Guia de visita
Europa, un continente dedicado a la artesania del encaje Detalle de mantilla de blonda de dos tonos. Casa Vives
PRIMERA PLANTA
SALA
SALA 4 . Europa, un continente dedicado a la artesania del encaje
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La artesanía del encaje es uno de los elementos característicos de la cultura europea, todos los países europeos desde Portugal hasta Rusia han desarrollado alguna o más de una técnica propia que los identifica: por sus diseños, utilidad o forma de trabajar. Los encajes fueron durante siglos un producto de lujo que tenía una gran aceptación en la indumentaria de las cortes europeas de los siglos XVII y XVIII. Con la introducción del encaje industrial a partir del siglo XIX, el encaje artesano fue perdiendo protagonismo. Los encajes pueden dividirse según la utilización de la aguja o bolillos. El guipur, el torchón o los encajes numéricos se encuentran prácticamente en toda Europa con características específicas como el guipur de Le Puy, los encajes numéricos de Rusia, Milán o el encaje brujo o encaje extremeño, de los cuales podemos ver algunos ejemplos en esta sala. Los primeros encajes se sitúan en Venecia a finales del siglo XVI. Es el punto in aria realizado con aguja, que tuvo un gran éxito en el siglo XVII. Francia fue uno de los grandes países productores de encajes, durante el siglo
Encaje veneciano o punto in aria
Pañuelo de encaje brujo. Foto de Enric Pera
XVIII con encajes a la aguja como los de Argentan o Alençon y hacia finales del XVIII con la introducción del fondo de tul en el encaje de valenciennes, blonda, xantilly o Lille, todos ellos realizados con bolillos y que fueron muy populares durante el siglo XIX. El otro gran país dedicado al encaje es Bélgica, con el encaje de Duquesa realizado con bolillos y la gasa belga que se realiza con aguja. Con la introducción de los tules mecánicos se
Vestido de encaje de Duquesa y de cinta
desarrollaron técnicas mixtas que consistían en aplicar motivos realizados con bolillos o aguja sobre los fondos de tul. Otro país que desarrolla sus propias técnicas es Gran Bretaña, donde se realiza el encaje de Honiton. El encaje de Malta, que se creó en esta isla, se realiza en seda y uno de los motivos característicos es la cruz de Malta. En el caso de Rusia se desarrolló un tipo de encaje numérico. Por lo que respecta a España, los territorios especializados en la producción de encaje fueron Galicia, donde el centro más importante fue Camariñas con la producción de unos trabajos basados en el guipur. Almagro, en el centro de la península, se especializó en blonda, técnica introducida por un matrimonio de Mataró, y en Cataluña destacan los centros del Baix Llobregat, dedicado al encaje negro (blonda, Le Puy, xantilly), el encaje del Arboç y los encajes blancos de la comarca del Maresme, don-
de se creó el ret fi o encaje de Arenys. En el siglo XVI se desarrollaron en Cataluña, Castilla y Extremadura puntos realizados con aguja que precedían al encaje, son los puntos de Cataluña, soles salmantinos y extremeños. Esta técnica evolucionará en el caso de las islas Canarias en el encaje de Tenerife y se trasladará a tierras americanas, concretamente a Paraguay, donde recibirá el nombre de ñandutí. El encaje artesano vivió su último momento de esplendor a principios del siglo XX con la influencia del estilo modernista. En Bélgica, Austria, Francia y en Cataluña diversos dibujantes de encajes desarrollaron nuevas formas estéticas. En el caso catalán destaca la figura de Marià Castells Simón, dibujante de Arenys de Mar que realizó magníficos diseños de estilo modernista para la ropa de hogar, albas de ajuar eclesiástico que se pueden contemplar en esta sala al lado de trabajos de estilo clásico.
Alba de ret fi. Casa Castells. Foto de Enric Pera