LUCÍA, UN EJEMPLO QUE ENSEÑA A NO BAJAR LOS BRAZOS
En Familia. Todos reunidos alrededor de su nueva casa. Gabriel Yedlin los acompaño
Los ojos de Lucía Ávila se nublan como la tarde otoñal del barrio San Miguel en la capital tucumana. Se asoman unas lágrimas entre la emoción, la alegría y la nostalgia. Viuda a los 35 años y madre de 6 hijos, pelea a la vida a diario y lo hace con éxito. Su marido falleció hace un año y medio en un accidente de moto y desde entonces se hizo más fuerte. Por su familia. Tras la muerte de su esposo dejó su casa y fue a vivir con su madre un tiempo.
Decidió volver, pese a todo. Y necesitaba una ayuda para ello. Esta mañana, el Ministerio de Desarrollo Social le colaboró con una casilla, muebles. Su historia trascendió porque Lucía forma parte del programa Ellas Hacen, mediante el cual estudia. Y por la tarde, recibió la visita del ministro, Gabriel Yedlin. Ante esto, Lucía expresa: “Estoy muy agradecida, por que ahora tengo casa para mis hijos”, expresa con gratitud al ministro. “Tengo seis hijos, todos estudian” aclara. “Yo tenía un a casilla muy viejita, que se estaba cayendo y tuve que dejarla;
Lucía Ávila. 35 años. 6 hijos
nostalgia. Viuda a los 35 años
Trabaja en Programa “Ellas
y madre de 6 hijos, pelea a la
Hacen “ desde el 2015.
vida a diario y lo hace con éxito. Su marido falleció hace un año
Los ojos de Lucía Ávila s nublan
y medio en un accidente de
como la tarde otoñal del barrio.
moto y desde entonces se hizo
San Miguel en la capital tucu-
más fuerte. Por su familia.
mana. Se asoman unas lágrimas
Tras la muerte de su esposo
entre la emoción, la alegría y la
dejó su casa y fue a vivir con su
fui a vivir con mi mamá pero éramos como 20 y decidí volver a mi casa; gracias a Dios me trajeron la casilla y con todas las cosas de adentro, nunca
bajé los brazos”, afirma. Cuenta con orgullo que dos de los seis chicos son “hijos del corazón”, los mayores, Belén y Federico que adop-
tó cuando tenían tres y seis meses respectivamente. Belén está estudiando para maestra jardinera. Federico va a la secundaria.
un ejemplo de madre, que se ocupa de sus chicos y se puso al hombro su familia más allá de la situación de vulnerabilidad”.
Y detalla la situación del resto, sus hijos biológicos: “Florencia está en segundo año, Camila en primero y en la primaria está Rocío, en segundo grado y Agustín en jardín”.
“Estamos muy contentos de poder estar cerca, de acompañarla, porque es la obligación nuestra como Estado, ayudar a qué sigan con sus sueños”, consignó Yedlin.
Gracias a Dios me trajeron la casilla y con todas las cosas de adentro, nunca bajé los brazos
Además, el ministro destacó el rol de los programas sociales: “Son tremendamente importantes. A veces las personas que no son beneficiarias se confunden o no los entienden. La Asignación Universal por Hijo en los últimos años sostuvo un piso de protección social y el Ellas Hacen permiten que puedan estudiar”.
Deja en claro que es fundamental para ella que estudien. Y pregona con el ejemplo. “Voy a estudiar a la noche, dos veces por semana y me va bien”, asegura. “Tengo muy buenas compañeras y ser parte del Ellas Hacen me dignificó la vida”, finaliza.
