REVISTA DE LITERATURA INFANTIL MARZO,
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2 018, N°39
“EL REINO DE LOS NIÑOS” REVISTA LITERARIA Editora: Flor del Carmen Rodríguez Segura
FELIZ DÍA DE LA MUJER
DEDICADA A LAS MUJERES DE COSTA RICA Y EL MUNDO. Especialmente a LAS NIÑAS DEL MUNDO.
8 DE MARZO/2018
EL REINO DE LOS NIÑOS REVISTA LITERARIA
REFLEXIONES SOBRE LA MUJER 1-La mujer es una idea maravillosa de Dios. ¡Acertó! 2- La mujer es igual al hombre, una compañera, una amiga, un amor. 3- Las mujeres nos hacen sonreír y soñar. 4- cada día se merecen una palabra de aliento, de cariño y de amor. 5-La mujer nos enseña a ser valientes, a ir hacia adelante y marcan nuestra vida. 6- Las mujeres son valiosas en todos los sentidos, ¡Qué Dios las resguarde! 7- La mujer no es una flor para exhibirla o disfrutar de su lozanía. Una mujer es para toda la vida. 8- El tiempo lo destruye todo. La mujer envejece y se vuelve anciana, pero es para quererla más. 9- Una mujer tiene sueños, deseos, sentimientos. Ayúdale a cumplirlos. 10- Motívala cada mañana para luchar, estudiar, cuidar de la familia y cumplir sus propios deseos. 11- Las mujeres algunas veces, deben renunciar a sus propias metas, para ayudar a la familia. 12- Dios no las deja nunca y si quieren lograr sus metas, lo lograrán. Incentívala. 13- Sé valiente y avanza. Cumple tus metas. 14- No te rindas, pelea por tu familia, por tus hijos, para que estudien y puedan tener un mejor futuro. 15- Ella puede trabajar muchas horas seguidas, con tal de ayudar a los suyos. Es incansable, tenaz. 16- Dios no te abandona. Sé valiente para proteger a tu familia. 17- La mujer es capaz de perdonar, de expresar dicha y de callar todo el sufrimiento. 18- Ama incondicionalmente y es capaz de sacrificarse por su familia. 19- Sufren con la pérdida de un ser querido o con el fracaso de un hijo. 20- Espera con paciencia y sabiduría, el momento oportuno para ayudar a los que ama. 21- Hace la vida agradable a todos, aunque esté triste, o tenga algún dolor. 22- La mujer es sabia, sensible, cariñosa, llena de paciencia y sabiduría, tolerante, precavida, astuta. 23- La mujer hace sonreír, soñar, planear, suspirar y llora de felicidad, cuando logra sus metas. 24- Son esposas y madres dedicadas y sacrificadas. 24- A veces, se olvidan lo mucho que valen.
VENTANA DE LA POESÍA UN ÁNGEL VIVE
Un ángel vive en un jardín lleno de rosas, tan pequeñín que ningún ojo puede verlo.
Un día encuentra a una niña ciega y con ella se queda. Piden por las calles, y en el invierno se refugian debajo del puente.
Goza de la luz del sol de la brisa y el viento, del rocío y la alegría de la vida en la Tierra.
Pero un día hace tanto frío que se abrazan y no despiertan más.
Encuentra a un chico hermoso y sonriente, tan pobre que tiene sed y hambre.
Ahora viven felices en el cielo, donde Jesús los cuida y ama.
Nadie le da un centavo, pero él contempla con lágrimas, las estrellas pidiendo misericordia.
TROMPOS Y BOLINCHAS
El ángel se conmueve y el niño lo mira en su esplendor y ve en sus ojos libertad y amor. El niño sonríe al cambiar su mortal pena en divina eternidad. ¡Se va con el ángel hacia el cielo! CANELO Y LA NIÑA Ciego de un ojo, andariego y vagabundo. Sin amo y sin fortuna vaga por las ciudades, los valles y el bosque. Es un perro canelo, que a veces tiene hambre y sed, pero es libre para andar por donde quiere.
