Sitema de mercado

Page 1

Universidad Mariano Gálvez de Guatemala Facultad de Humanidades Curso: Introducción a la Economía Cuarto Ciclo, Sección: “B” Catedrático: Lic. Ronal Remberto Martínez Reyes

SISTEMA DE MERCADO Estudiante: Merylin Angélica Rivera García. Carné: 5971-1313-481

El progreso Jutiapa, Septiembre, 2014


INTRODUCCIÓN El sistema económico imperante en el mundo es el que sostienen representacionalistas y constructivistas, con posiciones epistemológicas muy enfrentadas, sobre si la economía mundial es una realidad dada para el observador (representacionismo) o, por el contrario, es una realidad construida por el observador (constructivismo). Nosotros adoptamos una posición epistemológica a mitad de camino entre el representacionismo y el constructivismo, que es lo que se conoce como el enfoque inactivo y que se basa en la idea de que los fenómenos se manifiestan ante el observador y éste, a partir de ellos, construye interpretaciones de la realidad.


JUSTIFICACIÓN En primer lugar, necesitamos trazar una distinción entre sistema de mercado y mercado. Si bien no todas las sociedades adoptan o contienen un sistema de mercado, todas las sociedades existentes hacen uso de los mercados. El esencia, el problema de toda organización económica consiste en atenuar los costes de intercambio para hacer posible la especialización. La dificultad principal es cómo lograr, en un medio en el que la información está distribuida entre los individuos.

SISTEMA DE MERCADO Los cambios sociales de escala masiva con los que el siglo XX ha dado paso al XXI han escrito por sí solos el prefacio de este libro. A ellos se debe que


buena parte del mundo haya empezado una inesperada transformación. Al menos durante ciento cincuenta años, muchas sociedades se han visto atrapadas en un malhumorado debate acerca de los sistemas de mercado. Hoy tenemos la oportunidad de pensar en esos sistemas de una forma más clara y desapasionada, lo cual se debe a que los ideólogos del mercado se han dado cuenta de que hay poco que temer del comunismo, por lo que, consecuentemente, pueden permitirse abandonar sus barricadas ideológicas y hablar seriamente del mercado y sus problemas. Por otra parte, los ideólogos socialistas se han dado cuenta de que aspirar a una sociedad mejor no es suficiente: han de enfrentarse a las complejidades de construirla. Ahora bien, incluso con esos datos a favor, no será fácil debatir coherentemente sobre el mercado … Por ello, uno no encuentra un amplio intercambio intelectual acerca del sistema de mercado entre los economistas, quienes en su mayoría lo admiran, y aquellos otros académicos de campos como la historia, la literatura y la filosofía que, como el filósofo y sociólogo Jürgen Habermas, enjuician con dureza las consecuencias de un sistema de mercado para valores como la libertad, la racionalidad y la moralidad. ¿QUÉ ES UN SISTEMA DE MERCADO? En primer lugar, necesitamos trazar una distinción entre sistema de mercado y mercado. Si bien no todas las sociedades adoptan o contienen un sistema de mercado, todas las sociedades existentes hacen uso de los mercados. Paseando por una calle ya fuera en la China maoísta o en la Unión Soviética, cualquier distraído visitante habría visto mercados de bienes de consumo y de servicios como los de peluquería o de reparación de bicicletas. Y es que, efectivamente, dondequiera que la gente paga de modo usual a otra gente para que haga algo sea cantar una canción o cavar para extraer carbón esos intercambios constituye mercados.

Y sin embargo, pese a lo común de esos intercambios en la China maoísta o en la Unión Soviética, de ninguna de esas sociedades podía decirse que fuesen sistemas de mercado, puesto que un sistema de mercado existe solamente cuando los mercados proliferan y se interrelacionan unos con otros de una forma muy particular. El sistema de mercado organiza y coordina las actividades humanas no a través de la planificación estatal sino mediante las interacciones mutuas de los compradores y vendedores.