EJEMPLO DE MADRE El ministro Gabriel Yedlin destacó con énfasis la voluntad de Lucía: “Es
En ese sentido, subrayó que las personas que no estudiaron antes “fue porque realmente no tuvieron oportunidades”“En nuestra provincia hubo un salto cuantitativo y cualitativo tremendo”, evaluó. Finalmente, hizo hincapié en la arti-
culación con la Nación: “Hay voluntad del presidente Macri y de la ministra de Desarrollo Social, Carolina Stanley, de que estos programas continúen; además, esta semana vendrán funcionarios nacionales del Argentina Trabaja y Ellas Hacen a poner en marcha una nueva etapa”, concluyó Yedlin.
LA UNIÓN HACE LA FUERZA Y MARCA EL RUMBO EN LASTENIA Los ojos de Lucía Ávila se nublan como la tarde otoñal del barrio San Miguel en la capital tucumana. Se asoman unas lágrimas entre la emoción, la ale-
Camila tiene 18 años y un bebé de 45 días. Trabaja a diario en el comedor que funciona en la asociación Mujeres Unidas en Representación Comunitaria (MUSERC) en Barrio La Rivera, en Lastenia. Aparenta menos edad y sin embargo en sus ojos se reflejan decisión y experiencia. Atraviesa el último año de la secundaria y duda en seguir luego Enfermería o entrar a la Escuela de Policía. Pero tiene una certeza: seguirá colaborando a diario en MUSERC, donde cumple un importante papel, acompañando a jóvenes con problemas de
adicciones. “Nos encargamos a la tarde de la merienda y nos capacitamos para trabajar en el Punto de encuentro Comunitario (PEC) que funciona en la Asociación”, explica la joven. “Me encargo de buscar chicos adictos en el barrio, les pregunto qué les gusta y trato de atraerlos a la institución, donde reciben clases de canto, baile, etcétera”, manifiesta. Destaca que logró que la acompañen unos 15 jóvenes a las actividades de la entidad. “Estoy orgullosa de lo que hago”, afirma mientras toma en brazos a su bebé, que nació en el Hospital del Este. “Es importante que nos
Lucía Ávila. 35 años. 6 hijos Trabaja en Programa “Ellas Hacen “ desde el 2015. Los ojos de Lucía Ávila s nublan como la tarde otoñal del barrio.San Miguel en la capital tucumana. Se asoman unas
SOBRE LA ENTIDAD Carmen Rosa Rivadero es la presidenta de la asociación Mujeres Unidas en Representación Comunitaria (MUSERC).
lágrimas entre la emoción, la alegría y la
La entidad funciona desde hace 14 años en el lugar y según expresó Rivadero “tenemos comedor, merendero y capacitaciones, buscamos el bienestar de la gente”. Unos 150 chicos concurren al comedor y además, funciona un Punto de
Encuentro Comunitario (PEC) de Sedronar donde se acompaña a jóvenes con problemas de adicciones. Esta tarde el ministro de Desarrollo Social, Gabriel Yedlin y el secretario de Prevención y Asistencia de las Adicciones, Matías Tolosa visitaron MUSERC, se interiorizaron del trabajo diario y escucharon las inquietudes de los vecinos. “Es un día muy especial porque nos
Tenemos comedor, merendero y capacitaciones. Buscamos siempre el bienestar de la gente visitó el ministro y tenemos la esperanza que la situación va a ir mejorando con más articulación con el Estado”, señaló Rivadero.
En Familia. Todos reunidos alrededor de su nueva casa. Gabriel Yedlin los acompaño
EL QUE DEJA HUELLA
NO DESAPARECE
En el marco de la conmemoración de los 40 años del golpe militar, el Ministerio de Desarrollo Social, cartera que conduce Gabriel Yedlin, homenajeó a compañeros que trabajan en el organismo. Yedlin visitó a Rosa Mrad en Casa Cuna, quien cordialmente contó su historia. Rosa Mrad trabaja en la Casa Cuna, y su testimonio es un punto de partida para que este día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, a 40 años del golpe militar más trágico de la historia argentina, ayude a tener en cuenta que no se debe olvidar a quienes dieron su vida por ideales. Cuando Rosa Mrad habla los silencios parecen más prolongados. No es un oxímoron ni un contrasentido. Los ojos se humedecen. Todos miran y escuchan. Imágenes y palabras. “Los niños son sanadores porque te arrancan una sonrisa aunque estés muy triste”, suelta Rosa. El auditorio no es muy amplio pero si de mucho relieve. El ministro de Desarrollo Social, Gabriel Yedlin lleva el hilo de la charla. A su lado, están la directora de la Casa Cuna, María del Carmen Esteban, la directora Niñez, Adolescencia y Familia, Daniela Bravo
Los niños son sanadores porque te arrancan una sonrisa aunque estés muy triste...
