Motivamerica

Vive el hoy #DecideSerFeliz

Nilena MarĂ­n Calvo

Nilena Marín Calvo Panameña, comunicadora social, columnista en el periódico Panamá América, ambientalista de corazón, con experiencia en marketing y cursando Máster en Responsabilidad Social Corporativa en Madrid, España.

“Motivamerica es mi espacio de paz, alegría y amor. Es el empujón necesario para alcanzar tus sueños y metas. Motivamerica es pasión por lo que haces y motivación diaria para vivir con felicidad. Nadie ha dicho que las cosas serán fáciles pero, mientras tengamos aire para respirar, vivamos el día a día, aprendiendo, disfrutando todo lo que este mundo ofrece y trabajar en cada uno de nosotros para ser mejor”.

Madrid, Abril 2016.

A mis padres Chicho y Elida.

Guía para: • • • • •

Vivir el hoy Amor propio Encuentro de sueños Paz Aprendizaje

www.motivamerica.org #DecideSerFeliz

Índice AGRADECIMIENTO MI PROYECTO

INTRODUCCIÓN

Capítulo I: Ámate a ti mismo El amor que olvidamos

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Vivir el hoy

Manguito maduro

Solteros y Solteras Los mil yo

Una mente abierta

Capítulo II: Propósito de vida Tu propósito de vida

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Adiós a la zona d confort Decide ser feliz

Capítulo III: Sueños Sueños

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Aprendiendo a vivir sin miedos Realización de los sueños

Capítulo IV: Éxito

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El éxito

La piedra en el camino El Buena Vibra Oportunidades

Capítulo V: paz

Espiritualidad y más allá En busca de “paz”

Viviendo sin Rencor

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Liberando cargas

Paciencia para el alma Queremos paz Respira

Capítulo VI: Amor

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Tu Pareja Ideal

Amor de pareja

“Carta a mis ex”

Valora tu corazón

Capítulo VII: Mujer

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Una Mujer feliz

Mujer completa

Capítulo VIII: Aprendizaje Hoy aprendí

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Trabajar en ser mejor

El protagonista de tu historia Lo que ya no espero La sintonía

Viaja y conoce el mundo Todo va a estar bien

10 consejos para ser feliz

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¡Gracias!

Quiero agradecer de todo corazón a las personas que sin duda alguna han confiado en mi proyecto: Motivamerica.

Gracias a mi familia, mi gran pilar, las personas que me apoyan incondicionalmente.

Son inspiración y amor. Gracias a mis padres y hermanos: Naki y Narci que son mi luz, mi guía y parte esencial de mi existencia.

Quiero mencionar a grandes mentores y amigos que no dudan en brindarme el aliento y la seguridad para seguir hacia adelante con Motivamerica. Gracias a mi mejor amiga: Carmen Castrejón, recuerdo en el colegio, hace muchos atrás, me dijiste: “amiga tu serías una gran escritora”. Y aquí estoy con mi primer libro. Gracias por creer.

Quiero agradecer a Ricardo Gago F. mi jefe y amigo. Tus consejos serán siempre pieza clave en todos mis proyectos.

Amigo René Bermúdez, tus ánimos y forma de ser son parte esencial en Motivamerica. Estuviste desde el inicio y gracias por mantenerte siempre a mi lado.

Zuly y Zac Lundgren, mis queridos amigos y hermanos. Gracias por siempre estar en las buenas y en las malas, confiando en mí y en mis proyectos.

Familia Gómez Bolaños, siempre pendiente de leer mis escritos. Ustedes son parte de mi corazón y amor. Gracias por ser parte de este sueño.

Amiga Eyska Jiménez, gracias por estar en cada idea, proyecto y darme los ánimos necesarios para seguir en el encuentro de mis metas.

Giancellys Mileo, gracias por tu fuerza, por motivarme y escucharme siempre.

Valerie Stoute y Selene Ricord, gracias por brindarme el apoyo y la oportunidad para expandir mi mensaje en el periódico Panamá América.

Ana López San Román, gracias por tus consejos, sin ellos este E-Book no existiría.

En fin, gracias a todos que leen, los que inspiran, los que adquieren este E-Book y a todos los luchadores de sueños, los alegres, los llenos de fe y esperanza.

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Mi proyecto: “Motivamerica” Quiero contarles sobre este gran proyecto llamado “Motivamerica”. Su significado, su esencia y el motivo primordial por el cual fue creado.

Motivamerica es “motivación para todos”. Es una inyección de vibras positivas, es entregarles mis palabras y pensamientos que provienen de lo más profundo de mi corazón y mi mente. Es compartir un espacio de luz, con el fin de que, por un segundo, reflexiones sobre tu vida, tus acciones y decidas lanzarte a la búsqueda y encuentro de tus sueños.

Un buen día decidí escribir para llenarlos de paz y amor. Los temas que toco son experiencias propias o inspiraciones de personas de mi edad, que hablamos el mismo idioma y con vivencias muy parecidas. Motivamerica es como si fuera mi diario, a mi edad es fascinante poder escribir y plasmarles todos mis sentimientos y que de alguna manera te sientas identificado(a) con mis aventuras y momentos de aprendizaje.

Motivamerica al inicio, fue mi manera de hacer “catarsis” con el fin de liberar todo aquello que alteraba mi mente. Tú también puedes encontrar tu propia liberación, leyendo, haciendo algún deporte o realizando alguna actividad que sencillamente te desconecte de todo lo negativo.

En resumen, Motivamerica es parte de mi espiritualidad, alejando todo lo material, es un encuentro con uno mismo, es saber conocerse, saber lo que uno quiere, es aprender a querernos a nosotros mismos, se basa en descubrir y en enfocarnos en nuestras metas y sueños.

Les comparto los mandamientos de Motivamerica. Pongámoslos en práctica y aprendamos a vivir en armonía con nuestra alma y corazón.

Mandamientos de Motivamerica: Amor Propio: el amor a uno mismo es parte fundamental de nuestra vida. Como seres humanos tenemos la tendencia a esperar amor de otras personas, cuando lo primordial es, quererse a uno mismos para luego recibir amor de los demás.

Encontrarte a ti mismo: muchas veces sentimos un gran vacío en nuestro corazón o nos sentimos perdidos en el mundo. Es muy probable que estemos llevando una vida acelerada sin reflexionar lo que realmente amamos. Encuentra esa pasión que llevas dentro y canalízala en tu vida. Se tú mismo y disfruta tu vida haciendo lo que amas.

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Lucha por tus sueños: La vida es solo una y no es permitido el no luchar por lo que amas. Atrévete y entra al mágico mundo de los sueños, lucha por ellos y disfruta el hermoso viaje para alcanzarlos Decide ser feliz: la vida es corta para estar torturándonos con sufrimiento y dolor.

Inicia tus días con una sonrisa y llénate de felicidad eterna, de paz y amor.

Aprovecha el tiempo: Vive al máximo tus días. No desperdicies momentos o decisiones pensando en miedos o dudas. Disfruta la vida haciendo lo que amas y contribuyendo por un mundo mejor.

Vive el Hoy: Un día a la vez. Cero complicaciones con el pasado y no nos atormentemos por el futuro.

Acepta tus errores: todos cometemos errores, nuestra misión es aceptarlos y aprender de cada uno de ello.

Llénate de fe y esperanza: ten siempre presente que tus sueños y metas se pueden lograr. Con perseverancia y lucha todos pueden ser posibles.

Cree en ti: No dudes de tu fuerza, de tu valentía y de tu brillo. Eres único en este mundo, llénate de momento mágicos, positivos y descubre lo maravilloso(a) que eres.

Se luz para el mundo: Ilumina tu día, tu hogar, tu trabajo y todos los momentos. Da lo mejor de ti, sigue creciendo y luchando por todo lo que deseas.

Unamos fuerzas para tener un mundo mejor. Completo de amor, paz e igualdad.

Seamos seres espirituales impregnados de luz. Brindemos todo lo bueno que tenemos y sigamos aprendiendo en nuestro camino para alcanzar nuestros sueños y ser inmensamente felices.

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Introducción “El inicio” Bienvenido a mi mundo “MOTIVAMERICA”, en este mundo no hay un “No puedo”, “No tengo tiempo”, “No lo sé hacer” o “Nunca lo lograré”. Aquí no existen las palabras “No” ni “Nunca”. Nuestra vida está llena de sueños o metas que deseamos alcanzar. El inicio de todo consiste en decidir qué es lo primordial en tu vida, definir “eso” que nos mantiene vivos, alegres y llenos de motivación.

He aprendido que es de suma importancia el hecho de encontrar nuestro “Propósito de Vida”, sin este propósito nos envolvemos en un mundo inerte, en seres “ROBOT”, seres cotidianos, con los mismos hábitos de siempre, una persona que viene y va de sus trabajos, de sus mandados y de la vida misma. Sin esa “chispa” o “propósito” nuestro mundo no tiene sentido. Lo preocupante es que cada día veo personas sin esa “chispa”, sólo veo personas que “quisieran hacer cosas” pero no “hacen que las cosas pasen”.

Soy de las que opino que primero, debes conocer “que es lo que realmente deseas”, qué es lo que te llena en su totalidad, eso que tanto amas, te saca una sonrisa y te toca el alma. Tal vez, lo que deseas lo tienes frente a ti, y por solo ver el lado negativo de las cosas no dejas que tus ideas fluyan.

Hablando del lado negativo, es justo y necesario mencionar cuales son los “enemigos” en la búsqueda de nuestros sueños.

Conformidad o Zona de Confort: Este enemigo es muy poderoso, debemos estar preparados(as) para vencerlo. Se necesita una gran dosis de valentía para poder eliminarlo de nuestra vida. En esta zona nos sentimos a gusto porque la conocemos al 100%, pero a la vez, es una zona “traicionera” ya que cada momento nos hunde hacia ella y nos aleja de nuestros sueños.

Miedo: ¡Uy Miedo! El ser humano siempre tendrá miedos. Léelo bien “Todos tenemos miedo”. El miedo es un enemigo lleno de pequeños diablillos que viven en nuestra cabeza. El miedo, es alimentado con tus indecisiones y dudas, se llena con tu negativismo y tu falta de firmeza. ¿Cómo lo venzo? Muy fácil, acéptalo, el siempre estará allí para recordarte que te quedes en la zona de confort y, como ya sabes que el siempre estará allí salúdalo, déjalo a un lado e ignóralo. Recuerda, el siempre llegará pero la clave está en quitarlo de tu camino.

Falta de Dinero: muchas veces tenemos un sueño que involucra “dinero”, “invertir” o tener ese papelillo verde que nos ayuda a alcanzar nuestras metas. El dinero importa, nadie ha dicho que no. Pero soy de las que cree que el dinero se consigue. ¿Cómo lo 10

consigo? Con sacrificio, ahorro y trabajo.

Negatividad: Si sigues pensando de ese lado, lamento decirte que siempre te irá mal.

Si, somos seres humanos, flaqueamos ¿por qué no? Pero levántate, haz un STOP en tu vida y mira todo lo que has crecido y logrado, siéntete orgulloso(a) de todo tu camino y te darás cuenta que eres capaz de lograr muchas cosas.

Gente Tóxica: en la vida siempre encontraremos este tipo de personas.

Lastimosamente se encuentran en todos lados, las podemos ver en nuestra familia o trabajo. Simplemente no dejes que te inyecten esas ondas negativas, mantente fuerte y con confianza. El dato está en entender que este tipo de personas no han encontrado el propósito de sus vidas y de seguro están en un mundo de confusión y conflictos.

Cómo último consejo, te invito a que reflexiones y llegues a la conclusión de cuál es tu “Propósito de vida”, entrégate a él y vive tu vida al máximo. Recuerda que sólo se vive una vez.

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CAPÍTULO I

Ámate a ti mismo

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El amor que olvidamos “Amor”, una pequeña palabra que involucra un sinfín de sentimientos. Sabemos y entendemos que el amor es entrega, cariño, comprensión, tolerancia, respeto, bienestar, etc., etc., etc. Pero más allá de todo esto, el amor es una energía que nos une a distintos seres. Cuando hablo de esa “energía”, cabe mencionar todo lo que implica, me refiero a la conexión que tenemos con los demás, como el amor maternal, paternal, de hermanos, de familia, de amigos y de pareja. También existe el amor a lo que hacemos o como por ejemplo el amor a la naturaleza o a la vida misma. Hay un tipo de amor que es importante y nunca estamos atentos de él. Hay un amor que es incondicional, que es duradero y que nunca te va a fallar. Ese amor está completamente loco por nosotros, ese amor es simple y sencillamente el “Amor a nosotros mismos”. A todos nos pasa, estamos tan pendientes de recibir afecto de los demás, que nos perdemos de disfrutarnos, de comprender lo grandes que somos, lo luchadores, los echa’os pa’lante, (como se dice a lo buen panameño) y lo extraordinarios que nos vemos cuando logramos lo que queremos. Amarse a uno mismo no es vanidad, es estar claros de nuestras virtudes, talentos y gracias. Es saber que tenemos algo que aportar en este mundo, es sentirse seguros en momentos difíciles y de adversidad. El amor a nosotros mismos tiene diferentes elementos que son muy importantes mencionar: Buena Salud: cuando nos amamos, estamos conscientes de que nuestra salud importa. Cuidar nuestra mente y cuerpo es primordial en nuestra vida. Sabemos que sin la salud no podemos conseguir nuestros objetivos. Una buena salud nos ayudará a vivir de manera tranquila, con plenitud y paz.

Respeto: cuando estamos locamente enamorados de nosotros mismos, entendemos en cada momento que debemos ser respetados, que no podemos recibir ningún tipo de insulto, golpes o que sencillamente no aceptamos ningún tipo de maltrato ya sea físico o emocional. Respetarse a uno mismo es saber que merecemos más de lo que estamos recibiendo.

Tiempo: muchas veces decimos “No tengo tiempo para mí”, esto es un error catastrófico. Siempre debemos encontrar un huequito en nuestro horario para consentirnos, para hacer algún deporte, algún curso o tan sólo hacer algo que nos llene y nos tranquilice, que nos desconecte de lo rutinario y nos haga sentir mejor.

Cuando nos amamos sabemos que “YO” importo y no es cuestión de ser egoísta sino de pensar en nosotros.

Dignidad: ¿Quién no ha sufrido por amor? El que diga que no, es un mentiroso.

Cuando sufrimos una ruptura nos sentimos tan tristes y decepcionados que sólo vemos el lado negativo de las cosas. Sentimos que sin el otro no podemos vivir, nos estancamos en esa situación y llegamos a un punto de “ruego” para regresar junto a 13

esa persona. Cuando nos amamos estamos claros de que, el que quiere estar con nosotros hará lo imposible por estarlo, sin excusas ni cuentos. Y si no sucede esto, nos retiramos dignamente y sabemos que mejores cosas vendrán.

Talento: encuentra ese talento, eso que sabes que eres bueno, desarróllalo y no lo dejes escondido. Estoy segura que sabes que tienes una luz que anhela regalarte su brillo. Cuando descubrimos ese talento nos sentimos orgullosos de nosotros mismos y llenos de satisfacción.

En fin, el amor a nosotros mismos es la clave para vivir con felicidad y armonía, es el equilibrio que necesitamos para sobrevivir todas las batallas que se nos presentan en la vida. No lo dudes más y ve todo lo bueno que hay en ti, valora ese potencial que posees, desarrolla tus talentos, aprende, vive al máximo y así conocerás a esa persona increíble que hay en ti.

Vivir el “Hoy” Tengo una amiga que siempre nos recuerda y repite a cada instante lo siguiente: “La vida es ahora”. Esta chica es simplemente una aventurera de la vida, alegre y llena de vibras positivas. Es allí, donde su frase acerca de la vida, encaja perfectamente con su forma de ser y contagia a todos con ese sentimiento.

Aprender a vivir el “hoy” es un proceso continuo donde cada uno debe reflexionar sobre su vida y desarrollar una mente abierta con el fin de comprender que muchas veces estamos esperando, esperando y esperando que algo maravilloso nos pase, no nos atrevemos hacer lo que deseamos o simplemente vivimos estresados pensando en el pasado o el futuro y nos olvidamos por completo de “vivir el hoy”.

Vivir el “hoy” no significa que vivamos de una manera irresponsable, sino más bien, vivir con optimismo y disfrutar de cada detalle que nos brinda este mundo. Compartir con seres queridos que nos llenen de positivismo, ver la vida de una perspectiva diferente, realizar actividades que nos llenen el alma y el espíritu y sobre todas las cosas, hacer el bien y ayudar a los demás.

El hoy, es nuestro presente, vivir el día a día, minuto a minuto. Muchas veces nos ahogamos en un vaso de agua pensando en nuestro pasado, en lo que no sucedió, en lo que hicimos mal o como nos trató la vida en un momento determinado. Liberémonos de esa pesadilla, ¡lo que pasó, pasó!, no hay vuelta atrás. Nos toca aceptar y seguir adelante. Vivir el presente con una sonrisa, levantarnos del suelo y sentirnos ganadores, que somos luz y gozar del momento, que es simplemente lo que tenemos 14

seguro en nuestra vida.

Si el pasado es una tormenta, que les puedo decir del futuro. Nos inquietamos, nos estresamos y dejamos el “hoy” a un lado por el solo hecho de pensar con un futuro incierto. La auto tortura es casi inhumana porque nos enfocamos en pensar en el ¿qué pasará? y en qué nos deparará el futuro. A todos nos pasa porque, obviamente estamos trabajando para construir un futuro lleno de éxitos y el sólo hecho de pensar que no lograremos algo que deseamos nos llena de frustración y desesperación. Es lógico sentirse así, pero lo ideal es llegar a un punto de equilibrio, hacer un acuerdo con nuestra mente y pensamientos para poder vivir relajados. La estrategia es trabajar en el futuro pero, sin olvidar vivir el hoy. Construir un futuro es justo y necesario pero a la vez, no se puede olvidar que cada día que pasa, es una nueva oportunidad, un nuevo comienzo, para ser mejor, trabajar en nosotros mismos y ser fiel a todos nuestros conceptos y maneras de ver la vida.

“No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy” como dice el famoso refrán.

Estamos prestados en este mundo, por tal motivo, no dejemos pendientes importantes por hacer para después. Seamos luchadores de sueños y metas. ¿Por qué esperar tanto? ¿Qué nos frena? ¿Qué nos detiene? Tomemos conciencia de nuestra vida y como la estamos llevando. Reflexionemos cada paso, cada movimiento. ¿Qué estoy haciendo para alcanzar mis sueños? ¿Estoy haciendo algo diferente? ¿Cuándo inicio el plan para lograr mis metas? El momento es HOY y AHORA. No lo pienses más. No lo compliques, no te llenes de excusas y discursos innecesarios. No te engañes, porque si deseas algo no habrá barrera ni obstáculos. Tú eres el dueño de tu destino y de tu hoy.

