LA MONUMENTALIDAD PERIFÉRICA:
Nicolás Martín Díaz
TFG
LA MONUMENTALIDAD PERIFÉRICA: HITOS EN LOS LÍMITES DE LA CIUDAD
TRABAJO FINAL DE GRADO PRIMAVERA 2020 Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid Nicolás Martín Díaz nº exp: 14279 Tutor: Francisco Arqués Soler Aula 06 Coordinador: Fernando Casqueiro Barreiro Adjunto: Francisco Javier Sardiza Asensio 07/06/2020
ÍNDICE 0. INTRODUCCIÓN
8
0.1. ABSTRACT
10
0.2. OBJETIVOS
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0.3. TERMINOLOGÍA
14
0.4. ANTECEDENTES
16
0.4.1. CONTEXTO TERRITORIAL
18
0.4.2. MARCO TEÓRICO
22
0.4.3. MARCO DE REFERENCIAS
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Y DE RELACIONES 0.5. METODOLOGÍA 0.5.1. PASADO-ELEMENTOS
32 34
PRIMARIOS 0.5.2. PRESENTE-PUNTOS DE
36
REFERNCIA 0.5.3. FUTURO(S)-NUEVOS
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MONUMENTOS
1. ANÁLISIS
40
1.1. PASADO
42
1.2. PRESENTE
82
1.3. FUTURO(S)
94
2. CONCLUSIONES
114
3. BIBLIOGRAFÍA
138
0.
INTRODUCCIÓN
Fig 1. Madrid sin nĂşcleo 0 km
2 km
5 km
10 km
20 km
0.1.
ABSTRACT Las zonas céntricas de las ciudades han sido las principales beneficiarias de la prosperidad del conjunto urbano. Concentran instituciones culturales, administrativas y demás servicios públicos, lo que les convierten en focos del turismo y de todo tipo de eventos. Este éxito les confiere un estatus privilegiado; son las protagonistas de las reformas y rehabilitaciones urbanas que se realizan en la ciudad. Los barrios periféricos, por su parte, se han entendido como simples adhesiones en torno a un núcleo, y rara vez como posibles fuentes de nuevos centros de interés. Las investigaciones patrimoniales realizadas en estos ámbitos no suelen profundizar en la capacidad de los hitos periféricos de generar nuevos puntos de atracción más allá del núcleo urbano; sino en enunciar una serie de elementos que por sus características históricas, culturales o científicas poseen cierta relevancia como para ser conservadas. Se requiere una visión de la periferia que aporte algo más de significado que la de una simple adhesión, que amplíe el campo visual más allá de un centro y recorra la periferia desde otro punto de vista; que comience a enunciarla, como lo que un día fue, un elemento autónomo.
#Madrid #Periferia #Vallecas #Monumento #Hito #Paisajismo #Urbanismo
11
0.2.
OBJETIVOS Los objetivos de este trabajo de investigación son los siguientes: - Establecer cuáles son los criterios que definen a los hitos de la periferia madrileña. Se proporcionarán tantos criterios como fueran necesarios para poder abordar la cuestión de porqué un elemento es considerado como un hito. - Estudiar las relaciones entre los hitos y las dinámicas urbanas y sociales que se produzcan en su entorno. Se buscará encontrar una relación entre la existencia del hito y los desarrollos que se produzcan en el entorno más inmediato. - Cartografiar y detectar los hitos dentro de un ámbito concreto. Se documentaran tanto hitos presentes como pasados, con el fin de poder representar las variaciones sufridas a lo largo de la historia.
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0.3.
TERMINOLOGÍA En el siguiente apartado se definirán algunos términos recurrentes en este trabajo de investigación con el fin de facilitar la comprensión del lector. Hito: elemento del paisaje cuyas características le proporcionan una mayor relevancia, en aspectos diversos, respecto a otros elementos de su entorno. Monumento: elemento urbano material cuyas características le proporcionan una mayor relevancia, en aspectos diversos, respecto a otros elementos de su entorno. Periferia: porción de la ciudad alejada de su propio centro. En el caso de esta investigación, porción urbana delimitada del centro por la carretera de circunvalación M-30 y cuyos límites exteriores los marca el límite administrativo del municipio de Madrid. Símbolo: elemento cuyo significado, imagen o percepción le convierte en representativo de una idea o concepto.
Las definiciones de estos términos se han basado en las definiciones aportadas por el diccionario de la RAE. y organismos culturales internacionales como la UNESCO.
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0.4.
ANTECEDENTES Este proyecto de investigación parte principalmente de tres trabajos previos. El primero sería los estudios realizados en el taller experimental de Acciones Híbridas en el paisajede 20181, donde como participante de dicho taller, realizamos una serie de aproximaciones al paisaje periférico. En particular, profundice en el concepto de enantiomorfismo, muy estudiado por Robert Smithson, en el que mediante un juego de espejos, se conseguía alterar la percepción del paisaje, introduciendo elementos o desvaneciendo otros. Este trabajo me ayudó a tomar un primer contacto con el territorio y a comprender la riqueza de situaciones que en él se sitúan. El segundo trabajo de estudio sería la edición de (PAU)blados2 de la revista Arquitectura del COAM (2019), en la que se introducen distintas metodologías para abordar el estudio del espacio urbano limítrofe.
1.Taller experimental: Acciones Híbridas en el paisaje: entre arte y arquitectura. 2018. Profesores: Concha Lapayese Lupe y Francisco Arqués Soler. Página web: http:// www.accioneshibridas.es/ 2. GARCÍA GERMÁN, Jacobo, SORIANO, Federico y URZÁIZ, Pedro, 2019. (PAU)blados. , nº. 377, pp. 50-105. 2019 3. KOOLHAAS, Rem, 2004. Delirio de Nueva York : un manifiesto retroactivo para Manhattan. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili.1978
El tercer y último trabajo de investigación de partida sería Delirious New York3 de Rem Koolhaas (1978). En este manifiesto sobre Manhattan, Koolhaas reduce la totalidad de Nueva York a una serie de elementos o acontecimientos que él considera determinantes para su construcción. Lugares como Coney Island, tipologías como el rascacielos, edificios como el Rockefeller Center o eventos como la llegada de Salvador Dalí o Le Corbusier a la ciudad, son los bloques fundamentales que marcan y definen Manhattan. El trabajo de Koolhaas no plantea una metodología para poder realizar la búsqueda de estos elementos. Para ello será necesario recurrir a un marco teórico. 17
0.4.1. CONTEXTO TERRITORIAL Para poder evaluar las hipótesis que se desarrollarán en el trabajo será necesario seleccionar un ámbito periférico concreto. Dicho ámbito será sometido a varias metodologías que ayuden a detectar los hitos periféricos y su relación con el entorno. En el caso de este trabajo se ha optado por seleccionar la zona de Vallecas, en concreto los distritos de Puente de Vallecas y Villa de Vallecas. Las razones por las que se ha seleccionado Vallecas son las siguientes: fue el entorno de estudio en el taller experimental de Acciones Híbridas en el paisaje de 20184, por lo que dispongo de experiencia previa en este ámbito; es uno de los territorios más estudiados en la edición de (PAU)blados5 de la revista Arquitectura del COAM (2019), por lo que se dispone de una cantidad importante de información previa. Por último, es la zona periférica que a primera vista, posee una mayor riqueza de tipologías urbanas en una superficie de terreno relativamente controlable.
