Acupuntura

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-2 1 FIG. 16 MERIDIANO CIRCULACION•SEXO

FIG. 17 MERIDIANO DEL HIGADO


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FIG. 18 MERIDIANO DEL TRIPLE CALENTADOR

FIG. 19 MERIDIANO DE LA VESICULA BILIAR


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esta capacidad es pura fantasía o real poco es lo que influye en la eficacia del tratamiento. Los meridianos se hallan decididamente conectados de algún modo con los órganos y la acción de que se les haga objeto produce su efecto en los que aquellos representan. Incapaz de alcanzar los órganos vitales con sus agujas, el acupuntor confía plenamente en los puntos de los meridianos. Cada uno de los órganos y meridianos se halla vinculado a 77: determinados síntomas, que el acupuntor investiga en sus pacientes y de los que se sirve como guía parcial al decidir el emplazamiento de las agujas. Sin embargo, antes de que las relaciones existentes entre los síntomas y los meridianos y órganos puedan ser comprendidas, es importante conocer la trayectoria seguida por los canales. Cuatro de ellos, el Yin Absoluto del Brazo, Yin Absoluto de la Pierna, Yang Menor del Brazo, y Yang Mayor de la Pierna han sido explicados ya. Los otros son: Meridiano Ying Mayor del Brazo (pulmón) : se inicia en la segunda costilla, asciende hacia el hombro y sigue por el brazo hasta el extremo del pulgar (véase figura 20). Meridiano Yin Mayor de la Pierna (bazo) : empieza en el dedo pulgar del pie, asciende por la pierna, pasa por delante del cuerpo y termina encima de la axila (véase figura 21). Meridiano Yang Mayor (intestino delgado) del Brazo: comienza en la punta del meñique, sigue por el brazo, atraviesa la espalda, y asciende por el cuello hasta alcanzar la. oreja (véase figura 22). Meridiano Yang Mayor de la Pierna (vejiga) : que discurre desde los orificios nasales hasta la parte superior de la cabeza, para descender luego por el cuello, costado y

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FIG. 20 MERIDIANO DE LOS PULMONES


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FIG. 22 MERIDIANO DEL INTESTINO DELGADO FIG. 21 MERIDIANO DEL BAZO


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FIG. 23 MERIDIANO DE LA VEJIGA DE LA ORINA

FIG. 24 MERIDIANO DEL INTESTINO GRUESO


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FIG. 25 MERIDIANO DEL ESTOMAGO

FIG. 26 MERIDIANO DEL CORAZON


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FIG. 27 MERIDIANO DE LOS RIテ前NES

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FIG. 28 MERIDIANO YIN ABSOLUTO DEL BRAZO (Circulaciテウn窶「sexo) (2.600 a. C.)


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FIG. 29 MERIDIANO YIN ABSOLUTO DE LA PIERNA (Hígado) (2.600 a. C.)

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FIG. 30 MERIDIANO YANG MENOR DEL BRAZO (Triple Calentador) (2.600 a. C.)


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pierna, y dar fin en la última articulación del dedo gordo del pie (véase figura 23). Meridiano Yang Sol del Brazo (intestino grueso) : se inicia en el extremo del índice, sigue a lo largo del brazo y cuello hasta alcanzar el rostro, terminando cerca de la comisura labial (véase figura 24). Meridiano Yang Sol de la Pierna (estómago) : comienza en la parte lateral de la cabeza, desciende por el torso y y por la pierna hasta el pie, donde da fin en el segundo metatarsiano (véase figura 25). Meridiano Yin Menor del Brazo (corazón) : que desde el límite superior de la axila desciende por el brazo y mano hasta alcanzar el extremo del meñique (véase figura 26). Meridiano Yin Menor de la Pierna (riñón) : discurre éste desde la parte media de la planta del pie hasta la región pectoral superior y medial, después de haber recorrido por la cara anterior del cuerpo (véase figura 27). La trayectoria de los meridianos, como los puntos localizados en ellos, han cambiado poco desde tiempos remotos. En la segunda parte del Nei Ching titulada Ling Shu, se trata de la aplicación práctica de los conceptos recogidos en la primera, o Su Wen. Se encuentran allí dibujos de los meridianos, que los acupuntores seguían fielmente para su trabajo. Las comparaciones que puedan establecerse entre las ilustraciones más tempranas (véanse figuras 28 a 39) y las cartas modernas muestran poca diferencia entre sus respectivos meridianos. Autores médicos posteriores representaron todos los meridianos conjuntamente sobre una figura humana (véanse figuras 40 a 42). Muchos acupuntores actuales se sirven de estas representaciones én su práctica diaria, si bien es verdad que en el curso de los últimos diez años han sido publicadas cartas de confección más clara y fácil de interpretar. Tanto en los diagramas del Nei Ching como en los