No basta que la gente compre y venda para que exista un sistema de mercado, se requiere asimismo que sean sus compras y ventas las que coordinen la sociedad y no una autoridad central. Y esto nos permite dar una definición del sistema de mercado suficientemente útil para nuestros propósitos inmediatos: un sistema de mercado es un sistema de coordinación de las actividades humanas a escala de toda una sociedad que procede no mediante un sistema de órdenes centralizadas sino vía las interacciones mutuas en forma de transacciones. Tres son los tipos de mercados más habituales: los mercados de trabajo, los mercados agrícolas, y los mercados para los bienes y servicios que la industria ofrece a los consumidores. Pero para que un sistema de mercado funcione son necesarios dos tipos de mercado menos evidentes. Son, por un lado, los mercados de bienes y servicios intermedios producidos para el uso de otros productores; y por otro, los mercados de capital, y específicamente, los mercados de préstamos, acciones y otros tipos de activos de inversión. En estos dos tipos de mercados, los participantes ya no son gente común y corriente sino empresarios, empresas o instituciones financieras. Las dimensiones del sistema de mercado El sistema de mercado es, al igual que el Estado, un método para controlar y coordinar el comportamiento de la gente… Cuando un centenar de trabajadores aparecen en la puerta de una fábrica cada mañana a las 8 de modo enteramente previsible, su aparición no está ordenada por el Estado. Si están allí es porque la promesa de unos pagos monetarios los controla y coordina. ¿Puede ser cierto que el desorden aparente de las actividades de compraventa sea realmente capaz de lograr algo tan profundo y complicado como el control y la coordinación de toda una sociedad? Cualquiera puede percatarse de que el Estado consigue cierta coordinación de una sociedad a escala nacional, pero es mucho más difícil ver como el sistema de mercado hace lo mismo, como en efecto lo hace, tanto a nivel nacional como a escala internacional. En los sistemas de mercado los individuos no siguen sus propios y particulares caminos, sino que se encuentran ligados mutuamente en la persecución de sus objetivos a través de sus interacciones en los mercados. Si realmente les hubiese sido permitido hacer lo que les viniese en gana no habrían conseguido las prodigiosas hazañas productivas que caracterizan a los sistemas de


mercado. El que los participantes en los mercados se vean a sí mismos haciendo elecciones libres y voluntarias no niega en absoluto que estén controlados por los procesos de compra y venta. El sistema de mercado de nuestros días no es el laissez-faire de Adam Smith ni tampoco un sistema de mercado ligado a un Estado mínimo. Hoy, el sistema de mercado es un sistema dirigido en el que el Estado es el comprador más importante. De todos los agentes es el que tiene la lista de la compra más larga, incluyendo en ella al ejército, las obras públicas y los servicios de policía y de los funcionarios. También es un oferente a gran escala, aunque muchos servicios por ejemplo, la educación elemental no los venda sino que los "proporciona" así sin más, de modo que en vez de dejar que las fuerzas de la oferta y la demanda fijen los precios, a menudo lo hace él mismo, manteniendo por ejemplo los precios de los productos agrarios altos para ayudar a los campesinos o, por contra, bajando esos mismos precios para combatir el malestar social entre los pobres de las ciudades. De una forma u otra, el Estado subvenciona la mayoría de las industrias Recoge ingentes fondos para repartirlos a través de los programas de bienestar social. Y, finalmente, es un poderoso y activo agente en la oferta de dinero y crédito vía el control que ejerce sobre el sistema bancario y su propia política fiscal. Algunas de estas actividades estatales son necesarias para que un sistema de mercado florezca, otras son menos valiosas, y las hay que son un entero derroche. Hay algunas que no son otra cosa que rapiñas de los caudales públicos. Sea como sea la evaluación que se haga de ellas, son sin duda parte de la historia de cómo funciona un sistema de mercado.