4.Taller experimental: Acciones Híbridas en el paisaje: entre arte y arquitectura. 2018. Profesores: Concha Lapayese Lupe y Francisco Arqués Soler. Página web: http:// www.accioneshibridas.es/ 5. GARCÍA GERMÁN, Jacobo, et al. (PAU)blados, pp. 50-105.
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Fig 2. Vallecas como รกmbito de estudio dentro de la perferia 0 km
2 km
5 km
10 km
20 km
0 km
1 km
2 km
5 km
Fig 3. Vallecas, รกmbito de estudio 10 km
0.4.2. MARCO TEÓRICO Para poder detectar los hitos vallecanos, se plantea el trabajo de tres autores cuyas obras tratan diferentes formas de cómo entender la ciudad. A pesar de las diferencias que existen entre las tres premisas todas parten de una visión inicial común. El entendimiento de la totalidad del área urbana a partir de partes más pequeñas de la misma. El primer autor es Aldo Rossi que denomina a estas porciones elementos primarios. En su libro La arquitectura de la ciudad6 (1966) define estos elementos como aquellos hechos urbanos, que a pesar de la evolución que la ciudad sufre a lo largo de la historia, permanecen como condicionantes de este mismo desarrollo urbano. Por lo tanto, los elementos primarios poseen un carácter de permanencia en la trama urbana, y es esta misma permanencia la que termina condicionando los cambios que sufre la ciudad con el paso del tiempo. Para Rossi estos elementos poseen un carácter histórico, en el que el paso del tiempo es uno de los factores principales para su relevancia. La permanencia de estos elementos normalmente despoja a estas construcciones de su función inicial. Los elementos primarios mutan sus usos para adaptarse a las diferentes necesidades históricas. Otra característica común de estos elementos es su carácter de puntos de atracción de la dinámica social urbana. Funcionan como condensadores de las relaciones de los habitantes de la ciudad. Son elementos que por tanto poseen un acceso de carácter público. Rossi realiza una distinción: el viario y los edificios residenciales nunca podrán tratarse como elementos primarios. El primero porque es 22
6. ROSSI, Aldo, 2015. La arquitectura de la ciudad. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 1966
Fig 4. Foros romanos. Elemento primario segĂşn Aldo Rossi
Fig 5. Centro comercial La Gavia. Elemento primario vallecano.
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una simple forma de estructurar la ciudad. Es más una consecuencia que un motivo por el cual se desarrolla la ciudad. El segundo no posee la fuerza de atracción ni el carácter de acceso público para condensar las dinámicas urbanas. Uno de los ejemplos que Rossi propone es el Foro Romano como elemento por el cual se estructura toda la ciudad de Roma. Kevin Lynch, segundo de los autores, basa la concepción de la totalidad de la ciudad a través del imaginario colectivo de las imágenes públicas que la mayoría de los habitantes tienen de la ciudad en la que residen. Estas imágenes se componen de una serie de elementos principales que las protagonizan. A estos elementos Lynch las denomina en su libro La imagen de la ciudad7 (1961) como símbolos o puntos de referencia. A diferencia de las teorías anteriores para Lynch los elementos por los cuales se entienden la ciudad no tienen porque estar dentro del propio ámbito de estudio. Es interesante la respuesta que varios ciudadanos de Jersey City daban a la pregunta “¿Qué es lo primero que se le ocurre cuando oye las palabras «Jersey City»?”8. Varios de los entrevistados solo podían mencionar los rascacielos de Manhattan. Irónicamente aquello que consideraban más significativo de su ciudad era algo que no se situaba en ella pero desde la que se podía observar. De hecho, este mismo elemento ajeno a su propio ámbito, era uno de los elementos que muchos de ellos representaban cuando se les pedía que realizaran un mapa esquemático de Jersey City. Por otro lado, Lynch no solo alude a elementos construidos por el ser humano, sino a elementos propios de la atmósfera y la 24
7. LYNCH, Kevin, 1966. La imagen de la ciudad. Buenos Aires: Buenos Aires Infinito. 1961 8. LYNCH, Kevin, 1966. La imagen de la ciudad. Buenos Aires: Buenos Aires Infinito. 1961. pp 41
Fig 6. Silueta de Manhattan desde Jersey City. Punto de referencia según Kevin Lynch.
Fig 7. Silueta de Madrid desde el cerro del Tío Pío. Punto de referencia vallecano.
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naturaleza del ámbito de estudio. El tercer autor de referencia es Robert Smithson denomina a estas fracciones de ciudad como monumentos, tras un recorrido por su Passaic natal, una ciudad a las afueras de Newark, Nueva Jersey. Este paseo queda documentado en el texto Un recorrido por los monumentos de Passaic, Nueva Jersey9 (1967). En él, Smithson va fotografiando una serie de construcciones con las que se va topando a lo largo de su travesía. Estos elementos, al contrario de los que enuncia Rossi, no poseen una condición histórica tras de sí. Más bien, son construcciones que muestran una idea de ciudad que nunca llego a producirse. Son elementos que se contraponen con la idea clásica de monumento. Smithson comenta textualmente: Los monumentos de Passaic (...) son como ruinas al revés, es decir, toda la construcción nueva que finalmente se construiría. Esto es lo contrario de la «ruina romántica», porque los edificios no caen en ruinas después de haber sido construidos sino que crecen hasta la ruina conforme son erigidos.10 Los nuevos monumentos de Smithson son hitos al abandono. Son los mejores ejemplos de una situación post-crisis económica. En el que la quiebra paraliza las dinámicas de la ciudad y estos elementos representan dicha parálisis. Smithson toma como ejemplo de monumento unos contrafuertes de una autopista que nunca se llego a terminar de construir.
9. SMITHSON, Robert, 2006. Un recorrido por los monumentos de Passaic, Nueva Yersey. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 1967 10. SMITHSON, Robert, 2006. Un recorrido por los monumentos de Passaic, Nueva Yersey. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 1967
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Fig 8. Monumento de las tuberĂas. Nuevo monumento para Robert Smithson.