Armémonos de valor y disfrutemos de nuestro presente pero con miradas hacia el futuro pero OJO, sin estresarnos ni torturarnos. Dejemos atrás un pasado que sólo nos brindó enseñanzas y recuerdos. Vivamos el hoy, llenándonos de gratitud y esperanza. Concentrémonos en nuestros sueños, metas y seamos eternamente felices.

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“Manguito maduro” Muchas veces, al pasar los años, no aceptamos el hecho de que nos hacemos viejos.

Para mí llegar a ser adulta es una gran bendición. Aunque no les puedo negar que me llena de alegría que me pongan menos edad de la que tengo, de igual manera, me encanta crecer, tanto por fuera y por dentro. Cuando descubres que eres “adulto(a)” entiendes que muchas cosas tienes que cambiar en tu vida. “Pensar como adulto” es una etapa que se adquiere a través de la experiencia, por necesidad y por la madurez que cosechamos como individuos. Ser maduro es un proceso, y yo estoy en ese proceso; me encanta aprender cosas nuevas, tener mentores, personas que me aconsejen y sobretodo llenarme de buenos pensamientos con el fin de desarrollar una mente equilibrada y concentrada en conseguir mis sueños.

Puedo compartirles según mis vivencias las claves que debemos desarrollar para llegar a tener una mente fuerte y guiada por sus objetivos y metas.

Saber lo que uno quiere: fijarse proyectos, trabajar por tus sueños intensamente y no perder el foco de lo que se quiere.

Adquirir responsabilidades: debemos ser responsables de nuestras acciones y de lo que tenemos. Ser responsable es saber hacerse cargo de las cosas, es tener compromiso y dedicación a lo que uno permite que entre en su vida.

Aprender de los errores: nadie es perfecto, todos cometemos errores, no importa su tamaño, lo importante es aceptarlos, saber disculparse y enmendarlos. Los errores son un gran maestro, es permitido errar pero lo más esencial, cualquiera que sea el caso, es saber asumir el error y aprender de él.

Saber escoger quien camina a tu lado: llega un punto en nuestra vida que somos conscientes de que existen personas en nuestro círculo social, laboral, familia o entre otros, que querrán boicotear nuestros proyectos o metas. Estas personas, lastimosamente, aún no han encontrado su brillo y viven en la oscuridad, inyectando malas vibras a los demás. Entendemos que no podemos convivir con personas de tal grado negativo, ya que no son buena influencia para nosotros.

Nunca es tarde para empezar a crecer, en lo personal me considero un “manguito maduro”. Y ¿por qué un manguito? Es porque aún me falta aprender, explorar y experimentar un sinfín de momentos. Quienes me conocen sabrán que tengo una niña por dentro pero muy consciente que llega un punto en la vida donde debo ir 16

encaminándome al gran viaje para obtener mis sueños.

La vida no se trata de vivirla aburrida, ni que tampoco pasen los años y no hagamos nada para conseguir lo que deseamos. La vida es maravillosa, con sus altas y bajas, las bajas no enseñan a ser fuertes, a madurar y a seguir adelante. Las altas nos demuestran que todo es posible y que nos mantengamos con ese espíritu de lucha y perseverancia.

Crecer significa “ganar”, crecemos por dentro, de corazón y alma para entender más lo que nos sucede, para saber qué hacer en momentos difíciles y poder dejar una enseñanza siempre en cualquier lugar donde estemos. Nunca pierdas la niña o el niño que hay en ti pero, recuerda que crecemos, que no podemos taparnos los ojos y no asumir responsabilidades porque, para lograr nuestros sueños debemos hacer un pacto serio y formal para poder alcanzarlos. Tomemos decisión y entrega para lograr todo lo que queremos. Tú puedes, solo toma el control de tu vida y llénate de motivación, ánimo, fe y esperanza.

Solteras y Solteros Esta columna la dedico a todas las solteras y solteros en busca de paz, amor y equilibrio. Iniciemos con lo primero, “el desamor”. Como menciona en sus libros el famoso psicólogo y escritor Walter Riso: “Bendito sea el desamor que te libera…” Te libera de amarguras y de tristezas, te libera de forzar una relación o tan solo de estar con la persona equivocada.

Ser soltero(a) a los casi treintas o durante los treintas es una tremenda fortuna. En lo personal he aprendido a ser soltera en estos momentos, a vivir un día a la vez y porque también después de tanto tiempo puedo disfrutar de una “verdadera soltería”.

Con esto no quiero decirles que ando de “picaflor” o “brincando de aquí para allá”, sino más bien, porque he adquirido un verdadero conocimiento sobre la persona que soy hoy, disfrutar de mi compañía, de ser fiel a mis pensamientos, de concentrarme en mi evolución y realización como mujer independiente y lo muy luchadora que puedo llegar a ser para conseguir mis sueños. Ser soltero(a) a los casi treinta o en los treintas no es un pecado, ni tampoco se nos ha ido ningún tren, metrobus u otros medios de transporte. En el caso de las mujeres, en esta época, ser soltera e independiente es ser una mujer que vale oro, como lo menciona muchas veces la psicóloga Maritere Lee. Es ser única, brillante e interesante. Ese mito de que a los treinta debes ya haberte casado y establecido un hogar ya pasó a la historia. Ser casada(o), es un proceso de años de construcción con tu pareja. No es “casarse por 17

casarse”, es “hacer bien las cosas”. Yo lo veo así, y lo digo con propiedad porque fui víctima de una sociedad, la que te encierra y te llena los oídos de murmullos tóxicos, diciéndote que tu reloj biológico está a punto de estallar y que te quedaste sola en la estación del tren, porque lastimosamente ya pasó el último vagón. Todo este castigo de la sociedad hace que te olvides de tus sentimientos, fuerces una relación que no surge o no va para ningún lado. Libérate de esta sociedad cuadrada, se tú mismo, lucha por tu independencia y el cumplimiento de tus sueños los cuales deben ser tu prioridad. Si en el camino aparece una persona que está dispuesta a acompañarte y en apoyarse mutuamente “bendito sea” sino, sigue gozando de tu compañía, lee un buen libro, haz algún deporte o ejercicios, convive con tu familia y amigos.

Concéntrate en tus metas y descubre las bellezas que hay en ti.

No tengamos miedo a la soledad, en ella podrás encontrarte, podrás reorganizar tu vida, pensar en ti y buscar las vías y estrategias para adquirir todos tus sueños y deseos. La soledad es una gran aliada. En ella podrás encontrar el amor propio, tu propósito de vida y podrás hacer todas aquellas cosas que tengas pendientes.

Observa siempre tu presente pero sin olvidar tu futuro. Así lo veo yo. Viviendo el día a día, pero segura con lo que deseo en mi futuro. Te invito a que reflexiones sobre tu estado civil actual. Si eres feliz con tu pareja, ¡Aleluya! Sino, encuentren ese punto de equilibrio para mantener una relación sana. Y, si eres soltero(a), vive al máximo, sin desesperación, dedícate a ti. Se luz, llena tu vida de alegría y paz.

Mi viaje de soltería la vivo con armonía, conectando mi espíritu y mi cuerpo en uno sólo, realizando actividades nuevas, leyendo, escribiendo, compartiendo con seres queridos y dándolo todo en la pista para conseguir mis metas. Como les comento siempre, la vida es una, hay que disfrutarla responsablemente, con sabiduría y amor.

Debemos construir un mundo lleno de cosas buenas, nuestra misión es aportar algo, por lo menos ser positivos eso, aunque no lo crean, es un gran aporte, tener la mente abierta, dejar los miedos a un lado y vivir de manera feliz es la clave para llegar a conseguir lo que deseamos.

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Los mil “yo” ¿Cuántos “yo” tienes en tu interior? Esa fue una interesante pregunta que me realizó un gran amigo. Mi respuesta enseguida fue: Tengo mil “yo”. Así de fácil. En mi interior podrás encontrar a la mujer independiente, la soñadora, la que tiene algunos miedos, la sentimental, la que se enamora, la filosófica, la impaciente y si seguimos con la lista llegamos con las mil “yo”. Todos poseemos diferentes personajes en nuestro interior, todo esto es normal. Somos seres humanos llenos de emociones y sentimientos que se reflejan en nuestro actuar. No somos perfectos, tenemos nuestras debilidades y defectos pero siempre tendremos un freno que se llama “conciencia” que nos hará asumir cada error, cada “metida de pata” o como también, nos hará mordernos la lengua o detenernos antes de cometer o decir algo que hiera o afecte a terceros.

Como personas adultas tenemos el control de nuestros sentimientos. Allí está el detalle de poder manejarnos frente a situaciones y no desatar un huracán de emociones. En estos tiempos, no nos detenemos a meditar sobre nuestros “yo” y dejamos que todo salga de nuestra boca o actuar sin preocuparnos si le hacemos daño a los demás o como también a nosotros mismos. Ser sincero es una gran virtud, conversaba con mi amigo, pero también, es un arma de doble filo. Debemos tener la sabiduría para poder decir las palabras exactas. Ser honestos pero, tener el tacto necesario.

Mi amigo me comentó lo siguiente: nosotros como personas maduras somos el conductor del auto que lleva en su interior todos nuestros sentimientos. Como pilotos, debemos saber manejar cada emoción sabiamente para poder dirigirnos a nuestro destino con juicio e inteligencia.

Nunca dudemos de nuestro poder. Cada uno tiene en su interior una fuerza que puede de alguna manera a otra, realizar cambios importantes en momentos o situaciones de todo tipo. Tener inteligencia emocional es una parte esencial en nuestra vida diaria.

Debemos tenerla presente en todos los aspectos de nuestra existencia. No dudes que es de suma importancia contar con esta inteligencia en el trabajo, familia, con amigos y en cualquier entorno social donde nos encontremos. Daniel Goleman, psicólogo estadounidense popularizó la “inteligencia emocional” y la define como: “la capacidad de reconocer los sentimientos propios y la de los demás; por tal motivo, las personas somos hábiles para el manejo de los sentimientos”.

Realizando una pequeña investigación sobre nuestro Cociente de Éxito puedo comentarles lo siguiente: Nuestro cociente de éxito se debe a un 23% a nuestras 19

capacidades intelectuales y un 77% a nuestras aptitudes emocionales. Entonces nos hacemos la siguiente pregunta: ¿Por qué algunos le va bien y a otros no? La respuesta está en la inteligencia emocional o sabiduría emocional. Donde nuestras emociones son las que rigen nuestro caminar y las decisiones de nuestro éxito. Con esto no quiero decirles que no nos preparemos o que no estudiemos. Si no más bien, que en nuestra vida acelerada debemos tomar en cuenta nuestros sentimientos y emociones. Tener una actitud positiva y vivir con conciencia nos llevará a un camino lleno de éxitos.

Leyendo a Deepak Chopra puedo compartirles su siguiente frase: “El éxito es el fruto de una serie de buenas decisiones”. Por tal motivo, seamos generadores de buenas ideas, decisiones y comencemos a medir nuestras emociones. Te aseguro que una buena actitud y enfocada al optimismo nos llevará a conseguir el éxito que deseamos.

La clave está en controlar nuestros “yo”, saber que somos seres llenos de emociones, deseos y sentimientos. No podemos dejar por ningún motivo que un “yo” negativo maneje nuestro vehículo emocional. Elije ser positivo y que el “yo” lleno de buenas vibras sea el conductor para lograr todo lo que anhela nuestro corazón y mente.

Una mente abierta Cada persona es un mundo, esto significa que cada una tiene su propia forma de pensar, actuar y de hablar. Somos todos diferentes, con opiniones distintas en todos los sentidos. Este es el inicio para hablar sobre: una mente abierta, lo cual comprende que, al momento de expresar nuestras opiniones existirán personas que estarán de acuerdo con nosotros y otras sencillamente no. Luego de esto, es importante un siguiente paso para que nuestra mente se mantenga abierta, y no es más que: “respetar la opinión de los demás”. Es así de fácil, muchas veces nos complicamos y queremos que, de todas maneras, todos piensen igual que nosotros. Esa, es la primera manifestación de que tenemos una mente cerrada. Si insistimos en no abrir nuestra mente, estaremos incitando a tener malos entendidos, discusiones y momentos incomodos. Pero de lo contrario, si decidimos abrir nuestra mente y aprendemos a “escuchar” lo que los demás tienen que decir sin tratar de persuadir ni convencer que no están en lo cierto, nos encontramos con una mente totalmente abierta.

En mi experiencia, ha sido muy enriquecedora la decisión de abrir mi mente y poder dialogar tranquilamente con personas de pensamientos opuestos a los míos. Son opiniones que, al final, cada uno es dueño de su verdad y lo mejor que podemos hacer es quedarnos con las cosas positivas que vengan de los demás.

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Es muy importante también tomar en cuenta las siguientes fórmulas para mantener una mente equilibrada, abierta y con ganas de aprender cada día más: Nuevas experiencias: salir de la rutina, tener nuevas vivencias, conocer personas, aprender algo nuevo, ir a lugares que nunca hemos ido y ser originales.

Pensar fuera de la Caja: seamos diferentes, creativos y tengamos ideas nuevas. El pensar más allá te traerá beneficios de aprendizaje y satisfacción personal.

Salir de la Zona de Confort: no tengamos miedo a salir de esta zona. Lo que ella quiere es que nos quedemos allí toda la vida, siendo conformistas, sin metas y sin nada por que luchar. Al salir, nos damos cuenta que, vale la pena trazar el camino de nuestros sueños y ser felices en el proceso de conseguirlos.

Una mente abierta también tiene como característica lo siguiente: • Respeta: sexo, religión, estatus social, orientación sexual, culturas y costumbres.

• No realiza prejuicios o juzga de antemano.

• No existe color de piel, el racismo no se encuentra en el diccionario de una mente abierta.

• Es humilde: porque comprende que no lo sabe todo y sabe aprender de los demás.

• No se calla, habla con claridad sus pensamientos, con inteligencia y serenidad.

Abrir nuestra mente es un trabajo que lleva tiempo. Yo en lo personal he iniciado este maravilloso viaje, que me ha enseñado a valorar a las personas, a sacar lo positivo de cada una de ellas y compartir conversaciones interesantes. He aprendido a ver más allá, ver las cosas desde otra perspectiva y no enfocarme tanto en lo negativo de las situaciones. Obviamente soy un ser humando común con miedos e inseguridades pero, esto se vence con “confianza así mismo” y con el solo hecho de que cada uno es dueño de su mente y tiene el poder de controlarla y decir: Opción A: me mantengo positivo, abierto y con ganas de luchar o Opción B: me quedo en la oscuridad, negatividad y derrotado.

Son dos opciones que tenemos, cada uno decide. Mi misión es decirte: elige la opción A. Llénate de nuevas ideas, de retos, sueños y comparte con los demás con respeto, 21

unión y alegría.

No está mal ser diferente y tener pensamientos alocados. En lo personal me encanta ser distinta, tener la mente abierta y no hacer lo mismo que hacen los demás. Lo importante al final es que seas tú mismo, sin copiar a nadie, tenemos ese sello que nos identifica a cada uno y nos hace ser diferentes, maravillosos y geniales.

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CAPÍTULO II

Propósito de vida

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Tu Propósito de Vida Actualmente vivimos en una época donde todo tiene que ser para ya, donde estamos siempre de aquí para allá, donde hay estrés, migrañas y dolores de espalda. Donde existen preocupaciones y todo un mundo lleno de rapidez y movimiento. Si tan sólo nos detuviéramos por unos minutos a preguntarnos: ¿Qué estoy haciendo? o ¿Estoy teniendo la vida que realmente deseo? Puede que una de las respuestas sea: “Tengo todo lo que quiero pero no, lo que realmente necesito”. “Felicidad Momentánea” como le digo yo. Nos preocupamos por conseguir las cosas que nos dan alegría por un lapso de tiempo, que por conseguir las cosas que nos harán felices por el resto de nuestras vidas. Nos dejamos llevar por un mundo materialista en vez de enfocarnos en las cosas que nos llenan el corazón. Muchas veces sentimos un vacío interno que nos hace cuestionarnos: ¿Qué me hace falta si tengo todo lo que quiero? Bueno, quiero contarles que una gran parte de ese vacío tiene nombre y apellido, no es más que el: Propósito de Vida.

Iniciemos por el principio. ¿Qué es el propósito de vida? La respuesta es muy simple, el propósito de vida es el hecho de que estemos seguros del “Para qué” vinimos a este mundo, ¿cuál es nuestra misión en la vida? o saber ¿cuál es el aporte que dejaremos a las siguientes generaciones? El propósito de vida es la clave esencial para tener un corazón alegre, lleno de esperanza y paz. Al encontrar nuestro propósito sabremos el norte que debemos llevar en nuestra vida, sin interrupciones ni espacios. Estaremos enfocados en “eso” que tanto deseamos y nos entraremos en un mundo lleno de aprendizaje para alcanzar todo lo que queremos. Muchas personas desde muy pequeñas, saben el para qué, hay otras personas que nos damos cuenta un poco más tarde. Pero, lo importante aquí no es saber quién encontró primero su propósito y quiénes no, lo primordial es encontrarlo, fijar la mirada en él y armar el plan estratégico para iniciar la aventura más valiosa y significativa de nuestras vidas. ¿Cómo podemos encontrar nuestro propósito de vida? A veces es muy fácil, lo tenemos en frente nuestra y no nos damos cuenta. El propósito está allí, hablándonos mediante acciones y señales para que nos demos cuenta que es lo que amamos en esta vida. Cuando estás haciendo algo que te gusta, te dejas llevar, te sientes feliz, en paz y con ganas de más, allí es donde debes estar atento y ver las señales. Solo debes detenerte un tiempo y reflexionar, tomar decisión y decirte: “esto es lo mío”.

Todos estamos en este mundo por una razón, todos tenemos esa misión en esta tierra que debemos cumplir. Mientras vivamos bajo el propósito, nuestra vida estará llena de momentos mágicos y de positivismo. La vida la vemos desde otra perspectiva y hace que las cosas se tornen más fáciles. Cada vez que estemos enfocados en nuestro propósito la vida cambia. Y te aseguro que estaremos viviendo de manera 24

más relajada, aprendiendo y cultivando amor, ya que nuestro propósito siempre estará ligado en ayudar a los demás.

Le preguntaba a mi mejor amiga, quien actualmente es “Wedding Planner” o “Planeadora de Bodas” (en español) si ella estaba segura que esa profesión era los suyo. Su respuesta fue la siguiente: “Si, mi trabajo me llena y más cuando las parejas me lo agradecen, es mi mayor satisfacción”. Cuando algo que haces te llena, es allí donde debes estar atento, luchar por conseguirlo y trabajar duro por ello. Es cuestión de tomar las riendas de tu vida y “decidir ser feliz”. Recuérdalo siempre, estamos en este mundo por un motivo, una misión que debemos cumplir, para alimentar el alma, llenarla de cosas positivas con el fin de poder compartirlas con los demás.

