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EL ALZA DE IMPUESTOS AFECTARÁ EN 2014 A CASI EL 70% DE LOS AUTOS QUE SE VENDEN EN EL PAÍS La Asociación de Concesionarios criticó la medida y dijo que "no es la más adecuada" para preservar las reservas; prevé caída de ventas y pérdida de empleos
El proyecto oficial para aumentar los impuestos internos a los bienes "suntuarios" sigue generando rechazo entre los sectores afectados. Luego de que los importadores de autos y los fabricantes de embarcaciones expusieran sus críticas a la iniciativa y advirtieran sobre la posible pérdida de puestos de trabajo, la Asociación de Concesionarios de Automotores (Acara) distribuyó un informe sobre el impacto que provocaría entre las empresas del sector una suba impositiva para los vehículos de alta gama. El proyecto de ley establece,una tasa de im-
puestos internos de 30% para los vehículos cuyo precio -antes de impuestos y del margen del concesionario- esté entre $170.001 y $210.000 y una tasa de 50% para los vehículos cuyo precio supere los $210.000. El proyecto original establecía una tasa de 50% para todos los autos por encima de los $170.000.Según Acara, si se toman en cuenta los precios actuales, la medida afectará a 120 de los 220 modelos de autos que circulan en el país, es decir, "el impuesto abarcaría al 55% de los vehículos en alguna de sus versiones". Los concesionarios también
presentaron un escenario para 2014 que supone un aumento de 20% en el precio de los vehículos. Con esta proyección, el próximo año el número de modelos afectados por la suba en los impuestos internos llegaría a 148, es decir, el 68% del total de los modelos que se venden en el país. En Acara
creen que la suba impositiva producirá una "reducción mínima del 50% en las ventas de los vehículos afectados". Se estima que en 2014 esos modelos representarían entre 23% y 24% de los patentamientos y el 27% de la facturación de los concesionarios. Entre los modelos que se verían afectados por la iniciativa oficial hay algunos que se producen en el país, como el C4 Lounge de Citroën, el Ford Focus, el Peugeot 408, el Renault Fluence y el SW4 de Toyota, y sobre modelos producidos en Brasil y México. La incidencia sería especialmente fuerte en las de alta gama,
como Audi, BMW o Land Rover, el 100% de cuyos modelos se vería afectado. Sin embargo, considerando un aumento de precios de 20% en 2014, otras marcas que suelen ser asociadas con gamas más bajas, como Chevrolet, Volkswagen o Renault también sufrirían un impacto.El informe también resalta la distorsión que la medida producirá en los precios finales de modelos cuyos valores de fábrica son muy similares. Por ejemplo, un auto de $170.000 de precio antes de impuestos y del margen del concesionario no estará alcanzado por la medida y su valor de venta al público rondará los $239.000, mientras que otro con precio de fábrica de $170.001 estará sujeto a una tasa de 30% por concepto de impuestos internos y, por tanto, su precio final será de $312.000. Una distorsión aún mayor se producirá entre otro cuyo precio de fábrica sea de $210.000
y un auto que cueste $210.00. Según el Indec, en el acumulado de enero a octubre se destinaron US$ 5854 millones a la importación de vehículos, 32% más que en el mismo período de 2012. En opinión de fuentes del sector, el boom en la venta de autos importados, principalmente los de alta gama, se explica en parte porque, en un contexto de brecha entre la cotización del dólar en el mercado formal y en el paralelo, se tiene la sensación de que esos autos, que se importan al tipo de cambio oficial, "están baratos". Acara señala: "Si bien el sector avala la preservación de las reservas, creemos que la medida no es la más adecuada" y calcula que con la medida el Estado podría evitar la salida de $ 810 millones, "pero dejaría de recaudar US$ 1010 millones en concepto de impuestos". Fuente: Acara