Fig 9. Parque La Gavia, Toyo Ito. Nuevo monumento vallecano
27
0.4.3. MARCO DE REFERENCIAS Y DE RELACIONES A pesar de haber presentado tres teorías que plantean definiciones diferentes del concepto hito, esto no implica que un elemento urbano no posea varias condiciones monumentales al mismo tiempo. En este apartado se desarrollaran las relaciones y referencias que los tres conceptos guardan entre sí. Tanto Rossi como Smithson hacen definiciones de estas porciones qsemejantes a las que realiza la UNESCO del concepto monumento: “obra arquitectónica, de escultura o pintura monumental, elemento o estructura de carácter arqueológico, inscripción, caverna y grupo de elementos que tengan un valor universal excepcional desde el punto de vista de la historia del arte y de la ciencia”11. Los dos autores aluden a elementos físicos, generalmente individuales, localizados en el ámbito de estudio. Lynch sin embargo se desmarca de esta premisa exclusivamente física para aludir a conceptos más atmosféricos. Para este autor un punto de referencia puede ser tanto físico como ambiental. Además de esta diferencia material, Lynch plantea la posibilidad de que la localización del hito no se sitúe en el ámbito estudiado. Para el autor el hito se asocia con el lugar en tanto en cuanto este es percibido por el espectador en ese lugar concreto. En el momento en el que las teorías se funden se pueden discernir los distintos cambios de fase entre conceptos. Así pues, si un punto de la ciudad sirve como mirador de otros hitos, los cuales no tienen porque situarse en el ámbito como plantea Lynch, este lugar 28
11. UNESCO, 1972. Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural. 1972. S.l.: s.n.
es susceptible de ser un mirador. El poder de atracción social que posea este mirador le puede llegar a convertir en un elemento primario, de tal forma que funcione como un condensador social para la ciudad. Un nuevo monumento también puede transformarse en elemento primario si comienza a funcionar como condicionante urbano o condensador social. Estas relaciones planteadas tienen un mayor sentido si a cada teoría se le asocia el espacio temporal en el que principalmente se desarrolla. Así pues, Rossi define el elemento primario asociado a un proceso histórico principalmente, en el que tras el paso del tiempo los elementos acaban desarrollando la condición de primarios. Rossi ahonda en el pasado. Por otro lado, la inmediatez de la imagen urbana asocia a Lynch con el presente, con aquello que ocurre simultáneamente a nuestros planteamientos. Finalmente, Smithson parece asociarse más con conceptos de posibles futuros, en los que los nuevos monumentos plantean visiones de como será la nueva ciudad.
29
Fig 10. Esquema del marco de referencias y relaciones entre los distintos conceptos de hito.
0.5.
METODOLOGÍA Cada una de las teorías antes formuladas requiere de métodos diferentes de detección que consigan abordar el espacio temporal al que se vinculan. Los distintos análisis se han planificado tomando como referencia los propios métodos que los tres autores proponían en sus correspondientes obras. Estos métodos vendrán condicionados por la situación actual de confinamiento, por lo que se propondrán procesos que sustituyan los métodos tradicionales por otros de índole virtual. Los tres métodos son los siguientes: un estudio histórico, para la detección de los hitos conocidos como elementos primarios y que poseen vinculaciones con el pasado de la ciudad; una detección de los puntos más simbólicos para la búsqueda de los puntos de referencia, asociados a los hitos actuales, es decir, del presente; y finalmente, un recorrido virtual que identifique los nuevos monumentos, referidos a hitos que aportan una visión futura de la ciudad. En las siguientes páginas se desarrollarán estos métodos.
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0.5.1. PASADO - ELEMENTOS PRIMARIOS Como se ha comentado, para detectar este tipo de hitos, se empleará un estudio histórico del ámbito de Vallecas. Se tomará como ejemplo el estudio ya realizado por Rossi sobre el Foro Romano en su obra “La arquitectura de la ciudad”12. Rossi analiza el foro aludiendo a su relevancia dentro del desarrollo urbano de la ciudad de Roma13. Se remonta hasta la época de su construcción, aportando datos sobre el lugar donde se sitúa. Posteriormente continúa exponiendo la relevancia del hito a lo largo de la historia haciendo referencia a su importancia dentro de las dinámicas sociales que se desarrollan dentro de la ciudad. No solo es protagonista de los hechos relacionados con su uso primordial, sino también de otros acontecimientos en los que se ve involucrado dada su relevancia. Al analizar los elementos vallecanos, se aportarán relatos, que narren la sucesión de eventos que en estos hitos suceden dada su importancia. Además de narraciones históricas se aportarán datos que ayuden a obtener una perspectiva más rigurosa que la de ciertos relatos que podrían ser confundidos con leyendas. Ahora bien, abordar la totalidad de los elementos vallecanos como susceptibles de ser un hito llevaría una gran cantidad de esfuerzo. Con el fin de poder afinar mejor la búsqueda en este apartado se empleará la distinción que Rossi hacia entre elementos primarios, residenciales y viario. Así pues, esta parte del análisis excluirá de partida el viario y los edificios residenciales, centrando la mirada 34
12. ROSSI, Aldo, 2015. La arquitectura de la ciudad. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 1966 13. ROSSI, Aldo, 2015. La arquitectura de la ciudad. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 1966. pp 90-92.
únicamente en los edificios o construcciones de acceso público. Para poder acometer la distinción entre construcciones de acceso público y edificios residenciales, de oficinas o industriales, se emplearán sistemas de información geográfica. Mediante la información que proporciona el ayuntamiento de Madrid en el Geoportal de urbanismo y vivienda, así como el empleo de planos históricos se podrá realizar esta diferenciación.
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0.5.2. PRESENTE - PUNTOS DE REFERENCIA Para poder concretar los puntos de referencia que enunciaba Lynch, sería pertinente conocer la imagen de Vallecas que sus propios habitantes tienen de ella. Observar cuales son los elementos del paisaje más retratados y por lo tanto que resultan más significativos del barrio periférico. Ante la situación de confinamiento que atraviesa el país, las entrevistas a los habitantes de la zona quedan descartadas. También se ha optado por abandonar la idea de realizar encuestas virtuales, ya que sería complicado garantizar la veracidad de que los sujetos entrevistados son conocedores del ámbito vallecano. En su lugar, se ha planteado realizar un “mapa de calor” que detecte aquellas zonas más simbólicas del barrio periférico. En este estudio se ha asociado el grado de simbolismo con el número de apariciones de un elemento en las redes sociales. De tal forma, que se puede entender que un elemento urbano es más susceptible de ser un punto de referencia en tanto en cuanto posea una “imagen virtual” más definida. Para poder acceder a este tipo de datos se ha empleado la herramienta Sightsmap14. Dicha herramienta genera “mapas de calor” que muestran los lugares más fotografiados de una zona concreta. Los datos que aporta dicha herramienta son relativos al ámbito de análisis, es decir, los valores se escalan tomando de referencia el elemento más fotografiado de una zona. De esta forma, el hito más fotografiado poseerá un 100% de simbolismo y el resto de hitos del ámbito tendrán un porcentaje inferior al del más popular. La 36
14. Sightsmap. [en línea]. Disponible en: http://www. sightsmap.com/#
herramienta no muestra por lo tanto datos absolutos, como el número de veces que un elemento ha sido fotografiado, sino una comparación entre elementos. Mediante este mapa se podrán obtener fácilmente los puntos más fotografiados de Vallecas y por lo tanto más representativos del ámbito.