Sueño todas las noches con mi trompo de guayacán con su puyón de tope ¡Cómo destrozaba zapitas de los más expertos! También tenía un trompo de cacho de los que hacía don Narcizo. Era un tesoro que solo usábamos en ocasiones especiales. Un obispo de cocobola, y mi bolsa de bolinchas, donde no faltaban los botones, los chumicos y las guápiles. ¡Qué felices éramos, entonces!
VENTANA DEL CUENTO “Un cuento es un canto vivo de un espíritu feliz”
“CREER ES TODO LO QUE NECESITO” Naveguemos al amor y a la amistad. Quiero edificar un mundo de alegría y felicidad para todos. El amor es lo que realmente importa para construir un mundo feliz. La vida es un maravilloso don y una inolvidable aventura. Tengo paz en mi interior y deseo que los demás también la posean. ‘Somos lo que pensamos’. Si pienso en fracasos, fracasaré... Si pienso en cosas positivas y en el ‘YO PUEDO’, triunfaré. ¡Creer es todo lo que necesito para ser feliz!
“EL POLIZÓN” Escucho la melodía de un ángel que canta para mí y para el universo entero. El crepúsculo como una tinaja de agua fresca cae sobre el puerto. Los techos de zinc resuenan al paso del viento como violines desafinados. El cielo se llena de gritos con las bandadas de garzas, que regresan al arrecife para dormir. La noche extiende su mantón de luces y la luna se baña entre las olas. Los pescadores se reúnen en la cantina cerca del muelle para contar sus historias, y yo no me pierdo ninguna. Camino hacia mi casa. Soy delgado, porque estoy creciendo, apenas tengo quince años. Mi pelo crespo cae sobre mi frente y nadie se fija en mí. Pero mis ojos verdemar son inquisidores y me gusta verlo todo. Tengo tantas ideas en la cabeza de lo que quiero hacer con mi vida. Pero primero debo aprender a pescar, que es lo que hace papá y mi hermano. Ellos no me dejan embarcarme, porque debo estudiar para ser doctor, aquí en el puerto. El muelle y el bar se van despoblando poco a poco. Las guitarras callan sus sones y los pescadores buscan las chozas para ir a descansar. Tendrán una jornada muy dura al otro día. Las mandolinas de los grillos, junto con el picor de los zancudos y el croar de las ranas, no dejan dormir. Pero ellos están muy cansados y pronto visitan el país de los sueños. __ Esta madrugada me colaré entre los pescadores e iré con ellos. Mañana no tengo que ir al colegio y el día siguiente es domingo. Así es que partiré en alguna de las embarcaciones. No le diré nada a mamá, tampoco a papá. Me montaré en la lancha de Paco y ayudaré en la pesca. __ ¡Qué emocionante será! –Pienso. Soy hijo de pescador y debo aprender, aunque papá no me deje ir. Él quiere algo mejor para mí y por eso estudio. Pero puedo hacer las dos cosas… Un escalofrío en la columna vertebral del universo, me estremece. __Tengo miedo al furor del mar. __ “El océano es una bestia peligrosa”, hijo. Es mejor que no vengas –dice papá, siempre. Como en un espejo recuerdo que mi abuelo murió durante una tormenta y nunca lo encontraron. Mi hermano Julio fue arrancado de la borda por una ola gigante y si no hubiera tenido puesto el chaleco salvavidas, se lo habría llevado la marejada y no se hubiera salvado. Tantas historias he escuchado entre los pescadores que me ponen nervioso. Ellos conocen las olas y el viento. Soy nuevo en esto, pero yo soy muy valiente y todo lo superaré. Levanto mi copa de entusiasmo y bebo los colores de la alborada. Tomo un trozo de pan con mantequilla y un vaso de leche con chocolate. Dejo una nota para mamá y me voy muy calladito. (Después de que papá y mi hermano se fueron). Llevo un salveque, donde he puesto una linterna, una cuchilla y un poco de salchichón, queso y un pedazo grande de pan. Además una botella de agua con limón para la sed. En la playa hay gran algarabía. Los pescadores se dirigen a sus respectivas lanchas y todos se disponen a salir, casi a la misma hora. Yo subo a la trainera de Paco y me dispongo a arriar velas. Nadie me ha visto, soy uno más de ellos, con un pañuelo rojo en mi cabeza. Todavía las estrellas titilan y la luna permanece dormida entre las nubes. El mar está tranquilo con olas redondas y mansas. Las palmeras nos dicen adiós y se han levantado las gaviotas con tamaño alboroto sobre las olas, alrededor de las lanchas. Un cosquilleo de felicidad me estremece y el mundo se asombra conmigo. Dejo que la aurora viva su momento de luz. Apartado de los demás, oro por una buena pesca y por la protección del Altísimo, para que volvamos sanos y salvos. Es lo que he visto que hace papá y mi hermano. Ellos van en otra lancha. Todos vamos con las redes preparadas para lograr una buena pesca. Los hombres van tumbados sobre unos sacos y hablan poco. El tiempo me sobra. Observo las olas, que hoy noto más grandes. Está próxima la luna llena. Se acerca al barco una familia de delfines, nos acompañan por largo rato, haciendo cabriolas.
