Revista n° 12 by eduardo sanchez

REVISTA DE LITERATURA INFANTIL DICIEMBRE,

2015, N° 12

“EL REINO DE LOS NIÑOS” ESPECIALMENTE PARA TI EDITORA:

¡QUE VIVAN SIEMPRE EL AMOR Y LA BONDAD! “DEDICADA A MIS NIETOS: CATALINA, DAVID, SUSANA, VIVIANA Y GABRIEL”

“EL REINO DE LOS NIÑOS” REVISTA LITERARIA

PRESENTACIÓN EDITORA: Profesora y escritora: FLOR DEL CARMEN RODRÍGUEZ SEGURA. PARA ESTA REVISTA: Abuelita Cori “PALABRAS SABIAS” Me escondo en mi concha de caracol terrestre, pero quiero trascender como una mariposa que muestra sus coloridas y sutiles alas. Que mi aliento se extienda por el mundo y mis palabras lleguen a todos y propongamos fin a cualquier cosa que destruya la atmósfera, el bosque, los ríos, mares y a la Tierra misma. Que todos hagamos algo para salvar a la Naturaleza y a nosotros mismos. Bastará una chispa de cada uno para lograr un mundo mejor para todos. ¡Únete a mi voz colgada de luciérnagas! ¡Agolpa tus latidos con los míos! ¡Verás renacer la Tierra en un instante! Este es un canto de un corazón que quiere unir sus esfuerzos a la humanidad para dar a nuestros hijos y nietos un mundo mejor. QUERIDOS NIÑOS: colaboren con sus poesías y cuentos sobre la Ecología, es un campo muy rico para trabajar y escribir. Puedes mandar también un dibujo y lo publicaremos. Recuerda mi correo: florguez.segura@gmail.com UN SALUDO CARIÑOSO DE FELICES VACACIONES. QUE PASES UNA NAVIDAD MUY FELIZ Y QUE EL AÑO 2 016, TE TRAIGA PROSPERIDAD Y MUCHO AMOR. F

INVITADA ESPECIAL: ANI BRENES CANCIÓN DE CUNA Duérmete mi Niño,

Una estrellita

Mi Niño Jesús,

brilla que brilla.

ya las estrellitas apagan su luz.

Un ángel bello con su cantar,

Cierra sus ojitos

era una noche,

Niño Redentor,

era un portal.

hay mil angelitos a tu alrededor.

Era un regalo era el amor,

La Virgen María

era un misterio

y el buen San José

y un Niño Dios.

velarán tu sueño hasta el amanecer. ERA Era un pesebre

VISITAS De lugares lejanos vienen cansados, en sus camellos los Reyes Magos.

muy calientito. Era una oveja con pastorcito.

Una estrella en el cielo los ha traído por caminos seguros

Era una mula

hasta el Dios Niño.

érase un buey,

Como Rey, le dan ORO

un Rey muy alto,

INCIENSO como Dios,

un Rey muy blanco,

y se esparce en el sitio

y un negro Rey.

de la MIRRA el olor.

Era un José Y una María, “APROVECHEMOS LA NAVIDAD PARA AYUDAR A LOS MÁS POBRES”

Ya se van las visitas en sus camellos, los despide la estrella desde los cielos. “REGALA UN JUGUETE A UN NIÑO”

“VENTANA DEL CUENTO DE NAVIDAD”

“Mis regalos para el Niño Dios” FLOR DEL CARMEN

Noche rubia de estrellas y luna, que se dibuja en el cielo como sonrisa de un Niño Invisible y trina como un violín encantado. Es ‘Noche de Navidad’ y corre un vientecillo con olor a manzana y tamal. Una bandada de luciérnagas alumbra el portal, que resplandece con coloridos tonos que reman hacia mis sueños. __

¿A qué horas vendrá a recoger mis regalos: amistad, confianza, fe, amor verdadero?

Me quedaré quieto para que piense que estoy dormido y llene mis manos con muchos dones y esperanzas.

