercherías, pseudociencias y falsas creencias. El sábado 7 de febrero inició la 19ª edición del Curso de Divulgación Científica para profesores de bachillerato, secundaria y periodistas científicos, organizado por el área de Educación No formal de la DGDC. Esta ocasión con el tema “Un libro abierto llamado Tierra”. El curso fue inaugurado con una sencilla y breve ceremonia en donde el director académico de la DGDC dio la bienvenida a los 80 profesores inscritos, y destacó el importe papel de los mentores para impulsar en nuestra sociedad, a través de los estudiantes, “una cultura basada en los conocimientos producidos por la ciencia, frente a la avalancha de pseudociencias, charlatanería y falsas creencias a la que nos someten los medios de comunicación con afanes de grandes audiencias”. Asimismo destacó la herramienta para los maestros que pueden cumplir los cursos de divulgación

de la ciencia como “Un libro llamado Tierra”, a fin de que las materias de ciencias naturales sean atractivas, sorprendentes e interesantes para sus discípulos. “Un libro llamado Tierra” es un curso que se impartirá durante ocho sábados desde el 7 de febrero hasta el 18 de abril, en la Sala Juárez de la DGDC, de las 10:00 a las 14:00hs. La primera sesión la abrió la astrónoma y divulgadora de la ciencia, Julieta Fierro, con el tema “La Tierra desde el espacio… una exploración cronológica”, echando mano de sus innumerables objetos ilustrativos e imágenes. La segunda parte de la primera sesión estuvo a cargo de Gustavo Tolson Jones, del Instituto de Geofísica, con el tema “Armando un rompecabezas de los continentes”. Los cursos de divulgación de la ciencia para profesores de bachillerato y secundaria son organizados año con año, desde hace 19 años, con el entusiasmo, dedicación y profesionalismo de Serafín Pérez y Eduardo Contreras, bajo la supervisión de la Coordinadora de Educación No Formal, María del Carmen Sánchez Mora. Los cursos se llevan a cabo mediante una cuota que cubren los profesores. Este año cinco fueron becados y 75 cubrieron su cuota.

53


54


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.