XXIII ANIVERSARIO MAEM | DESDE EL 07 DE NOVIEMBRE
CIUDAD (RE) PRESENTADA UN PROYECTO CURATORIAL DE
ARIADNA GIMÉNEZ
“En la ciudad ya no se sabía demasiado de que lado estaba verdaderamente el miedo; quizás por eso te divertía dominar el tuyo y cada tanto elegir el lugar y la hora propicios para hacer un dibujo.” Julio Cortázar
Una ciudad es un acontecimiento que permanece. Cualquier ciudad puede ser leída como un texto; una escritura colectiva multicapas, capa sobre capa de sentido que aportan todos los actores a través del tiempo. Se constituye con la definición del trazado sobre el territorio, la llegada de sus habitantes, la construcción de una casa, el cultivo de la tierra, el trabajo en la oficina, un nacimiento. Se escribe y se lee de múltiples modos, tantos como puntos de vista se tenga del mundo. La ciudad puede leerse como una trama sobre la cual se realiza el tejido; cada acto humano teje un punto en el acontecimiento ciudad. Al construirse la ciudad se presenta. Sabemos que como creación colectiva, la ciudad es la materialización de infinitas relaciones humanas; el tejido nos muestra ese juego complejo de las voluntades, los poderes y los saberes de tantísimas culturas. El urbanismo moderno se constituye en una disciplina en auge que pretende reunir y organizar todos estos saberes. En sincronía, las distintas materias aportan su conocimiento al servicio de hacer, comprender y visibilizar los procesos urbanos. A través del tiempo la ciudad ha sido un tema de interés central para artistas y arquitectos, en la doble tarea de presentar y representar. La historia de la creación de las urbes es la historia del hombre desarrollando capacidades para producir el fenómeno ciudad. Crear ciudad es una cualidad humana ancestral. En Medio Oriente Alepo, Damasco y Jericó se disputan el honor de ser las ciudades más antiguas de la humanidad, aldeas agrícolas habitadas tal vez diez mil años antes de Cristo. A la fecha se atribuye a Uruk ser el primer centro urbano de la historia cuyos templos datan de cuatro mil años a.C. alcanzando unos ochenta mil habitantes hacia 2900 a.C. Las ciudades antiguas representaban el orden cósmico, el orden natural, el orden sagrado. En el continente americano, en Perú, Caral fue la primera ciudad de la civilización andina, contemporánea con la mesopotámica. Aunque no sobrevivió, Teotihuacán fue fundada hace más de dos mil años y llegó a tener doscientos mil habitantes antes de la llegada de los europeos, un dato cuantitativo que no da cuenta del valor de su organización social. Entonces el hombre tiene seis milenios de experiencia urbana. La primera ciudad fundada por la conquista española y que continúa habitada hasta hoy es Cumaná, en Venezuela, y data de 1515. Buenos Aires fue fundada por primera vez en 1536, destruida cinco años después y refundada en 1580. Casi trescientos años pasaron hasta la fundación de Río Gallegos, la ciudad argentina continental más austral. Entonces los habitantes de estas tierras contamos solamente con ciento treinta años de cultura urbana o, dicho de otra manera, se ha tenido ese corto tiempo para producir una ciudad. Entre Siria y Santa Cruz, hay seis mil años de historia transcurridos.Tal vez resulte incomparable. Sin embargo, este recorrido en tiempo y espacio da cuenta de la misma interacción del hombre con su entorno para satisfacer las necesidades primarias y las simbólicas. El acto fundacional puede ser un ritual sagrado o una cuestión de orden práctico, pero se constituye eterno. Ese gesto se materializa en una geografía y permanece en el espíritu, determinando los modos de desarrollo. Somos parte del entorno que habitamos, como observadores y como partícipes necesarios en la consolidación de la identidad ciudadana. En la génesis de la urbe va incluido su contenido social y político. Gabriel Alomar1 nos marca que estas tres dimensiones se encuentran en las raíces etimológicas de ciudad: la urbs, la civitas y la polis. Podemos leer a la ciudad como un cuerpo complejo. El fenómeno urbano abarca la dimensión espacial de ordenamiento del territorio físico construido y su relación con el medio ambiente (urbs), pero la sociedad que le da origen y se hace responsable por las transformaciones de su hábitat es la raíz de la civilización (civitas). La organización y administración de la vida en la ciudad nos remite a la polis, y tiene que ver con el modo en que se distribuye y se ejerce el poder. Como en todo organismo, los sistemas se complementan y una falla repercute en el funcionamiento del todo.