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FIG. 31 MERIDIANO YANG MENOR DE LA PIERNA (Vesícula biliar) (2.600 a. C.)


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FIG. 32 MERIDIANO YIN MAYOR (Pulmones) (2.600 a. C.)

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FIG. 33 MERIDIANO YIN MAYOR DE LA PIERNA (Bazo) (2.600 a. C.)


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esquemas compuestos posteriores, los puntos de acupuntura aparecen marcados y titulados. La relación entre los meridianos y los doce órganos causa la impresión de que con acupuntura se cura toda enfermedad por el mero hecho de insertar una aguja en uno de los 365 puntos especificados. Los millares de males que aquejan al hombre parecen reducirse, pues, únicamente a esos lugares señalados en los meridianos. No es así, como jamás pretendería el acupuntor reputado. El sistema es, de hecho, mucho más complejo de lo que parecen revelar los doce meridianos. Se trata en este caso de los más importantes, y los puntos en ellos especificados no son sino los considerados de tratamiento primario. Dos meridianos más, el Vaso del Gobierno y el Vaso de la Concepción, tienen una importante relación con el bienestar general del organismo (los puntos que sustentan se hallan incluidos en el total de 365). Eso, sin embargo, no es sino el comienzo. De cada uno de los meridianos principales se ramifican otros, en número que depende de la longitud del primario. Quince canales Luo conectan los meridianos principales entre sí. Se cuentan, además, doce meridianos musculares, y otros, en número de ocho, que no se hallan conectados con ninguno. En total, los acupuntores utilizan 59 meridianos en su trabajo, y hasta un millar de puntos, cuyo número ha sido objeto de considerable controversia desde los tiempos de Huang Ti y Chi Po. Algunos acupuntores modernos postulan que los puntos que se encuentran a lo largo de los meridianos secundarios carecen de efecto; otros, en cambio, profesan hacer uso de ellos cada vez que tratan a un paciente. El hecho es que ningún texto clásico reconoce más que los 365 fundamentales. Con todo', aun sin estos puntos supernumerarios, los acupuntores deben considerar todos los meridianos, habida cuenta de que interactúan con los órganos y entre sí de acuerdo con las leyes de Yin y Yang.

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FIG. 34 MERIDIANO YANG MAYOR DEL BRAZO (Intestino delgado) (2.600 a. C.)


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FIG. 35 MERIDIANOS YANG MAYOR DE LA PIERNA (Vejiga) (2.600 a. C.)

FIG. 36 MERIDIANO YANG SOL DEL BRAZO (Intestino grueso) (2.600 a. C.)