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0.5.3. FUTURO - NUEVOS MONUMENTOS Detectar los nuevos monumentos que enuncia Smithson requerirá de una vista a pie de calle, de tal forma que se pueda enmarcar el monumento con su entorno más próximo. Se realizará un recorrido por Vallecas, tal y como hizo Smithson en Passaic. En vista de que los monumentos a los que alude Smithson son construcciones inacabadas o con escaso desarrollo, se centrará la búsqueda en aquellas zonas de Vallecas cuya consolidación sea menor. Por lo tanto, el recorrido deberá desarrollarse principalmente en el distrito de Villa de Vallecas. El recorrido ha sido escogido a través de los trabajos previos realizados en el taller experimental de “Acciones Híbridas en el paisaje” de 201815 así como en la edición de “(PAU)blados”16 de la revista “Arquitectura” del COAM. Dadas las excepcionales circunstancias, el recorrido se ha visto condicionado por las limitaciones de las herramientas de visualización a pie de calle, de tal forma que la travesía se ha modificado para adaptarse a dichas herramientas. Estas son Google Maps17 y Bing Maps18. Se tomarán panorámicas de la zona cada 100 metros de tal forma que se pueda configurar un recorrido virtual. A la hora de seleccionar los hitos, se tomarán los criterios de Smithson para su detección.
15. Taller experimental: Acciones Híbridas en el paisaje: entre arte y arquitectura. 2018. Profesores: Concha Lapayese Lupe y Francisco Arqués Soler. Página web: http:// www.accioneshibridas.es/ 16. GARCÍA GERMÁN, Jacobo, et al. (PAU)blados, pp. 50-105. 17. Google Maps. [en línea]. Disponible en: https://www. google.es/maps/preview 18. Bing maps. [en línea]. Disponible en: https://www.bing. com/maps
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0.5.4. HITOS PERIFÉRICOS Una vez detectados los hitos a través de los tres métodos antes presentados, se procederá a su clasificación y catalogación. Se agruparan en función de dos parámetros fundamentales. El primero es la razón que hace al elemento concreto un hito. El segundo el efecto que este hito produce en la ciudad. Las causas y consecuencias más características se conocerán a través de los tres análisis. Se prevé que los hitos no serán exclusivos de una única causa y que produzcan un efecto concreto, sino que se mezclen en diferentes motivos y consecuencias, haciendo mucho más complejo la propia documentación. Este proceso podrá aportar una serie de nuevos datos sobre los hitos. El primero sería una nueva perspectiva de la forma de clasificar los elementos fundamentales que definen una ciudad y encontrar situaciones similares en elementos ,que a primera vista, pueden parecer inconexos. Por otro lado, el conjunto del catálogo se espera que defina la periferia de una forma insólita, que se diferencie sobre la concepción de los hitos céntricos y aporte un nuevo atractivo al territorio limítrofe.
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1. ANÁLISIS
1.1.
PASADO El pasado vallecano se remonta a hace más de 20.000 años. Utensilios de esta época se descubrieron en 1919 por los arqueólogos Pérez de Barradas y Obermaier, que investigaron en las llamadas canteras de Vallecas, junto al pueblo, y siguiendo el camino de la vía del tren, por la zona de Entrevías. Además se han encontrado restos del año 500 a.C. en zonas como el cerro de la Gavia y el cerro Almodóvar.19 A pesar de tan antiguos comienzos el nombre de Vallecas no aparece en un documento escrito hasta 1202 donde, en el Fuero de Madrid promulgado por el rey Alfonso VIII, se regula el carrascal20 de Balecas, Vallecas.21 Será aproximadamente esta fecha el punto de partido de los siguientes relatos de los hitos vallecanos.
19. RUBIO MARTÍN, María José y ALCÁZAR PÉREZ, Miguel, [sin fecha]. Vallecas . S.l.: s.n. Encontrado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. S.l.: El Avapiés. 20. Lugar o monte poblado de carrascas, árbol bellotero. 21. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/
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VÍA Existen varias teorías sobre la etimología de Vallecas. Desde la presencia de un adinerado moro llamado Kas, que durante la Edad Media se apoderó del valle donde hoy se encuentra el barrio, haciendo referencia a este valle como Valle-Kas22, hasta la de Fernández de los Ríos, en la que Vallecas proviene de Vallis Egas, Valle de Egas haciendo referencia al dueño de una alquería23. Más allá de teorías, Vallecas nace en el camino entre dos puntos. Lo que hoy se conoce como avenida de la Albufera, antiguamente era llamada: carretera de Valencia. Es esta la vía que atraviesa el centro de la Villa y la estructura. Este centro, donde hoy se encuentra la plaza de Juan de Malasaña, es el kilómetro cero Vallecano, lugar donde todos los caminos nacen. Dada su situación, no es de extrañar que existiera alguna construcción en la zona acorde a la importancia de esta vía. Era también común en la época medieval que en estos caminos, a las entradas de las ciudades, se situasen una especie de peajes, que recaudaban dinero de todo usuario que pasara por aquel punto, con el fin de poder invertirlo en la manutención de la carretera. Tanto la cantidad a pagar como el edificio donde se realizaba dicho pago eran denominados como portazgo. La importancia que estas construcciones tenían era tal, que no tardó demasiado tiempo en rodearse de otros edificios como viviendas y establecimientos. De esta forma nace el segundo núcleo de Vallecas, en el entorno donde hoy se encuentra la estación de metro de Portazgo24.
44
22. ORTEGA RUBIO, Juan., 1921. Historia de Madrid y los pueblos de su provincia. Madrid: Imprenta municipal. Encontrado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.30 23. FERNÁNDEZ DE LOS RÍOS, Ángel, 1876. Guía de Madrid : manual del madrileño y del forastero. Madrid: s.n. Encontrado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.30 24. CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp 24.
Fig 11. Nacimiento del segundo núcleo vallecano en la antigua carretera de Valencia. Se desconoce la arquitectura de este primer hito, así como su emplazamiento exacto. La construcción se situaba entorno al círculo rojo.
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No se dispone de información fehaciente sobre como surgió el primer núcleo que conforma Vallecas. Sin embargo, sí que se puede apreciar la primera prueba de la relevancia del hito en la construcción de la ciudad. Una frontera dispuesta sobre un camino es suficiente para generar un nuevo núcleo. En esta sección de la vía se configuran núcleos ha ambos lados, que sirven a los usuarios de ida o de vuelta del camino. La característica funcional del hito le convierte en un punto de atracción de las dinámicas sociales, así como, en un condicionante del desarrollo urbano.