Pensar en el equilibrio y desarrollo armónico de las tres dimensiones como un triángulo equilátero nos coloca en un ideal, que se manifiesta cada vez más distante de la ciudad moderna. Entre la utopia y la distopia transcurre la mayor parte de la realidad urbana en todas las sociedades; algunas más cerca de una o de otra. Entre los extremos reales: Dubai (desde 1960 la ciudad futurista de Emiratos Árabes) y Kowloon (la ciudad sin sol de Hong Kong fundada en el siglo X y demolida en 1994), se ha votado a Melbourne (fundada en 1835) como la mejor ciudad existente para vivir. Tantas variables han sido tema habitual de representación en la historia del arte. Representación en tanto idea o imagen que se tiene o proviene de los entornos que habitamos, y sustituye la realidad. Las ciudades ideales han sido imaginadas desde la literatura, la arquitectura, el cine, la política o la sociología; utopías de espacios para hombres felices. Sin embargo, lo contrario no es difícil de imaginar para el hombre común; al fin y al cabo, la dicotomía entre vida y artificio es una de las bases de "lo siniestro"2. Para leer la distopía planteada en los clásicos del cine y la literatura: Metrópolis 3,Tiempos modernos 4, Un mundo feliz 5 o 1984 6 y que se vive en las urbes modernas, sólo hay que detenerse a mirar alrededor. Salimos de la vida salvaje para vivir en comunidad con reglas acordadas, protegidos por el refugio, el orden y la civilización. El statu quo de la polis no complace a la civitas, que no se responsabiliza por la urbs. La ciudad refugia y expulsa. El caos de la vida urbana moderna nos expulsa del afuera, del espacio público; la calle nos resulta agresiva y huimos para encontrar cobijo en el interior de las casas, que debemos enrejar para defendernos del otro ominoso. El siglo XXI parece presentar un retorno a lo salvaje donde la opción se plantea entre la superpoblación o la eliminación de los cuerpos. Tanto en el mundo “desarrollado” como en los países marginales se revelan las contradicciones que atraviesan cualquier tiempo, y esto afecta, directa o indirectamente, a los tres mil seiscientos millones de personas que vivimos en ciudades (estimado el cincuenta por ciento de la población mundial, porcentaje que va en aumento). En Argentina solo un ocho por ciento de la población vive en áreas rurales. Puede leerse en una dimensión simbólica que casi todos los habitantes de este país periférico buscan pertenecer a una centralidad. Similar condición se observa en Santa Cruz, contando con casi toda la población en zona urbana para vivir en el centro de la periferia de la periferia de un mundo. Cada ciudad tiene códigos propios, por lo tanto es comprensible para quien la habita. Los artistas leen los diversos signos, re-significándolos. El damero, el laberinto, la diagonal, la torre, el puente, el muelle, la calesita, la villa. El disfraz, la fiesta, la noche, el auto, la basura, la calle, el niño. El trabajo, la corrupción, la identidad, la memoria, la protesta, el viento, el