El 24 de abril de 1998, Monseñor Juan Gerardi, presentó el informe Guatemala: Nunca Más en la Catedral Metropolitana. En este informe, responsabilizó al ejército, a otras fuerzas oficiales, a las patrullas de autodefensa civil y a los Escuadrones de la Muerte del 90% de las violaciones de los derechos humanos durante el conflicto armado interno y atribuyó el 10% a la insurgencia. Dos días después, el 26 de abril, Monseñor Gerardi fue golpeado hasta la muerte cuando entraba en su casa parroquial en la ciudad de Guatemala.