y la secretaria de Niñez, Adolescencia y Familia, Sandra Tirado. Rosa trabaja hace 22 años en la institución. Y tiene una historia particular. Cuando tenía 18 años, su hermana Ana María, de 27, fue secuestrada por un grupo de tareas en Santiago del Estero en 1975. Ana era una joven militante que luchaba por sus ideales en los años de plomo. Y Rosa la evoca con acciones: trabajar para que los niños estén mejor. “Mi hermana era profesora de Filosofía, una mente bri-
llante”, recuerda Rosa. “En la facultad empieza a militar en la Juventud Peronista. Se casa y a los dos meses desaparece su esposo, durante carnaval. Lo secuestran, lo torturan y muere”, expresa. Cuenta que su padre ideó un plan de escape hacia afuera del país para Ana, pero ella quiso quedarse. Sin embargo, Ana se fue a vivir a Santiago del Estero, primero con unos familiares y luego en una pensión. “La secuestraron en una plaza junto a una com-
En Familia. Todos reunidos alrededor de su nueva casa. Gabriel Yedlin los acompaño
pañera de apellido Lezcano, que era familiar de quien tenía a cargo el operativo, lo que a mi entender, es quien la entrega”, dice Rosa. Ana estuvo en el Regimiento Santo Domingo y muere por la tortura al cuarto día. Revela que el operativo estaba dirigido por Antonio Musa Azar, ex jefe de Policía de Santiago del Estero, tristemente célebre por el famoso crimen de la Dársena y condenado por delitos de lesa humanidad.
Las madres Una de las oficinas de la Casa Cuna fue el escenario del encuentro propiciado por el Ministerio. El emblemático instituto de Puericultura depende orgánicamente de Desarrollo Social.
“Con mi madre y hermana comenzamos a militar en Madres de Plaza de Mayo” Allí, todos los días, desde la 8 hasta las 12, Rosa se encarga, como fonoaudióloga de la estimulación temprana de los niños de 0 a 3 años. Además se encarga de controlar la asistencia médica de todos los chicos que viven en el lugar. A medida que avanza en el relato se distienda. Ya no repara en la cámara ni en los micrófonos. Varios de los presentes no pueden evitar las lágrimas. “Con mi madre y mi hermana comenzamos a militar en Madres de Plazas de Mayo, y luego mamá y yo dejamos y siguió mi hermana”, destaca.
De hecho, su hermana mayor, Sara, es la referente tucumana de la agrupación.
Lo que no mata fortalece Rosa recuerda a su hermana como una referente en su vida. “Era como una segunda madre para mí; si yo no entendía matemáticas o historia ella me enseñaba. Me ayudaba en las tareas escolares”. “Fue un golpe muy fuerte perderla, lo que no mata fortalece; y no desaparece el que ha dejado huella, el desapa-
recido es como alguien que siempre está”. Rememora también a su padre, cuando estaba muy enfermo:“Tengo la imagen de mi padre, cuando declaré en el juicio y lo vi acariciando sobre su vientre la foto de mi hermana”. Rosa, que cursó hasta cuarto año de medicina, tiene una hija médica, otra abogada y un hijo varón que trabaja en la Caja Popular.
