DE DÓNDE VIENEN LAS COSAS

vienen las cosas De dónde

De dónde De dónde vienen las vacunas vienen las vacunas

¿Has escuchado hablar sobre las vacunas? ¿sabes qué son y de dónde vienen? A continuación, te explicaré cómo se fabrican y su importancia.

La vacunación es la forma más eficaz de prevenir las enfermedades infecciosas; la inmunidad generalizada debido a la vacunación es en gran parte responsable de la erradicación mundial de la viruela y la restricción de enfermedades como la poliomielitis, el sarampión y el tétanos en la mayor parte del mundo.

Una vacuna es un compuesto que te da inmunidad contra una enfermedad, ya que estimula la producción de anticuerpos que se encuentran en tu organismo, los cuales son empleados para identificar y atacar elementos extraños tales como bacterias y virus.

Las vacunas se fabrican en laboratorios usando los virus o bacterias que causan las enfermedades, pero de una manera que no dañan a las personas. Al contrario, estos virus o bacterias debilitados, muertos o modificados hacen que el sistema inmunológico de las personas desarrolle anticuerpos.

Los anticuerpos son una sustancia que está en la sangre para combatir una infección de virus o bacterias que afecten al organismo.

Desarrollar una vacuna segura y eficaz lleva tiempo, pero gracias a la inversión sin precedentes en investigación y desarrollo y a la cooperación global, los científicos han podido desarrollar una vacuna contra la COVID-19 en un tiempo récord, sin dejar de mantener rigurosos estándares de calidad. En la actualidad se están desarrollando más de 200 posibles vacunas (56 en desarrollo clínico y 166 en desarrollo preclínico), y muchas de ellas se están probando en ensayos clínicos.

El elemento estimula el sistema inmunológico del cuerpo para que lo reconozca como una amenaza, lo destruya y guarde un registro del mismo, de modo que el sistema inmune puede reconocer y destruir más fácilmente cualquiera de estos microorganismos que encuentre más adelante.

Las vacunas se usan con carácter profiláctico. Es decir, para prevenir los efectos de una futura infección por algún patógeno natural o "salvaje".