“LOS FANTASMAS DE LA NAVIDAD” “ABUELITA AURELIA” Con la cabeza llena de sol, llegué al corredor de la casa de la abuela Aurelia. Me sacudí los zapatos para entrar a aquel templo, que mis tías Ana y Ligia tenían como un ajito. Toqué muy suavemente la anilla de cobre, verdosa, por la pátina del tiempo. Tía Ligia abrió la puerta grande, pesada, de madera de roble con tallas de flor de lis, que parecía saludarme con su crujir cansado y perezoso. __ ¡Hola, Flor del Carmen! ¡Qué milagro que vienes a visitarnos! –dijo entre divertida y asombrada. Pasa, sobrina, pasa, no te quedes afuera. __ ¿Cómo está tía? Hace tiempo que nos las saludaba y al ser hoy Nochebuena, me acordé que las he tenido muy olvidadas. __ ¡Bueno, como todos los sobrinos! Desde que murió mamá, nadie ha vuelto a venir. ¿Qué ha sido de tu vida? __ He estado estudiando muy duro para la licenciatura en Arquitectura y mi hermano José Alfredo también. Caminamos por los pasillos volados de la vivienda de adobe y distingo entre unas macetas de helechos la gran tinaja de agua fresca de mi abuela Aurelia. Inmediatamente me dio sed. __ Tía, ¿podría darme agua de la tinaja? __ ¡Claro, hijita, está muy fresca. El agua bajó suavecito por mi garganta haciendo gorgoritos y por un momento pude ver a mi abuela agachándose para sacar agua de la gran tinaja. Ella me miró y sonrió. ¡Cómo amaba a mi abuela Aurelia! Y no recordaba el diente de oro que sobresalía en su boca. De nuevo miré hacia la tinaja y ya no la encontré. __ Pasa, hijita, a la sala –dijo mi tía Ana que ya me esperaba con las hojas de las puertas azules, abiertas. __ ¿Cómo está tía Ana? __ ¡Muy bien, Florcita, pasa, siéntate aquí en el sillón de acá. Removió unos almohadones y me senté… Quedé frente a la poltrona de la abuela y la veo sentada con sus cachetitos colorados y su sonrisa alegre, sonriendo junto al portal. Me dio un vuelco el corazón, cuando de repente se encendieron las luces del nacimiento como un milagro…