Adiós a la zona de confort He leído tantas frases sobre la zona de confort como: "Todo lo que quieres en la vida está fuera de la zona de confort" o "zona de confort: justificación perfecta para no hacer, no crecer, no arriesgarse y no vivir". Iniciemos explicando el significado de la zona de confort. Sencillamente, esta zona es el lugar, situación o estado en el cual estamos acostumbrados a estar, nos sentimos seguros en ella, la conocemos de principio a fin, estamos informados de lo que sucederá en el futuro y principalmente está rodeada de una barrera protectora construida por: miedo, pensamientos negativos y fragilidad.

Todos hemos experimentado vivir en la zona de confort. Personalmente, les comento, que he identificado esos momentos en mi vida, en los que por la monotonía del día a día no tenía esa chispa y ese brillo que nos inspira a seguir hacia adelante.

Nuestra vida nos es perfecta, pero todos somos los responsables de hacer ese "giro" y movernos, de tal manera que disfrutemos de cada minuto de nuestro tiempo, desarrollando "proyectos de vida" o "construyendo nuestro plan personal" para vivir con pasión y alegría el encuentro de nuestros sueños.

Y ¿cómo podemos saber si estamos en la zona de confort? Pues, según mi experiencia, a continuación les detallo algunas señales: Confort laboral: esta señal es una de mis favoritas de explicar. Cada vez observo más personas que no están contentas en sus puestos de trabajo, pero no mueven ni un solo dedo para enviar una hoja de vida a otras compañías o, sencillamente, no encienden un computador o compran un periódico para ver las ofertas de empleo.

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Creen que, con "quejarse", llegará la "hada madrina laboral" que con su barita mágica les conseguirá el trabajo que más desean y con el salario que anhelan. La persona que está estancada en la zona de confort en el área laboral está acostumbrado a "sus quince y sus treinta", esto en cuanto a los días de pago. Los líderes laborales deben observar detenidamente quiénes son las personas que viven en esta zona, ya que, como "mentores", su rol debe ser de "empuje", de crecimiento y, si esto no funciona, está demás decir que hay que pensar en los colaboradores que busca la empresa. Se necesitan personas con pasión, creatividad, innovación y motivación.

Confort profesional: en este mundo tan competitivo no está de más aceptar que debemos seguir preparándonos en el ámbito profesional. Tomar cursos, posgrados, maestrías, seminarios o conferencias es de suma importancia. Sabemos claramente cuáles son nuestras debilidades que obstaculizan nuestro desarrollo como profesionales. Con valentía y empeño trabajemos en todas las debilidades identificadas y avancemos. Y si esto significa algún gasto monetario, recuérdalo siempre: "Toda inversión educativa es única y exclusivamente para ti y solamente para ti".

Confort sentimental: la rutina fácilmente mata. Sal de la zona, de lo cotidiano, rompe el hábito y goza con tu pareja de nuevas actividades. Si realmente estás enamorado y valoras a tu pareja, jamás estarás en esta zona porque disfrutas de la compañía y del amor del otro y, haces que las cosas buenas y malas valgan la pena porque al final todo tiene un aprendizaje para los dos.

Salir de esta zona no es fácil, pero no es IMPOSIBLE. A mí me encanta reinventarme cada cierto tiempo, crecer, evolucionar, tomar riesgos y prepararme para ser mejor persona y profesional. ¿Empezar de cero? He pasado por eso varias veces y ¿adivinen qué? Sigo viva, con más ganas, con alegría y con un total entusiasmo para caminar por el sendero que he construido a través de los años. Y que me ha ayudado: aprender de mis errores, madurando, leyendo, escribiendo, compartiendo con grandes personas, y como lo digo "con ganas de comerme al mundo". Si está en tu mente, lo puedes lograr, todos tus sueños son posibles y los logras con trabajo arduo, con enfoque y dedicación.

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Decidí ser feliz Un buen día decidí dejar a un lado las tristezas, dejar de perder el tiempo en tonterías y comenzar a soñar, a sentirme viva, a llenarme de conocimiento, a gritarle al mundo lo feliz que soy y simplemente un buen día decidí olvidarme de todo aquello que me molesta y me hace sufrir. Sencillamente comencé a ver la vida desde otra perspectiva, a conocerme a mí misma, a llenarme de buenas vibras, a sentir que cada día que pasa es una nueva oportunidad, un nuevo amanecer y una enseñanza para mi vida.

Dejé de estresarme tanto, de preocuparme por cosas que al final tienen solución, de no buscar pleitos y no exaltarme como lo hacía antes. Busqué un momento para tomarme un té y leer un buen libro. Encontré momentos para compartir con personas que me empujen a seguir mis sueños. Inicie a creer en mí, en mi fuerza y en mis ganas de luchar por mis metas. Dejé de respirar en la ciudad los fines de semana para escaparme a sitios muy parecidos al paraíso, para sentir y disfrutar lo hermosa que es la naturaleza, para hacer yoga, meditar y a encontrarme con mi alma, con mi espiritualidad y sentirme en paz.

Ahora vivo de manera distinta, disfruto de las pequeñas cosas que veo en este mundo, me emociona reír junto a un niño, conversar con un anciano, a sonreírle a la vida y llenarme de felicidad porque simplemente vale la pena vivir de manera positiva, de expandir mi conciencia y ver los problemas en retos y aprendizajes y no, como un obstáculo para seguir adelante. Decidí luchar contra todos los tropiezos, lágrimas y apoyar a todas las personas que me rodean.

Decidí serle fiel a mis conceptos, a mi manera de pensar y a tener la mente abierta para nuevas experiencias. Encontré una nueva versión de mí en este camino y no está demás contarles que decidí escribir para llenarlos de esperanza y amor, porque la vida se nos pasa pensando en problemas, en estrés o en desamores. Veamos la vida con pasión y energía. Vivamos día a día con motivación y ganas de hacer las cosas bien.

No nos atormentemos con comentarios tóxicos, con nuestro pasado o con el futuro desconocido.

Con esto no quiero decirles que no he pasado momentos de dolor o angustias pero, todos esos momentos me han enseñado a crecer, a madurar y me hacen recordar lo fuerte que puedo ser y el aprendizaje me lo llevo conmigo siempre.

Comprendí que si pierdo la fe, mis sueños se derrumban, de que si no sigo de pie no logro lo que mi corazón desea. Soy ahora feliz “aprendiendo”, analizando cada 27

situación buscando soluciones positivas para poder seguir adelante y no perder el foco para conseguir mis sueños.

Entiendo ahora, quienes son y serán las personas que deseo que caminen a mi lado en la búsqueda y realización de mis sueños. Y que, el que sinceramente me escucha y me da un consejo sensato podrá contar conmigo hasta la eternidad.

Aprendí a amarme tal como soy, a ver mis defectos, aceptarlos y trabajar en ellos. En tomar la decisión de dar lo mejor de mí para que este mundo cambie y que tengamos tranquilidad y serenidad.

Estoy segura que mis sueños y los tuyos se pueden lograr. Solo tenemos que concentrarnos en ellos, hacer el pacto oficial e iniciar la estrategia perfecta para lograrlos, vivir en armonía y unión con nuestro cuerpo y alma. Porque nuestros sueños provienen desde lo más profundo de nuestros corazones.

Tomemos la decisión de ser felices, no importa tu estatus social, religión, sexo o edad.

Como dicen por allí “ser feliz es gratis”. Todo depende de tu actitud frente a las adversidades de la vida. Tú eres el dueño de tu manera de ver la vida, de tu destino y futuro.

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CAPÍTULO III

Sueños

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“Sueños” “Si tu no trabajas por tus sueños, alguien te contratará para que trabajes por los suyos” Steve Jobs.

Con esta frase célebre de Steve Jobs, inicio este capítulo destacando la importancia que tienen los sueños en nuestra vida. ¿Qué es un sueño? Es una meta que deseas lograr, es ese pensamiento en tu cabeza que te hace sonreír, que te motiva, te llena de alegría y hace que tu día se llene de fe y esperanza. Los sueños son ese camino de luz, son una antorcha encendida que muchos desean seguir. Los sueños, siempre están iluminados, están siempre a la espera por una reacción, por un primer paso o que simplemente nos arriesguemos por ellos.

Un sueño debe ser parte primordial en tu vida. Debes concentrarte en él para conseguirlo. Trabajar duro, hacer sacrificios y tener perseverancia. Lastimosamente muchas veces nos hace falta coraje. No deseamos lanzarnos, tomar el riesgo y entregarnos a ese sueño. Queremos que el sueño llegue a nuestra casa, toque la puerta y llegue así de fácil. No, no, no. Para conseguir lo que anhelamos debemos ser “valientes”, “luchadores” y trabajar arduamente para conseguirlo.

La vida se trata de aprendizaje, todo tiene un por qué y para qué. Si decides seguir tus sueños debes entrar en un mundo lleno de altas y bajas, aprender, ser inteligente, no flaquear, seguir hacia adelante, no mirar atrás, tener el foco hacía ese sueño y pisar fuerte. La vida nunca será fácil, lo fácil se va rápido, no te llena, son solo alegrías momentáneas.

Te invito a que definas qué realmente quieres en la vida. Si, a veces deseamos tantas cosas, pero cuando se trata de los sueños debemos hacer un alto y priorizar cuál sueño deseo alcanzar primero. Analízalo y decide con cuál deseas iniciar, sigue tu corazón, tus sentimientos y un gran dato, que tu sueño no se base solo en el dinero, recuerda que el dinero puede comprar muchas cosas, pero no la satisfacción del corazón. El dinero, como lo mencioné anteriormente importa pero, no debe ser tu sueño. Es parte de, pero no es lo principal.

He aprendido muchas cosas en mi vida en cuanto a los sueños. Aunque no lo crean, mi gran sueño lo tuve frente a mi todo este tiempo, hasta que lo entendí en medio de una situación tormentosa. En el camino, se presentan pruebas que te hacen más fuerte y hacen que abras tu mente. Estas pruebas me confirman que debo seguir mi sueño, porque mi sueño, es el lugar donde quiero estar. Verás que si te enfocas en lo que quieres, estarás convencido de seguir lo que te llena tu alma, en seguir tus sueños y tus metas. Existirán algunas distracciones pero jamás debemos perder nuestro camino por algo que no nos llenará en su totalidad.

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Con estas palabras quiero convencerte a que sigas lo que te dicte tu corazón. A veces somos tan materialistas, tan insensibles a lo espiritual y no estamos conscientes de que estamos de paso en este mundo y, que si no aprovechamos cada momento en hacer las cosas que nos gustan, estamos viviendo sin sentido, sin un propósito y sin alegría verdadera.

Encuentra eso que quieres hacer por el resto de tu vida, dedícate y esfuérzate.

Trabaja por lo tuyo, no para los demás. Te aseguro que tendrás todo lo que deseas si le metes corazón y pasión.

No dudes más, renuévate y asegúrate de que estás viviendo al máximo, haciendo lo que te gusta, dejando un legado en esta tierra, llénate de mucho positivismo y amor.

Atrévete, que el tiempo pasa y no dejes para mañana lo que puedas iniciar hoy.

Aprendiendo a vivir sin Miedos Todos, pero absolutamente todos hemos experimentado una sensación de ansiedad, cobardía o de inseguridad. Lo resumo en una sola palabra: MIEDO. El miedo es un ente monstruoso en nuestra mente que nos dice a gritos: “jamás lo lograras”, “ese lugar no es seguro” o “tú no eres capaz”. Estos y más, son los comentarios que el miedo llega a decirnos, es una voz intermitente que hace que nos estanquemos en un mundo donde todo lo sabemos, que es básico, donde no hay emoción y que tan solo amamos estar. A este mundo lo llamamos “Zona de Confort”. Nos quedamos viviendo en esta zona porque nos sentimos seguros e equilibrados, pero en cambio deseamos cosas opuestas a esto y el miedo hace que sigamos allí, sin importar lo que soñamos y lo que nos queda, es quejarnos de cada cosa que pasa en nuestra vida. Anhelamos tantos sueños y no los llegamos a concretar por culpa del miedo. No digo que “nada importe” sino más bien, que hagamos un alto a reflexionar, que no podemos vivir con miedo, debemos ser cuidadosos eso sí, pero no concentrarnos en el miedo en cada paso que damos. Si nos enfocamos en nuestros temores, te lo aseguro, que la ley de la atracción llegará para demostrarnos que: “si lo piensas, pasará”. Una mente positiva y llena de buenas vibras hará que tu día no tenga estrés y malos ratos. Claro, ninguno tienen una bola de cristal, ni ve el futuro para saber con certeza que nos sucederá, nadie sabe nada, lo que sí puedo aconsejarte es vivir con alegría, con optimismo para que todo marche bien y te pasen cosas maravillosas. Vivir con miedo es natural, a mí me pasa, le temo a ciertas cosas que, con un poco de valentía, voy venciendo poco a poco. Entiendo que el mundo está lleno de personas perversas, que existen desastres naturales o a veces decimos: “estaba en un lugar inadecuado y sucedió”.

Nuestra vida tiene un plan desde que nacemos, nuestro destino está escrito, lo que nos toca es construir la estrategia para cumplir nuestras metas, el camino lo hacemos nosotros, el futuro ya vendrá. A continuación te detallo algunos puntos a considerar 31

para vivir sin miedos.

Investiga antes de hablar o actuar: en cualquier situación o con personas que sientas algún temor, procura consultar o investigar, a veces hacemos juicios anticipados sin informarnos bien acerca de un tema.

Haz las paces con la valentía: depende de cual sea tu caso, la mejor aliada es la valentía. Cuando entiendas que dejar a un lado el miedo será la mejor solución para acercarte a lo que deseas, te reconciliarás con la valentía y te aseguro, que será una relación duradera y llena de excelente beneficios.

Llénate de pensamientos positivos: Entrégate a pensar todo en positivo.

Conviértete en una persona con buena actitud. Como les comentaba, “la ley de la atracción”. Atraemos todo lo que pensamos, si nos concentramos en pensamientos positivos nuestra vida cambia y estará completa de plenitud y felicidad.

Encuentra mentores: únete a personas que inspiren, que te llenen de buenas vibras y que te asesoren en el viaje a conseguir lo que deseas. Estas personas serán clave para vencer miedos y todo tipo de interrupción. Ellas te guiarán por el camino correcto hacía la búsqueda de tus sueños.

No te estreses por el futuro: muchas veces el miedo es tan sólo: imaginarnos que algo malo pasará o que algo no saldrá bien. Como verás el miedo nos es más que algo inconcreto, es un pensamiento, no un hecho. Elimina ese estrés sobre el: ¿Qué pasará?, vive el hoy, cada hora, cada minuto y cada segundo. El futuro llegará en su momento, lo importante es disfrutar del presente y gozar de sus maravillas y sus enseñanzas.

Realización de los sueños Vinimos a este mundo a soñar, a vivir con alegría y pasión. Somos seres con tanto que aportar y por hacer. Muchas veces no nos damos cuenta que dejamos nuestros sueños a un lado por hacer cosas que no nos llenan en su totalidad. Nos conformamos por algo estable y vivir en nuestra zona de confort, porque es allí donde nos sentimos seguros, donde todo lo sabemos y no existe riesgo alguno. No nos atrevemos a lanzarnos, a vivir esa aventura de la búsqueda de nuestros sueños porque tenemos miedo al fracaso, a perder algo o simplemente no nos atrevemos por falta de valentía.

Y, ¿qué hacemos? Nos quedamos viendo a los que sí se atreven a soñar y somos solo los espectadores de la fascinante película de los demás en vez de ser nosotros 32

también los protagonistas de nuestra película, de hacer la vida distinta, de vivirla con energía, motivación y con el ánimo de armar la estrategia para el encuentro de nuestros sueños.

Yo los invito a ser personas soñadoras. A que no dejemos todo para el famoso “después”. Llenémonos de valor y sigamos lo que nos dicta el corazón. Muchas personas piensan que los sueños son “imposibles” pues, yo les aseguro, que todo en la vida lo podemos lograr.

Pongamos en acción la realización de nuestros sueños.

A continuación les comparto un método que podemos utilizar para iniciar el guion de nuestra hermosa película: • La lista: haz una lista, en orden de prioridad, de todos esos sueños que tienes en tu corazón. Esos que te sacan una sonrisa, los que sabes que te llenarán de satisfacción y alegría tu alma.

• Significado: cada sueño debe tener un significado o una razón. Es muy importante que sepamos por qué deseamos tal cosa o ¿cuál es el fin? Debemos tener claro el motivo por el cual deseamos algo. Mientras más entendamos lo que queremos más fácil será para nosotros la realización de nuestros sueños.

• Arma tu estrategia: inicia la logística y estrategia para la realización de tus sueños.

Desarrolla e investiga cuáles son los elementos necesarios para conseguir lo que deseas. Arma el plan e inicia el camino.

• Aliados estratégicos: únete con personas que te empujen a la realización de tus sueños, que te guíen, te motiven y que sobre todas las cosas sean una influencia positiva para ti y tus sueños.

• Aprende del Fracaso: el fracaso no es más que un gran aliado. Él nos enseñará a qué hacer y qué no hacer en el futuro. Habrá frustración pero, esto no significa que debemos parar, sino más bien, que sigamos hacia adelante, que solamente es un aprendizaje y no el final de nuestra película.

• Perseverancia: es la amiga del fracaso ya que, luego que aprendimos de él, la perseverancia estará guiándonos a no desistir y que, pase lo que pase estaremos enfocados en nuestros sueños gracias a ella.

Como dice el gran dicho “no dejes para mañana lo que puedas hacer hoy”. Inicia el camino de tus sueños y vívelo con alegría. Como ya lo mencioné “todo en esta vida se puede lograr” eso sí, lo logras con empeño, dedicación, entusiasmo, entrega y trabajo arduo. “Tus sueños no caerán del cielo”, debemos ir por ellos y disfrutar del camino para conseguirlos, porque eso es lo que hay, seguir caminando, seguir hacia adelante y ser feliz.

