EN DESARROLLO

POR Luis Berger FOTO cortesía

AL PLANEAR EL INTERIORISMO EN EL CUARTO DE LOS NIÑOS, ES NECESARIO PENSAR A FUTURO Y RECURRIR A UN DISEÑO CON EL CUÁL SE PUEDE ENCONTRAR DIFERENTES ENFOQUES DECORATIVOS PARA UN MISMO MOBILIARIO.

Conforme al crecimiento, los niños se vuelven rítmicos y graduales, en comparación con los cambios dramáticos de las etapas previas. Es durante la época de los años escolares, que el niño empieza a desarrollar una identidad de grupo y a identificar su espacio no sólo como un lugar de juego sino también un sitio para el estudio. En este periodo es oportuno desarrollar dentro del cuarto del niño un área destinada a sus labores escolares con mobiliario para esta finalidad.

ETAPAS POR EDAD:

• Planeación para cuarto del bebé.

• La primera infancia.

• Lugar de espacio y estudio.

• Espacio pre adolescente.

La llegada de niños a una familia es un motivo de ilusión, alegría y grandes cambios en la forma de vida. Estos se hacen extensibles al uso del espacio que ahora será compartido por hijos y padres, aunque distintas generaciones den distintos usos a un mismo lugar.

El ideal de cualquier espacio infantil es un lugar donde los niños se sientan libres y protegidos, que además estimule su creatividad. Consecuentemente es oportuno crear un espacio especial para los niños, que sea diferente al resto de la casa y donde los estándares sean más relajados, de manera que se permita andar sin zapatos, tomar una siesta o cenar frente al televisor. En resumen, un sitio donde los niños se puedan tomar el control y expresarse con libertad.

La decoración de un lugar así tendría que ser divertida, relajante e invitante llena de elementos que puedan tener muchas funciones como cojines de gran tamaño, alfombras o tapetes que hagan cómodo el sentarse al nivel del suelo – muy al estilo japonés - o mesas plegadizas que sólo aparezcan cuando se les necesite. Consecuentemente el diseño para un espacio infantil requiere de gran ingenio para equilibrar estética, comodidad, la funcionalidad con toda la acción que se desarrollará en un sitio tan dinámico. El único sitio del hogar donde cualquier cosa puede permitirse menos la aburrición.

Estilo Propio

Pues bien, el cuarto de los niños requiere ser un espacio flexible y funcional cuya decoración y mobiliario puedan cambiar a la par de las pequeñas personas que los habitan. A lo largo de la infancia el niño se desarrolla y conforme a estos cambios naturales de su crecimiento también se transforman sus intereses y necesidades.

Sería absurdo pensar en volver a decorar la habitación de un niño cada vez que este entra en una nueva etapa de su desarrollo. Pero tampoco es correcto pretender que su habitación permanezca estática desde la primera infancia hasta que la adolescencia se manifieste plenamente. La solución a este dilema radica en pensar a futuro y recurrir a un diseño con el cuál se puede encontrar diferentes enfoques decorativos para un mismo mobiliario. Mediante el uso de los colores, materiales, accesorios, detalles y un grupo de muebles

ERRORES AL DECORAR:

• Probablemente lo más común al planear la habitación para los niños es el de no permitirles involucrarse en la decoración del mismo. Aunque sean los adultos los que tomen las decisiones sobre este espacio son los niños quienes realmente lo habitarán por lo que se debe de conocer su punto de vista al respecto.

• De igual importancia es la planeación de las medidas de seguridad, pasarlas por alto puede ser un error fatal. Deben tomarse precauciones como cubrir los enchufes de la luz, evitar que los cordones de las cortinas estén al alcance de los niños, cerrar con dispositivos de seguridad los gabinetes con medicinas o substancias tóxicas, evitar que las cunas o camitas estén muy cerca de los calentadores, son algunas de las consideraciones básicas en este aspecto.

• Otro error es pretender que un lugar dedicado a los niños permanezca demasiado ordenado. La forma que tienen los pequeños de percibir el espacio es diferente, los niños conservan la habilidad de “pensar con el cuerpo” que les motiva a experimentar con todos sus sentidos por eso su espacio debe favorecerlos, tanto en medidas de seguridad como en mobiliario y materiales resistentes. De igual manera se debe de tomar en cuenta que la habitación de los niños evolucionará junto con ellos.

relativamente neutral un mismo sitio acompañará a los pequeños de la casa durante una temporada substancial de sus vidas adaptándose a ellos y lo que es más importante contribuyendo a la formación de su personalidad en la medida de que sirva como su lugar de expresión.

Las diferentes etapas de crecimiento se prestan para utilizar más estímulos con el uso del color. Aplicar diferentes tonalidades es un elemento fundamental, ya que este fenómeno óptico tiene la facultad de provocar reacciones sensoriales en los humanos y más aún en los niños quienes captan nítidamente la información que les transmiten sus sentidos. Cualquier padre observador notará que desde edad muy temprana los niños manifiestan preferencia por ciertos colores.

Con base a cada cambio, el espacio se va redimensionando hasta convertirse en el cuarto de un adolescente, que ya tomará su propia identidad y podrá seleccionar los elementos que integran el área en la que más pasa tiempo, su lugar dentro de casa.