Todos nos hemos podido sentir presos, alguna vez, de un disfraz que no nos podemos quitar. En esta ocasión, bajo la piel de un Dinosaurio, viviremos el periplo de ser otro; sentiremos los temores y la fascinación de buscar de la propia identidad, al ritmo carnavalesco de un mundo mágico, donde el reencuentro y el apoyo familiar se imponen.