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Dicen que son seres muy inteligentes y que pueden comunicarse con otros seres vivos. Quizás algún día lograremos comunicarnos entre sí. Me acerco a la borda para verlos mejor. Nadie me ve desde donde estoy. Travieso y soñador, deseo tocarlos y así se lo expreso: __ Hermano, delfín, quiero tocarte… –Digo con mi pensamiento, apenas esbozado con mis labios, sin ningún sonido. Uno de los cetáceos, que tiene un pedacito menos en su aleta dorsal, se separa del grupo, que nada hacia adelante y se queda a la par del barco. En un momento, se eleva hacia la borda para que lo toque por un instante, mojándome con un espolvorín de agua salada. __ Me he comunicado con él… ¡Qué maravilla! ¡Lo he logrado! ¡Él me entendió! ¿Será posible? –Grito, muy contento. Pero con esta acción, los compañeros se fijan en mí y me rodean. __ ¿Qué haces aquí, Juanito? –Me interroga Paco, el dueño. __ Quiero aprender a pescar, como lo hacen todos los pescadores del pueblo, para poder ayudar a papá y a mi hermano. Pero ellos, no desean que los acompañe, quizás para protegerme. Así es que me colé en tu lanchón. __ Pescar es rudo y peligroso. Procura no estorbar a los hombres, por favor. __ Está bien, maestro. El vigía avisa: __ Un cardumen de atunes a proa, compañeros. Todos corren a tirar las redes más rápido. Yo hago lo mismo que ellos. Pongo carnada a los anzuelos y estoy atento a las cuerdas. Los delfines quedan atrás. Oro, pidiendo al Ser Universal que nos ayude para obtener una buena pesca. ¡Dios nos escucha…! Después de un tiempo, comenzamos a recoger las redes y atrapamos gran cantidad de atunes. El sol cae como plomo sobre nuestros hombros y todos sudamos a mares. Para aguantar el tren de trabajo, un negro inicia el canto de una canción marinera, que todos cantan conforme recogen la red. En mis cuerdas hay un róbalo y un jurel de tamaño grande. Estoy muy orgulloso de mi trabajo. El mar se ve azul esmaltado, con tanta luz. Estoy muy impresionado con todo lo que estoy aprendiendo, pero verdaderamente fascinado, con lo que me ocurrió con el delfín. Tal parece que me entendió. __ ¿Seremos almas gemelas? ¡El mar de mis ideas se agita…! Les he traído suerte, porque en la tarde están las congeladoras llenas y emprendemos el viaje de regreso. El mar está muy picado y el barco se bambolea hacia un lado y otro. Debo ponerme el salvavidas y amarrarme a unas banquetas de hierro atornilladas a la base del lanchón para no salir disparado sobre la borda. ¡Es atemorizante! Estoy agotado. Pero me siento feliz, por todo lo que he vivido. De repente, como en un espejo, veo volar hacia el mar, a un compañero que no tuvo la previsión necesaria, en casos de marea alta o tormenta. (Mi abuelo salta a mi imaginación, también mi hermano). Los hombres se avocan a lanzar un salvavidas y una rueda al compadre para poder izarlo hacia la lancha. Él lucha contra el oleaje hasta que lo logra. La próxima vez hará más caso a las reglas… Todavía no se ve la playa y la niebla desciende rápidamente. Todo es blanco, pero el piloto sabe lo que hace. Allá en las montañas se empieza a producir una enorme tormenta con rayos, que muy pronto nos alcanzará. Tengo miedo. Escucho la melodía de un ángel que canta para mí y para el universo entero. Tengo fe de que llegaremos con bien a casa. Mis pensamientos vuelan libres por el cosmos y lo que más deseo en este momento, es ver al delfín, que me acompañó por la mañana. Sé que él me cuida… A lo lejos, comenzamos a distinguir entre nieblas, las luces del faro