PUENTE(S) Diversos puentes existieron en Vallecas para salvar, con uno u otro o fin, el arroyo Abroñigal. En ocasiones estos puentes coexistieron, en otras convivieron solitarios. La relevancia de estas construcciones es de lo más variada. La mayoría de ellos pasaron desapercibidos a los ojos de la historia, otros apenas duraban unas semanas por las fuertes crecidas que el arroyo Abroñigal sufría. Solo unos pocos puentes tuvieron una verdadera repercusión en el desarrollo vallecano; y más aún, calaron en las mentes de los habitantes. Conviene comenzar por el puente que sirvió de topónimo para un barrio vallecano. A finales del siglo XVIII se adjudica el proyecto de un puente sobre el arroyo Abroñigal al arquitecto Pedro de Ribera25. Los anteriores puentes construidos al menos desde el siglo XII, que es cuando se tiene constancia del primer puente sobre el Arroyo Abroñigal, 46
25. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/
tenían la misma fama de peligrosos que el propio arroyo.26 Ribera será el encargado de realizar un puente de mampostería de piedra de tres arcos con pilares en forma de cuña, que conectara los dos tramos de la carretera de Valencia. El proyecto se culminaría en torno a 1731. Las fuertes embestidas del arroyo en época de tormentas eran suficientes para devastar la mayoría de puentes vallecanos, o como es el caso de este puente, dañarlo profundamente. En los años sucesivos a su construcción se acometen obras de mantenimiento y reparación del puente vallecano. El secretario de Carlos III, Antonio Ponz, escribía de esta forma sobre el arroyo y las reparaciones sobre el puente en su obra “Viage de España”: El camino de Madrid a Ballecas es pésimo en tiempos lluviosos y el arroyo que lo atraviesa llamado Breñigal, peligrosísimo cuando crecen las aguas, en el han perecido no pocos pasajeros; queriéndolo vadear, por evitar un puente de lo más ruin que se puede ver.27 A pesar de su cuestionable estado, continuaría siendo el punto de conexión entre dos ciudades hasta varios siglos más tarde. 26. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.25 27. PONZ, Antonio, 1774. Viage de España. S.l.: s.n. Encontrado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.40 28. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.57
Tal fue la importancia de aquel nodo en las comunicaciones madrileñas y vallecanas que terminó configurando el mayor núcleo de población de Vallecas. La prosperidad industrial concentrada en las áreas periféricas, en detrimento del empobrecimiento del sector agrario por la desvalorización del suelo agrícola, ambas características del siglo XIX, hace que los campesinos se trasladen a las ciudades para conformar esa gran masa de mano de obra no especializada.28 47
Estas configuran las principales causas de un crecimiento en las zonas periféricas aún sin precedentes. Inmensas cantidades de emigrantes procedentes de zonas rurales llegan a la periferia con el fin de poder aspirar a una oportunidad mejor de empleo. En las décadas posteriores la periferia crece sin cesar, pero ningún lugar crece como Vallecas. Su cercanía con Madrid la convierten en el lugar favorito para asentarse. Su capacidad de absorción de emigrantes parece casi infinita, llegando a multiplicar su población por seis en el último cuarto del siglo XIX.29 Un imperio a la necesidad se instala alrededor de la capital siendo Vallecas su principal foco. Ese puente vallecano, a pesar de su precario estado, sirve como primera piedra para establecer el gran barrio vallecano. Construcciones de todo tipo comienzan a erigirse en las proximidades del puente beneficiándose de la excelente comunicación que este proporcionaba. Este es el nacimiento de Puente de Vallecas. Tras décadas de servicio, el puente es demolido en 1923 para dar paso a otro tipo de conexión, esta vez subterránea, la ampliación de la línea 1 del metro madrileño.30 A pesar de su demolición, el puente parece no desaparecer del todo de Vallecas. Al menos para los vallecanos. Uno de los acontecimientos más llamativos, en torno a estas construcciones, ocurrió una noche de 1983. El altercado se inicia con la preparación para la demolición del llamado puente de los tres ojos, un puente situado entre el Cerro Negro y el Cerro de la Plata. Dicho puente había servido como punto de paso 48
29. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.59 30. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.101
Fig 12. Nacimiento del núcleo de Puente de Vallecas entorno al puente homónimo. En rojo el puente sobre el arroyo Abroñigal.
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para la línea de ferrocarril que unía Madrid y Aranjuez, pero con el nuevo ancho de vía de los trenes modernos el puente se habíaquedado obsoleto. Su construcción, de mampostería de ladrillo y tres arcos, de ahí el nombre de puente de los tres ojos, recuerda en cierta forma al puente vallecano construido por Ribera. A la hora de la demolición una muchedumbre de vecinos se reúne con el fin de salvar, lo que para muchos es, el puente que un día dio nombre a todo su barrio, y no como lo que en verdad era, un puente de construcción mucho posterior al primer puente que existió sobre el arroyo Abroñigal. Los vecinos claman contra los técnicos mientras estos ponen las cargas: “¡Ingenieros al paredón!”31 Como si de auténticos criminales se tratase. La carga detona y una intensa humareda se alza en el entorno. Poco a poco la neblina producida por la explosión se disipa. Nadie podía creer lo que dicha niebla ocultaba. El puente permanecía en pie, prácticamente intacto. Los vecinos gritaban de euforia, los arcos del puente, que para algunos eran igual que los de la misma Puerta de Alcalá, habían permanecido impasibles a la explosión. Los ingenieros no habían contado con la robustez de aquella estructura de grandes pilares de ladrillo que se alzaba sobre la ya construida M-30 y que había soportado durante años las grandes cargas de las locomotoras que sobre el transcurrían. A la noche siguiente, la acción de una excavadora sirvió para vencer a aquella mole de ladrillo.32 Con aquella demolición se iba también la identidad de un barrio, que ya sea por confusión o simple convencimiento, había permanecido en la memoria de los vallecanos. Ambos puentes 50
31. CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.250 32. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.250
Fig 13. Puente de los Tres Ojos.
formaron parte del gran catálogo de hitos vallecanos, pero a pesar de ser el mismo tipo de construcción, las causas que los convierten en hitos y la repercusión que tienen en el entorno es completamente diferente. El puente construido por Ribera posee una gran relevancia desde el punto de vista funcional, conectando el gran eje estructural de Vallecas con la ciudad de Madrid. Desde este punto de vista, es tan crucial la función que cumple, que consigue atraer a otras construcciones a su alrededor convirtiéndolo también en un elemento determinante en el desarrollo urbano de la periferia. Por otro lado, el puente de los tres ojos continua la existencia de un límite como son las redes ferroviarias, las cuales terminan por excluir al barrio de Entrevías del resto de Vallecas. No posee una condición de atracción como el anterior puente, más bien configura una frontera, un obstáculo en la ciudad. Esta 51
condición fronteriza no es la que le convierte en un elemento relevante a los ojos de los vallecanos, sino su condición simbólica. La semejanza con el puente vallecano de Ribera, unida a la confusión histórica de los vecinos, le convierten en un símbolo. Un elemento constructor de la imagen de un barrio. En este punto aparece una paradoja. El verdadero puente vallecano, foco de un barrio y verdadero símbolo de su identidad, pasa desapercibido para los vallecanos de principio de siglo XX. No se han constatado protesta alguna por la demolición de aquel primerizo puente. Sin embargo, el puente de los tres ojos, cuyo simple destino era una cuestión funcional, adquiere una condición simbólica irrefutable. Este traspaso de cualidades entre los puentes plantea varias suposiciones. Es posible, que la emoción de disponer del privilegio de una estación de metro que comunique con el centro, supere a la tristeza de la perdida de un elemento de la relevancia como la que poseía aquel puente vallecano; y que por otro lado, la desaparición de un elemento funcional, en sustitución de otro más moderno, como supone la demolición del puente de los tres ojos, sea una ofensa para un barrio maduro como era el de Vallecas durante los años ochenta. Sean cuales sean las causas de este intercambio, el hecho por sí mismo plantea una situación extraordinaria en la historia de los monumentos periféricos.
