NAHUEL MORENO
Un marxista al servicio de la
clase obrera y la Internacional Cuando Nahuel Moreno murió, su antiguo compañero y adversario político, Ernest Mandel, lo recordó con las siguientes palabras: "Con él desaparece uno de los últimos representantes del grupo de cuadros dirigentes que, después
de la Segunda Guerra Mundial, mantuvieron la continuidad de la lucha de León Trotsky en condiciones difíciles..." Nada más cierto. El mérito de Moreno fue justamente haber sido un continuador —en nuestra opinión el más digno de los tantos que existieron— de la lucha de León Trotsky. Continuador de esa larga marcha que tiene un punto de referencia en el triunfo de la gloriosa Revolución Rusa, que
continuó en la III Internacional, en la Oposición de Izquierda y después en la fundación de la IV Internacional. Solo se puede entender la vida y obra de Moreno en el
marco de esa batalla, de allí que cada uno de sus actos se entremezclen con grandes acontecimientos ocurridos en una
época pródiga en guerras y revoluciones.
1917
Triunfa la Revolución Rusa. Los obreros y campesinos, organizados en los Soviets y dirigidos por el Partido Bolchevique, toman el poder. Al frente de este se destacan las
figuras de Lenín, el dirigente indiscutido del Partido y de Trotsky, presidente del Soviet de Petrogrado. 1918
Comienza la guerra civil en la URSS. Toda la reacción rusa y mundial se une para destruir el primer estado obrero.
Trotsky es nombrado Comisario del Pueblo para la defensa. En Alemania se proclama la República de los Consejos.
1Aak> - Edición especial - 2007