LOS PLANETAS EXTERIORES
Los planetas exteriores son aquellos que estan situados mas alla del cinturon de asteroides, es decir Jupiter, Saturno, Urano y Neptuno.
Notese que, desde la redefinicion de planeta de 2006, Pluton no se considera planeta.Sino que se considera planeta enano o planetoide
Sus caracteristicas mas importantes son: - Giran muy deprisa, periodos de rotacion en torno a las 10 horas -Son básicamente gaseosos, careciendo de superficie sólida. Urano y Neptuno poseen núcleos internos formados por hielos primigenios a gran presión y temperatura y en estado líquido. •Disponen de fuertes campos magnéticos. •Poseen muchos satélites. •Poseen sistemas de anillos a su alrededor.
Los planetas gigantes de nuestro Sistema Solar estan formados por profundas atmosferas de hidrogeno y helio y que llegan a constituir la mayor parte de la masa de Júpiter y Saturno, además de que ocupan una tercera parte de los planetas Urano y Neptuno.La mayoria de planetas extrasolares descubiertos hasta la fecha encajan dentro de las características principales de masa y composición de los planetas exteriores de nuestro sistema solar, si bien sus órbitas son mucho más cercanas a su estrella principal hablándose en ocasiones de júpiteres calientes.
JUPITER Sin embargo, en los planetas gigantes del sistema solar, los procesos meteorológicos pueden durar décadas. El récord lo tiene la Gran Mancha Roja de Júpiter, que fue observada por primera vez, como muy tarde, en 1830 –y probablemente mucho antes. Este sistema tormentoso ovalado es lo bastante grande para tragarse dos Tierras y los vientos de su perímetro soplan con una fuerza varias veces superior al huracán más potente registrado en la Tierra. Como demuestra la Gran mancha Roja, Júpiter es un mundo de superlativos. Es el planeta más grande de nuestro sistema solar (lo bastante grande para tragarse más de 1,300 Tierras, y más grande que algunos tipos de estrellas) y más masivo que los demás planetas y lunas del sistema solar combinados. Rota más deprisa que cualquier otro planeta, y ofrece el conjunto de lunas más interesante y numeroso. Sin embargo, a pesar de su gran tamaño y de su brillo en el cielo nocturno de la Tierra, queda mucho por comprender en Júpiter. Los científicos tienen mucho que inferir a partir de las observaciones de los vehículos espaciales que han visitado el planeta. Gran parte del misterio se centra en el interior de Júpiter. A partir de la masa, densidad y campo magnético del planeta, los científicos conjeturan que probablemente tiene un núcleo denso de roca y metal al menos 10 veces más masivo que el de la Tierra. El núcleo está rodeado de una espesa capa de hidrógeno. La gravedad de Júpiter presiona tanto en esta capa que funciona como un metal. El hidrógeno metálico probablemente rota a una velocidad diferente que el núcleo. Ello produce un efecto
“de dinamo,” generando las corrientes eléctricas que crean el campo magnético de Júpiter. El hidrógeno metálico está rodeado de capas de gas de hidrógeno y de helio, y una capa relativamente delgada de nubes envuelve todo el planeta. (Esta capa tiene, en realidad, docenas de millas de espesor pero, considerando el enorme tamaño de Júpiter, es como la piel de una cebolla.) La rápida rotación de Júpiter estira las nubes en bandas estrechas que rodean todo el planeta. Las bandas tienen colores diferentes, lo que significa que sus nubes están compuestas de materiales diferentes y están a distintas altitudes. Las capas de nubes más altas, que son blancas, están compuestas de amonio congelado. Las nubes de la capa siguiente contienen amonio mezclado con otros elementos químicos, y tienen un aspecto marrón o anaranjado. Las capas más bajas contienen vapor de agua y agua helada, y se ven azules. Estas bandas forman franjas alternas, de tonos claros y oscuros. Las de colores claros son grupos de nubes impulsadas a lo alto de la atmósfera por burbujas emergentes de gas caliente. Las franjas más oscuras contienen materiales más fríos que vuelven a bajar a la atmósfera del planeta. Gran parte del clima de estas zonas recibe su energía no del Sol, como pasa con las tormentas de la Tierra, sino del interior profundo del propio Júpiter. Al comprimir el planeta, la gravedad produce un calor que asciende hasta la atmósfera y después escapa al espacio como energía infrarroja. Júpiter irradia más energía al espacio de la que recibe del Sol. Júpiter está rodeado de anillos, aunque son mucho más oscuros y tenues que los del planeta Saturno, más vistosos. Los anillos pueden estar