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La sintomatología se correlaciona específicamente con los meridianos, con frecuencia en tal grado, que los acupuntores pueden formar reglas básicas que les orienten acerca de donde localizar el trastorno Yin-Yang producido. Existen también diferentes tipos de desorden, debidos a la particular naturaleza del flujo de Ch'i, que los acupuntores deben asimismo considerar. Algunos desequilibrios Yin-Yang son causados por el exceso o defecto de Ch'i en un órgano, hecho que significa que la fuerza se está acumulando en el interior de otro y, por consiguiente, no fluye en consonancia con su discurrir natural. Otros tienen su origen en el exceso de Yin o de Yang en el interior de un órgano, y los hay, en fin, que obedecen a la ausencia total de Ch'i que, por ejemplo, podría originar el colapso de un pulmón. Cualquiera de estas circunstancias es causa de enfermedad y responderá al uso adecuado de las agujas. En el curso de su experiencia secular, los acupuntores han descubierto que determinadas enfermedades causan siempre los mismos síntomas, como no ignoran los médicos occidentales, conscientes de que la sintomatología de un cuadro patológico es, por lo general, bastante regular para un individuo dado. Esta circunstancia permitió a los acupuntores clasificar las enfermedades y tratamientos, aunque sin olvidar por ello la inconstancia inherente a la naturaleza humana. Pocos, pues, aplicarán las agujas sin explorar de antemano todos y cada uno de los lugares de desequilibrio posible entre Yin y Yang. Su cautela nace del conocimiento de los males que puede acarrear un tratamiento incorrecto. Después de ocho años de intensa investigación, la Escuela de Medicina China de Pekín llegó a la conclusión de que se habían determinado en grado y número suficiente las relaciones entre síntomas, meridianos, órganos y enfermedades, para confeccionar un catálogo que permitiera a los acupuntores un utilísimo diagnóstico diferencial. La Editora del Pueblo publicó esta com-

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FIG. 38 MERIDIANO YIN MENOR DEL BRAZO (Corazón) (2.600 a. S.) FIG. 39 MERIDIANO YIN MENOR DE LA PIERNA (Riñones) (2.600 a. C.)


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pilación en 1960 y en ella se incluían los puntos a considerar en presencia de determinadas enfermedades, así como la explicación antigua y moderna de sus causas: muchos, si no todos, los problemas médicos abordables por medio de la acupuntura eran recogidos en una lista en la que, entre otros, aparecían: gripe, paperas, laringitis, traqueítis, histeria, asma, bronquitis, neumonía, enfisema, pleuresía, gastritis, digestión laboriosa, fiebres varias, disentería, diarrea, colitis, cólera, vómitos, hipo, úlceras pépticas, dolores y distensión abdominales, inflamación intestinal y espasmos, así como constipación. La larga enumeración comprendía también: ictericia, abscesos abdominales, venas varicosas, edema, espasmos faciales, convulsiones, insomnio, tensión nerviosa, cefaleas, migraña; vértigo, síncope, meningitis, neuralgias, reumatismo, lumbago; ciática, insensibilidad en partes varias del cuerpo, parálisis, sudores nocturnos, hemorroides, nefritis, cistitis, retención y ausencia de control en la orina, impotencia, frigidez, falta de deseo sexual, ninfomanía, eczemas, acné, gingivitis y problemas odontológicos similares, tonsilitis, tartamudez, glaucoma, conjuntivitis, cataratas, fiebre del heno, sinusitis, pólipos nasales, beriberi y prolapso rectal. Entre las enfermedades y desórdenes propios de la mujer el catálogo consideraba indicación de acuterapia los siguientes: menstruación irregular, esterilidad, hipersecreción vaginal, fibromas, naúseas y vómitos durante el embarazo, espasmos puerperales, parto laborioso, retención de la placenta e insuficiente producción de leche. Una sección de la lista estaba dedicada a las enfermedades de los niños, tanto físicas como emocionales, y a centenares de transtornos comunes que no citamos. No se indicaba la aplicación de la acupuntura como anestesia ni en asociación con técnicas occidentales u otras artes curativas tradicionales. Este inventario nosológico y terápico hecho público por aque-

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FIG. 40 ANTIGUA ILUSTRACION CHINA ACUPUNTURISTA ILUSTRATIVA DE MERIDIANOS Y PUNTOS (2.500 a. C.)


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