“MILAGRO DE NAVIDAD” “Dios está más allá de todo conocimiento” Hoy se gradúa de abogado, con honores. Mario Alberto manejará los negocios de su padre. Es un hermoso joven moreno, muy desenvuelto y simpático. Pero su vida no siempre fue así, tan exitosa como hoy, hasta que ocurrió el milagro… __ ¿Quién me ama a pesar de que sigo perdido en estos lugares? Creo que nadie –piensa. Sus mejillas recogen toda la brisa juguetona del mes de diciembre. La mañana es muy fresca y el niño pasa frío, ya que su ropa está rota. Es una hoja rociada de bruma, con el color de las flores prendido en los ojos y extraviado en el bosque de la pobreza. Pero él procura vivir lo más feliz, que le es posible. Mario Alberto es moreno, delgado y pequeño para la edad de nueve años. Tiene los ojos brillantes, hermosos y lleva entre ellos, un puñado de estrellas, enmarcados dentro de una carita triangular, de nariz afilada. Su pelo negro y ondulado destaca en su cabeza, alborotado por el viento navideño. Nadie le había enseñado nada de religión, pero a veces, va a la iglesia a rogar a Dios, que le conceda un papá y una mamá, como a todos los niños. Y sale del templo con la convicción de que si viene seguido, tal vez en algún momento, aquel Niño que está en el portal, se compadecerá de él. Se dirige al potrero del patrón de su tía, a traer las vacas para el ordeño. Lleva un mecate para soguear a una de ellas y mamar algo de leche, antes de llegar a la casa. Ese es su desayuno. Luego tiene que rebuscarse algo de comer para almorzar. Ocasionalmente su tía le regala un pedazo de pan con mantequilla y queso y por la noche, le lleva alguna comida de la que ha sobrado en la casa. Por no sé qué designios del destino, Mario Alberto se encuentra solo en el mundo. Vino de muy lejos, con unos inmigrantes y ahora vive en el cobertizo de la casa de los patrones de su tía, que es la empleada doméstica. El niño es ilegal y ellos no lo saben. Corre por el potrero y con un silbido llama a las vacas. Las palomas, con su currucucú lo acompañan, también las mariposas de colores, lo siguen. Las nubes dibujan animales, que él identifica con una sonrisa. Por la tarde camina por la finca, donde tiene muchos amigos que lo escuchan cantar y tocar la dulzaina. En una de las cercas hay un árbol de jocote y ahí, comiendo frutas, encuentra a las ardillas, a los pájaros y hasta una tortuga terrestre. Entonces, toma su dulzaina y les ameniza un hermosísimo concierto, que luego, complementa con canciones muy hermosas. Otras veces juega con canicas y mariposas. Este es el lugar donde sueña, mientras el sol se peina en los espejos del río, con aureolas de luz. Él come de los frutos del bosque, bebe y se baña en los manantiales de agua limpia y procura no ensuciar el ambiente, porque todos somos criaturas de Dios. Este día, Mario Alberto se encuentra muy triste, porque viene Navidad y él no tendrá regalos, pero eso no le importa tanto. Él desea más que nadie en el mundo, tener una familia, que lo ame y lo abrace. __ “Oh, Jesús, José y María, ustedes son una familia muy buena. ¿Por qué yo no tengo a nadie que me ame?” El sacerdote del pueblo, que lo había visto entrar varias veces al templo, le pregunta, un día: __ ¿Qué vienes a pedirle a Jesús? __ Una familia que me quiera –contesta sin ningún secreto, el travieso. Cuando el párroco dispone de un poco de tiempo, le enseña sobre la Sagrada Familia de Belén y esto hace muy feliz al chico, que sale del templo muy reconfortado. El sacerdote ha hablado con varias familias, que no tienen hijos en el pueblo, pero cuando les dice que tiene nueve años, todos lo rechazan. En su mayoría desean adoptar un niño recién nacido. Pero un día, llega a la iglesia una señora con su esposo y se hincan delante de la Sagrada Familia, delante del nacimiento del templo, que conmemora la Navidad. El Padre Juan los mira complacido. Está dentro de la sacristía ordenando un poco y se les acerca. __ ¡Buenos tardes, hermanos! ¿Desean confesarse? __ Queremos hablar con usted, Padre. Nosotros nos casamos hace diez años y no hemos podido tener hijos. ¿Cree usted que en esta comunidad haya algún niño que podamos adoptar? –pregunta la señora. __ Bueno, hay un niño que hace tiempo está pidiendo a Dios, le depare una familia. Se llama Mario Alberto. Tiene nueve años, pero es un niño muy honrado y que tal vez, sea el hijo que han estado buscando. __ Mire, qué casualidad, mi esposo se llama Mario. __ ¿En dónde podremos ver este niño? –pregunta el señor, que parece muy serio.

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Vengan mañana a esta misma hora y yo lo traeré. El clérigo vuelve su mirada hacia la entrada. ¡Ohhhh! Esperen, no va a ser necesario, porque ahí viene. __ ¡Ven, hijo! Estos señores desean adoptar un niño. ¿Te gustaría que fueran tus padres? El chiquillo es sorprendido con aquella pregunta, cuando menos se lo esperaba y no encuentra palabras para decir que sí. Simplemente se abraza llorando a aquella señora, que lleva en sus ojos, un no sé qué de luz sagrada y quiere ser su mamá. El llanto es de felicidad. No puede creer, que su sueño se esté cumpliendo. El niño y aquellos señores que desean ser sus padres adoptivos, junto con el sacerdote, se hincan delante del portal de Belén y dan gracias a Dios, por el milagro que les ha hecho. Es veinticuatro de diciembre, la víspera de la Navidad. Esta Nochebuena es la más feliz que ha pasado Mario Alberto. El Niño Dios le ha concedido una hermosa familia, cumpliendo precisamente este día, su sueño. El matrimonio lo traslada a la casa donde vive el niño, para que se despida de su tía y luego, lo llevan a su hogar. Le compran ropa, juguetes y lo invitan a cenar. El amor estalla en sus corazones. El matrimonio desea formalizar los papeles, pero el niño no tiene nada que certifique quién es. Los señores contratan a un abogado para que lo inscriba como si fuera su propio hijo. La vida del niño cambia. Comienza a asistir a la escuela y le contratan un tutor, para que le ayude a ponerse al nivel de los niños de su edad y resulta, que es tan inteligente, que muy pronto, el chico está aprendiendo otro idioma y a tocar el trombón. Para Mario Alberto solo existe el presente con su mamá y su papá, que se preocupan por él y lo abrazan cada vez que están juntos. Hoy se gradúa de abogado, con honores. Es un hermoso joven moreno, muy desenvuelto y simpático. Mario Alberto manejará los negocios de su padre. Tener una familia es lo más grande que le ha pasado. Ha sido un “Milagro de Navidad”. FLOR DEL CARMEN/15

NOCHE DE NAVIDAD Ha nacido el Niño Dios entre estrellas y luna el buey le da calor y le canta la mula. La luna peina su cabello

Le han traído leche, miel, y para que no pase frío de oveja, una piel. Él hace posible sus deseos en la Noche de Navidad.

lleno de luciérnagas, le pone una corona de sueños y le acomoda las pajas níveas.