La militancia “Hay más jóvenes que se interesan,
En Familia. Todos reunidos alrededor de su nueva casa. Gabriel Yedlin los acompaño
que están más abiertos; y hay que decirles que no tengan miedo de militar, que eso (la represión en dictadura) nunca más va a pasar, los mayores no lo vamos a permitir”, asegura con firmeza. Rosa profesa un gran amor a los niños. Recuerda que Ana María no quiso abandonar el país, cuando tuvo la posibilidad de viajar al Líbano instada por su padre. “Mi patria me necesita, no voy a ningún lado, le dijo Ana a mi padre”, reve-
la Rosa. La charla va llegando a su fin. Se acerca la reflexión final. “Los desaparecidos se han multiplicado; están presentes en sus hermanos, sobrinos, sobrinos nietos que militan y levantan las banderas de la memoria, la verdad y la justicia”, afirma y destaca: “Es importante que el otro te importe” Finalmente, recordó el cierre de una carta que Ana le remitió a su padre, con una frase tremenda pero motivadora a la vez: “A donde veas un rancho, con un niño descalzo, ahí estaré yo”.
Yedlin destacó el trabajo en cuero de un emprendedor en Villa 9 de Julio Los ojos de Lucía Ávila se nublan como la tarde otoñal del barrio San Miguel en la capital tucumana. Se asoman unas lágrimas entre la emoción, la ale-
El ministro Gabriel Yedlin visitó un emprendimiento de economía social, donde se realizan trabajos en cuero. En esta oportunidad, el funcionario estuvo acompañado por el secretario de Estado de Articulación Territorial y Desarrollo Local, Ramiro González Navarro y miembros de su equipo. La fábrica “Génesis”, está ubicada en Laprida 2705, de Villa 9 de Julio. Allí, el promotor del emprendimiento, Oscar Soria, realiza trabajos manufacturados en cuero, como carteras, alpargatas, sandalias y otras piezas de una cali-
dad y terminación destacada. Al respecto, Yedlin expresó: “Es muy interesante la historia de vida y superación de Oscar, quien con la crisis del 2001 tuvo que cerrar su fábrica de alpargatas y gracias a herramientas que ofrece el estado a través de la economía social, como micro créditos y micro emprendimientos, pudieron recuperarse. Además, tenemos la expectativa de poder proveer a nuestros emprendedores de materia prima, ya que actualmente deben adquirirlas fuera de la provincia”.
En Familia. Todos reunidos alrededor de su nueva casa. Gabriel Yedlin los acompaño
Lucía Ávila. 35 años. 6 hijos
nostalgia. Viuda a los 35 años
Trabaja en Programa “Ellas
y madre de 6 hijos, pelea a la
Hacen “ desde el 2015.
vida a diario y lo hace con éxito. Su marido falleció hace un año
Los ojos de Lucía Ávila s nublan
y medio en un accidente de
como la tarde otoñal del barrio.
moto y desde entonces se hizo
San Miguel en la capital tucu-
más fuerte. Por su familia.
mana. Se asoman unas lágrimas
Tras la muerte de su esposo
entre la emoción, la alegría y la
dejó su casa y fue a vivir con su
Por su parte, González Navarro detalló: “Su mercadería es muy requerida en ferias y comercios no solo en Tucumán sino también en Buenos Aires. Es una gran emoción para nosotros ver emprendedores que se independizan y junto a su familia logran esta empresa que hoy tiene Oscar”. Por último, Soria puntualizó: “Empezamos con el emprendimiento en cuero, luego nos dieron dos máquinas y la posibilidad a través de la banca solidaria de sacar prestamos para mejorar la calidad del los productos”. El Ministerio, impulsa a través de la
“Con mi madre y hermana comenzamos a militar en Madres de Plaza de Mayo” economía social, políticas de inclusión en el ámbito laboral, para que a través de ellas, cada emprendedor tenga la posibilidad de construir su propio camino.