Si bien el debate acerca del sistema de mercado es interminable, vamos a establecer algunos hechos clave sobre él. Así, demostraremos que puede coordinar el comportamiento o las actividades humanas en unos ámbitos y con una precisión sin parangón en ningún otro sistema, institución o proceso social. Pero es asimismo un coordinador rudo y, a menudo, cruel. Es a la vez un aliado y un enemigo de la libertad personal; lo primero porque amplía el ámbito de elección de cada participante en él, y lo segundo, porque elimina algunas de las principales opciones por las que unos individuos libres podrían optar. Ha eliminado muchas y enormes desigualdades históricas pero luego ha introducido otras de su propia cosecha. Consigue unos niveles de eficiencia extraordinarios ya que permite a quienes en él participen hacer elecciones


precisas y bien calculadas, pero es por otro lado notoriamente ineficiente a causa de las opciones que ha eliminado. Ha sostenido históricamente el sistema democrático, y así no hay estados democráticos que no sean sociedades de mercado, pero sin embargo ha saboteado un buen número de características ostensiblemente democráticas de esos mismos estados.

ESPECIALIZACIÓN E INTERCAMBIO El esencia, el problema de toda organización económica consiste en atenuar los costes de intercambio para hacer posible la especialización. La dificultad principal es cómo lograr, en un medio en el que la información está distribuida entre los individuos de forma desigual, que unos seres humanos potencialmente oportunistas o aprovechados se comprometan entre sí de forma que les sea posible intercambiarse bienes y servicios y, de ese modo, hacer posible la especialización de sus recursos, considerando además que esta especialización es la única vía disponible para aumentar la riqueza de todos ellos. El caso sobre “La crisis del jabón en la Unión Soviética” y diversos ejercicios de ese capítulo permiten comparar las propiedades que presentan las principales soluciones abstractas del problema, caracterizadas como “mercado” y “política”. Se examina también el papel que representan las organizaciones de ámbito más reducido, prestando atención preferente a las empresas, entendidas como meras formas complejas de contratar. Esencialmente, como nexos contractuales en los que confluyen múltiples propietarios y usuarios de recursos, todos los cuales participan de algún modo en la elaboración y adquisición de un determinado producto o servicio. Simplemente, la actividad de los agentes económicos genera empresas y otras organizaciones, y las dota de personalidad jurídica, cuando realizar intercambios mediante ellas les permite lograr costes menores de los que incurrirían al realizarlos a través de transacciones en el mercado, incluyendo, obviamente, los costes de intercambio que pueda generar la propia contratación organizativa. El hilo conductor del análisis es, pues, el considerar la “organización” de la actividad económica en el mercado y, en particular, las propias organizaciones empresariales como un medio para ajustar los intereses de los participantes en los intercambios económicos y hacer así posible su especialización productiva.


Algunos tipos genéricos relaciones económicas

Soluciones ysalvaguardias

Comerciales

Integración vertical Contratos largo plazo

Laborales

de Ventajas de Conflictos y especialización costes de intercambio Bienes Originadas en Expropiación intermedios la de transformación activos física de los específicos Bienes finales recursos Garantía de calidad Producción en Interacción en Gorroneo o equipo el equipo parasitismo Agencia delegación

Financieras

Crédito

Sociedad Dirección

Cooperativa

y Especialización Esfuerzo de principal y subóptimo, agente búsqueda de rentas Provisión de Insolvencia recursos de capital Asunción de Acción riesgos colectiva Tareas Esfuerzo directivas subóptimo Asunción de Diversificación riesgos Ausencia de especialización (los trabajadores han de ser capitalistas y ejercer el control)

PRECIO DE MERCADO

Cuasi-rentas Reputación Remuneración residual de la tarea de control Remuneración por rendimiento