miedo. Esta cualidad del arte posibilita que un signo re-significado se convierta en un nuevo significante que al ser tomado por un nuevo espectador renueva su lectura, generando un proceso continuo. Apropiarse de un espacio lo convierte en lugar. La ciudad de cada uno está en el propio imaginario y podemos construir mapas mentales que nos sean familiares. El mapa mental 7 es en sí mismo una red de puntos y un campo de relaciones intermedias que se tejen, individual y colectivamente, pasando del micro mapa al macro mapa de manera continua. La representación que los artistas hacen del hecho urbano está en los detalles y en el todo; en la historia y en el futuro; en lo evidente y en lo oculto; en lo permanente y en lo efímero. Los artistas comunican ciudad descubriendo las construcciones de sentido de la dinámica social y las luchas de poder. Nos acercan fragmentos del texto para agregarlos a nuestra propia vivencia ciudadana. Porque cada imagen, cada palabra, acción o idea (re) presenta el acontecimiento ciudad. Ariadna Giménez / 2016
1 - Alomar, Gabriel. SociologĂa urbanĂstica. Madrid, Editorial Aguilar, 1961. 2 - Sigmund Freud. Lo siniestro. 1919. 3 - Largometraje dirigido por Fritz Lang. EUA. 1927. 4 - Largometraje escrito y dirigido por Charles Chaplin. EUA. 1936. 5 - Novela escrita por Aldous Huxley. Reino Unido GB. 1932. Largometraje dirigido por Leslie Libman y Larry Williams. EUA. 1998. 6 - Novela escrita por George Orwell. Reino Unido GB. 1949. / Largometraje dirigido por Michael Radford. Reino unido GB. 1984. 7 - Lynch, Kevin. Urbanista y escritor estadounidense. La imagen de la ciudad. Editorial Infinito. Buenos Aires. 1959.
CIUDAD (RE) PRESENTADA
MAEM 0286 LEANDRO MANZO “UNA CIUDAD DEL NORTE” 2008
MAEM 0292 MIGUEL ANGEL CABEZAS “CALESITA”. 2008.
MAEM 0318 MARIA FERNANDA MOLINA ST. 2011
MAEM 0215 MARIA VERA “CAMINOS DE TESEO” 2001
MAEM 0300 DANA CATRILAF “DE LA SERIE: SALIDAS DE EMERGENCIA” 2010
MAEM 0330 CLAUDIA WRIGHT “ESTRUCTURAS” 2011
MAEM 0156 LEON FERRARI “CIDADE” 1986
MAEM 0105 RAFAEL GIL “ANTROPOFAGIA. HISTORIA DE LAS MANCHAS QUE SE COMEN A LOS HOMBRES” 1998
MAEM 0064 NORMA SEGOVIA “EMPRENDIENDO EL VIAJE” 1994
MAEM 0013 / 0014 CARLOS POETE “SITUACIÓN” 1997
MAEM 0128 DANIEL FERNANDEZ UNA CAJA PARA UN ELEFANTE INMIGRANTE 1997
MAEM 0239 SUSANA SUAREZ ST 2004
MAEM 0167 LUCHI COLLAUD “LA PROMESA”
MAEM 0186 JULIAN USANDIZAGA “NN” 2001
MAEM 0245 VICTOR REBUFFO “LA VILLA SUMERGIDA” 1972
MAEM 0383 GRACIELA RODRÍGUEZ “DE LA SERIE TU NO DEBES… PARACAIDISTAS II” 2008.
MAEM 0189 MARIA FERNANDA MOLINA “LA BÚSQUEDA I” 2003
MAEM 0208 CARLOS SCANNAPIECO “PUENTE SOBRE EL RIO NEGRO” 2005
Coordinación: Área Patrimonial:
Bettina Muruzábal Mariela González
Área Arte y Educación: Maira Márquez Susana Torres Mauricio García Ana Copto Pamela Driuzzi Comunicación y diseño: Natalia Andrea Bravo Auxiliares de la educación: Carmen Arbe Susana Ces Cristian Bahamonde Luis Barrionuevo Registro Fotográfico:
Musicalización:
Gabriela Peñas Enrique Paleari Juan José Màrquez Victor Cardenas