Gran Málaga
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MIÉRCOLES 2-2-2005 Málaga hoy
T R A N S P O RT E I N T E R U R BA N O
Novedad. Miles de usuarios de la provincia se encontraron ayer con la nueva tarjeta del consorcio metropolitano entre las dudas, confusiones y preguntas que los propios conductores de los autobuses no sabían bien cómo aclarar
Billete único, confusiones varias viajera que subió en Churriana a las 13.24, momento en el que varios pasajeros bromearon. “¡A ver si te llevan a un curso para aprender!”, decían entre risas. A las 13.48, frente a la urbanización Pinos de Alhaurín, el conductor avisaba. “Ya estamos en Alhaurín de la Torre. Los del billete único de un salto deben pagar otra vez para llegar a Alhaurín el Grande”. Eso sí que lo había aprendido. Una hora más tarde de la salida, a las 14.03, el autobús se detuvo en la primera parada del municipio de destino y mientras los pasajeros ba-
La conversación estrella de todos los pasajeros de se centraba en discutir ventajas y desventajas del nuevo billete electrónico
FOTOGRAFÍAS: GARCÍA VIVAS
DUDAS. Una viajera, en al autobús, en el primer día del billete único. LA CRÓNICA
Nacho Sánchez ■ MÁLAGA. Primer día del billete único del Consorcio de Transportes del Área de Málaga y primeras confusiones y sorpresas para los viajeros. Un trayecto desde Rincón de la Victoria hasta Alhaurín el Grande se convertía ayer en un buen ejemplo para conocer cómo habían recibido los usuarios la novedad del transporte interurbano. De las 42 personas que subían a las 12.05 desde el Ayuntamiento de Rincón, tan sólo tres poseían el billete único. Los demás viajeros miraban asombrados y preguntaban al conductor. “¿Qué es esa tarjeta? ¿Cómo funciona? ¿Dónde la compro?”, repetían unos y otros. El nuevo monedero electrónico era ayer la conversación estrella en el interior de todos los autobuses interurbanos –junto al súbito aumento de temperatura– y se escuchaban precios, definiciones y versiones sobre el significado de los saltos entre zonas para todos los gustos. Los viajeros más avispados explicaban a sus compañeros qué es y cómo se usa el billete único, pero todos se quejaban de falta de información. “Este trayecto costaba el lunes 95 céntimos y hoy de repente 1,15 euros. Todos los que no tenemos la tarjeta hemos pagado la novatada”, decía Luisa Aguilar. A lo que otra viajera añadía que “hay que comprarse la tarjeta por fuerza. Con estos precios no queda otra opción”. A las 12.33 y tras saltarse dos semáforos en rojo, el autobús de Portillo alcanzaba la acera de Muelle Heredia. Momento que muchos aprovecharon para solicitar más información al conductor. “Vaya día le queda”, decía Pilar Gálvez, otra viajera del mismo vehículo. “Yo ya
tengo tres tarjetas electrónicas. La del consorcio, la de la EMT y la del transporte urbano de Rincón”, explicaba la mujer. Desde Muelle Heredia hay que realizar un nuevo desplazamiento a la estación de autobuses para tomar un transporte interurbano que tenga como destino Alhaurín el Grande. Para que cueste más barato y se aproveche el transbordo, hay que realizar el trayecto en menos de cuarenta minutos (ya han pasado otros 30 desde Rincón) y no se debe perder tiempo. Hay dos opciones: tomar la línea 24 de la EMT (para lo que es necesario otra tarjeta inteligente diferente) o ir dando un paseo. Aprovechando el buen tiempo y a paso rápido, a las 12.55 los usuarios ya esperaban en el andén 27 su transporte hacia Alhaurín. Pero se encontraron con otro problema: la tarjeta de un salto que necesitan para ir de Rincón a Málaga, no les sirve para llegar a su destino, que está a dos saltos. El conductor del vehículo no sabía ayer cómo solucionar el entuerto y ante las dudas, recurrió a un inspector. Éste daba dos opciones. “Lo mejor es comprar una tarjeta de un salto y otra de dos saltos para tener de todo. O bien pagar un viaje hasta Alhaurín de la Torre y allí volver a pagar otro hasta Alhaurín el Grande, de tal manera que pagas un salto y luego otro”. La última opción convenció más a los viajeros aunque resulta algo más cara. De los otros 66 compañeros de trayecto hasta Alhaurín el Grande, tan sólo cuatro poseían el billete único. Este conductor también era novato y tuvo más problemas de los esperados para conseguir cobrar los trayectos. El ejemplo más claro, los ocho minutos que tardó en dar el recibo de pago a una
INFORMACIÓN. Un usuario lee un tríptico del consorcio.
3 VALORACIÓN POSITIVA El primer día se cierra con la venta de más de 1.400 tarjetas El presidente del Consorcio de Transportes del Área de Málaga, Antonio Ortuño, valoraba como “un muy buen día” el del estreno del billete único. Según sus cuentas, el día se cerraba con más de 1.400 tarjetas vendidas, una cifra “espectacular”. “Lo que en otros consorcios han conseguido en un mes, nosotros lo hemos conseguido en un día”, explicaba ayer tarde. Reconoció que hubo diversos problemas y muchas dudas de los
usuarios, pero apenas le daba importancia. “La gente estaba entusiasmada con su nueva tarjeta porque es mucho más cómoda y más fácil para todo”, añadía Ortuño. Además, se mostraba partidario de dar mayor rapidez a la incorporación de la EMT en el consorcio. “Ese momento llegará muy pronto y entonces todo mejorará aún más. Aunque es cierto que hay que dar tiempo a todos. Poco a poco todo ira mejor”, dijo.
jaban, los que se quedaban seguían manteniendo discusiones sobre el billete único. “La tarjeta vale diez euros”, afirmaba uno. “No, cuesta dos euros y el resto te lo van descontando en cada viaje”, respondía otro. “Pero entonces, ¿cómo sé cuántos viajes me quedan?”, preguntaba un tercero. Media hora más tarde, a las 14.35, aparecía el autobús de vuelta a Málaga. Su conductor tampoco tenía demasiado claro cómo funciona el monedero electrónico, pero aceptaba cualquier solución con tal de ir más rápido. “Llevamos 20 minutos de retraso porque no nos aclaramos con las tarjetas y el sistema informático”, aseguraba. Este chófer decía que se había enfrentado a un gran problema en el primer día del nuevo monedero electrónico: “Cuando llevo alguien a Coín y tiene la nueva tarjeta, me ha pagado hasta Alhaurín el Grande con el billete único y desde ahí a Coín, con efectivo, porque este municipio no es parte el consorcio. Y es un lío muy grande”, se quejaba. Las normas básicas del billete único colgadas en los autobuses indican que eso no está permitido, y dan como opción pagar todo el trayecto en efectivo o bajar donde acabe el trayecto abonado a través de la tarjeta. A las 15.30, el autobús se detenía en la estación de autobuses. En este viaje, de los 34 pasajeros sólo cuatro pagaron con la tarjeta electrónica. El resto no se quejó: hace dos días el viaje desde Alhaurín de la Torre a Málaga costaba 1,27 euros y ayer 1,15. “Esto es como el euro, habrá que acostumbrarse” contaba otro viajero mientras esperaba a su vehículo. Junto a él, otras tres personas trataban de traducir el tríptico informativo con las características y explicaciones del billete único. “¿Pero qué es un salto?”, repetían de nuevo. Y como se resalta en el reverso del billete único: “Recuerde que cuanto más use su tarjeta mejor para usted y para todos”. Y claro, mejor para el consorcio.