del puerto. __ Estamos cerca. ¡Gracias, Dios mío…! Mamá me regañará… –Pienso. De repente, distingo entre las olas más cercanas al delfín de la mañana. Sé que es él, porque tiene un pedazo menos en su aleta dorsal. Nos acompaña casi hasta el muelle, luego hace una cabriola en el aire, espolvoreando el agua por todas partes y regresa a buscar a su familia. __ ¡Adiós, amigo! Pronto nos volveremos a ver… Bajo de la trainera, tengo las manos llagadas y los labios partidos por tanto sol y me dirijo a Paco: __ ¡Gracias, amigo! __ Oye, Juancito, llévale la cena a tu madre, te lo has ganado, amigo. Paco saca el róbalo pescado por mí y lo pone es mis brazos. Corro feliz a casa, con tamaño pez, que es como un trofeo. __ Mira, mamá, lo que he pescado… –Grito con entusiasmo. Mi correo es florguez.segura@gmail.com Ella me mira con lágrimas en los ojos y me abraza sin regañarme. Papá y mi hermano no han llegado. Tampoco les diremos nada… Ceno pescado frito con yuca y me recuesto, muy satisfecho de todo lo aprendido. Pero mi familia no está completa hasta que ellos llegan en la lancha. Los escucho entrar y miro por la ventana un lucero, que me guiña el ojo, me sonríe y titila con un parpadeo recóndito y personal. Hay una sombra detrás que se parece a mi abuelo. Me sonríe. Me duermo feliz. Escucho la melodía de un ángel que canta para mí y para el universo entero… Flor del Carmen/ 16
“VENTANA CONGRATULACIÓN A LA MUJER”
VENTANA DEL HUMOR ¡Reírse es buenísimo! El mejor remedio para animarse y no presenta contraindicaciones. Y si la risa es buena, nada mejor que compartirla con los demás. Cuando los niños escuchan y comparten chistes, entran en un mundo de risas, de imaginación y fantasía. Los chistes los divierten y les ayudan a desarrollar su agilidad y agudeza mental. Además fomentan el buen humor, estimula la comunicación de los niños. Los chistes estimulan el buen humor, fomentan la risa, desarrollan el vocabulario, y divierten a los niños. La risa es un ingrediente básico para la salud de los niños.
¿Cuál es el colmo de un oso panda? Que le saquen una foto a color y salga en blanco y negro. ¿Cuál es el colmo de un libro? Que en otoño se le caigan las hojas. ¿Cuál es el colmo de un astrónomo? Que se enamore de una estrella ¡de cine! ¿Cuál es el colmo de un astronauta? Que su esposa sea una lunática. ¿Cuál es el colmo de un constructor? Que se llame Armando Paredes. ¿Cuál es el colmo de una gallina? Que tenga pluma y no pueda escribir. ¿Cuál es el colmo de un electricista? Que su esposa se llame Luz y sus hijos le sigan la corriente. ¿Cuál es el colmo de un policía? Que lleve siempre dos esposas. ¿Cuál es el colmo de un meteorólogo? Que no tenga tiempo para nada. ¿Cuál es el colmo de una farmacia? Que tengan que venderla porque no queda más remedio. ¿Cuál es el colmo de un Robot? Que tenga nervios de acero. ¿Cuál es el colmo de un jardinero? Que su hija se llame rosa y lo deje plantado. ¿Cuál es el colmo de un policía? Que lo asalten las dudas. ¿Cuál es el colmo de un payaso? Que se tire un pedo de colores. ¿Cuál es el colmo de un ladrón? Que su hijo sea policía. ¿Cuál es el colmo de una funeraria? Que el negocio se muera. ¿Cuál es el colmo de un jardinero? Que siempre lo dejen plantado. ¿Cuál es el colmo de un escritor? Que su mujer le haga sopa de letras. ¿Cuál es el colmo más pequeño? El colmillo. ¿Cuál es el colmo de un boxeador? Que se saque un moco con un guante de boxeo. ¿Cuál es el colmo de los colmos? Que pierda un imperdible. ¿Cuál es el colmo de un mueblista? Que tenga una hija cómoda.