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Fig 14. Movimiento del hito. Cรณmo el puente de Vallecas se traslado 450 metros al suroeste y rotรณ 38ยบ en la mente de los vallecanos. 0m
100 m
200 m
500 m
TESTIGO El siguiente hito posee unas características formales que le convierten en símbolo indiscutible del entorno ya no solo exclusivo de Vallecas, sino de toda la periferia. El cerro Almodóvar se erige como el punto más elevado de Vallecas. Es esta condición geográfica una de las razones de su relevancia. Esta característica sirvió de foco cultural para la periferia. Hubo una época en la que Vallecas estuvo cerca de sobrepasar a París como capital de la vanguardia mundial. Una tarde de 1927, dos jóvenes artistas se reunían, como casi todas las tardes, en la puerta de Atocha. Desde ese punto se iniciaba asiduamente un recorrido que en ocasiones les dirigía hacia Vallecas. Ese día los dos jóvenes terminaron su recorrido en lo alto del cerro Almodóvar, al que bautizaron con el nombre de cerro Testigo. Este sería el punto donde debía nacer el nuevo arte español.33 Los dos fundadores a los que se refiere el párrafo anterior son Alberto Sánchez y Benjamín Palencia, miembros de la llamada Escuela de Vallecas. En palabras del propio Sánchez: Una vez en lo alto del cerro, de tierras arrasadas por las lluvias, donde solo quedaba algún olivo carcomido, con escasas ramas, abarcábamos un circulo completo, panorama de la tierra imagen de redondez. Aprovechábamos un mojón que allí había, para fiar sobre él nuestra profesión de fe plástica: en una de las caras escribí mis principios, en otra, Palencia puso los suyos, dedicamos la tercera a Picasso.34 54
33. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.107 34. Varios autores., 1984. Escuela de Vallecas 1927-36 1939-42. Imprenta de la Comunidad de Madrid. Encontrado en la obra de: CASTELLANOS, L.H. y COLORADO, C., 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp 108
Fig 15. Fragmento del mapa topográfico de Madrid de 1875, se aprecia el cerro Almodóvar como principal cima geográfica vallecana. Coordenadas (W 3°27’15” - W 3°23’15” / N 40°24’00” - N 40°22’03)
El suceso acontecido en la cima de este montículo periférico sirve de precedente para la construcción de todo un movimiento cultural que aportará una imagen de Vallecas totalmente diferente. Estos artistas “establecieron una visión del paisaje castellano, que era magicista y sensual, en las antípodas de la concepción dolorida, descarnada, fatalista y trágica de los escritores del 98.”35
35. Cita del historiador ensayista, crítico de arte Francisco Calvo Serraller. Encontrado en la obra de: CASTELLANOS, L.H. y COLORADO, C., 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp 108 36. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.33
Este monumento sirve para introducir la materia prima de la que Vallecas se enriqueció durante siglos. El cerro, como prácticamente todo Vallecas, se compone de arcillas blancas (yesos) y arcillas rojas, usados comúnmente para los encalados y la construcción de cerámicas respectivamente. Además de otros materiales como los pedernales, usados para el empedrado de las calles.36 La enorme riqueza en la 55
que se erigía Vallecas la convierten, por denominación del rey Carlos IV, en lugar de realengo, convirtiendo al pueblo en el proveedor por excelencia de pedernales y yesos de la región.37 La abundancia de estos materiales hacia que el terreno fuera lodoso y difícilmente transitable. La situación lleva a que en los años sesenta del siglo pasado se populariza el siguiente eslogan: “Si quiere usted sentir el placer de pisar barro, véngase a Vallecas”38. Tal era la cantidad de materias primas que poseía Vallecas, que a los lados de la carretera de Valencia solo se podían encontrar canteras de yesos y pedernales, que abarcaban prácticamente la totalidad del paisaje.39 La bonanza económica en la que Vallecas se sumergía la convertían en atractivo de toda clase de personas; desde nobles que construían villas de recreo junto a sus explotaciones yeseras o campos de cultivo40, hasta emigrantes del campo que veían en la nueva industria vallecana una oportunidad de trabajo.41 La abundancia no se traduce en calidad. Si por algo eran codiciados los yesos vallecanos no era por su excelente pureza, de hecho estaban mezclados con todo tipo de materiales e impurezas, pero es precisamente esta pobre calidad la que permitía un fraguado más lento que facilitaba su manipulación; es por esta razón por la que adquirieron semejante fama. En el caso de los pedernales que empedraban las calles, eran tan frágiles que finalmente tuvieron que sustituirse por granitos.42 El suelo vallecano será una de las características que marcará los siguientes apartados prácticamente hasta el final de este análisis; y aunque no pueda considerarse como un hito como tal, será pieza fundamental 56
37. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.28 38. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.33 39. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.5937. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.58 40. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.67 41. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. 42. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 33-34
Fig 16. El cerro Testigo. Origen de la nueva vanguardia vallecana.
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de la identidad vallecana y periférica. Finalmente, se debe comentar el nuevo significado que adopta el cerro vallecano. De elemento geográfico de referencia a punto de partida de una nueva vanguardia. De montículo arcilloso, fuente de riquezas de los vallecanos durante la edad media, a símbolo unívoco de la periferia madrileña. Un suceso puede cambiar por completo la percepción de un hito, no por ello renunciando a su anterior significado, sino enriqueciendo a un más el concepto que de él se tiene.
MÁQUINA Las industrias y el transporte han servido de manera diferente a los barrios vallecanos. Respecto a las fábricas y demás situaciones industriales que poblaron Vallecas, no se las reconoce como hitos en el entorno, ya que no cumplen ninguna de las condiciones que los tres autores plantean para ser reconocidos de tal forma. Su única relevancia fue una cuestión económica. Por otro lado algunos medios de transporte contribuyeron a la configuración de la Vallecas actual. En este apartado se profundizará en dichos medios. Las riquezas, anteriormente mencionadas, de los terrenos del sureste debían ser correspondidas con un servicio de transporte que permitiese el rápido traslado de los materiales a la capital. Es así como en enero de 1878, se le concede al ingeniero Luis Figuera Silva la creación de un tranvía que llevara desde Arganda hasta Madrid el tan demandado material.43 Este tranvía conocido 58
43. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.35-36
Fig 17. Ampliación de Puente de Vallecas y aparición de nuevos núcleos en el trayecto del Tren de Vallecas. En línea roja el trayecto del tren de Vallecas.
Fig 18. Aparición de Entrevías y Pozo del Tío Raimundo junto a línea ferroviaria nacional. En línea roja el trayecto de la línea del ferrocarril.
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popularmente como maquinilla o tren yesero, nunca llegó a su destino final en Arganda, siendo su final de trayecto Vallecas. Así fue como el tren de Arganda pasó a convertirse en el tren de Vallecas. Esta magnífica máquina llegó a realizar hasta diez recorridos diarios llevando tanto material yesero como pasajeros que podían optar entre distintas clases en función de lo que estuvieran dispuestos a pagar. Poseía cinco estaciones en poblado: Presilla, Villa Roja, Picazo, Huerta de Hachero y Villa de Vallecas; además de dos estaciones en las canteras y otra en la yesera La Invencible. Esas cinco paradas consolidaron desarrollos urbanísticos a lo largo del recorrido de aquel tren que tantos beneficios traía al pueblo. Sin embargo la gran máquina, que transformaba a Vallecas en una ciudad moderna, sufría tal cantidad de descarrilamientos que en 1931 fue desmantelado definitivamente durante unas protestas por los propios vecinos.44 Si ampliamos la escala, el ferrocarril de ámbito nacional, que partía de las estaciones madrileñas, es uno de los elementos que favorece el desarrollo de los barrios de Entrevías y Pozo del Tío Raimundo. El primer barrio mencionado era lugar de trabajadores de la compañía ferroviaria, el segundo nace de un apeadero de la red ferroviaria.45 Las características que poseía el ferrocarril le convierten en uno de los hitos que poblaron Vallecas. Su carácter de conexión entre puntos le aportan una relevancia suficiente para convertirse en foco de nuevos núcleos de población en el ámbito vallecano.
44. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/ 45. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.106
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Fig 19. Tren de Vallecas iniciando su recorrido desde la industria La Invencible
Fig 20. Los propios vallecanos desmantelan uno de sus hitos.
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IGLESIA Las zonas de culto tendrán en Vallecas una relevancia variable. Su éxito no reside en su localización o configuración, sino más bien en su funcionamiento interno como institución. En este punto se ofrecerán datos que atañen a todas las parroquias por igual, prácticamente sin contar las leves diferencias de público que se pudieran producir entre ellas a lo largo de la historia. El gran templo vallecano se sitúa en el kilómetro cero de Vallecas. En la actual plaza de Juan de Malasaña se encuentra la Iglesia de San Pedro Ad Vincula, construida por Juan de Herrera en el siglo XVII,46 será la principal parroquia de Villa de Vallecas. A pocos kilómetros al noreste de la villa se encuentra la ermita de Nuestra Señora de la Torre, patrona de Vallecas, construida en el siglo XV. Otras ermitas de origen medieval hoy ya son inexistentes, como la que fue la ermita de la Piedad, también en la plaza Juan de Malasaña, o la ermita del Santo Cristo. Prácticamente desde su construcción, estos templos fueron condensadores sociales de las dinámicas vallecanas. Desde los oficios religiosos habituales hasta procesiones se producían, y actualmente se siguen produciendo, en torno a estos hitos.47 Sin embargo, el inicio del siglo XX significa un primer punto de inflexión en la relevancia que poseen las iglesias como puntos de atracción de las dinámicas sociales vallecanas. El anticlericalismo se extiende por toda España y parece que Vallecas es su capital. “Actos como interrumpir las misas mediante sonidos de pitos y trompetas o la participación de vecinos del Pozo del Tío Raimundo en 62
46. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.41 47. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/
Fig 21. Campanario de la Iglesia de San Pedro Ad Vincula. Kilรณmetro 0 vallecano.
Fig 22. Ermita de la Virgen de la Torre, Patrona de Vallecas. Lugar de peregrinaciรณn.
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una de las célebres matanzas de sacerdotes que ocurrieron al comienzo de la guerra”48, pues allí fueron asesinados el obispo de Jaén y su hermana.49 Los vallecanos sienten que Dios les ha dado la espalda y ellos parecen lo suficientemente independientes y convencidos como para poder prescindir de él. Las iglesias pierden poder de atracción hasta convertirse en elementos irrelevantes. Los años posteriores a la guerra civil significan una expansión de Vallecas sin igual. La guerra había agravado las condiciones en el campo ya paupérrimas a finales del siglo XIX. Miles de campesinos llegaban a Vallecas con el fin de encontrar un lugar donde asentarse lo suficientemente cerca de la gran fuente de trabajo que es la capital.50 La necesidad de estas familias era tan alarmante que prescindían de cualquier tipo de salubridad con el fin de poder construir un techo donde cobijarse. Las chabolas se construyen en una noche, para no ser detenidos por los guardas, con los materiales que por allí hubiera.51 Tal llega a ser la extensión de Vallecas que se convierte en el principal asentamiento chabolista de la periferia madrileña. La fama de Vallecas como lugar de acogida hace que campesinos desahuciados en otros puntos de la periferia decidan asentarse en la zona.52 Vallecas se expande de forma caótica, parece no haber tiempo para ningún tipo de planificación y la administración madrileña asistir a tal evento como si este no existiera. Entre 1941 y 1950 la mayor parte de Vallecas no tenía existencia oficial. Para las autoridades, aquello, toda la ancha franja comprendida entre el barrio de Puente de Vallecas y la Villa de Vallecas era zona verde. A pesar de que en realidad hubiese 64
48. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.113 49. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.113 50. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.127 51. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.139-146 52. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.127
Fig 23. La situaciรณn de las dos iglesias histรณricas vallecanas, condensadores sociales vallecanos. En rojo las iglesias
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una abundante población, no se hizo ni el menor intento de dotar a la zona de ningún tipo de servicios ya fueran culturales, sociales o urbano.53 No es hasta los años cincuenta cuando los templos recobraran el poder perdido supliendo la inactividad e impasibilidad de la administración. Probablemente el principal precursor de este renacer sería el padre Llanos, un sacerdote jesuita que en 1956 se mudó al pozo del Tío Raimundo. Vivió como un chabolista más. Fundó la parroquia de San Raimundo donde, además de promulgar la palabra de Dios, se organizaba toda la vida de la comunidad. “El padre Llanos, (...) el más comprometido luchador (...) y sacerdote vallecano,(...) había encontrado a Marx predicando a Cristo.”54 Esta actitud distaba con lo que parecía el interés de las instituciones estatales. La pobreza aportaba una fuente casi infinita de mano de obra barata, unas intenciones que se asemejan más a la época medieval que al periodo contemporáneo.55 Tanto el padre Llanos como párrocos posteriores fueron los verdaderos descubridores y portavoces de los problemas y carencias que afectaban a estos barrios. Las parroquias comenzaron a mutar su función organizando centros de reunión donde se hacían actividades sobre todo para los habitantes más vulnerables, generalmente jóvenes y ancianos. Así es como se fundaron diversos clubes recreativos, como el “Club Recreativo del Cerro del Tío Pío”, el hogar “Providencia del niño y el anciano” en la parroquia Dulce Corazón de María y el “Club Recreativo San Agustín”, en la parroquia de Palomeras Bajas.56 El compromiso de las parroquias no solo 66
53. CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.147 54. CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.153-154 55. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.155 56. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.156-157
Fig 24. Desarrollo de chabolas producidos en Vallecas a partir del aĂąo 1950. En trama de lĂnea se muestran las superficies de desarrollos de chabolas.
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abordaba el problema social sino otros más básicos como las carencias de libertades. Así fue como, en un país donde la libertad de reunión era inexistente, los miembros del Partido Comunista de España organizaron reuniones clandestinas bajo el amparo del sacerdocio. Era tal la situación de complicidad, que no era extraño acudir a misa después de la manifestación o protesta de turno. Es en esta época cuando las parroquias vallecanas se consolidan y proliferan por el territorio.57 En las dos últimas décadas se produce una caída de feligreses constante en los templos de todo el país.58 Las iglesias dejan de poseer esa condición de atracción perpetua para sustituirla por concentraciones temporales. Las características históricas y arquitectónicas convierten a algunas en hitos simbólicos dentro del paisaje.