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CAPÍTULO IV

Éxito

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El éxito Una de mis bandas favoritas de rock menciona la siguiente frase en una de sus canciones: “Anotando lo que la vida poco a poco me ha ido dictando y miro hacia atrás y el camino ha sido largo, voy porque voy aunque falte pa' llegar al punto más alto, sigo subiendo con cada paso” Señor Loop. Cada vez que escucho esa parte de la canción “Triste Perro”, recuerdo todo mi caminar y todo lo que en mis treinta y tres años he aprendido en cada experiencia. He reído, llorado, bailado, viajado y disfrutado el tiempo, cada minuto, cada segundo. Miro mi pasado y comprendo que nada ha sido en vano. Todo tiene un por qué y una enseñanza. Y luego, me veo trabajando para el futuro y voy paso a paso poniendo cada pieza en su lugar para lograr todo lo que deseo y obtener el éxito que tanto anhelo. Si me preguntan, mi éxito se basa en algo sencillo: “Hacer las cosas que me hacen feliz”. Cada uno ve el éxito como más le guste, convenga o lo desee. En lo personal el éxito no se mide por riquezas o poder, sino más bien, se mide por la paz y tranquilidad que tengas en tu corazón, la felicidad que posea tu alma, el brillo en tus ojos y en tu ser. Muchos me dirán que enloquecí, pero para mí, vale más una sonrisa sincera que una cabeza confundida llena de estrés y de problemas por pensar en cosas que no llenan el alma y el corazón.

“El éxito es el fruto de una serie de buenas decisiones" Deepak Chopra. Les comento esta frase ya que es la definición más clara que he podido obtener acerca del éxito. Si tomamos buenas decisiones y ejecutamos buenas ideas conseguimos el éxito que tanto queremos. Adicional a esto, es muy importante tomar en cuenta los siguientes factores: Aprender del Fracaso: el éxito no se obtiene de la noche a la mañana. Es de suma importancia aprender de cada caída, de cada error, con el fin de no volver a repetir cada tropezón. El fracaso es parte esencial hacia el éxito porque nos “enseña” a qué no hacer, a qué seguir y ese aprendizaje nos queda para toda la vida.

Perseverancia: nos ayudará a seguir de pie, a no perder las esperanzas y a continuar nuestra lucha para alcanzar nuestras metas. Si nos rendimos, no logramos el éxito que deseamos. La vida tiene momentos de aprendizaje y momentos buenos. Así de simple nunca perdemos por esto, siempre hay que seguir firmes e ir hacia adelante.

Optimismo: ser personas de pensamientos positivos, llenarnos de buenas vibras y de gente que nos ayude de alguna manera a seguir de pie para conseguir nuestros sueños, es de gran ayuda para poder tener éxito. Cuando tenemos una mente positiva todo cambia, nuestra vida vuelve a tener color y nuestros problemas se vuelven en 35

retos que con valor pueden ser superados y con seguridad saldremos victoriosos gracias a nuestro optimismo.

Ser feliz: para lograr el éxito hay una parte muy importante que debemos sacar a flote, no es más que nuestra felicidad, la que viene desde lo más profundo del alma, no la pasajera ni momentánea como le digo yo sino, la que hace que nuestro corazón salte de alegría y que nuestro espíritu se llene de grandeza y gratitud. Seamos felices viendo cada logro, cada escalón y disfrutemos de cada momento y de cada escena de este gran viaje que lo denominaremos: “El viaje de los sueños”.

Finalizo nuevamente con Señor Loop: “Y yo mantengo el curso, mientras tenga pulso”.

Esta frase nos dice: mientras tengamos vida hay esperanza, debemos vivir con pasión, alegría, paz, vivir bajo el propósito de nuestras vidas y armar la estrategia para obtener nuestros sueños para conseguir el éxito deseado y disfrutar de este gran regalo llamado: LA VIDA.

La piedra en el camino Una persona muy especial me escribió lo siguiente: “que la piedra que te encuentres en el camino, te sirva para construir un gran edificio”. Apenas leí su frase me vino a la mente el sinnúmero de piedras con las que he tropezado, todos eso bajones, fracasos, caídas, resbalones o como quieran llamarle. Con esta frase comprendí que, de nuestros tropiezos, podemos de alguna manera transformarlos en nuestro gran aprendizaje para luego, fabricar un futuro lleno de éxitos.

Muchas veces nos encontramos en situaciones inexplicables, nos hacemos miles de preguntas y nos decimos: ¿Por qué a mí? Todo al final tiene una enseñanza. Nuestra misión es aprender de cada error o cada caída. Nos complicamos tanto, nos llenamos de ira y dolor. Cerramos nuestra mente, la contraemos y nos quedamos en un mundo oscuro sin pensar: “por algo pasan las cosas”.

Esa misma persona nuevamente me dejó meditando con lo siguiente: “La vida no es complicada, tú la haces complicada”. ¡Wao! eso fue directo y sin filtro. Reflexioné y en resumen, tiene toda la razón. La vida es alegría, con sus buenos o malos momentos, siempre debemos cargar una sonrisa en nuestro rostro, seguir hacia adelante, sin perder el foco y llenarnos de pensamiento positivos. Ser positivos es un reto que todos debemos tener. Porque siempre tendremos lecciones que nos harán sufrir o llorar pero luego, nos harán crecer y madurar. Nos llevarán a tener una nueva vida y te aseguro, que agradeceremos por todo aquello que nos sucedió porque “de todo se 36

aprende”.

Lo sé, nos es fácil, llegar a casa encontrar problemas, tener un jefe estresante, un trabajo que no nos guste, alguna enfermedad o simplemente vivir en medio de injusticias. Lo he vivido, me ha tocado, me he caído pero, así mismo me he levantado.

Y como dicen por allí, te caes pero te levantas con más fuerza que nunca. Allí está el gran detalle, no es levantarse por levantarse, es decirle al mundo: “Me caí, pero me levanto, con un gran aprendizaje, con ganas de vivir feliz, porque la vida es una y quiero lograr lo que deseo”. Tener una actitud optimista es pensar en uno mismo, es ver todo en positivo. Es allí donde les puedo decir que, una de las claves para resolver todas las adversidades de la vida es ser “OPTIMISTA”.

La segunda clave para seguir nuestro camino es la PERSERVERANCIA, porque ella nos ayudará a no parar, a continuar nuestro sendero para alcanzar todo lo que queremos. Si a la primera nuestra estrategia no funcionó, entonces vamos de inmediato al plan B. Siempre habrán otros escenarios, la primordial está en NO RENDIRSE, en olvidar que el plan A no funcionó pero, aprender de nuestros errores para no aplicarlos nuevamente.

La tercera clave es CREE EN TI. Cree en tu fuerza, en tus ganas de luchar. No hay persona que sea mejor que tú. Todos somos diferentes, con pensamientos distintos.

Si comienzas a comparar tu vida con la de los demás, te aseguro que no llegarás a ningún lado. Somos únicos, poderosos y con un sinfín de talentos. Crea tu plan de acción para conseguir tus metas, cree, vívelo y demuéstrate que eres capaz de todo, porque tu sencillamente puedes obtener todo lo que desea tu corazón.

Nunca es tarde para cambiar nuestra actitud. Seamos personas llenas de amor y positivismo. Los problemas, retos y dificultades son parte de la vida. Son piezas esenciales de nuestro aprendizaje como seres humanos, con el fin de que veamos todo desde otra perspectiva, que seamos luz y trabajemos por ser mejores cada día.

“La piedra en el camino” no es más que la gran lección de nuestras vidas. Seamos pacientes, meditemos porque nos suceden ciertas situaciones incomodas y veamos todo del lado positivo. En conclusión, nunca dejemos de sonreír porque, hemos aprendido y superado cada prueba, para así crecer como personas y vivir en armonía con nuestro corazón, cuerpo y alma.

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“El buena Vibra” Conocer personas “buena vibra”, hablar con ellas, compartir ideas y consejos es una verdadera terapia para reducir todas nuestras inseguridades, miedos y trastornos emocionales. En lo personal me encanta conversar con gente así, gente que me recuerde: “vamos pa’ lante”, “sin miedo a nada” o el magnífico “vamos con todo”. La gente buena vibra te empuja a seguir tus sueños, te llena de buena actitud, de alegría y te inyecta positivismo porque, en su ADN se encuentra un sinnúmero de buenos sentimientos y eso se nota desde su mirada, sus gestos, sus respuestas y su modo de actuar.

La gente buena vibra sabe que necesitan de su consejo, ellas no durarán en darte uno, y no uno cualquiera o simple, sino más bien, te darán un gran consejo que te sacudirá todos esos pensamientos negativos, te animará y alentará en cuestión de segundos.

Como reconocemos a nuestros simpáticos buena vibra: • El buena vibra nunca te envidiará, sino más bien te admirará. Tomará tu ejemplo y le servirá como guía para cumplir sus sueños.

• Se guardará todo pensamiento negativo, no lo dirá porque sabe que podrá hacer daño con tan solo mencionarlo.

• Verá todo lo positivo que hay en alguna escena negativa. No te recordará tus errores, sino más bien, te aconsejará en su momento para que no los vuelvas a repetir.

• El buena vibra sabe reconocer a las personas que desea que estén a su lado. Sabe que su actitud positiva es un gran tesoro y no querrá contagiarse de gente tóxica.

• Una persona buena vibra siempre estará invitada a juntarse con los demás, porque sencillamente es agradable, tiene tema de conversación y su característica de animar a los demás brillará y esto a la gente le agradará. ¿Qué pasaría si todos fuéramos buena vibra? ¿Nuestro mundo sería igual? ¿Tendríamos tantos conflictos? La realidad es que existen muchas personas con pensamientos tóxicos, que por falta de buena actitud y de pensamientos positivos destruyen sin piedad cada situación sin ser conscientes de las consecuencias que muchas veces, esas consecuencias se reflejan hacia ellas mismas y hacia los demás.

Si somos positivos, con pensamientos optimistas nuestro mundo y el de los demás cambia. En la vida todo se logra dependiendo de tu actitud y tu forma de ser.

Tener una buena actitud es de grandes. Solo piénsalo. Cuando necesitas un buen consejo o un empujón, ¿Qué te gustaría escuchar?: ¡Qué todo lo puedes lograr!

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¿Cierto? Así mismo como deseas recibir mensajes positivos sé también el portador de buena onda, buena vibra y buena actitud. Todo esto se trata de una gran cadena que sea transmisora de elementos justos y necesarios para seguir hacia adelante y conseguir el éxito que deseamos.

Ser positivos en la vida es una herramienta esencial para cumplir tus sueños y metas.

Si lo piensas, lo puedes lograr, así de fácil. Lo único que se necesita es, enfocarse en lo que uno desea, trabajar con esfuerzo, con corazón, metiéndole pasión y dedicación.

“El buena vibra” es un gran aliado. Únete con personas que te empujen a seguir tus sueños, que te aconsejen y apoyen. Lastimosamente estoy segura que, a nuestro alrededor, se encuentran personas negativas, con esto no estoy diciendo que le quitemos el habla pero, es muy importante no dejarse manipular por sus pensamientos y frases desmotivadoras. No podemos caer frente a comentarios ajenos, la historia es nuestra y debemos vivirla de la manera que mejor nos parezca, siguiendo nuestro corazón y mente, dando todo por el todo y aprender de cada error.

Somos nosotros los dueños de nuestro destino y hay que dibujarlo de manera positiva y con la mente clara de que todo lo podemos lograr.

Se el “buena vibra” de tu vida y de tu mundo. Llénate de luz e irradia paz y alegría hacia los demás.

Oportunidades En la vida, se nos presentan un sinfín de oportunidades. Existen oportunidades donde no dudamos en lanzarnos e ir por ellas. Hay otras que les tenemos temor o interrogantes. Las oportunidades aparecen en nuestro caminar una sola vez, son como pequeños temblores que sacuden nuestro cuerpo y mente, nos hacen analizar y, si damos el sí a esa oportunidad, nuestro mundo cambia y la historia escrita por nuestras propias manos da un giro excepcional lleno de experiencias y de aventuras nuevas.

Yo soy fiel creyente en darle un sí a las oportunidades, a descubrir todo lo que hay para llenarme de innovación, aprendizaje y para hacer el cambio justo y necesario que necesita mi vida.

La rutina mata por esto, me gusta evolucionar, ir desarrollando mis talentos y destrezas, seguir hacia adelante en busca de mis sueños que van acompañados de 39

“oportunidades” por esto, es clave evaluar cada una de ellas, si van en la misma sintonía que mis metas y entregarme al 100%.

Las oportunidades se toman o no. Así de sencillo. Ellas no estarán esperando tu respuesta por un largo periodo, ellas tienen un ciclo de vida, son como una bomba donde no tienes mucho tiempo para decidirte. Ellas vienen y van. Y muchas llegan en el momento menos esperado, yo les llamaría “sorpresivas”. Llegan a tu vida cuando necesitas darle esa vuelta que necesitas. Si das el sí todo cambia y si te niegas a lanzarte seguirás en la misma rutina.

Es muy importante conservar una oportunidad que te ayude a ser mejor y que sea el puente que te hará llegar al logro de tus objetivos. Hay que estar claros que nada en nuestra vida es fácil. Cuando llega la oportunidad y la aceptamos, no solo le dimos el sí a ella sino, a todo lo que trae. Por esto, hay que tomar acción con positivismo, entrega, pasión y perseverancia para que todo marche como lo deseamos.

Cualquiera que sea tu oportunidad, que podría ser: un nuevo trabajo, estudios, vivir en el extranjero, un negocio, una nueva relación, entre otras, es normal hacerse preguntas al respecto pero, si esto que llega a ti y te conviene, es por tu bien, te hará crecer personal o profesionalmente entonces no tengas dudas porque, las oportunidades solo se dan una vez y así como también, solo se vive una vez.

Hay ocasiones que no aceptamos algunas oportunidades por miedo. Es normal sentir miedo. Somos seres humanos llenos de dudas pero lo importante aquí es tener la valentía de aceptar lo “nuevo”. De salir de esa zona de confort, de ese día a día y encontrar esas cosas que nos brindan alegría eterna y, que nos ayudarán a seguir adelante en nuestro camino.

No perdamos oportunidades importantes, después nos quejamos que por qué a “otros” si les pasan cosas geniales y a nosotros no, sin mirar atrás que también, nos han llegado buenas oportunidades que hemos rechazado sin haber analizado detenidamente cada detalle. Y es allí donde comenzamos a comparar la vida de los otros con la nuestra y nos quejamos como si la vida nos hiciera un gran boicot mientras que todo lo contrario, la vida a todos nos presenta oportunidades solo que otros si las aprovechan como se debe mientras que otros no.

Llénate de valor y dile sí a las oportunidades. Arriésgate por aquellas que te harán bien. Esas oportunidades que te harán mejor. Ellas son únicas y son exclusivas para ti. Es permitido analizar cada una de ellas pero lo que no es permitido es, arrepentirte 40

de no tomar una que te haría feliz.

Sigue tu corazón, tus sueños y metas. Ellos van de la mano de las oportunidades que te llevarán a la cima donde, podrás observar tu universo de logros y triunfos.

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CAPÍTULO V

Paz

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Espiritualidad y más allá Conversando con unas amigas en una escapadita de esas que realizo eventualmente, estuvimos tocando un tema que me encanta y podría hablar horas y horas de lo mismo, porque sencillamente este tema me apasiona y me emociona descubrir más sobre él. El tópico era nada más y nada menos que de la “Espiritualidad”.

Cada una expuso su punto de vista acerca del tema. Pude notar que cada una tenía su manera de pensar acerca de la espiritualidad, todas de una manera distinta. Es allí, donde decidí ponerle: “Espiritualidad y más allá” a esta parte. Aquí, les expongo mis pensamientos y opiniones acerca del significado tan importante y esencial de la espiritualidad y su presencia en mi vida y sobretodo, en la renovación y crecimiento como persona.

Iniciemos con el “espíritu”. En mi concepto, el espíritu es el motor, el corazón o el punto más importante de mi ser y de mi existencia. Es el encuentro conmigo misma.

Para mí la espiritualidad es la acción de pensar, meditar y conversar con mi “Yo interno”. Es conocerse a uno mismo, a nuestra alma, nuestros sueños y metas por alcanzar.

Luego de muchas experiencias y anécdotas sobre la búsqueda de la felicidad, pude comprender que la felicidad está dentro de cada uno, de cada lado de tu ser, junto a tu alma. En lo personal, he decidido a realizar actividades y a trazarme objetivos o metas para alimentar mi alma de alegría extrema porque, definitivamente no hay mejor felicidad que la que va directa al corazón y al espíritu.

Este tema va más allá de lo terrenal. Muchas veces nos enfocamos en cosas materiales, nos complicamos en el día a día y no nos detenemos un minuto a reflexionar sobre nuestros sueños, de quienes somos y en nuestra felicidad eterna.

Nuestro espíritu o nuestro ser, nos llama a ver la vida de otra perspectiva. A vivir con amor y felicidad en las cosas más simples que existen en este mundo. Cada uno lleva por dentro un ser lleno de luz que desea ser escuchado.

A continuación les enumero de manera sencilla como podemos tener una relación plena y efectiva con nuestro yo interno y descubrir la espiritualidad: Meditación: es llegar a encontrarte contigo mismo(a). Es el punto donde confirmas tus sueños, a conocer más a fondo lo que te preocupa y todo lo que guardamos en lo muy adentro de nuestro corazón. Sólo cierra los ojos, concéntrate, no pienses en nada, déjate llevar y vive la meditación.

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“Inhala y exhala”: respirar es una acción de cada día. Detente unos minutos y toma conciencia de tu respiración. Siéntete vivo y llega a comprender que eres un ser lleno de vida y espíritu.

Contacto con la Naturaleza: observar las maravillas que existen en el mundo y admirar los bosques y áreas verdes. Solo déjate llevar por su perfección y respira el aire puro que habita en esas zonas.

Encuentra un momento a solas para descubrir las maravillas que hay en ti. Tómate unos minutos para escuchar tu voz interna, para entenderte, conocerte, llenarte de paz, para perdonarte y observar que es lo que realmente te llena. A confirmar tus sueños para luego ejecutar el plan estratégico para alcanzarlos.

Mi punto de vista sobre la espiritualidad no necesariamente es la que “hablo con gente muerta” o que siento presencias del más allá o veo fantasmas. Mi espiritualidad es la acción de poder escuchar mi alma y de que sí, soy de carne y hueso pero también, llevo por dentro a una mujer llena de sueños y deseos. Mi cuerpo sólo es el vehículo para alcanzar lo que realmente quiero.

Esta es mi verdadera espiritualidad, es una cita con mi yo interno y hace que cada día crezca el deseo de vivir con plenitud, aprendiendo sobre cómo ser mejor persona y dejar un legado de positivismo y amor para todos.

En busca de “paz” Todo ser humano desde tiempos antiguos, siempre está en busca de paz, con el fin de vivir momentos llenos de tranquilidad, de suavidad y de silencio. Entrar en un mundo donde nada moleste, nada estrese y que sobre todas las cosas no exista ruido ni personas que dañen su tiempo de relajación. Eso, para muchos es la “paz”. Cada quien la ve como la sienta mejor. Cada uno vive su paz de manera diferente donde comprende, que haciendo tal cosa, le de paz. Podría ser una escapada a la playa, un pasatiempo como pintar, escribir, leer, diseñar, observar la naturaleza, jugar algún deporte o tocar algún instrumento; sea cual sea tu paz, todo es válido porque, son momentos únicos y tuyos donde no existen perturbaciones.