La luna peina su cabello que brilla con flamas, le pone una aureola de colores

En su cara de ángel

y le acomoda las sábanas.

se dibuja una sonrisa. El viento del norte deletrea su nombre santo: J e s ú s s s s.

En su cara de ángel se dibuja una sonrisa al ver a la brillante luna.

Su madre lo adora.

Un coro de querubines

Su padre lo mira con ternura.

lo arrulla con una canción de cuna.

Los pastores le cantan iluminados por el Eterno.

“COMPARTE TUS JUGUETES USADOS CON OTROS NIÑOS”

VENTANA DE LA INVITADA ESPECIAL LIZBETH LORENA MELÉNDEZ SALAZAR

“PAPÁ Y LA NAVIDAD” A mi padre, con cariño.

Esperábamos ilusionados los regalos del Niño Dios, mis hermanos y yo. __

Hoy le pagan el aguinaldo a papá y mamá ha ido a San José a encontrarse con él para comprar los estrenos y nuestros regalos de Navidad –dije a mis cinco hermanos, muy quedo, como contándoles un secreto. Mis hermanos estaban ilusionados, esperando el regreso de nuestros padres. El dinero no era mucho, pero qué alegría al verlos llegar cargados de bolsas, de donde sacaban: medias, camisas, pantalones, vestidos y hasta un par de zapatos para el más necesitado. Celebrábamos con bulla y asombro, aquel momento único de gozo y terminábamos aplaudiendo cada cosa nueva. Luego, papá nos mandaba a la cama y decía: __

A dormir hijitos, porque ya pronto viene el Niño y si no están soñando con Él, no les dejará

nada. Todos corríamos a lavarnos los dientes y nos íbamos hacia nuestras camas con los cachetes rojos de alegría. Luego, papá se asomaba y decía: __

Ya escucho los cascabeles, duérmanse pronto.

Qué alegría despertar por la mañana y encontrar junto a la almohada en una bolsita, una roja y deliciosa manzana, un dulce ramito de uvas y una sonora corneta de cartón con barbitas de papel china de colores. Era una algarabía total, sonando las cornetas por toda la casa. Limpiábamos la manzana con la ropa de dormir hasta dejarla muy brillante, para comerla despacito, saboreando su delicioso aroma, por mucho tiempo deseado. Luego, asistíamos a misa estrenando la ropa que nos habían comprado. Después, la tradición de la familia era visitar el Parque Bolívar, todos juntos. Cuando íbamos a montarnos al bus un amigo le dijo a papá: __

Idiay, Germán, ¿dónde llevás al Kinder?

Hoy papá ya no está con nosotros. El día de Navidad miro a través del recuerdo, la imagen de mi padre, con su dulce e inconfundible sonrisa, cuando nos decía: __

”Ya viene el Niñito Dios, todos a dormir…”

“SEAMOS COMPASIVOS Y DONEMOS UN REGALO PARA UN NIÑO POBRE”

“FELIZ NAVIDAD Y AÑO NUEVO 2 016”

NIÑO DESCALZO

Original: francés

Pedro era un niño que había perdido a sus padres y vivía con su tía, una mujer muy egoísta y avariciosa. Ella nunca le demostraba cariño. Ni siquiera le felicitaba por su cumpleaños. El pequeño, sin embargo, tenía un corazón bondadoso. Su tía era tan avara, que desde hacía tiempo no le compraba zapatos. Pedro se tallaba él mismo, unos zuecos con un poco de madera. El 24 de diciembre, Pierre estaba muy nervioso, ya que sabía que esa noche vendría Papá Noel. Está deseando llegar a casa para dejar sus zuecos junto a la ventana. Sin embargo, al salir de la Misa del Gallo, Pedro vio a un niño muy pobre que tiritaba de frío en un rincón de la acera. No tenía zapatos y vestía de blanco. A Pedro le dio tanta pena, que se quitó uno de sus zuecos y se lo ofreció al niño. Al regresar a casa, la tía de Pedro se enfureció al verle. __