Garantías reales

Contratación relacional Mercado de control

Paliativos opuestos a la forma cooperativa


El precio de mercado es un concepto económico de gran aplicación tanto en aspectos teóricos de la disciplina como en su uso técnico y en la vida diaria. El concepto es fácil de comprender, el precio de mercado es el precio al que un bien o servicio puede comprarse en un mercado concreto. Sin embargo, el concepto ha dado origen a discusiones tanto técnicas como teóricas en el desarrollo de las ciencias económicas. Esas discusiones van desde la definición de que es un mercado a que se entiende por precio, dificultades que adquieren un auge particular en la microeconomía, ámbito en el cual una de las funciones más importantes de un economista es la determinación de precios que maximicen la ganancia de una empresa. Sin embargo, la problemática también se extiende al ámbito macroeconomía, en el cual cálculos acerca de precios juegan un papel central en la determinación del hipotético equilibrio económico. Descripción general Históricamente, la escuela clásica consideraba que existen dos “precios de mercado”: el que se debe a la competencia (o precio natural) y el que se genera sin competencia (o precio monopólico). En las palabras de Adam Smith: "El precio de un monopolio es en cada ocasión el más alto que se puede conseguir. El precio natural, o el precio de la libre competencia, por el contrario, es el más bajo que se puede tomar, no de hecho en cada ocasión pero sobre un tiempo considerable. El uno es en cada ocasión el más alto que se puede exprimir de los compradores, o el que, se supone, van a consentir dar: el otro es el más bajo que los vendedores generalmente pueden permitirse aceptar, y al mismo tiempo continuar sus negocios.". El "precio natural" depende directamente, en esta visión, del valor de un bien, y ese valor equivale a la "cantidad de trabajo" necesario para producir el bien en cuestión. Esto es conocido como la teoría del valor trabajo.


Para explicar las variaciones de precios, los marginalitas introdujeron el Principio de utilidad marginal decreciente (ver "Primera Ley de Gossen). En la visión de Ricardo, por ejemplo, se concibe que los diamantes tengan valor porque algunos trabajan para encontrarlos y transportarlo a grandes distancias. Y, como quiera que eso sea no solo difícil y peligroso pero además requiere mucho esfuerzo en relación a los diamantes "producidos", estos cuestan mucho. En la visión marginalita, mineros buscan diamantes porque hay una demanda por ellos. Pero, en la medida que alguien los posee, disminuye lo que ese individuo está dispuesto a pagar por ellos, consecuentemente el "precio" del diamante no es fijo, depende de cuánto los desee un potencial comprador. De la misma manera, el primer vaso de agua para un sediento vale más que los sucesivos. Y por el mismo principio, los individuos estarían dispuestos a pagar más por una casa para vivir que una para vacaciones. (Ver Paradoja del Valor)


EL SISTEMA ECONOMICO IMPERANTE EN EL MUNDO El segundo de los debates es el que sostienen representacionalistas y constructivistas, con posiciones epistemológicas muy enfrentadas, sobre si la economía mundial es una realidad dada para el observador (representacionismo) o, por el contrario, es una realidad construida por el observador (constructivismo). Nosotros adoptamos una posición epistemológica a mitad de camino entre el representacionismo y el constructivismo, que es lo que se conoce como el enfoque inactivo y que se basa en la idea de que los fenómenos se manifiestan ante el observador y éste, a partir de ellos, construye interpretaciones de la realidad (Varela, Thompson y Rosch, 1991: 202) Como resultado de nuestro posicionamiento en el primer debate, debemos aceptar la transnacional dad, lo que es lo mismo que aceptar que las relaciones económicas transfronterizas ya no son relaciones económicas internacionales, es decir, entre naciones, sino relaciones económicas mundiales o globales, es decir, entre agentes de distintas partes del mundo. El matiz no es irrelevante, pues nos permite hablar de las relaciones transfronterizas e intrafronterizas como un todo, la economía mundial, y no como la suma de unas partes, que eran las economías nacionales en los análisis de la economía internacional. Y al considerar la economía mundial como un todo, la aplicación del análisis sistémico a su estudio resulta de gran utilidad y permite reformular la pregunta de forma distinta: ¿qué es el sistema económico mundial? La aplicación del análisis sistémico al estudio de la economía mundial no es nueva; basta recordar los trabajos de Wallerstein (1974, 1979, 1980 y 1989) sobre el sistema mundial y la economía-mundo; de hecho, la corriente neo marxista de la Economía Política Global ha utilizado y sigue utilizando el análisis sistémico (por ejemplo, Martínez González-Tablas, 2000).