Sentirse en paz es conveniente, justo y necesario. Todos debemos encontrar ese momento para llenar nuestra alma de serenidad. Tomemos conciencia sobre nuestros actos y dediquemos un lapso de tiempo para convivir con nuestra paz. ¡Todos la merecemos! Quien no cree merecerla está completamente equivocado. Venimos a 44

este mundo para ser felices no para pasarnos todo el día estresados en nuestro trabajo, pensando en problemas o simplemente ser un total amargado.

Nuestra paz siempre está dispuesta a esperarnos. A que saquemos un tiempo de nuestra apretada agenda para envolvernos en su mágica capsula, para vivir instantes que solo son nuestros, que son netamente íntimos, que llenan nuestro día de calma y lo más especial, sacarnos una verdadera sonrisa que proviene de lo más profundo de nuestro ser.

Además de vivir momentos de paz, les comento que la paz está en nosotros mismos, dentro de cada uno, en como vemos la vida y sobre todo como tomamos las cosas de los demás. Muchas veces decimos frases como “llego a casa en busca de paz y mi mujer es la primera que me la quita”, o puede ser en el ámbito laboral: “me despierto con paz pero al llegar a mi oficina me roban toda mi calma”. La paz también es “ACTITUD”. Sí, no voy a decirles que en nuestros días no aparecerán personas tóxicas con ganas de robarnos nuestra paciencia pero todo, absolutamente todo, está en nosotros, en respirar profundamente, en meditar antes de hablar o contestar, en ser personas pacíficas y con templanza. Como dice un gran amigo: “Toma las cosas de quien vienen”. Esa frase se me ha grabado en mi mente y quiero decirles que es totalmente cierta. Nos estresamos tanto por cosas que nos dicen los demás y no examinamos con atención al emisor del mensaje. Recuerden que para dar críticas constructivas o algún comentario debemos dar el ejemplo. Porque simplemente lo que nos define son nuestras acciones y no nuestras palabras. Así que, de ahora en adelante, al encontrarte a una persona negativa y comience a derramarte sus líquidos tóxicos, reflexiona antes de hablar, observa bien al emisor y simplemente no dejes que robe tu paz. No le des el gusto de darle uno de tus grandes tesoros, que es tu paz. Es más, comprende que esa persona debe estar pasando por momentos difíciles y su mundo debe estar completamente gris y sin salidas.

Podemos notar que existen diferentes tipos de paz. Tenemos la de realizar alguna actividad que nos regale tranquilidad y la paz consistente que debemos guardar dentro de nosotros para confrontar diferentes escenarios cotidianos y así, poder tener un control mental en todas las diferentes áreas de nuestra vida.

Ser personas de paz, convertirnos en seres llenos de luz es un gran aporte que podemos brindarle a nuestro mundo. Tener momentos nuestros y llegar a tener una inteligencia emocional son las claves para mantener una mente equilibrada y a la vez que está en completa evolución para vivir de manera relajada y con buena salud mental.

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Uno de mis lemas es “decide ser feliz”. Vivamos en paz y alegría. Nuestra misión es ser seres llenos de buenas vibras, de cosas positivas y de mucho amor para compartirlo con los demás.

Viviendo sin Rencor Existe un sentimiento que llena nuestra mente y corazón de odio, de malestar y nos deja siempre un mal sabor, nos guste aceptarlo o no. Este sentimiento es tan pesado que, muchas veces nos sentimos exhaustos y llenos de pensamiento negativos. Este sentir le llamo “Rencor”. ¡Uf! lo he sentido muchas veces, alzo la mano y lo acepto.

Todos hemos estado envueltos a este sentimiento que carcome el alma y envenena el corazón. El rencor hace que nos estanquemos, que no vivamos en paz y que no sintamos esa tranquilidad que tanto buscamos. Hace que tengamos sensaciones incómodas y simplemente hace que no podamos vivir en armonía con nosotros mismos. Sí, así lo veo yo, difícil y complicado. Cuando vivimos con rencores nuestro corazón cambia de color, oscurece y le ponemos una barrera a la libertad, nos encadenamos a “eso” que nos hizo daño o nos ofendió. Vivir con rencor es, estar atado al pasado. Lo que queda es, aprender de lo sucedido, perdonarse a uno mismo y a los demás. Lo importante es la enseñanza de las cosas que fallamos y seguir hacia adelante. ¡OJO! No podemos jamás cambiar a las personas, ellas cambiarán solas cuando estén realmente listas. Lo que tenga que cambiar la persona que te ofendió, ¡ella sabrá! Nuestra meta ahora es mejorar cada uno, día a día y la misión es trabajar en nosotros mismos para vivir en paz, con una buena salud mental, física y sobretodo, compartiendo momentos alegres e inolvidables con las personas que amamos. Vivir con rencor es natural, no te sientas mal si lo estás viviendo. Somos seres humanos, todos con un lado oscuro que debemos reconocer para entenderlo y poder superarlo de una manera sana y honesta con nosotros mismos.

Nuestro semblante cambia cuando comprendemos que perdonar es la mejor opción para salir adelante. Aprender y saber olvidar es un detalle esencial para poder vivir sin rencores. Entiendo que existen personas que nos han hecho daño de tal grado que es muy difícil perdonar. Lo sé, lo he vivido en carne propia. Los puedo entender si aún no han podido perdonar. Pero, lo que si les puedo asegurar es que aceptando las cosas, ver la vida de manera optimista y perdonar, sus vidas se transforman, se llenan de luz y se liberan de esa situación que tanto daño les causó. Leí en algún lado, lo siguiente: “Realmente has perdonado cuando puedes recordar la situación que te hizo daño sin dolor”. Enseguida que leí esta frase pude comprenderla, ya que es totalmente cierta.

Porque ya estuve allí en esa situación. Perdonar es un proceso que sólo tú puedes experimentar. Nadie puede decirte “perdona” si tú no estás dispuesto hacerlo. Es un 46

proceso íntimo donde podrás descubrir las maravillas que hay en ti. Te aconsejo un método eficaz para llegar al perdón. Se llama meditación. No soy experta en esto, apenas una principiante pero, la meditación me ha ayudado a descubrir mucho sobre mí y a perdonar todo aquello que en su momento me hizo mal o daño. Entendí que si seguía viviendo de esa manera no podía avanzar con libertad. En la meditación te escuchas a ti mismo y aprendes cosas sobre ti que no comprendías.

En fin, mientras que tengamos vida llevémosla con pasión, alegría y paz. Vivamos rodeados de personas que nos empujen a seguir nuestros sueños, que nos aconsejen y que sean puntos positivos para poder llevar una vida equilibrada y llena de momentos inolvidables. El perdón no lo olvides de tu lista, es la clave para vivir en plenitud y felicidad. Como comenté, sólo tú tienes la llave para vivir en paz mental y tranquilidad. Anímate a realizar un cambio en tu vida, a encontrarte y entender que, muchas veces, no vale la pena seguir con pensamientos llenos de rencor y odio. Hay que seguir avanzando, llenos de amor para alcanzar todo lo que deseamos, porque recuerda que la vida es sólo una y no es precisamente para estar viviéndola llena de pensamiento negativos. Decide ser feliz hoy y construye un mundo lleno de espiritualidad, sueños y positivismo.

Liberando cargas Las experiencias en mi vida me han enseñado que debo abrir mi mente para comprender ciertas situaciones que me han hecho sufrir. He llegado a un punto en el cual he expandido mi conciencia para poder entender el actuar de ciertas personas o momentos incómodos.

Comprendí que todos nos equivocamos, todos fallamos y que aunque en su momento me hicieron mucho daño, esto debía de pasar para iniciar mi etapa de aprendizaje, crecimiento y madurez.

Liberar cargas pesadas, perdonar, comprender que todos erramos es el primer paso para un corazón lleno de plenitud, con paz, tranquilidad y menos equipaje. Es darnos una oportunidad para vivir con alegría, de no pensar más en lo que sufrimos y vivir momentos de felicidad, aprendiendo, con actitud positiva y llenos de buenas vibras para seguir hacia adelante.

En este viaje tan real, tan mío y tan íntimo he aprendido a ponerme en el lugar de los demás, a entender la situación de cada uno y comprender, por qué aquella persona actuó de alguna manera que hirió mis sentimientos. En este proceso desarrollé la 47

liberación de cargas pesadas para así poder dejar todo rencor, malos recuerdos, tristezas o sufrimiento y así, de tal manera, poder perdonar a los que en su momento me hirieron o me hicieron sentir mal. Dejar esas cargas y sentirme libre, llena de paz es una de las mejores sensaciones que puedo tener en mi existencia.

Muchas veces nos cuesta dejar esas cargas, nos enfocamos solo en el dolor y llevar todo ese peso con nosotros. Tener ese “yunque” de negativismo en nuestro cuerpo es uno de los precursores de que en algunos momentos suframos estrés, dolores de cabeza o cualquier tipo de dolencia física. El cuerpo humano trabaja en comunicación con nuestros pensamientos que hacen de alguna manera, se vean reflejados en nuestra salud física. Si somos personas optimistas, con pensamientos positivos te aseguro que nuestra salud cambia. Si nos enfocamos en rencores, odio y pensamos solo en los malos momentos nuestra salud se afecta de forma negativa.

Sé que es muy difícil liberar todo aquello que nos hizo sufrir, pero no está de más recordarles que si es posible, solo debemos abrir nuestro corazón, ser sinceros con nosotros mismos y decidir dejar todo aquello atrás y darle un giro a nuestra vida, cerrar ese capítulo e iniciar uno nuevo. La vida se nos pasa pensando en dolor cuando la vida se resume en felicidad, porque todos vinimos a ser inmensamente felices. La decisión de dejar todo atrás es tuya, nadie podrá obligarte, pero mi misión es darte ese empujón para que veas la vida del otro lado, que tu corazón este libre, lleno de amor y vivas en armonía y alegría.

Vinimos a este mundo a relacionarnos con los demás, no podemos ser islas.

Debemos aprender a controlar nuestras emociones, olvidarnos de ser impulsivos, analizar antes de hablar, de actuar y no comprometer nuestra tranquilidad con episodios que solo truncan nuestra paz mental y espiritual.

Encuentra ese momento para soltar todo aquello que te hace sufrir. Tu actitud frente a la vida será el motor de tus días, de tus metas y sueños. Si no haces el cambio y decides vivir en la oscuridad, estarás malgastando tu vida entera. No lo dudes más y llénate de días positivos, de ideas, de sueños de esperanza. Contagia esa alegría con tu gente. Seamos luz y botemos todo aquello que no nos deja avanzar. Seamos conscientes de que todo en la vida tiene solución y que veamos nuestro mundo con optimismo para alcanzar todo lo que deseamos. ¡Libera ya toda esa carga! no esperes más. Toma la elección de vivir en paz y alegría.

Hagamos un esfuerzo, demos lo mejor de cada uno y brillemos para tener un mundo lleno de amor, de momentos felices, de unidad y hacer que todo cambie de manera 48

positiva para construir un mejor futuro.

Paciencia para el alma.

Todo lo quiero para hoy, para ya y de inmediato. No me gusta esperar tanto. Así soy yo. Desesperada por tenerlo todo. Ese estrés de querer tenerlo todo en el instante hace que mi mente quede en un estado de bloqueo y es donde le doy apertura a la ansiedad, preocupación y dolores de cabeza. Es en ese momento donde ocurre un “shock de negativismo”, es donde me digo a misma “ALTO”, ¿qué estás haciendo? Te estas torturando solo por no saber “esperar”. Tienes que tener paciencia, me digo yo.

Cuento hasta mil y se me pasa. Los que me conocen saben esa gran debilidad. Y esta vez quise compartirles mi impaciencia con ustedes ya que, estoy segura que juntos podemos trabajar ese lado nuestro que debemos estudiar y reflexionar para así ser mejores cada día.

No tener paciencia es algo totalmente alocado. Te llenas de ideas negativas, piensas que tu objetivo nunca vendrá y que la respuesta no llega al ritmo que queremos, porque andamos a mil por hora, y no nos concentramos en disfrutar cada momento y ver paso a paso nuestros progresos.

Para tener paciencia hay que ser creativos. ¿En qué sentido? Bueno les cuento que he optado en adquirir varias maneras de controlar mi impaciencia. Aquí se las comparto: Aceptar nuestra falta de paciencia: debemos ser sinceros con nosotros mismos.

Entender nuestras debilidades, ver nuestro lado oscuro y aceptar que somos impacientes. Ese, es el primer paso. Luego de esa aceptación toca trabajar en calmarnos y encontrar la serenidad que deseamos.

Pensar en otra cosa: en vez de autocastigarme en la espera de lo que deseo me concentro en actividades que me den buenas vibras y me desconecten de mis preocupaciones y estrés.

Contar lo que me impacienta: hablar eso que te preocupa y de lo que no le tienes paciencia es bueno. Eso sí, cuéntaselo a personas de confianza, a los que sabes que te darán su opinión sincera y te llenarán de motivación para mantenerte firme y equilibrado.

Música: refúgiate en la música. Aquella que te calma, que te hace bailar o cantar con 49

alegría. La que te traslada lejos y hace que todos tus pensamientos sean positivos.

Hay que tener paciencia con la familia, amigos, trabajo y en cualquier situación que se nos presente. En estos tiempos de tráfico pesado y de miles de cosas a la vez, debemos transformarnos en seres pacientes. Y como les confesé, me lo repito día a día: ¡PACIENCIA!, porque es importante entender que no todo se va a dar a nuestro ritmo o que no todo estará a la hora que queremos. Es tan sólo entender que las cosas llegarán cuando tengan que llegar y punto. Mientras, hay que disfrutar la vida al máximo y compartir con nuestros seres queridos. Eso sí, las cosas llegan porque se trabajan en ellas. Si no mueves ni un solo dedo entonces no te pongas impaciente por algo que no has ni empezado. La paciencia va ligada en algo que ya hemos iniciado.

Esto lo comento en referencia a proyectos o cualquiera solicitud, sueño o plan que tenemos.

Con respecto a la paciencia con personas esto sí que va más allá. Sé que muchas veces nos encontramos con personas que nos roban la tranquilidad y hacen que perdamos nuestra poca paciencia. Es allí la parte difícil, ¿Cómo lidiar con eso? ¿Cómo controlamos nuestra boca frente a estas personas? Existen dos casos: Las personas que conocemos y las que no conocemos. Referente a las personas número uno, una gran persona me dijo lo siguiente: “hay que querer a las personas como son”.

Así que si quieres a alguien hay que tener paciencia, así de sencillo. Y para las personas número dos: No dejes que esas personas te roben tu buena vibra, te aseguro que si le das una respuesta con actitud positiva no dejarás que su onda de negatividad caiga en ti. Tú quedarás con tu buena vibra, te lo aseguro. Nuestra actitud depende de cada uno, no de los demás, no nos amarguemos por momentos y seamos inmensamente felices.

Queremos paz Cada vez que veo mis redes sociales aumentan los comentarios, protestas y comunicados sobre la falta de tolerancia, paciencia y de buena fe que existe en nuestra sociedad. El asunto es que todo este tema se agranda, nos vemos afectados por esas situaciones negativas y nos convertimos en jueces debatiendo entre nosotros, buscando culpables en vez de buscar una solución, la cual está en cada uno de nosotros. Sí, vemos las noticias, nos afecta de inmediato la falta de prudencia, responsabilidad y de valores de ciertas personas que, sea cual sean sus razones, comenten errores que demuestran el poco equilibrio mental, agresividad y un sinfín de actitudes negativas. Y ¿qué hacemos nosotros? Quedamos impotentes y nos decimos: “si fuera mi caso yo hubiera hecho tal cosa…”.

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Mi opinión de todo este tema de la tolerancia es muy sencilla: “Seamos personas pacíficas, personas en busca de paz, de tranquilidad y sobre todas las cosas “no seamos personas creadoras de conflictos”. La vida se nos pasa peleando, teniendo rencores y pensando en negativo. Haz un alto en tu día, y te darás cuenta que el solo hecho de estar molesto o disgustado es pérdida de tiempo y es allí donde la magia entra en ti, tu mente se abre y comprendes que no vale la pena tener esa nube negra que sí, existen momentos de rabia, frustración y ansiedad pero, en la vida todo tiene remedio.

Vinimos a este mundo a ser felices, a reír, soñar y disfrutar. Si piensas lo contrario, te aseguro que estas totalmente equivocado. No quiero tampoco sonar que no soy realista porque sí, yo he tenido momentos de disgustos, equivocaciones y miles de errores, pero eso no significa que cada uno de esos momentos me han enseñado a que no hacer en el futuro y, que en definitiva, no vale la pena estar atrapada en una mar de amarguras cuando al final la misión de todos es “ser felices”.

No somos perfectos, tenemos nuestro carácter, existen cosas que nos molestan, que nos roban la calma, lo sé pero, es nuestro deber como personas adultas tener el control de todo, de calmarnos, de pensar: voy a discutir, pero no voy a pelear, “no voy a la guerra”, quiero ser escuchado(a), pero con inteligencia emocional y como también tomar en cuenta, como lo he visto muchas veces en las redes sociales: “hay que saber escoger las batallas”. Amigos, dejemos el ego a un lado, seamos sabios y entendamos que muchas veces es mejor tener paz en nuestros corazones que tratar de ganar alguna pelea.

El mundo cambia si cada uno de nosotros lo hace. Así de fácil. Nos quejamos y no hacemos nada. Despertemos cada mañana agradecidos, con una sonrisa, digamos buenos días, ayudemos a los demás, seamos pacientes y si tenemos que contar hasta mil, hagámoslo. Tengamos buena actitud, hagamos el bien, realicemos un autoanálisis y mejoremos cada defecto, tratando siempre de ser personas con optimismo y sinceridad con nosotros mismos.

Busquemos soluciones, no compliquemos más las cosas, brindemos un ambiente cálido y ameno en nuestras familias, trabajo, pareja y amigos. Demos el paso a ser mejor, a cuidar nuestro entorno con amor y cariño. Que los momentos de alegría sean más grandes que los de amargura y dolor. Seamos conscientes que la vida es una, llenemos nuestro corazón de paz y, si nos encontramos a alguien que no la tiene, no dejemos que no las roben, así de fácil. Tener paz es un gran tesoro que debemos custodiar porque ella nos brinda serenidad, amor y un encuentro con nuestro espíritu 51

lo cual lo defino como una de las mayores satisfacciones que como ser humano debemos poseer.