VENTANA DEL CUENTO
“EL ALBATROS Y EL PESCADOR” En la aurora, el albatros alza sus alas y se pierde en la inmensidad del cielo. Hace acrobacias, cabriolas y pesca en el mar, luego vuelve a posarse en la palmera, cerca de la choza del pescador. Las nubes tiemblan y hacen ruidos como si se encabritaran todos los caballos del cielo. El viento crece hasta convertirse en aullidos. Pedro siente una opresión en el pecho como una premonición… __ ¡Dios mío, ampáranos! –Hijo, baja las velas. ¡Apresúrate! Juancho sale de la parte interior del bote y corre a arriar las velas. Relampaguea fuertemente y una turbonada se levanta a lo lejos y se les viene encima. Pedro y su hijo Juancho son pescadores de atún y quedan en medio de aquella arremetida del oleaje. Las enormes olas del mar con su ondulante y profundo bramido chocan ferozmente contra la barca, que parece una hoja movida por el viento, sin capitán ni dirección… Su hijo ha desaparecido entre las gigantescas olas negras y por más que lo busca no puede encontrarlo. La espuma, las nubes y la niebla se hacen cada vez más oscuras entre las sombras de la noche y Pedro pierde la esperanza, cuando el palo mayor se le viene encima. La sofocada agonía de Pedro, llamado por muchos: Tiburón, se corta contra el filo de las olas que muerden sin piedad. Está tirado en el piso de la embarcación con la mano lastimada. El mástil lo tiene prensado contra la proa. El Tiburón ha perdido toda su prestancia y llora más de angustia que de dolor. No puede aceptar que el mar le haya robado lo más preciado que tenía: a su hijo, joven, musculoso, de buena presencia, amado por las mujeres, buen hijo, muy trabajador y excelente marinero. Está amaneciendo y la lancha se mueve con más calma. El cielo se ilumina despejado de centellas y de nubes grises. Pedro tiene un fuerte malestar en el pecho y trata de ponerse en pie, sin poder lograrlo. La tormenta ha pasado y el sol sonríe jugueteando sobre las montañas. La lancha se acerca a la playa. Pedro lo sabe por las gaviotas, que vuelan buscando alimento. Se aterroriza. Encallará en el arrecife, se volcará el bote hasta hundirse. Debe tomar el timón antes de que esto pase… El hombre de cabello y barba gris, pero de brazos musculosos y fuertes, de tanto bregar con las redes, se esfuerza por zafarse del madero que lo aprisiona. El movimiento de las olas ha corrido un poquito la vela mayor y logra escabullirse hasta el fondo lleno de agua. El escozor de la sal le lastima sus heridas, sin embargo, aguanta y se levanta. Camina tambaleándose por la pequeña cubierta hasta llegar a la cabina, que ha sufrido aplastamiento con el palo mayor, aunque el timón está intacto. El capitán mira a lo lejos, las torres de la iglesia del pueblo y escucha las campanadas que llaman con voz de bronce a la misa diaria, como un canto de ángeles. Divisa el techo de su choza a la orilla de la playa. Ahí duerme todavía, su esposa Mariana… __ ¿Cómo le diré que Juancho cayó al mar tormentoso? ¿Acaso pude hacer algo? Él arriaba las velas y una ola enorme no le dio tiempo de nada. El mar lo envolvió en el negro sudario y no lo vi más. Lo busqué en medio de la tormenta, pero la vela mayor dobló el mástil y me prensó. Desee morir. Pude ver un espíritu sobre mí, que me hablaba, pero estaba tan angustiado, que no pude entender lo que me decía… ¿Sería su alma? ¡Dios mío! Tú puedes hacer el milagro de salvarlo. Quizás no está muerto… –Llora desesperadamente. El sol brilla lanzando rayos candentes sobre el océano y las olas parecen encendidas con miles de lamparitas. Pedro observa a lo lejos y ve un hombre gigantesco que camina por sobre las olas y se acerca. Parece que se dirige hacia él, llamándolo papá… en un graznido. __ Una vez, mi hijo me dijo que si moría, iba a convertirse en un albatros. ¿Esos deseos se harán realidad? Quizás… No lo sé. Aquella sombra la transmiten las alas de una enorme ave marina, que se acerca y se posa en la proa de la lancha de Pedro… El hombre se desmaya por la impresión; es un albatros.