LAS FUNCIONES DEL ESTADO Y LA ECONOMIA MIXTA La economía mixta se sitúa a medio camino entre los sistemas de economía de mercado y de planificación centralizada, tratando de aprovechar las ventajas de ambos sistemas, aunque en la práctica ha sido inevitable heredar sus defectos. Este sistema entró en vigor después de la Gran Depresión, que fue provocada por las crisis a las que se exponía continuamente el sistema de economía de mercado. En la actualidad, las funciones fundamentales del Estado en un sistema de economía mixta superan las que tenía asignadas en el sistema de economía de mercado. Estas funciones son las siguientes: Establecer el marco jurídico-institucional: Sin la existencia de unas reglas y normativas básicas no sería posible que las familias y las empresas pudieran desarrollar sus actividades sin que nadie se viera perjudicado. Suministrar bienes públicos: La sociedad considera que bienes como la sanidad o la educación deberían estar al alcance de todos, por lo tanto son suministrados por el Estado, ya que la empresa privada no los podría suministrar o lo haría a precios demasiado altos. Redistribuir la renta: ya que todas las personas no nacen con las mismas oportunidades o capacidades, el sector público trata de corregir las diferencias socioeconómicas para lograr un mínimo nivel de bienestar para todos. Suavizar la inestabilidad cíclica: Sujeto a la iniciativa privada, el sistema de economía de mercado alterna fases de expansión y fases de recesión, por lo que es responsabilidad del Estado que las transiciones entre ambos tipos de ciclo sean lo más suave posible.

Las sociedades de los países ricos, España entre ellos, impulsaron durante el siglo XX el denominado Estado del Bienestar, un caso particular de sistema de


economía mixta caracterizado por un alto grado de intervención del Estado en la economía y un elevado gasto social.

SISTEMA IMPOSITIVO DE GUATEMALA El sistema tributario es el nombre aplicado al sistema impositivo o de recaudación de un país. Consiste en la fijación, cobro y administración de los impuestos y derechos internos y los derivados del comercio exterior que se recaudan en el país, además administra los servicios aduanales y de inspección fiscal, La tendencia universal es a que haya varios impuestos y no uno solo. Podemos resumir que un sistema es conjunto de impuestos que rigen en un país en un determinado momento. En Cuba el sistema tributario está regido por la Ley No. 73 del 4 de agosto de 1994, aprobado por la Asamblea Nacional del Poder Popular. Desde un punto de vista normativo (lo que debe ser), un sistema tributario cumple ciertos requisitos para ser una estructura tributaria idónea. Un sistema tributario debe estar diseñado para atender los siguientes objetivos: Debe permitir alcanzar los objetivos de la política fiscal (máxima equidad posible, menor interferencia posible en la asignación de los recursos de la economía y promover la estabilidad y el crecimiento económico). Minimizar los costos del sistema, ya sean los que incurre el contribuyente como los de la distribución fiscal (la organización estatal dedicada a la percepción y el control impositivo) Lograr un rendimiento fiscal adecuado, lo que implica alcanzar una recaudación en función de los objetivos propuestos, tanto desde el punto de vista del financiamiento del gasto público como de incidir en la economía.