¡Ya has perdido uno de tus zuecos! –le gritó al niño– Ahora querrás tallar otro con uno de mis

troncos para la chimenea. ¡Me lo tendrás que pagar! Por malo, esta noche en lugar de Papá Noel, vendrá el tío Latiguillo y te traerá carbón. Pedro se fue muy triste a su cama. Pero dejó el zueco que le quedaba junto a la chimenea. Al día siguiente, Pedro se llevó una gran sorpresa. Se levantó muy temprano, porque apenas podía dormir, y junto a la chimenea descubrió todos los regalos que deseaba recibir: abrigos, ropa nueva, zapatos, cuadernos para el colegio y algún juguete. Pedro fue corriendo a la ventana y al mirar al cielo, descubrió el trineo de Papá Noel que se alejaba. A su lado, viajaba un Niño vestido de blanco. El niño al que le regaló su zueco ¡Era el Niño Jesús!

“ARTABÁN, EL CUARTO REY MAGO”

Melchor, Gaspar, Baltasar y Artabán, eran cuatro ilustres magos de oriente a los que les encantaba observar las estrellas. Los cuatro magos descubrieron una estrella diferente al resto. Tras varios estudios, llegaron a la conclusión de que esa estrella les marcaba un camino que terminaba en Belén, lugar en donde estaba a punto de nacer el Niño Jesús. Los cuatro magos decidieron partir de inmediato hacia allí. Pero antes, debían reunirse en un punto concreto de Babilonia, para ir todos juntos. Melchor llevaría oro. Gaspar, incienso, y Baltasar, mirra. Artabán decidió llevar como regalo piedras preciosas: un diamante, un rubí y una perla. Pero de camino a Babilonia, Artabán se encontró con un pobre hombre al que habían asaltado unos bandidos. Conmovido, le entregó el diamante. Cuando llegó al punto de encuentro, los otros magos habían partido hacia Judea. Él fue detrás, pero al llegar allí, tampoco estaban. En su lugar, se encontró con un panorama desolador: Herodes había mandado matar a todos los recién nacidos. Al ver a un soldado a punto de matar a un pequeño, le ofreció un rubí a cambio de que dejara vivir al niño. Pero otros soldados, al ver lo que hacía, le cogieron prisionero y le encarcelan en Jerusalén. Después de 33 años entre rejas, el rey mago Artabán recupera la libertad. Entonces le dicen que Jesús va a ser crucificado y decide ir allí. Pero de camino, Artabán se encuentra con una mujer que está a punto de ser vendida, y decide entregar la perla que le quedaba a cambio de su libertad. Cuando Artabán, cansado y con muy pocas fuerzas, se encuentra en el monte Gólgota con Jesús, ya crucificado. Ambos se miran y Artabán le dice: __ Perdona, Jesús, porque llegué tarde. Jesús entonces le dice lo siguiente: __ Artabán, tú hoy estarás conmigo en el reino de los cielos, porque cuando tuve hambre, me diste de comer, y cuando estuve enfermo, me cuidaste. Cuando me cogieron preso, me liberaste... __ Pero Señor, ¿cuándo hice yo todo eso? –preguntó Artabán sorprendido. __ Lo que hiciste por tus hermanos, lo hiciste por mí –contestó Jesús. Estefanía Esteban. Redactora de GuiaInfantil.com

: AMOR AL PRÓJIMO, BONDAD SOLIDARIDAD, CARIDAD, COMPARTIR, AYUDAR, AGRADECIMIENTO.

EL NIÑO DIOS ¡Aleluya! ¡Aleluya!

Invisible, el viento del Norte, nos anuncia que nacerá el Hijo de Dios. ¡Aleluya! ¡Aleluya! Es Creador misericordioso, cumplidor de promesas, abundante de bondad. Su amor es leal e infinito, su propósito eterno. ¡Aleluya! ¡Aleluya! Es Dios de justicia presto a perdonar. Nos espera en el confín del firmamento para abrir las puertas de la eternidad. ¡Aleluya! ¡Aleluya! La Tierra Nueva volverá a ser paraíso, donde viviremos todos, obedeciendo sus designios. ¡Aleluya! ¡Aleluya!