Vive momentos de paz, se el cambio que necesita esta tierra, no seas cómplice de la guerra y el negativismo, seamos luz y cultiva la serenidad en tu alma, te aseguro que cada día será mejor si tienes esa gran conciliación en tu corazón.

Respira Hay veces que me siento derrotada, como si un tractor pasara por encima de mí, mi cabeza da vueltas, no paro de pensar y pensar, me vuelvo ansiosa y mientras más le meto mente no le encuentro solución a nada. Entonces, es allí donde tomo unos minutos y me digo “respira”, calma, baja las revoluciones, así no se puede resolver nada. Y así, “respirando”, es donde entra la calma, baja la intensidad e inicio a buscar respuestas a todas esas preguntas que en un par de minutos antes, me estaban llevando al borde de la locura.

Los problemas no son el fin del mundo, solo son obstáculos que al final llevan un aprendizaje, una nueva vivencia que nos enseñan de manera creativa y diferente como es la vida. La vida es un continuo regalo, lleno de momentos alegres o tristes.

Tú decides el estado de ánimo que quieres que brille en ti. Yo me considero una persona positiva pero, como ser humano, también tengo momentos estresantes, de tristezas o de locura. No somos perfectos pero, tenemos el control de nuestras emociones y podemos decidir al final “sacar las cosas positivas de cada situación”.

No podemos quedarnos estancados en momentos negativos, la vida, como les he comentado siempre, es sólo una. No he visto a nadie con pensamientos negativos que triunfe. Por eso, nuestro gran aliado es el “pensamiento positivo”, para seguir adelante y, mientras haya aire para respirar aún tenemos esperanza.

Para momentos duros o difíciles todo hay solución. No podemos hundirnos y seguir atrapados en esa cápsula que no nos llevará a ningún lado.

Los problemas vienen y van, nada es perfecto. Lo ideal es convertirnos en guerreros y estar dispuestos a lanzarnos a cada batalla que, con pensamientos positivos, perseverancia y fe estoy segura que venceremos.

Pero como les cuento, el dato está en “respirar”, en bajar la tensión, en buscar serenidad para así, encontrar soluciones. Respirando controlamos nuestros pensamientos y nuestro modo de actuar. Y adicional, somos conscientes de cada 52

paso que damos para así reflexionar si vamos por buen camino o no.

Seamos personas positivas y llenemos de luz a los demás. Con esto no quiero decir que desaparecerán nuestros problemas pero, estoy segura que los sabremos afrontar de manera correcta a través de la conversación o el dialogo, actuando de manera justa, con sabiduría y así nos sentiremos más tranquilos y confiados.

No nos ahoguemos en un vaso de agua cuando podemos respirar y analizar cada situación o cada error. La vida es así, nos enseña momentos buenos y malos para que aprendamos y sigamos adelante.

Nunca desistamos a nuestros sueños o a lo que queremos lograr si nos encontramos con obstáculos. Si en realidad deseamos algo, debemos de enfrentarnos a todo para así obtener con éxito todo lo que tenemos anotado en nuestra lista de deseos.

Solamente hay que respirar, una acción tan natural que, lo hacemos inconscientemente pero, cuando tomamos conciencia y sentimos el aire entrar por nuestras fosas nasales es donde entra la magia que viene acompañada de calma y serenidad. Practícalo y te darás cuenta que lo que te digo es cierto. Tomemos las cosas con tranquilidad y verás que todo se solucionará.

Respira cada momento que te sientas agobiado, lleno de trabajo, cuando sientas que algo no está saliendo bien. Respira cuando te sientas ansioso, abrumado o estresado.

Deja que entre aire en tu cuerpo, siéntelo y deja que fluya. Deja que entre la paz en tu cuerpo y alma para luego, tomar acción y encontrar todas las estrategias que harán que venzas cada prueba que se te presente en el camino.

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CAPÍTULO VI

El Amor

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Tu Pareja Ideal Cada día me encuentro con muchas personas en “busca de la pareja ideal”. No soy experta en el amor, para nada, me considero una aprendiz sobre este tema. Lo que puedo compartir con ustedes, son pequeñas experiencias, como por ejemplo la que debemos saber elegir a nuestra pareja, tener metas y proyectos en común para que todo surja y fluya con naturalidad. Como siempre destaco la importancia del “aprendizaje”, la vida cada día nos enseña algo que debemos captar e interpretar, con el fin de que esa enseñanza se quede con nosotros como una experiencia. Así también es en el amor, “aprender es crecer”. El amor es así, somos felices, discutimos, nos reconciliamos y luego así volvemos a ser felices. Es un sube y baja tan impresionante que solo resisten los que están seguros de lo que quieren, los que aman de corazón y los que no están dispuestos a dejar a su pareja porque simplemente es la persona con la cual desean estar. Uno de los puntos más importantes que muchas veces pasamos por alto, es que todos merecemos tener un “amor sano”, donde reine la confianza, la libertad y el respeto. Obviamente las discusiones y problemas siempre aparecerán en el camino, esto siempre pasa desde el noviazgo hasta en los matrimonios. La idea de todo esto, es que cultivemos el hábito de ser pacientes y tolerantes, de comprender a nuestra pareja, ponerse en sus zapatos, saber escuchar, aconsejar y sobre todo “saber arreglar los problemas”, esto último es clave en nuestros tiempos. Nos encontramos en una época donde lo que no funciona se bota. Me comprometo con mi pareja pero no al 100%. En la actualidad, se dan muchos casos de compromiso vago, de no meternos de lleno y al final lo que resulta, es un huracán de malos entendidos, resentimientos y hasta odio.

Las mujeres decimos “la calle está dura”, “hay mucha competencia”, “ya los hombres no quieren compromiso”; “ya no hay hombres buenos”; en el caso de los hombres “no quiero volver a vivir en una cárcel”, “ella está loca”, “mejor estoy solo”, estos y muchos más, son algunos de los comentarios que escuchamos a menudo sobre el “amor”. Ya no vemos el “amor” como limpio, casto y puro. Lo vemos como si fuera obligación nuestra, estar en pareja, como una dura decisión y no como esa química de estar con alguien porque te encanta su personalidad y belleza. Debemos sobre todas las cosas, rescatar esos valores que están perdidos y llenarnos de pensamientos positivos. Si estamos en pareja, dar todo para que funcione, eso sí, no dejando de ser quien eres, de tener tu espacio y poner en tu lista de prioridad a tu pareja. Importante que construyan algo juntos y se comprometan a que sobre todas las cosas, porque los dos lo desean así, seguir juntos hasta el final. Si estas soltero o soltera, vive al máximo disfruta tus días haciendo lo que te gusta, comparte con tu familia, amigos y llénate de buenas vibras. No desesperes si no te ha llegado “tu pareja ideal”, como dicen por allí, “eso llega solo” o “mientras menos busques te llegará”. Hay que dejar claro que la 55

“vida en pareja”, se puede volver complicada, pero no imposible. “Querer es poder”.

Cuando deseamos algo de corazón, le ponemos empeño y todo tiene solución. En ocasiones nos ahogamos en un vaso de agua, cuando el remedio a nuestros problemas está frente nuestra. La vida es una montaña rusa donde hay emociones de todo tipo. Así es el amor, lleno de cosas lindas, duras y momentos especiales. Un gran amigo me dijo alguna vez: “Una relación de pareja es como una plantita que se debe regar para que crezca fuerte y sus hojas se mantengan con un color vivo y fresco”. En este caso la relación viene siendo esa “plantita” que cada persona debe regar para que esta perdure gracias a los cuidados de cada uno.

Vivamos con alegría, sea cual sea nuestro “estado civil”. Los que tienen pareja llenen de amor a su compañero o compañera, y los solteros no vivan frustrados por no conseguir a la pareja ideal o por los momentos vividos con sus ex. Como dice la psicóloga Maritere Lee “los ex son de experiencia” por ende debemos ser aprendices de cada momento y entendamos que todo lo que nos pasa es por nuestro bien.

Mientras que haya vida, sigamos con buena actitud y con las ganas de seguir siempre hacia adelante.

Amor de pareja Quienes somos solteros experimentamos un millón de situaciones en citas o conociendo personas que, si nos ponemos a conversar acerca del tema, nos quedaremos hablando horas sobre anécdotas, experiencias o consejos ya que el tema del “amor” es amplio y cada uno lo vive o lo ve de manera distinta, aunque reconozco que tengo amigas y amigos que concordamos en que el amor es “recíproco”, que el dolor del otro es mi dolor y que sobre todas las cosas es sincero y comprensivo.

El tema del amor lo hablo a diario. Chats, llamadas y charlas en persona donde cada amigo(a) me cuenta su vivencia con su ex, su cita o pareja actual. He llegado a la conclusión que a mí alrededor se toca mucho ese tema porque nosotros pensamos que el amor es “complicado”. Sabemos las respuestas pero nos cuesta actuar.

Entonces, nos volvemos “gurus del amor”, aconsejamos a los demás y cuando nos vemos al espejo, estamos metidos en el mismo rollo de la persona que nos pidió un consejo. El resumen es que, nos es fácil hablar pero, en el momento de tomar decisiones, nos cuesta por miedo, falta de carácter, valentía y actitud.

Walter Riso menciona en sus libros las siguientes frases: “Si alguien duda que te ama, no te ama” Y mi favorita que habla de esas parejas indecisas: “Si tienes a un ni 56

contigo, ni sin ti… corre lo más pronto posible”. Vemos las señales y nos quedamos sufriendo en vez de buscar nuestra libertad y tranquilidad. Nos conformamos en ser víctimas en vez de llenarnos de buenas decisiones y encontrar la felicidad que tanto anhelamos. Sé que es difícil, pero muchas veces debemos abrir los ojos, ser sinceros con nosotros mismos y comprender de que si no nos sentimos a gusto en una relación debemos aprender a decir adiós, iniciar un camino de aprendizaje y un encuentro con nosotros mismos el cual le llamaré: Soltería.

El tema está en que cada uno debe vivir su propia experiencia, como dicen por allí: “Nadie aprende por cabeza ajena”. Podemos escuchar consejos pero al final, somos dueños de nuestros pensamientos y de nuestro actuar. Es allí donde, cada uno es responsable de lo que vive. Si alguien no nos valora o quiere y seguimos en esa relación martirizados eso, es total culpa nuestra. Haciendo un análisis es sencillo el tema del amor pero, nosotros lo transformamos como una telenovela donde el o la protagonista soy yo y que el villano o villana es nuestra pareja. Nos quedamos allí sacrificados en vez de salir a la luz, tomar riendas al asunto y solucionar todo problema que exista en la relación o terminar definitivamente con nuestra pareja porque sencillamente no hay compatibilidad. Tocando un poco más el tema de ser “compatibles”, aprendí que es esencial que tu pareja tenga pensamientos o actividades similares a las tuyas. Menciono a Walter Riso nuevamente donde dice: “No es verdad que los polos opuesto se atraen, lo que muestra los datos es que la semejanza atrae”.

Realicemos un análisis personal, al final tanto los hombres y mujeres lo que queremos es lo mismo: paz, amor, cariño, respeto, honestidad y sobre todas las cosas un buen trato. Somos distintos pero deseamos lo mismo.

Al seleccionar una pareja, como me aconsejó alguna vez una amiga: “busquemos a una persona que saque lo mejor de cada uno”. Que nos brinde seguridad y el interés que cada uno merece. Que vaya alineado a nuestros sueños y deseos. La elección es de cada uno, pero con mi poca experiencia y la de los demás te puedo decir que es de suma importancia conocer y convivir con la persona antes de dar grandes pasos.

Hay un dato importante, si esa persona te da buena vibra, préstale mucha atención, porque esa vibra no miente, ella está dentro de ti y la misma se llama intuición.

Aprende a escucharla y verás que las decisiones no serán tan duras y podrás encontrar esa tranquilidad que tanto buscas en tu pareja.

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“Carta a mis ex” Quisiera agradecer a todos aquellos que no me quisieron de corazón, a los que no me valoraron o sencillamente dejaron en “visto” mis mensajes de whatsapp. Los que no se preocupan por mí, por mis sueños y lo que deseo. Gracias por no quererme como lo hice yo. Simplemente gracias por no mantenerme en sus vidas porque de alguna manera a otra me han dejado libre. Libre para conocerme, para cumplir mis metas, para amarme más cada día y vivir en compañía de mi soledad momentos mágicos e inolvidables.

Gracias a todos aquellos que no me tomaron en cuenta, los que no sabían en su momento lo grande que soy y mil gracias a todos ellos que no se atrevieron a dar más por temores, inmadurez y miedo.

Gracias porque ahora entendí, que tenía que ponerme triste, llorar o sufrir para obtener una gran enseñanza de vida. Tenía que aprender a vivir sola, a concentrarme en mí, en mis sueños, metas y construir mi camino del éxito.

He dejado mis rencores atrás y solo les puedo decir a ustedes “gracias”. Al final nuestro destino no era quedar juntos, sino más bien, que todo era parte de mi historia, o un pequeño capítulo que me llevó a entender cómo funciona el tema del amor.

Gracias a ustedes ya no estoy desesperada por tener un hombre a mi lado. Tomo las cosas con calma porque comprendo y valoro la importancia de mi soledad. Adicional a esto, también gracias a ustedes ya sé finalmente que es lo que quiero en cuanto a hombres se trata .

Respeto a todos y las decisiones que se tomaron en cada una de las historias. No quiero meterle mente a ninguna en específica, solamente quiero decir “gracias”.

No fuimos el uno para el otro. Solo fuimos parte de cada una de nuestras vidas por un lapso de tiempo con el solo fin de que aprendiéramos sobre el amor y sobre nosotros mismos.

Ahora, gracias a ustedes, entiendo que quiero estar con alguien que saque lo mejor de mí, que el amor sea recíproco y que mi pareja me valore sobre todas las cosas.

Gracias a las experiencias con mis “ex” conozco más el mundo de los hombres.

Aunque no lo crean, me pongo en el lugar de ellos pero, esto no justifica ciertos comportamiento que van en contra de mi dignidad y amor propio.

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Al pasar los años, durante mis treinta maduré y, gran parte de ese proceso personal están involucradas todas las experiencias con mis ex, por esto y más, mil gracias.

Ustedes son parte importante de mi vida pero no mi punto final. Estoy agradecida de corazón por todos los momentos, los buenos y los malos. Mi corazón está libre de odio y rencor. Los he perdonado a ustedes y a mí misma. Soy feliz ahora porque descubrí una gran compañera que tenía abandonada por mucho tiempo. Esa compañera olvidada era, a mí misma.

Hoy en día sigo soltera, enamorada de mi vida, llena de amor en mi corazón y en mis días. Sigo mi camino guiada por mi intuición y mi fuerza. Recuerdo con tranquilidad las experiencias con mis “ex”, ya no sufro ni recuerdo las tristezas. Ahora sigo adelante, conociendo lugares y nuevos amigos.

Aún no encuentro a mi gran amor pero, sé que llegará cuando tenga que llegar. Las experiencias del pasado me enseñan que es lo que busco en un hombre y que no.

Todo al final es a mi favor. Sin apuros ni estrés vivo el día a día. No desespero. Confío en mis proyectos de vida, pongo todo mi corazón y empeño en ello.

En fin, nuevamente gracias por ser parte de mi vida. Por enseñarme grandes lecciones sobre el amor y otras cosas. Por llenarme de sabiduría, de conocimiento para así, al final, encontrar a ese príncipe real, y no precisamente al encantado de Walt Disney sino más bien, el que, a pesar de sus defectos me amará con todo el corazón y como me lo merezco.

Valora tu corazón Entrega tu corazón a alguien que lo valore. Alguien que te admire, que te quiera y que te ame. Cuida a tu corazón, dedícale tiempo para conocerlo y ver que hay dentro de él. Tu corazón no solo es ese órgano que bombea sangre para poder vivir, sino más bien, tiene un significado de sentimiento profundo y buenas intenciones. Si ese es tu corazón y lo conoces de principio a fin, no dudes en mantenerlo y llenarlo de experiencias positivas y enriquecedoras.

Tener un buen corazón para mí, se centra en ser buena persona. Es, que a pesar de tanta presión laboral, problemas y demás, siempre saldrá a flote respuestas positivas, buena actitud y el ánimo necesario para seguir hacia adelante.

Un corazón noble, que aprende de sus equivocaciones, que perdona, que ríe y que 59

ama es un gran tesoro que pocos hoy en día valoran. En la actualidad muchas veces lo que importa es: ¿Cuánto dinero tienes?, ¿qué auto conduces? o ¿cuánta ropa de marca usas? El corazón se deja de último, sin ubicarlo como prioridad.

Más allá de todos los bienes que poseas, es muy importante conocerte, saber que hay dentro de ti, de tu corazón, no todo puede ser superficial, porque a este mundo llegamos sin nada y al final terminamos igual.

En cuanto al amor, vamos entregando nuestro corazón sin hacer el análisis necesario, a veces nos desesperamos y lo regalamos sin darnos cuenta si esa persona valorará el preciado obsequio que le damos en sus manos.

Después de varias experiencias en el amor y luego de conocer mi corazón, ahora lo protejo y también lo valoro porque aprendí, de esas vivencias pasadas, concentrarme en mí, en cuidar mis sentimientos y tomar las cosas con la debida paciencia.

Valoro mi corazón y también estoy en busca de uno bueno. No podemos desperdiciar momentos con personas que aún no entiendan este gran significado. Porque las cosas materiales van y vienen, lo que se queda para siempre son momentos y conversaciones que valgan la pena, que te hagan aprender, que te llenen de buena vibra y que cambien tu día.

Todo depende de ti. De lo que desees en una pareja. Pero para eso estoy, para recordarte que sí estas en busca de pareja recuerdes este punto tan importante que muchas veces olvidamos. Nos deslumbramos muchas veces por la belleza física o en lo material que dejamos este tema a un lado. Estoy de acuerdo de que hagamos un listado de las características necesarias que buscamos en una pareja pero, recuerda siempre poner de primero “un buen corazón”.

Cuando entendamos lo importante que es valorar nuestro corazón, es donde todo cambia. Vemos la vida desde otra perspectiva, más espiritual, es un encuentro contigo mismo, son momentos íntimos, es donde te conoces más y comprendes lo grande que eres.

Mi idea de esto es recordarte que te encuentres y veas todo lo bueno que hay en ti. Y que todo ese amor lo reflejes a tu pareja, familiares, amigos y demás. Y si eres padre o madre te invito a “criar hijos con buen corazón”. No soy madre pero, me encantaría comentarles de que sí, es muy importante la educación de los hijos, costearles una educación de alta calidad pero, que no se les olvide una parte fundamental en el 60

crecimiento y desarrollo del ser humano que es “tener un gran corazón”. Criar buenas personas, con valores familiares, buena autoestima y amor por los demás. El futuro está en los niños, en enseñarles a ser buenos de corazón y en compartir momentos positivos con los demás.