compuestos de materiales que fueron “barridos” de las superficies de las lunas de Júpiter por las colisiones con meteoritos.Como Júpiter no tiene superficie sólida, ningún ser humano podrá caminar jamás por el planeta. De hecho, cualquier intento de visitar el sistema de Júpiter requerirá mucha protección. El campo magnético de Júpiter captura partículas con carga eléctrica del Sol y de Io, la luna volcánica del planeta. Estas partículas crean unos potentes cinturones de radiación. En torno a la órbita de Io, los cinturones de radiación son lo bastante potentes para matar a una persona sin protección en pocos minutos. Otro superlativo más para la larga lista de Júpiter: tiene los cinturones de radiación más letales
SATURNO El planeta Saturno es un gigante delicado. Aunque es el segundo planeta más grande del sistema solar, es el menos denso –menos denso que el agua. Los componentes químicos de la parte superior de la atmósfera colorean sus bandas de nubes con tonalidades de color marfil, amarillo y marrón-anaranjado. Saturno está, además, rodeado de sus amplios anillos, lo que hace de él uno de los planetas más hermosos del sistema solar. Al igual que su hermano mayor, Júpiter, Saturno es una bola de hidrógeno y helio en torno a un núcleo denso y rocoso. Saturno gira tan rápido que está abultado en su ecuador, por lo que es mucho más grueso en el ecuador que en los polos. Las nubes de Saturno tienen sutiles
La rápida rotación de marrones Saturno yy su estructura en capas producen un campo magnético. Observaciones tonalidades amarillas, del vehículo espacial Cassini sugieren que el campo puede estar cambiando, lo que podría significar que anaranjadas. el interior de Saturno también está cambiando. Para intentar medir la rapidez de rotación de Saturno, Cassini estudió las ondas de radio producidas por el campo magnético. (Como Saturno no tiene superficie sólida, es imposible medir su rotación estudiando accidentes geográficos como montañas o cañones.) Pero el vehículo descubrió que la rapidez de rotación parece haber disminuido en unos seis minutos desde las misiones del Voyager de hace dos décadas. Los científicos no creen que la rotación de Saturno esté ralentizándose. Una posible explicación alternativa es que haya cambios en el núcleo del planeta que estén produciendo cambios en el campo magnético. La característica más destacada de Saturno, sin embargo, es su amplio sistema de anillos. Galileo Galilei descubrió los anillos a principios del siglo diecisiete. Con su pequeño y rudimentario telescopio, sin embargo, los anillos parecían “bultos” en el planeta. Cinco décadas después, el astrónomo holandés Christian Huygens, que acababa de descubrir Titán, la luna más grande de Saturno, detectó que había un pequeño espacio entre Saturno y los bultos. Huygens dedujo que los bultos eran, en realidad, anillos en torno al planeta. Hoy, los astrónomos saben que el sistema de anillos de Saturno está compuesto de miles de anillos. Algunos de ellos están formados por pequeños trozos de agua congelada, otros contienen granos diminutos de polvo y hay otros con una mezcla de los dos. El conjunto de anillos sólo tiene unos cientos de pies de grosor. Por dentro y por fuera del sistema de anillos hay varias lunas pequeñas en órbita. Estos satélites “pastores” contribuyen a mantener en su sitio a las partículas, pero también dan a algunos anillos formas extrañas, retorciéndolos y enredándolos. Los anillos de Saturno se formaron, probablemente, cuando una pequeña luna o cometa pasó cerca de Saturno y fue destrozado por la gravedad del planeta. El matemático francés Edgard Roche describió este proceso por primera vez hacia 1850. La gravedad de un planeta es más fuerte sobre el lado de la luna que lo mira que sobre el lado opuesto. Si una luna pasa demasiado cerca de su planeta madre esa diferencia, llamada fuerza de marea, la destroza, convirtiendo la luna en residuos cósmicos. Con el paso del tiempo, los residuos se esparcen, formando anillos –como los que rodean a Saturno. Aunque Saturno no tiene superficie sólida, quizás algún día los humanos puedan ver sus anillos de cerca. Tal vez puedan caminar en alguna de sus heladas lunas o incluso flotar por encima de las lunas de Saturno en grandes globos. Desde un punto de vista tan elevado, los anillos se verían como bandas anchas y brillantes por el cielo. A veces, partículas heladas del borde interior de los anillos de Saturno caen hacia la atmósfera del planeta, creando brillantes “estrellas fugaces” que surcan el cielo de este delicado gigante.