TRES REGALOS Los sabios de Oriente miraron al cielo, iluminados fueron por el Padre Eterno. Llevarán tres regalos al Divino Niño en su cumpleaños. Presurosos se reunieron en medio desierto, marcharon sonrientes hacia donde está el sol poniente. En Belén todo es fiesta, ha nacido el Salvador, anunciado por el ángel en la noche del fulgor. Los sabios de Oriente miraron al cielo… Melchor se inclinó primero, un cofre lleno de ORO puso a los pies del Niño: un Rey bondadoso será en el futuro. Gaspar hizo reverencia, presentó su regalo: INCIENSO para el que será Sacerdote Consagrado entre el hombre y el Supremo. De último llegó Baltasar porque ha visto en el porvenir

al Niño-Hombre sacrificado por lo que MIRRA para embalsamar es su presente. Los sabios de Oriente miraron al cielo…

EN NOCHE DE NAVIDAD La luna peina su cabello lleno de luciérnagas, le pone una corona de sueños y le acomoda su almohada nívea. En su cara de ángel se dibuja una sonrisa. El viento del norte deletrea su nombre santo: Jesuuuuuuuús. Su madre lo adora. Su padre lo mira con ternura. Los pastores cantan iluminados por el Eterno. Le han traído leche y miel, una piel de oveja para que no pase frío. Él hace posible sus deseos en la Noche de Navidad. La luna peina su cabello lleno de luciérnagas… En su cara de ángel se dibuja una sonrisa. El viento del norte deletrea su nombre santo: Jesuuuuuuuuús.

Por. Flor del Carmen Rodríguez

PRESENTACION DE UN ESCRITO 1-

No olvidar la sangría al inicio del escrito o después del punto y aparte.

Hacer letra legible, si el escrito es a mano.

Recomiendo aprender el uso de la computadora si desea dedicarse a escribir, ya que hace más fácil la corrección.

Trabajar con orden y limpieza. Presentar lo mejor que se puede la narración. Usar un fólder con prensa para guardar los escritos y poder encontrarlos cuando desee corregirlos. Si los tiene en archivos en la computadora, debe guardarlos en discos CD, porque ocurre que la computadora se llena de virus y borra los archivos.

Examinar el tiempo de los verbos y acciones.

Revisar si he descrito en forma literaria los escenarios.

Usar subtítulos o capítulos si el cuento es largo.

Poner los escritos a descansar por un tiempo y luego los vuelve a revisar. A veces se recomienda guardar los escritos por unos cuatro años, luego retomarlos.

Estudiar continuamente Gramática, Ortografía, sobre todo PUNTUACION y consultar los diccionarios, el más completo que tenga. Usar diccionario de Antónimos y Sinónimos.

10-

Si su escrito no le gusta o no sirve: MÁTELO.

11-

Lea mucho. Especialmente de lo que quiere escribir. Si quiere escribir humor, debe leer lo que hay escrito sobre el tema. El humor vende.

12-

Escriba para entretenerse. Si no es así, dedíquese a otra cosa.

13-

Es difícil ser fresco, original y único, pero si se les da lo que quieren a los editores y a los lectores, ellos le darán lo que usted tanto desea: dinero.

14-

Busque la manera inteligente de combinar: NARRACION, DESCRIPCION Y DIÁLOGO.

15-

Si su cuento, noveleta o novela debe dividirse en capítulos es mejor que cada uno de ellos termine en un gancho que incentive al lector a seguir leyendo el próximo capítulo.

16-

Todo lo que haga que sea escrito con humor, si el tema se presta. El humor vende. Todo editor busca buenas obras divertidas.

17-

Si su cuento no tiene acción o conflicto, es una narración simple e inocente. Una historia sin significado, sin metáfora, sin tocar emociones humanas, es simplemente: una lástima.

18-

Dé a sus personajes una salida airosa. Es muy efectivo dejar la escena con palabras o acciones relevantes (Darle un buen final). No agregue enseñanzas o moralejas. No es bien visto.

19-

Los finales sorpresivos son fantásticos.

20-

Pula sus escritos y cuando brillen, vuélvalos a pulir de nuevo UNA Y OTRA VEZ.

Escríbeme: florguez.segura@gmail.com