Abre tu corazón y valóralo. Conócete y observa detenidamente todos esos sentimientos que hay allí adentro. En el amor, entrégalo a su debido tiempo y a la persona que se lo merezca y en la familia, que sea un eje central para la crianza de tus hijos y así contribuir en dar a este mundo “personas de buen corazón”.

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CAPÍTULO VII

Mujer

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Una Mujer Feliz Decidí recordarles a todas mis lectoras y amigas que nacimos para ser únicas, amadas y felices. Muchas veces nos aferramos al dolor o desamor y nos olvidamos de una parte esencial que es "amarnos primero" y esto significa ser respetadas, valoradas y queridas.

Ser feliz es misión de todos, pero esta vez, mi intención es dedicarle este capítulo al sexo femenino, a nosotras, quienes luchamos por nuestros sueños, las que tenemos hambre de comernos al mundo, las madres que educan a sus hijos, las solteras en busca de amor y paz, las casadas que buscan estabilidad y amor en su familia, las abuelas, tías, amigas y primas que en algún momento de la vida pasamos dificultades que con mucho valor y optimismo superamos, porque eso de que somos el "sexo débil" ya pasó a la historia.

He visto con mis propios ojos las batallas que vivimos como mujeres y no está de más comentar que siempre salimos hacia adelante, nos secamos las lágrimas y con el pie derecho seguimos nuestro camino con el fin de encontrar lo que deseamos y tener una gran sonrisa en nuestro rostro.

Una mujer feliz sabe levantarse del suelo y seguir su camino. Sabe que con amor e inteligencia podrá recibir un sinfín de respuestas positivas. También está informada de sus errores y sabe decir "perdón". Una mujer feliz se desilusiona, pero al día siguiente sabe que ese desamor fue un aprendizaje y que de alguna manera, esa enseñanza le ayudará en el futuro. Una mujer feliz sabe valorar a las personas que la aman y ve más allá de lo material. Está claramente segura de que en lo sencillo y natural existe felicidad eterna. A una mujer feliz le encanta conocer lugares que nunca ha visto, conversar con personas y sobre todas las cosas, una mujer feliz les sonríe a todos, aunque en el fondo tenga miles de preocupaciones, porque sabe que con su sonrisa podrá animar a los demás.

Nunca dudemos de nuestra fuerza y de nuestras ganas de luchar. La mujer feliz nunca se conforma o se queda en la zona de confort, ella armará el plan estratégico para vivir con plenitud y alegría, guiada por su corazón, por sus sueños y metas para vivir con pasión y trabajar en lo que realmente ama.

Ella siempre estará pendiente y llenando de amor a sus seres queridos. Ella es humana, tiene defectos, pero sabe manejarlos con el fin de no hacerles daño a los demás ni a ella misma. Conoce sus virtudes y trabaja en ellas para ser luz y vivir en 63

armonía.

Una mujer feliz canta y baila (aunque no lo haga bien, pero eso la hace reír), no le da vergüenza ser ella misma, habla lo que piensa con tacto y claridad. Sabe respetar la opinión de los demás y se queda con lo positivo de cada persona y situación. Sabe que siendo ella misma logrará más que copiando a las otras.

La mujer feliz habla con ella misma, se automotiva, se llena de buenas vibras, se dice a sí misma: "vamos pa' lante". Reflexiona sobre su vida y aprende a "no esperar nada a cambio o nada de nadie", porque sabe hacer las cosas de corazón y que si espera algo de los demás, ya nada tendrá sentido porque sabrá que se podrá decepcionar o sentir mal.

Mi corazón te aconseja que no pares, a que sigas llenando tu vida de amor y de alegría. Pase lo que pase, ya sea tristeza, dolor o sufrimiento, debemos seguir, porque si tenemos aire para respirar, eso significa que hay esperanza y que aún no ha terminado nuestra historia. "El momento que colguemos los guantes es cuando ya hemos llegado al último round". Porque la batalla hay que pelearla hasta el final y aprender de cada momento, del bueno, del malo y tener la felicidad eterna que siempre anhelamos.

Mujer completa A mis treinta y tanto de años y en mi experiencia ser una mujer completa es ser independiente, inteligente y capaz de valerse por ella misma, ya no significa que somos “mujeres diferentes” sino más bien ya es algo normal o común. Eso de la “liberación femenina” es algo del pasado. La mujer es, hoy en día, igual que el hombre.

Capaz de realizar todas las tareas que hace el hombre e inclusive hacer miles de cosas a la vez.

Ella no depende monetariamente del hombre y comprende que si tiene una relación las cuentas son equitativas y justas. Acepta invitaciones pero no es “abusiva” con el hombre.

Cuenta con valores morales y persigue sus sueños. Piensa en su bienestar, en su salud física y mental. Comprende el valor de la verdadera amistad y amará compartir momentos inolvidables con sus seres queridos.

Ella decidirá con quien salir y con quien sencillamente no. No estará a la espera del 64

hombre, entenderá fácilmente cuando el hombre, así de fácil: “no está interesada en ella”.

Una mujer completa, no recibe migajas de ningún hombre. Sabe su valor como persona y tiene amor propio. Ella jamás aceptará ser el “plato de segunda mesa”, porque nuevamente lo comento, “tiene amor propio”.

No competirá con nadie porque entiende que la competencia es con “ella misma”.

Admirará el éxito de los demás sin envidias ni críticas.

Nunca perderá su buen humor y su sonrisa. Irradiará paz y alegría al caminar.

Entiende que sus problemas son retos que en algún momento vencerá.

Ella sabe que la vida es solo una y hay que aprovecharla cada minuto, cada segundo.

Sabe con certeza cuál es su propósito de vida y armará el plan estratégico para vivir haciendo lo que ama y es, sin duda alguna, una “luchadora de sus sueños”.

El “qué dirán”, ya no le interesa escuchar. Porque se hace responsable de sus actos y de sus opiniones. Le son indiferentes las críticas destructivas porque tiene una barrera “anitóxica” que impide, de alguna manera, tener contacto con lo negativo.

No le hará daño a los demás y si lo llega hacer, sabe aceptar de inmediato sus errores.

La mujer completa vive su mayor tiempo con alegría. Ha superado tantos fracasos que al final entiende que todo aquello que la hizo sufrir tuvo un final feliz. Y ¿por qué?

Porque aprendió, se siente orgullosa de la persona que es hoy, con sus altas y bajas, porque al final no le convenía la situación o sencillamente sabe que todo tenía que pasar “por una razón”.

La mujer completa está dentro de cada una de nosotras. Déjala que salga a flote, llénate de esperanza y descubre todas las maravillas que hay en ti.

Permítete vivir con plenitud y llevar la vida como te mereces. Tú eres la dueña de tu destino y de tu vida. Nadie puede decirte que decir o hacer. Tu ere única, hermosa y sinigual. Sé tú misma. No copies y se una mujer “real”. Con defectos y virtudes. Con mucho amor para dar a los demás y concentrada en las cosas que deseas.

Vive el hoy, guiada por tu corazón. Si sientes que el mundo no avanza, que tu vida es 65

injusta o que no eres feliz, te comento querida amiga que “todo depende de ti”. El ser feliz está en ti, no depende de nadie más. Decide ser feliz hoy, mañana y siempre. No esperes nada de nadie y lucha con perseverancia y pasión. Toma riesgos, lánzate y disfruta cada momento. No desesperes si aún no llega lo que deseas. Tú disfruta del hoy, trabaja con esfuerzo y dedicación y verás que en el momento que menos esperas, llegará ese trabajo que tanto deseas, ese proyecto que tanto anhelas o ese príncipe azul que tanto esperas.

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CAPÍTULO VIII

Aprendizaje

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Hoy aprendí Me encuentro en un momento de mi vida en el cual me siento renovada, llena de energía, salud y con ganas de comerme al mundo. En mis treinta y tanto de años he descubierto muchas cosas que me hacen comprender que no necesito ser millonaria para ser realmente feliz. Que mis padres, hermanos y sobrinos son mi luz, mi guía, mis amores incondicionales y que simplemente son piezas clave de mi existencia. Que el amor verdadero no se busca sino que llega cuando tenga que llegar. Aprendí a conocerme, a pelear con mis miedos y debilidades. Reflexiono y entiendo que he crecido, madurado y que simplemente tengo nuevos intereses, más serios y más formales. Comprendí que lo que busco en un hombre es esa vibra que me llene, es que pueda conversar horas y horas con él y que simplemente y muy esencial que tenga un corazón de oro. Entiendo ahora cuáles son mis sueños y deseos. Ahora, disfruto cada escalón que piso para alcanzar mis metas, con sus desafíos e inconvenientes que, con fe y perseverancia sé que todos los puedo vencer. En estos momentos estoy totalmente segura de las personas que quiero que estén a mi lado.

Personas que me ayuden a cumplir mis sueños y que me empujen a ser positiva. Son bienvenidas las que me aconsejan, las que luchan por un mundo mejor, las que tienen un buen corazón y que sobre todas las cosas los que son humildes y sinceros de alma.

Mi vida es mi gran aventura, con sus cosas malas y buenas, todo esto hace que sea una vida divertida, porque los que me conocen saben que al final siempre tendré una sonrisa en mi rostro. Porque sencillamente amo ser feliz, reír y, que mi mayor satisfacción es compartir mi alegría con todos los que me rodean.

Nadie es perfecto, yo mucho menos, pero lo que si les puedo asegurar es que estoy aprendiendo a ser mejor, a callarme para no herir a los demás, a decir las cosas como son pero con el debido tacto. No soy perfecta pero tengo mucho amor que dar, y es por esto, que amo escribir para transmitirles todos mis sentimientos positivos que vienen de lo más profundo de mi corazón.

Aprendí que si hablas con amor y sinceridad llegarás más lejos que si hablas con sarcasmo, disgustado, histérico o alocado. Estoy aprendiendo a no esperar tanto de los demás y, que si los demás me fallan, no es culpa mía. Si alguna vez fallo yo, debo aceptar mis errores y saber arreglarlos.

Todos los días aprendo algo nuevo. Me encanta conversar con las personas, filosofar y compartir ideas. Me lleno de conocimiento todo el tiempo hablando con los demás.

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Siempre las personas tienen algo que enseñarme y ese aprendizaje se queda en mí para siempre.

Yo les deseo a todos lo mejor de este mundo, así como la vida me ha enseñado a ser una persona luchadora y con sueños, los invito a todos a ser soñadores, a ver más allá, a reorganizar nuestra vida, a darle un giro para llenarla de emoción, entusiasmo y alegría.

Siempre se los recordaré, la vida es solo una. Existimos por una razón que debemos descubrir en lo más profundo de nuestro ser. Hagamos ese ejercicio de entrar en nuestros corazones y trabajar en las cosas que nos llenan de paz, armonía y felicidad.

En fin, aprendamos a ser grandes y a no conformarnos. A vivir con ideales, con sueños y metas. A vivir momentos mágicos haciendo lo que amamos. A no quedarnos en el suelo cada vez que caemos, sino más bien, levantarnos con más fuerza, alegría y pasión. Seamos personas de luz, amor y vivamos con esperanza que sin duda alguna, nos ayudará a mantener en el rostro una hermosa sonrisa en todas las escenas de nuestra maravillosa película llamada: VIDA.

Trabajar en ser Mejor Me pregunto a mí misma: ¿Qué estoy haciendo para ser mejor? Y ¿Para ser mejor en qué sentido? Mi respuesta es sencilla, me refiero a ser mejor como persona y profesional. Ser mejor es utilizar tu talento, tus virtudes, tu pasión y corazón, es entregar lo bueno de cada uno, es dejarlo todo en la pista y, sobre todas las cosas, es compartir toda esa aventura y enseñanza con los demás. Todos tenemos dones que debemos descubrir. Todos somos diferentes con mucho que aportar. Tenemos que avanzar, seguir hacia adelante, encontrar nuestro camino y trabajar por alcanzar nuestros sueños y metas. ¿Y cómo podemos llegar a ser mejores? En el ámbito personal, podemos utilizar varias herramientas para ser mejores.

1. Autoanálisis: realizar una evaluación de nuestros pensamientos y actos. Debemos estar plenamente conscientes de todo lo que hacemos bien o mal. Tenemos que conocer nuestras debilidades y nuestras virtudes. Nadie es perfecto, así que no nos autocastiguemos con nuestras faltas y errores, lo importante aquí es aprender de ellos, reconocerlos y enfocarnos en desarrollar nuestras virtudes para lograr ser mejores.

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2. Sonreír: cada vez que brindamos una sonrisa sincera, se ilumina nuestro día, nuestra alma y ser. Sonreír, estar alegres es la mejor terapia para convertir tu vida en luz. La felicidad se contagia, así que no dudes en mostrar tu hermosa sonrisa.

3. Tener paciencia: al ser pacientes, encontraremos paz y armonía en nuestra mente.

Esperar con calma, no desesperarnos y permanecer tranquilos es una gran terapia para ser mejores.

4. Ser agradecidos: agradecer cada detalle o respuestas de los demás es de total vitalidad, ya que confirmamos que estamos contentos por los esfuerzos que recibimos de los demás.

5. Valorar a los demás: cuando valoramos a las personas que nos quieren, estamos dándoles el lugar que se merecen. Lo que está prohibido es valorar cuando estas personas tan especiales ya no estén a nuestro lado.

Para ser mejores en lo profesional, debemos tomar en cuenta lo siguiente: 1. Ama lo que haces: si no estás enamorado de tu trabajo, cámbiate de inmediato.

Estar en un trabajo o hacer algo que no te encanta es el peor error que podrás cometer en tu vida profesional. Si no estás a gusto, sal corriendo, huye y ve en busca de eso que amas.

2. Actualízate: la vida profesional avanza, es cambiante, no podemos quedarnos como iniciamos. Prepárate, estudia, toma cursos, investiga, lee y especialízate en la carrera o profesión que elegiste.

3. No te conformes: si te sientes estancado en tu trabajo, si sientes que no sacas lo mejor de ti, inicia de inmediato el plan estratégico para encontrar ese momento o lugar para poder desarrollar tus habilidades y destrezas con el fin de brindar a su máxima expresión todo lo bueno que hay en ti.

4. Inspírate: existen personas que nos inspiran, que nos muestran su valentía frente a los retos y desafíos profesionales. Gente que se atreve a dar grandes pasos. Estos mentores son parte clave para ser mejor, ya que al final serán un gran ejemplo.

5. Innova: se creativo, utiliza tu imaginación, bríndale a tu trabajo el toque personal que te caracteriza, se tú mismo y crea cosas diferentes, no te dejes llevar por lo convencional.

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Nuestra tarea de ser mejor es constante y continua. Actualmente, nos encontramos en un mundo en donde las noticias, videos, imágenes están cargadas de muchos mensajes negativos. Ser mejor es dar un gran paso positivo, es nuestro aporte para que todo cambie. Al final, la competencia es con nosotros mismos, nadie compite con nadie. Ser mejor es trabajo individual. El hecho de que existan personas que no desean mejorar es asunto de ellos. Nuestra misión es trabajar primero en cada uno de nosotros. Luego ese aprendizaje lo podremos compartir con los demás. Elige ser mejor, en lo personal y profesional. Esto es lo que hay, del pasado ya aprendimos y el futuro aún no lo sabemos. Ser mejor cada día es la razón para seguir vivo, para crecer, para llenarnos de luz experiencias y conocimientos.

El protagonista de tu historia Vive como quieras, de la manera como a ti mejor te parezca, realiza actividades que te hagan completamente feliz, disfruta cada momento y cada segundo de tu vida. No te frustres con pensar en el futuro, ¡ojo! si, trabaja con objetivos pero tómate tu tiempo para aprovechar cada minuto y vivir el hoy. Rompe con la rutina, con lo cotidiano, sal de la caja y descubre nuevos lugares, mágicos momentos y aprende algo diferente.

Sin duda alguna vinimos a esta tierra con una misión y mientras que la vives o la encuentras entrégate y enamórate de tu vida.

Uno de mis grandes consejos en este hermoso recorrido como Motivamerica es que seamos seres soñadores, vivamos con pasión y alegría. Ser positivos y aprovechar el tiempo de manera productiva es una manera eficaz para llevar una vida equilibrada.

Conócete a ti mismo, tú eres el principal protagonistas de tu historia. Saber en detalle cuáles son tus fortalezas y debilidades, reflexionar sobre tus pensamientos y actuar, trabajar en ser mejor, prepararte en cuanto a estudios y mantenerte en continuo aprendizaje, todo esto hará que te acerques cada día más a tus sueños.

Debes estar claro de lo que quieres para tu vida. Así será más fácil encontrar el camino correcto para el encuentro de tus metas. En lo muy personal, y creo que se los he mencionado anteriormente, mi camino lo encontré durante varios años y lo que pude notar es que siempre estuvo frente a mí, esperando mi primer paso. Lo que sucedió en ese momento fue que no me concentraba en mi persona, me distraje en otras cosas y es allí donde les vuelvo a recordar lo esencial que es pensar en nuestra vida, en nuestra historia, no es egoísmo sino más bien, pensar en uno mismo, en analizar cuál es la vida que deseamos y arrancar con el plan para cumplir lo que queremos.

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Yo estoy totalmente convencida que todos nuestros sueños se pueden cumplir.

Pero ellos, no caen del cielo. Hay que trabajar con esfuerzo, enfocarse y “hacer que las cosas pasen”. No te quedes como espectador de la historia de los demás y “sé el protagonista”. Si el miedo no te deja avanzar, te puedo recordar que “todos tenemos miedos”, eso te lo puedo asegurar. El miedo es un sentimiento que sin duda alguna siempre aparecerá en momentos claves o en toma de decisiones. No dejes que ese miedo tome el control de tu vida, lánzate, aventúrate e inicia el camino.

Un día decidí ser la protagonista de mi historia. Tomé las riendas de mi vida y me propuse a pensar en mí, en lo que me quiero dedicar por el resto de mi vida y buscar las vías necesarias para que eso pase. Todo se alinea cuando vas andando en el camino. Las piezas se van juntando cuando estas decidido, seguro y trabajando por lo que quieres. Steve Jobs decía: Cada día me veo al espejo y me pregunto: “Si hoy fuera el último día de mi vida, ¿querría hacer lo que voy hacer hoy?” Si la respuesta es “no” durante demasiados días seguidos, sé que necesito cambiar algo. Esta frase fue una de las que en su momento hicieron o reforzaron que yo siguiera hacia adelante.

Inspírate en personas que se atreven a ser el protagonista de su historia. No la envidies sino más bien alégrate de su éxito e inicia el tuyo. Tener mentores que te empujen a conseguir tus sueños es una gran motivación para tu aventura.