Principales elementos que integran los impuestos •

• •

Sujeto Activo: Es el estado en términos generales y por delegación a algunas entidades públicas menores como son las administraciones locales. Sujeto Pasivo: Es la persona natural o jurídica que incurre en un hecho sujeto a gravamen. Puede ser el contribuyente que es la persona sobre la que se impone la carga tributaria o el responsable legal que es el que está obligado al cumplimiento material o formal de la obligación. Hecho imponible: Circunstancia cuya realización origina una obligación tributaria. Base imponible: Magnitud de dinero, producto o cualquier otro signo que cuantifique el hecho gravado.

Métodos para determinar la base imponible. • • •

Estimación directa Declaración Jurada Comprobaciones Sanciones

Los ingresos públicos se clasifican en: Ingresos ordinarios y derivados: • Los son aquellos que tienen su origen en el propio patrimonio del Estado, como consecuencia de su explotación directa o indirecta. • Los derivados son aquellos que el Estado recibe de los particulares, es decir que no provienen de su patrimonio. Por exclusión son ingresos derivados todos los que no tienen la categoría de ingresos originarios. •

Ingresos ordinarios y extraordinarios: Son ordinarios aquellos que se perciben regularmente, repitiéndose en cada ejercicio fiscal y en unos presupuestos bien establecidos debe cubrir enteramente los gastos ordinarios.

Por otro lado los extraordinarios son aquellos que se perciben solo cuando circunstancias anormales colocan al estado frente a necesidades imprevistas que le obligan a erogaciones extraordinarias como sucede en casos de guerra, epidemia, catástrofe, déficit, etc. Ingresos Tributarios y no tributarios: Los tributarios son los que obtienen el estado a través de su poder de imperio que cuenta con la


facultad de exigir determinados recursos al particular, es indispensable dejar asentado que toda imposición a los particulares podrá tener el carácter de exacción tributaria, ya que existe otros tipos ingresos que a pesar de ser impuestos por el poder soberano, no tienen estas características, caso particular lo constituyen las multas, que no obstante representar ingresos para el Estado su imposición tiene como antecedente un hecho ilícito y su finalidad es, ante todo, ejemplificativa y aflictiva. •

Sobre los Ingresos no tributarios, por exclusión podemos decir que son en los que el Estado no utiliza el Poder Tributario para poderlos obtener, así tenemos por ejemplo: Los ingresos Patrimoniales y a los ingresos Crediticios. Como ingreso Patrimoniales se tiene a los productos, a los aprovechamientos, incluidos también en esta clasificación, son los recursos obtenidos por Organismos Descentralizados y Empresas de Participación, al ser ingresos que son producto de la propia riqueza del Estado y que forman parte de su patrimonio. Los ingresos Crediticios, son todos aquellos con el carácter de préstamos, los cuales el estado obtiene a través de financiamientos tanto internos como externos o por la emisión de bonos de cualquier denominación, pero que siempre presentan las características que son reembolsables.

El sistema tributario lo integran los siguientes Impuestos:  Impuesto a la ganancia o utilidades.  Impuesto al valor agregado.

 Impuesto sobre ingresos personales.  Impuesto sobre ventas.


CONCLUSIÓN No basta que la gente compre y venda para que exista un sistema de mercado, se requiere asimismo que sean sus compras y ventas las que coordinen la sociedad y no una autoridad central. Y esto nos permite dar una definición del sistema de mercado suficientemente útil para nuestros propósitos inmediatos: un sistema de mercado es un sistema de coordinación de las actividades humanas a escala de toda una sociedad que procede no mediante un sistema de órdenes centralizadas sino vía las interacciones mutuas en forma de transacciones.


BIBLIOGRAFÍA  http://www.esi2.us.es/~mbilbao/mercado.htm  http://www.gcd.udc.es/subido/jose/docencia/economia_empresa/ temas/t3_especializacion-e-intercambio.pdf


Turn static files into dynamic content formats.

Create a flipbook
Issuu converts static files into: digital portfolios, online yearbooks, online catalogs, digital photo albums and more. Sign up and create your flipbook.