Día de Acción de Gracias 2010
Tres Actitudes de Una Persona Agradecida
Autores del Sermón: Antonio Brito y Rogéria de Brito Presidente y Directora del Ministerio de la Mujer de la Misión del Oriente Boliviano
Coordinación: Departamento de los Ministerios de la Mujer de la División Sudamericana de la IASD
Arte/Diagramación: Arte/Diagramação: Victor Diego Trivelato Impressão e Acabamento: Casa Publicadore Brasileira Traducción: División Sudamericana de la IASD
ORDEN SUGERENTE DEL CULTO
Preludio Musical Entrada de la Plataforma Doxología Oración de Invocación Dizemos y Ofrendas Himno para las Ofrendas Oración de Dedicación de las Ofrendas Himno de Alabanza: Oración Intercesora Adoración Infantil: Una Moeda de Gran Valor Música Especial SERMÓN: Tres Actitudes de Una Persona Agradecida Himno de Consagración: Bendición Final Himno de Despedida Postludio
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Adoración Infantil UNA MONEDA DE GRAN VALOR En la Biblia en el libro de Lucas capítulo 15, versículos del 8 al 10 leemos una historia muy interesante. Leer: “¿Qué mujer que tiene diez dracmas, si pierde una dracma, no enciende la lámpara, barre la casa y busca con diligencia hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, reúne a sus amigas y vecinas, y les dice: “Gozaos conmigo, porque he encontrado la dracma que había perdido”. Así os digo que hay gozo delante de los ángeles de Dios por un pecador que se arrepiente”. Tal vez, hoy en día no hagamos tanto alarido por encontrar una moneda. Pero hace mucho tiempo las monedas tenían un gran valor; son como los billetes de hoy. En algunos museos se exponen monedas que son valiosísimas, pero en general, hoy no tienen esa cualidad. Con ellas se podía comprar muchas cosas, y la mujer de nuestra historia había perdido una de sus monedas. La buscó y cuando la encontró no se quedó callada. Llamó a sus amigos y vecinos y festejó. Les contó de su gozo, y ellos se alegraron con ella. Fue una gran fiesta. Para Jesús, nosotros somos como esa moneda de gran valor. Cuando le decimos no a su compañía y nos vamos de su lado él se pone muy triste. Entonces nos busca, nos llama, y cuando regresamos a él, me imagino que hace una gran fiesta en el cielo con sus ángeles. Todos cantan gozosos por cada niño que se acerca a él. ¿No quieres ahora agradecerle porque te tiene como alguien de gran valor? Oremos. 3
Sermón TRES ACTITUDES DE UNA PERSONA AGRADECIDA “¡Alabad a Jehová, invocad su nombre, dad a conocer sus obras entre los pueblos!” Salmos 105:1 INTRODUCCIÓN Dios espera que nosotros seamos agradecidos. Cuando María ungió los pies de Jesús y Judas protestó por esta supuesta pérdida de dinero, Cristo dejó implícito el sentido de la gratitud: Juan 12: 7,8 Jesús enalteció este acto. “¡Cuán agradecida me siento de que él está familiarizado con todas nuestras debilidades y con todas nuestras tentaciones! Sabe cómo compadecerse de nosotros y cómo fortalecemos si acudimos a él en busca de ayuda. Cuando tu fe se vea probada, no te inquietes. Espera solamente, y con calma somete a él tu juicio, tu voluntad, tu camino, y manifiéstate dispuesto a ser conducido”. Alza tus ojos, pág. 137. El texto de Salmos que leímos nos muestra tres actitudes de una persona agradecida. La primera actitud es: I – ALABAR (Alabad a Jehová) Es mismo que celebrar, estar contento, aplaudir, saltar de alegría. Cuando recibimos algo, o alguna buena noticia nos alegramos y no nos podemos quedar callados. Generalmente dejamos salir de dentro de nosotros los más hermosos sentimientos MOTIVOS DE ALEGRÍA • ¿Donde está nuestra alegría? 4
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¿En ver a la Iglesia disciplinar a alguien que se ha equivocado? ¿En ir a un funeral? ¿En visitar a una familia en problemas? ¿En alegrarse con la conquista de almas? ¿En alegrarse con mí amigo por sus conquistas? La Iglesia espera que seamos cristianos alegres. Marcando presencia, testificando “Me siento agradecida a Dios por sus ricas bendiciones para conmigo. . . Mantenga la en su corazón de la mañana a la noche. No pronuncie ni una palabra de queja, sino pida que el poder sanador de Dios tenga su corazón y mente. Esté animado y esperanzado”. Alza tus ojos, pág. 287. Alabar a Dios por lo que tenemos y por todo que en cada momento él nos da. Siempre que estemos decepcionados dónde vivimos o cómo vivimos la vida, debemos parar y pensar en el pequeño Jamie Scott. Jamie estaba disputando un papel en la pieza de teatro de la escuela. Su madre había intentado preparar su corazón, porque ella temía que él no fuera elegido. El día en que los papeles fueron escogidos, Jamie corrió hasta la mamá, con los ojos brillando de orgullo y emoción dijo: - ¡Adivina que, mamá! Y dijo unas palabras que pueden ser una lección para nosotros: - ¡Yo fui elegido para aplaudir y esparcir la alegría! A Dios le agrada cuando estamos satisfechos con lo que él hace por nosotros. Puede ser que estemos anhelando otros “papeles” en la vida, pero Dios siempre nos da el mejor papel. Y ésta es la participación que él quiere que tú y yo hagamos en nuestra vida personal, en nuestra Iglesia y en la comunidad. Cuando no estamos satisfechos con lo que él nos da, tenemos dificultades para ser agradecidos y alabarlo. Siempre vamos a necesitar de las personas que aplaudan y esparzan la alegría. Alegría de ser de Cristo y de tener a Cristo. Alabémoslo por sus actos en nuestro día a día. 5