La lancha patrullera del muelle rescata al Tiburón y lo lleva al hospital. Sacan su lanchón a la playa y lo amarran a una palmera para que pueda arreglarla, después. El hombre está entre la vida y la muerte. Ha sufrido varias quebraduras en un brazo y en las costillas, además tiene una herida en la mano derecha. Pedro delira llamando a su hijo… __ ¡Juancho! ¡Juancho…! Un albatros se ha posado en un árbol cercano al hospital… Se ha quedado solo, aunque estas aves son gregarias y todas tienen su pareja, que es para toda la vida. Estas aves jamás se acercan a las ciudades. Ellas viven en los arrecifes de islas solitarias, donde tienen sus nidos. Pedro está mejorando y el doctor le permite levantarse de la cama para ver por la ventana. El enfermo ha escuchado el graznido de un ave marina por varios días, pero cree que solo está en su cabeza. La llamada de un albatros posado en la rama de un árbol, que puede ver desde el hospital, lo sobresalta… __ ¡Es Juancho, es Juancho…! –Grita excitado. Mariana, su esposa, lo visita aquella mañana. __ Mira, amor, aquel albatros es nuestro hijo Juancho… –Balbucea. Ella lo mira espantada… __ Se ha vuelto loco –piensa– lo cuidaré, con amor, es mi esposo –murmura triste– no solo perdí a Juancho, también he perdido a Pedro. Su mente se ha revelado a la muerte de nuestro hijo, aunque no han hallado su cuerpo… En el hospital le dan la salida al pescador y Mariana lo lleva a casa para que se recupere. Pero una cosa rara pasa, el albatros se muda a una palmera cercana a la choza de Pedro y Mariana. Por las tardes, Pedro lo llama para darle algo de comer y el albatros le obedece. Baja de la palmera y camina torpemente con sus grandes alas alrededor de Pedro y con sus graznidos parece que dice: __ ¡Papá! ¡Papá! Mariana los observa por la ventana cuando están juntos. Pedro le cuenta muchas cosas y se ríe de los chistes, como lo hacía con su hijo, tomándose una cerveza, debajo de aquella misma palmera. Los pescadores amigos pasan a dejarles pescado para que coman y permanecen largos ratos juntos. Pero en la aurora, el albatros alza sus alas y se pierde en la inmensidad del cielo. Hace acrobacias, cabriolas y pesca en el mar, luego vuelve a posarse en la palmera, cerca de la choza del pescador. FLOR DEL CARMEN/17
Canción GUARIA MORADA FLOR NACIONAL DE COSTA RICA
Hermosas, risueñas, botijas de sueños, son las guarias moradas. Listones lilas sobre los verdes señores del bosque. Sus corazones son esmeraldas colgadas del aire, el viento, y los jirones de las nubes. Hermosas, risueñas, botijas de sueños, son las guarias moradas. Habitan la floresta escondidas entre niebla y llovizna. Musas de aromas inigualables. Encantan a los insectos, portadores del amarillo polen,
cuyos genes vagan alegres por los confines de la floresta. Se casan ante el lucero del alba, tocando sus liras nazarenas al pecho abierto del campo. Hermosas, risueñas, botijas de sueños Son las guarias moradas. Flores tiernas, dulces, hermosas. ¡Son las guarias moradas, almas del horizonte! ¡Nuestra flor nacional! Flor del Carmen/16
VENTANA DE LA POESÍA PARA NIÑOS LA BALLENA VIAJERA Una ballena viajera me lleva por el mundo en su lomo plateado y me trae en la primavera. Ella sigue la estela del sol con gran armonía y desde el mar puede ver la palmera y el girasol, los paisajes de la tierra y la serranía. Ella es mi hermana, igual que el viento, la luna y el mar. Quiere la libertad y la paz, como todos nosotros. Flor del Carmen/18
EL SAPO VERDE Ese sapo verde se esconde y se pierde; así no lo besa ninguna princesa. Porque con un beso él se hará princeso o príncipe guapo; ¡y quiere ser sapo! No quiere reinado, ni trono dorado, ni enorme castillo, ni manto amarillo. Tampoco lacayos ni tres mil vasallos. Quiere ver la luna desde la laguna. Una madrugada lo encantó alguna hada; y así se ha quedado: sapo y encantado. Disfruta de todo: se mete en el lodo saltándose, solo, todo el protocolo.