No te quedes observando la historia de los demás ni tampoco seas el juez de sus actos. Encárgate de tu propia vida, actúa para ti. Los demás son dueños de su propia vida, tú, tienes una que está en la espera a que sencillamente trabajes en ella. Está en la espera a que concretes tus sueños y que inicies paso a paso el gran recorrido.

Lo que ya no espero En mi crecimiento y evolución personal he descubierto lo mucho que hacemos mal “al esperar”. Al esperar de que las “cosas pasen”, de que lo que deseamos caiga del cielo o que nos toque a la puerta de nuestra casa. Muy dentro de mí, ya no espero que nada llegue tan fácil y, sí así pasa, es porque hay un trasfondo de trabajo arduo, planificación y empeño.

Ya no espero que mi príncipe azul toque a mi puerta, ni ando buscándolo desesperadamente. Vivo el hoy disfrutando cada momento, conociendo gente, lugares y culturas.

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No espero que llegue el “trabajo deseado”. Con paciencia desarrollo mi plan de vida y mis proyectos personales y entiendo, que hay que trabajar duro y con mucho sacrificio para alcanzar lo que queremos.

He aprendido a dar las cosas de corazón, ayudar a los demás, a comunidades, familiares, amigos, compañeros de trabajo y entre otros. Ya no me preocupa recibir algo a cambio, porque sé que lo que entrego lo hago porque quise y no por interés ni obligación.

Me liberé de estar pendiente de “la espera”, de estar cansada de decepcionarme por no recibir nada a cambio. En fin, comprendí que, debo hacer las cosas que quiero, sin que nadie me diga que hacer pero, siempre haciendo el bien.

“Si haces bien, te irá bien”. De esto se trata. De hacer las cosas con cariño y estar 100% seguros de todos nuestros pasos. Yo les aseguro, que esa frase es totalmente cierta y la recompensa siempre la veremos a su debido tiempo.

Me cansé de esperar y me fui en busca de mis sueños y metas. Si estamos pensando que la vida es injusta y no tenemos lo que merecemos, estamos equivocados porque, para el encuentro de nuestros sueños hay que tomar riesgos, ir por ellos y enfrentarnos a lo que venga.

He hecho un pacto conmigo misma para no esperar nada, de seguir hacia adelante, de aprender de los momentos buenos y malos. A continuar con alegría cada día e ir construyendo mi futuro con pasión y dedicación.

Soy feliz cada día, descubriendo todo lo bueno que puedo aportar a este mundo. Ya no espero que vengan cosas buenas hacia mí, sino más bien, quiero ser parte de ese cambio y compartir con ustedes todo lo bueno que hay en mí.

Tengo mis días grises, llenos de miedos e inseguridades, como todos pero, todo esto es parte del proceso de crecer, madurar y entender de qué se trata esta gran aventura llamada “vida”.

En cuanto a mis defectos, ya no espero que las personas me los digan, he aprendido a conocerme y saber que nadie es perfecto, pero está en nosotros trabajar en ser mejor, en aceptar nuestros errores y que esa enseñanza queda en nosotros para siempre.

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No lo pienses más e inicia el camino para llevar una vida equilibrada, para entender lo que realmente “necesitas” y no lo que “quieres”. Hay una gran diferencia en esto y cuando ya lo hayas analizando sabrás que lo que necesitamos no tiene precio.

No te quedes sentado esperando que las cosas lleguen a ti, da el paso, comienza a caminar y deléitate de cada momento, de cada aprendizaje y escribe cada capítulo de tu libro, llénalo de grandes hazañas, anécdotas, momentos mágicos y de innumerables experiencias.

No espero riquezas ni cosas materiales, lo que si espero es que la gente tenga más alegrías, metas, pasión por lo que hacen y que vivan con positivismo y amor. Esto fue una de las razones por las que inicie este gran proyecto llamado “MOTIVAMERICA”, para contagiarlos de felicidad y ese empujón que necesitamos todos para atrevernos a “vivir” y a soñar.

La Sintonía ¿Sabes si estás en la misma sintonía con la gente que te rodea? ¿Te sientes conectado(a) con tus amigos, pareja, familiares o compañeros de trabajo? Este mundo avanza y tú también por eso, en este gran recorrido que se llama “CRECER” debes aprender a seleccionar quiénes son los que caminarán a tu lado, quiénes son aquellas personas que estarán en las buenas y en las malas, quiénes son los que te darán el ánimo necesario para seguir adelante, quiénes te ayudarán con un consejo para el desarrollo de tus proyectos y quiénes irán y creerán en ti en esta gran aventura.

He oído muchas veces que nuestra vida es un tren donde se suben y bajan personas en diferentes estaciones. A mi parecer, es muy cierta esta frase. En mi vida han subido y bajado tantas personas, algunas se quedan junto a mí como mentores, consejeros, familia, amigos leales, en fin, personas importantes. Otras en cambio, se bajan por su propia decisión o al final, tenían que bajarse porque su misión era que yo aprendiera algo específico de ellos y luego seguir cada uno nuestro camino.

Es de mucha importancia estar claros cuales son las personas que nos rodean. Si tu objetivo es concentrarte en ser mejor cada día, en aprender cosas nuevas, en emprender un negocio, en estudiar, realizar alguna actividad física, hobby o desarrollar algún proyecto de vida, debes saber seleccionar quiénes se quedan junto a ti en este viaje, quiénes te darán el apoyo sin críticas destructivas, comentarios tóxicos, envidias, cualquier pensamiento negativo o simplemente: que estén en tu 74

misma sintonía.

Lastimosamente hay muchas personas cercanas a nosotros con actitudes negativas y, la pregunta es: ¿Qué hacemos con ellos? Personalmente he tenido muchos seres a mí alrededor que no compartíamos la misma sintonía y con esto no significa que no les quiera y aprecie pero, por más que yo quiera, si la persona no cambia por sí misma nunca cambiará. Entendí que tenía que tomar otro camino, que no teníamos los mismos pensamientos, gustos, sueños, anhelos, ganas de crecer, de ver la vida de otra perspectiva y por más que me duela tuve que decir “adiós” muchas veces. No por odio, ni por rencor ni por nada malo sino, que nuestra historia era corta, porque así es la vida, nada es para siempre, nada es seguro y por esto, mientras tengamos vida debemos de ser luchadores de sueños y encontrar a ese grupo de personas que estarán a nuestro lado en cada caída, cada error y cada enseñanza.

A veces es muy duro hacer esta “selección”. En cuanto a las amistades, como ya sabemos: no es cantidad sino calidad. Son valiosos todos esos aspectos positivos que una gran amistad te puede brindar. Esto para mí vale oro, un amigo o amiga es un gran tesoro que hay que conservar. Alguien que te escuche, que te dé aliento, que entienda tu visión de ver las cosas y que le agregue valor a tu vida es y será una persona bienvenida ya que, aportará un sinfín de ideas y aprendizaje, te llenará de buena actitud y buenas vibras.

"Sintonía en el amor”. Me ha pasado, he tenido relaciones sin sintonía. Y he luchado por encontrar esos cables para tratar de conectarlos y ver si al final existía sintonía pero, ¡qué va! Las luchas de este tipo son como buscar una aguja en un pajar, son muy difíciles y al final, si no encuentras ese cable lo más sano y razonable es retirarse.

En fin, la “sintonía” con los demás es pieza clave para tu crecimiento como persona y como profesional. Tenemos que aprender a distinguir donde está la sintonía y, preservar esta conexión que tenemos con aquellos que hacen que nuestra vida sea más bonita.

Viaja y conoce el mundo Mi corazón me dice “viaja”, conoce nuevas culturas, lugares, costumbres, llénate de conocimiento y conversa con personas de otros países. Comparte momentos, no te quedes plantado en un mismo lugar tanto tiempo, sal de la rutina, aprende cosas nuevas y sobre todas las cosas “no te detengas”.

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Busca un vuelo económico o el que quieras, rompe con lo cotidiano y deja que entre todas esas imágenes nuevas, todo aquello desconocido, eso que nunca has visto y así, tu mente inicia un mágico proceso de abrirse para recibir experiencias nunca antes vividas que sin duda alguna, quedarán grabadas en lo más profundo de tu corazón y en tu mente.

Este mundo se hizo para verlo, para ser visitado. Al viajar se queda en ti, grandes memorias llenas de anécdotas inimaginables, historias llenas de humor, alegría y mucha aventura.

Viajar te hace expandir tu mente de una manera diferente. Te hace más creativo, te inspira a realizar nuevos proyectos, te llena de sabiduría y crecimiento personal y profesional.

Muchos dicen que: viajar es un “placer” o “es un lujo que no todos podemos darnos”.

Yo respeto la opinión de los demás pero, para mí viajar es una inversión justa y necesaria para mi felicidad eterna. Porque, la felicidad que te da el viajar no es la misma que te da las cosas materiales. El recuerdo intangible es más valioso que un par de zapatos, carteras o vestidos nuevos. Con esto no quiero decir que nunca iré de compras pero, les aseguro, desde lo más profundo de mi corazón que lo que más me llena de amor y alegría es conocer lugares distintos, conversar con la gente en fin: “VIVIR”.

Cada uno es dueño de su vida y destino. Somos los responsables de construir nuestro futuro y si realmente queremos algo, debemos ir por ello. Si uno de tus sueños es viajar y conocer lugares entonces “hazlo”, ¿qué te detiene? Si realmente es tu sueño ahorrarás o harás todo lo posible para hacerlo. Si no es tu sueño, buscarás excusas para no realizarlo.

Si no sabes cómo iniciar tu plan de viaje, a continuación te daré unos consejos para que no tengas más excusas y comiences a coleccionar sellos en tu pasaporte: Agéndalo: ponerle fecha a tu viaje es importante, ya que marcas tu objetivo y sabes que debes pedir vacaciones para esa fechas y recolectar el dinero para ese momento.

Presupuesto: arma tu presupuesto de viaje incluyendo boleto aéreo, comidas, transportes, entradas a museos, parques, exhibiciones entre otras actividades. Así te harás la idea de cuánto necesitarás para esta aventura. También podrás consultar con amigos que hayan viajado para saber cuánto se han gastado.

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Ahorra: si uno de tus sueños es viajar, no malgastes el dinero en cosas innecesarias.

Piensa que ese dinero lo necesitarás para comidas o transporte en los lugares donde quieras ir.

Boletos aéreo: al agendar las fechas de tu viaje con tiempo, podrás adquirir a buen precio tu boleto aéreo. Hay muchas páginas en internet donde puedes cotizar tus vuelos y así podrás evaluar los precios con tu presupuesto.

Hospedaje: Existen varias opciones que podrás encontrar en internet. Hoteles, hostales o apartamentos, de diferentes precios, encuentra uno que se ajuste a tu presupuesto y que sea céntrico o que tenga alguna estación de buses o metro cerca.

Visita amigos o familiares: si tienes amigos o familiares que viven en el extranjero y pueden darte hospedaje, no dudes en hacer de inmediato tus maletas y visítalos. Es una gran oportunidad de compartir con ellos, conocer nuevos lugares y así poder ahorrar en lo que ibas a pagar por un hotel.

Sitios de interés: busca en internet lo que te interesa ver en cada ciudad, mira sus costos de entrada o cualquier detalle que necesites para ir rellenando tu presupuesto.

No esperes más, haz las maletas y cumple uno de tus sueños: “Conoce el mundo”.

“Todo va a estar bien” La vida me ha enseñado a ser fuerte, a luchar y a nunca rendirme. Tengo tantos recuerdos en mi mente y corazón acerca de todas las batallas que se me han presentado. Desde muy chica pude observar muchas cosas dentro y fuera de mi familia que me mostraban como sería al ser grande y sin darme cuenta esas lecciones me hacían crecer como persona. En este espacio deseo contarles una experiencia que me marcó radicalmente, en el sentido familiar y espiritual. Esta vez deseo contarles una vivencia de hace casi 13 años atrás donde pudimos experimentar la sensación de prepotencia, de tristeza y sufrimiento del CÁNCER. Mi padre, a quien todos amamos en mi familia, fue la victima de esta enfermedad, lo que trajo mucho dolor y preocupación a toda la familia y amigos. Recuerdo tener solamente 20 años cuando recibí la noticia de que mi padre, mi hombre favorito en el mundo, tenía esta enfermedad. Tengo en mi memoria que, antes que le diagnosticaran a mi padre el cáncer, el comentaba: “Estoy seguro de que es cáncer”.

Haciendo un repaso de lo que sucedía en ese momento, fue muy difícil tocar ese tema 77

con mi hermana mayor quien estudiaba en el extranjero y no queríamos mortificarla con esta noticia, lo que nos tocó a mi madre, hermano y a mi persona el cuidado de mi padre, orar, motivarlo y estar a su lado, ya que se encontraba en la gran prueba de su vida. Quienes han vivido esto, están claros que no solamente sufre el enfermo sino toda su familia. Es allí, en este punto donde deseo compartirles mi experiencia, lo que vivimos y como logramos superar juntos el combate contra el Cáncer.

Mirando hacia atrás, no sé cómo sucedió, pero pasó. De un momento a otro, mi mente se bloqueó de una manera extraordinaria, donde solamente pasaban por mi mente palabras de aliento y de positivismo. Mi padre me hablaba de su enfermedad y de inmediato le respondía “Todo va a estar bien”. Nunca olvidaré el sufrimiento de mi madre al ver a su compañero postrado en una cama. Recuerdo decirle: “Mamá todo irá bien, no llores más, estoy segura que mi papá va a salir de todo esto”. Lo veo en estos momentos y aún no me explico cómo fui tan valiente, cómo una joven podría estar tan llena de coraje y tener el valor para decir semejantes palabras en un momento tan delicado. Es allí donde comprendo que todos tenemos ese caparazón, esa coraza que nos protege de todo mal que nos sucede y hace que las cosas no se vuelvan tan difíciles y sean superables. Nunca sabremos al final que pasará pero, si sacamos esa energía positiva siempre saldrá algo bien, siempre habrá un aprendizaje y algo que nos queda en la vida. Debemos ser optimistas, porque siempre tendremos tropiezos, caídas o pruebas que nos enseñarán grandes cosas y harán que veamos la vida desde otra perspectiva y te aseguro, que comprenderás de una manera más humana el por qué nos suceden cosas ya sean positivas o negativas. ¿Y qué sucedió con mi padre? Bueno, les cuento que mi papá salió victorioso de la operación y que el día que me “quebré” fue al verlo, luego de la operación, con una sonrisa, con ganas de hablar y lleno de vida. Ahí, en ese preciso momento fue que entendí el por qué no tenía que flaquear, que debía apoyar y amar más que nunca a mi familia y estar 100% para ellos. Ver a mi padre en ese instante es una fotografía en mi mente que llevaré conmigo para siempre. Quisiera incentivar a todos a que nos realicemos un examen general y a visitar al médico, porque recordemos que la salud es importante. No sabemos con certeza si nos tocará algún momento sufrir de esta enfermedad pero, lo que importa aquí es estar preparados para lo que venga, nunca perder la fe y la esperanza de que “Todo va a estar bien”.

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10 consejos para ser feliz Hoy decidí compartir con ustedes diez consejos que me han servido para encontrar felicidad y paz en mi corazón. No soy perfecta y te aseguro que nadie lo es. He aprendido que a pesar de las imperfecciones y que no lo tenga todo, solo basta en ser “agradecidos”, disfrutar cada día, cada momento como si fuera el último, luchando por mis sueños, hacer lo que más me gusta, dando todo con amor y dejando todo en la pista.

Estos consejos son parte de mi experiencia de vida, es el gran aprendizaje que he recibido a través de los años, son parte de mi historia y sé que quedarán en mí hasta la eternidad. Por esto, me parece justo y necesario dejarles este legado para que todos seamos “eternamente felices”.

Como ser feliz en 10 pasos: • Conócete: muchas veces les he compartido lo tan importante que es conocerse a uno mismo, meditar y reflexionar sobre todo eso que tenemos guardado. Como personas individuales es vital y de suma importancia encontrarse y saber perfectamente que deseamos en la vida, cuales son nuestros sueños o metas para así alcanzar la felicidad y el éxito que tantos deseamos.

• Perdónate: como comenté nadie es perfecto, somos seres humanos que cometemos errores. En este caso, no te tortures más, perdónate, reconoce tus errores e inicia de nuevo. Ese error será el gran maestro de vida. Al final todo es parte de nuestro aprendizaje, para crecer y madurar.

• Lucha por tus sueños: cuando estés claro de lo que desees, lánzate y ve en busca de tus sueños. “Todo es posible”. Cuando deseas algo de corazón, el universo conspira para que las cosas pasen con la ayuda de tu fuerza, empeño y dedicación.

• Nunca pierdas la esperanza: sigue el camino de tus sueños, el que has construido con trabajo y esfuerzo. Que la esperanza sea tu valiosa aliada, ella te ayudará a ver la luz al final del camino y será ese brillo en tus ojos para seguir hacia adelante.

• Paciencia: les voy a ser sincera, este punto es mi gran reto. Aunque me ha costado acostumbrarme a ella, ha sido maravilloso tenerla en mi vida. La paciencia hace que mi humor cambie, que vea las cosas lentamente, viendo cada detalle y así poder entender que las cosas llegan a su debido tiempo, que todo tiene una razón para 79

aprender y entender como es la vida y que al final todo tendrá una gran recompensa.

•Ayudar a los demás: cuando tienes un gesto, un detalle o haces algo por los demás, es la inyección de alegría más efectiva para tu corazón. El tan solo hecho de ver a las personas agradecidas por tus favores, es un especial regalo para nuestra alma.

• Perdona a los demás: perdona toda aquella persona que te ha herido. Libérate de esa carga negativa. Es imposible vivir felices teniendo tanto odio y rencor en nuestro corazón. Perdonar no es fácil pero no imposible.

• No esperes nada a cambio: cuando esperamos de los demás es cuando nos decepcionamos. Dejemos todas aquellas expectativas que nos hacen pensar de más.

Cada persona es un mundo y tiene diferentes maneras de reaccionar. No esperes que todos actúen como lo harías tú. Cuando entiendas esto, verás que habrán otras cosas positivas que las personas te pueden brindar.

• Acepta a las personas como son: tratar de cambiar a las personas es caso perdido. Ellas cambiarán si realmente lo desean, podemos aconsejar y guiar pero, si ellas no ponen de su parte todo seguirá igual. Al final tendrás que tomar la decisión de aceptarlas tal cual y quererlas como son.

• Sé optimista: aunque tengas dudas, miedos o no veas solución, llénate de vibras positivas, únete con personas que te den aliento, ánimos y motivación. El ser optimistas es parte esencial para alcanzar tus metas y esa felicidad eterna que todos anhelamos.

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