El mayor motivo para alabarlo es por la muerte de Cristo por nosotros. Nuestra alabanza será aceptada con alegría por nuestro Dios, si es de corazón, o sea, en espíritu y en verdad. Se cuenta que Stanley Jones, visitando un leprosário, vio a un creyente deformado por la enfermedad, el cual, con apenas un dedo en la mano izquierda, aún podía hacer surgir el sonido de un conocido himno al violín. Admirado se dirigió a aquel hombre y oyó de su boca que: ¡daba gracias a Dios por la oportunidad de aun tener un dedo para tocar! «Dad gracias en todo, porque esta es la voluntad de Dios para con vosotros en Cristo Jesús.» (1 Tesalonicenses 5.18). La segunda actitud es: II – INVOCAR (Invocad su nombre) Dios espera que seamos personas de ORACIÓN INTERCESORA y estudiosas de la Biblia. ORAR en favor de otro. Como Iglesia, hemos sido llamados a ORAR en tres áreas. En orden de importancia son: • ORAR AL SEÑOR POR NOSOTROS, • ORAR AL SEÑOR POR LA IGLESIA, • ORAR AL SEÑOR POR EL MUNDO. “Nuestra obra será incompleta si no preparamos a otras personas para que sean colaboradoras de Dios, para visitar a las familias y orar por ellas, y para mostrar al mundo lo que Jesús ha hecho por nosotros”. Cada día con Dios, pág. 368. Un día, a un indio en el Arizona, le fue preguntado cómo era su relación con Dios, y especialmente, lo que sentía cuando oraba. Su respuesta fue: “Cuando oro, siento como si mi vida fuera un pequeño canal de irrigación, siendo que soy llevado a un poderoso río. Y cuando en oración percibo que estoy bien cerca de Dios, parece que el agua de aquel río viene a mi encuentro y se derrama sobre mí, inundando todo mi ser. En ese instante, siento muy fuerte el poder y la presencia de Dios. 6
¿Qué hemos sentido cuando buscamos la presencia de Dios? ¿Y qué hemos sentido cuando no nos acordamos de buscarlo? ¿Hemos tenido experiencias evidentes en nuestra vida de oración, pudiendo testificar que la oración es la palanca que mueve los milagros del Señor? ¿O continuamos incrédulos y fríos exactamente porque no nos movemos en dirección de Aquel que puede hacer grandes maravillas? III - DAR A CONOCER Es exaltar a Cristo delante de sus oyentes. Da a conocer sus hechos a través del: • Ministerio de RESTAURACIÓN: Reconciliar el hombre con Dios • Ministerio de ILUMINACIÓN: Abrir los ojos de la gente para ver CRISTO • Ministerio de LIBERACIÓN: Presentar la verdad para sacar el hombre de las manos del diablo y entregárselo a Cristo. • Ministerio de CONSERVACIÓN: Preparar un pueblo para la venida de Jesús. El misionero escocés en la India, Alexandre Duffl, regresó a su patria para morir allá, después de una penosa lucha. En una reunión en su iglesia, predicaba, y llamaba a sus nobles que se presentase para dar proseguimiento a la obra. Nadie atendía a su llamado. Insistía. Nada. Entusiasmado, desmayo y fue llevado afuera. El médico que lo atendió examinaba su corazón, cuando de repente, Alexandre abrió los ojos, diciendo: necesito volver al púlpito. Necesito continuar el llamado. ¡Cálmate!, le aconsejo el médico. Su corazón está muy débil. Pero el anciano misionero no se conformó. Volvió al púlpito y siguió con su llamado: Cuando la reina Victoria invitó voluntarios, centenas de jóvenes se presentaron. Más cuando el rey Jesús llama, nadie quiere atender. ¿Será que en Escocia ya no tiene hijos para atender al llamado de la India? Esperó un poco en silencio y no hubo respuesta. 7
Después dijo: ¡Muy bien! Si en Escocia no tiene más jóvenes para enviar a India, yo mismo iré otra vez, para que el pueblo de allí sepa que por lo menos un escocés aún se preocupa de ellos. Cuando el veterano soldado de Cristo dejó el púlpito, el silencio fue roto por una multitud de jóvenes que se presentaron: - ¡Yo voy! ¡Yo voy! ¡Yo voy! Podemos contar hoy al mundo que Cristo pronto vendrá. “Mañana puede ser muy tarde”, dice la letra de un himno. CONCLUSIÓN El Salmo 108:13 dice: “En Dios haremos proezas y él hollará a nuestros enemigos”. PROEZAS: “Vida, historia, hazañas, acontecimientos, carrera, hechos, sucesos”. En Dios haremos PROEZAS Hechos de valor mayores que el común ALABE Acción de valor. INVOQUE Ministrando con alegría. DANDO A CONOCER LOS HECHOS DEL SEÑOR Esto ocurrirá cuando: Nos sentemos alegres con el Señor (Devocional) Lo busquemos en oración por los demás (Comunión) Testifiquemos por él (Misión) Que el Señor nos ayude a alabar, invocar y dar a conocer sus hechos mostrando nuestra actitud agradecida.
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