Y le importa un pito si no está bonito cazar un insecto. ¡Qué nadie es perfecto! ¿Su regio dosel? No se acuerda de él. ¿Su sábana roja? Prefiere una hoja. ¿Su yelmo y su escudo? Le gusta ir desnudo. ¿La princesa Eliana? Él ama a una rana. A una rana verde que salta y se pierde y mira la luna desde la laguna. Autora: Carmen Gil
VENTANA DE LA LECTURA
REGALA O LEE UN LIBRO A TU HIJO Regala o lee un libro a tu hijo para su cumpleaños: Aunque parezca que pasar las páginas de un libro pueda aburrir a un niño, pensar eso es erróneo. Aunque el libro no le haga saltar, correr,... dará alas a su imaginación, a sus emociones, conocimientos, y lo que es mejor, le proporcionará uno de los hábitos más enriquecedores para uno:
LA LECTURA.
¿Por qué no regalar a los niños un libro? La lectura es una alternativa que también permite disfrutar y desarrollar una actividad en conjunto. Compartir intereses, informaciones, historias, cuentos... La lectura contribuye al desarrollo de mecanismos como la
comprensión, el lenguaje y la comunicación, y ayuda en la formación de los pensamientos de los niños.
Los beneficios de la lectura para los niños
Antes de hablar, los niños escuchan y entienden el lenguaje. Pues antes de hablar, los niños también pueden entender el lenguaje escrito.
La lectura favorece a muchas habilidades sociales. Permite entender distintos mundos, crear una actitud de empatía hacia el otro, e introduce el niño en el mundo de las ciencias y del pensamiento crítico. Leer con los niños es bueno por muchos motivos: 1- Ayuda a aumentar el vocabulario y el conocimiento
2- Enseña a construir oraciones y a considerar los signos de puntuación 3- Motiva para leer 4- Favorece la correcta pronunciación. Para que el niño se sienta motivado a leer es necesario que el libro sea interesante también para sus padres. Que cuente una historia que le haga probar distintas emociones, conocer diferentes realidades, y que le permita reflexionar sobre ellas. Cuánto más pequeño sea el niño, más tendrá que lucir la historia que cuente el libro. Un libro debe ser visualmente atractivo, con ilustraciones sugerentes, claras, y ricas en formatos y colores. Algo así como una cajita de sorpresas, en la que los niños podrán encontrar humor, fantasía, misterios, leyendas, y un mar de cuentos e historias.
“AMA LA NATURALEZA” “AMA LA FAMILIA, PORQUE ES PARA SIEMPRE”
“VENTANA DE LOS RECURSOS LITERARIOS” LOS RECURSOS LITERARIOS: Son diversas técnicas que son útiles tanto en el aprendizaje de la lengua materna de los niños, como en el enriquecimiento del vocabulario de los niños. Históricamente para niños de menor edad se han usado recursos literarios que dejan a los niños algún aprendizaje sobre el medio, la vida y la naturaleza. El maestro pretende con estos 4 recursos literarios, que los niños aprendan algunas moralejas y tengan enseñanzas sobre las experiencias que han tenido los personajes de alguna fabula, mito, leyenda, metáfora y personificación o humanización y el cuento.
Habilidades que desarrollan los niños usando recursos literarios Los pequeños podrán aprender moralejas sobre la vida el valor de lo correcto y lo incorrecto.
El valor del planeta y de la tierra. El valor de la naturaleza. Estimularán su ingenio y creatividad. Aprenderán moralejas sobre la vida. Aprenderán a resolver conflictos.
Recursos literarios que favorecen el aprendizaje lingüístico LAS FÁBULAS: La fábula es un relato fantástico no muy largo que puede dejar una enseñanza moral o emocional, de valor para la naturaleza, aprecio de las emociones ajenas. Fomenta los valores del respeto, la amistad, la sinceridad, la honestidad y muchos otros valores que se adquieren en la familia y en la escuela en las primeras etapas de la vida. Generalmente representa la interacción entre 2 o más personajes que casi siempre son animales o cosas que han sido humanizados para estimular la imaginación. Ejemplos de fabulas famosas: la hormiga y la cigarra, la liebre y la tortuga; el burro y el viejo y el niño. Las fabulas son recursos muy utilizados por padres y maestros en la enseñanza de moralejas y valores de aprecio a los demás. Es un gran recurso literario y educativo que no debes perder de vista.
EL MITO: El mito es un relato corto o varios relatos que forman parte del imaginario y tradiciones religiosas de una región determinada vinculado siempre a la religión, es un recurso de gran valor educativo para conocer la cultura de las regiones geográficas donde viven los niños y resulta de gran importancia investigar sobre los mitos que caracterizan una región determinada y su propia región. Los mitos son muy bien conocidos por personas antiguas en una comunidad, los abuelos y otras personas de mayor edad. ¡Pregunta a tus abuelos o bisabuelos sobre algunos mitos de tu región! Ejemplo de mitos famosos para niños la historia de hércules, mito bíblico de Sansón y Dalila, David y Goliat, entre otros que no son tan conocidos, pero que forman parte de los relatos del acervo geográfico o religioso de un lugar determinado.
LAS LEYENDAS: Es un relato tradicional de alguna región pueblo y que normalmente se relata como si fuera real, aunque no lo sea. Resulta interesante porque el recurso invita a los niños a imaginar y crear mitos nuevos, lo que estimula su creatividad y su inteligencia lingüística cuando intentan crear alguna historia o leyenda por su propia cuenta: Ejemplo de mitos famosos: la leyenda de la llorona, cocodrilos bajo las calles de Nueva York, la Rubia de Kennedy, Elvis Presley vive, la muchacha de la curva entre muchas otras que se escuchan. Generalmente los temas llaman mucho la atención y tienen especial propagación por internet y redes sociales en la actualidad, antes podían relatarse de manera verbal y aún se puede.
LOS CUENTOS: El recurso literario del cuento se realiza con un cuento corto de lectura veloz que nunca deja de estimular el ingenio del niño, existen cuentos cortos que solo los más usados en el aula de clase como recurso para práctica de la lectura veloz o la lectura grupal o individual. Es un recurso que vale la pena conocer, porque aumenta el vocabulario del niño y enriquece su imaginación, posteriormente el recurso literario podrá ser utilizado también como fuente de conocimiento para poder redactar.
LA METÁFORA: La metáfora es un recurso literario que identifica a una persona, animal o cosa con otro, porque generalmente tienen alguna característica en común, nunca se utiliza la palabra “como”. El recurso compara un objeto, animal persona o cosa como alguno otro, por ejemplo: “las perlas en tu boca” se pueden ver cuando sonríes (compara una perla con los dientes de una persona).
LA HUMANIZACIÓN O PERSONIFICACIÓN: El recurso literario consiste en atribuir características humanas o propias del ser humano a un objeto, animal o cosa, todos los cuentos, leyendas y mitos, tal vez tengan algunas humanizaciones o personificaciones, por ej.: “los arboles lloran en otoño” o el “tigre habló y dijo”
BENEFICIOS DE LOS RECURSOS LITERARIOS
Favorece en interés por la lectura. Estimula la creatividad y la interacción. Favorece el proceso de redacción propia en los niños. Permiten que los niños creen nuevas historias. Favorece la compresión lectora. Estimula la inteligencia o talento lingüístico. Aprendizaje de metáforas, paralelismo y humanización. ESCRÍBEME A: florguez.segura@gmail.com