ESTADIO Diversas han sido siempre las formas en las que los vallecanos dedicaban su ocio. Pero ninguna determinó tanto la ciudad como fueron los toros y el fútbol. Ambas actividades movilizaron, en épocas distintas, a una parte importante de la población vallecana. Los toros tuvieron su lugar reservado en Vallecas más allá de las verbenas locales. Se han llegado a contabilizar hasta cuatro plazas de toros en esta zona, tanto sucesivas como simultáneas, pero más allá de alguna referencia escueta en algún plano catastral, solo se tiene precisa constancia de una 68
57. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp.255-256 58. Dato consultado en: LÓPEZ, Celeste, 2018. Aún menos creyentes. La Vanguardia. [en línea]. Madrid, 2018. Disponible en: https://www.lavanguardia.com/ vida/20180418/442678792299/ espana-creyentes-religion-catolicafe-secularizacion.html.
Fig 25. RelaciĂłn de superficies de los desarrollos chabolistas producidos en la periferia de Madrid en el aĂąo 1950. Vallecas fue el desarrollo de mayor extensiĂłn.
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de ellas.La plaza de Vallecas, de hasta 22.000 espectadores, se inaugura en 1884 se demuele en 1929.59 El torero Guerrita describía así la plaza en 1896: Está emplazada en el Barrio de Nueva Numancia, a dos kilómetros aproximadamente de la población de Madrid. Tiene de obra un muro exterior, las contrabarreras, corales , chiqueros y dependencias. Los asientos son de madera, y están asentados sobre gruesos maderos sostenidos por pies derechos de mucha resistencia. Mide el diámetro de la plaza 49,75 metros, de los que 35 corresponden al redondel. La anchura del callejón es de 1,80. Sostenidas por columnas de hierro tiene 5 palcos capaces para 20 personas, estando destinado en del centro para la presidencia. Tiene cuatro tendidos y una pequeña grada debajo de los palcos. El número de puertas de entrada para el público es de dos...60 Los toros fueron sustituyéndose por juegos igual o más excitantes. El fútbol atrae y atrajo a gran número de aficionados que se agolpaban como podían para ver tales encrucijadas. El primer campo de fútbol profesional de Vallecas se instaló en 1900 en lo que hoy es el parque Amós de Acero.61Pero para hablar de tal deporte en un lugar como Vallecas es obligatorio recurrir al Rayo Vallecano y su entrañable historia. El Rayo se funda en 1924 como una excisión del club numantino, un modesto club vallecano cuyo campo se encontraba en la
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59. CABANERO, Alba, 2017. Se inaugura la Plaza de Toros de Vallecas,Madrid diario. [en línea]. 27 septiembre 2017. Disponible en: https://www.madridiario. es/448559/efemeride-plaza-torosvallecas. 60. GUERRA, Rafael, 1896. La Tauromaquia. S.l.: s.n. Encontrado en la obra de: CASTELLANOS, L.H. y COLORADO, C., 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp 79 61. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/
Fig 26. Toros en Vallecas.
62. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 212 63. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 213-124
calle Peña Gorbea, en lo que comúnmente se llamaba “campo Rodival”, que por aquel entonces se situaba en lo que se podría denominar como el “centro” de aquel núcleo primerizo que fue Puente de Vallecas; muy cerca del eje estructural, la Avenida de la Albufera.62 Este primer campo es recurrir a ese Vallecas de riquezas en el que los vallecanos hundían sus pies en el lodo arcilloso que suministraban a toda la región. Lo que por aquel entonces era síntoma de estatus, a principios de siglo XX era reflejo de pobreza. Los aficionados se apiñaban como podían entre las piedras que rodeaban el campo. Las porterías tardarían en llegar, montones de ropa marcaban el área de gol. Estas precarias condiciones no impedían a los aficionados asistir en millares a contemplar semejante espectáculo deportivo.63 En la temporada 1929-1930 Vallecas inaugura por fin su gran coliseo. El llamado Estadio
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Fig 27. Vallecanos aglomerados entorno al campo Rodival.
de Vallecas se ubica en la zona de Portazgo, en la manzana adyacente a la plaza de toros. Ambos estadios convivieron menos de un año.64 El nuevo estadio vallecano tiene la modesta capacidad de 2.000 espectadores. Su terreno de juego sigue siendo barro; no se poblará de césped hasta los años sesenta. Parece que a Vallecas le cuesta desprenderse de sus raíces. Desde el inicio de la guerra civil hasta casi la década de los cincuenta la actividad rayística sufrirá un periodo de actividad intermitente que culminará en la temporada del año 1947 con la refundación del club deportivo. a partir de este momento se suceden las ampliaciones llegando a albergar hasta 12.000 espectadores. En el año 72 se declara en estado ruinoso y renace de sus escombros cuatro años más tarde, esta vez con espacio para 12.000 espectadores más.65 Los dos grandes centros del espectáculo vallecano tuvieron ritmos y vidas distintos. La de los toros, corta; la del fútbol, realmente extensa. A pesar de las diferencias, ambos estadios fueron los condensadores más eficientes en sus periodos de actividad, que aunque solo se redujera al horario de los 72
64. Observar figura 28, página 73. 65. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 213-124
espectáculos, consiguieron concentrar mayor población que ningún otro evento en Vallecas. El fin de los toros marca el inicio de la época del fútbol, y así como si de una transfusión se tratase, los espectadores taurinos abandonan la plaza esta vez camino a su estadio.
Fig 28. Estadio de Vallecas junto al descampado donde antes se situaba la plaza de toros. La transfusión ya se ha realizado.
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MERCADO El peso de los espacios comerciales ha cambiado drásticamente la configuración urbana. No es el campo de esta investigación profundizar en este aspecto. Se comentará el cambio ocurrido en Vallecas desde un punto de vista simplificado. Las modificaciones en el espacio comercial vallecano comienzan con la venta ambulante. No existe un espacio específico para el comercio. Los establecimientos, o mejor dicho, puestos comerciales se configuran, como un líquido en un recipiente, al espacio público del que disponen. El mercado es un hito temporal que aparece y desaparece. Sin embargo, estos mercados ambulantes, sí que solían concurrir en espacios públicos específicos. Es el caso del mercadillo que se establecía en la calle del Arroyo Olivar o en la actual calle Monte Igueldo antes conocida como la calle Josefina de la Presilla.66 En 1930 se construye el primer espacio dedicado exclusivamente al comercio, más allá de algunos locales comerciales desperdigados que creaban núcleos comerciales menores. Se configura en la actual plaza de Puerto Rubio con el nombre de mercado de San Isidro.67 En 1946 se decide construir un nuevo mercado de abastos junto al anterior que ya no podía abastecer a la gran cantidad de usuarios que poseía. En 1962 un mercado similar se instala en Villa de Vallecas en sustitución de una de los últimos restos de la industria yesera vallecana.. Los mercados se veían acompañados de inauguraciones de galerías comerciales desperdigadas por el entorno vallecano.68 De no poseer un lugar concreto y estable, a tener un espacio 74
66. Dato consultado en: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 195-197 67. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/ 68. Dato consultado en: MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.wordpress. com/
Fig 29. Desarrollos residenciales desde 1990. En rojo los centros comerciales de las Ăşltimas tres dĂŠcadas.
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específico en la ciudad donde establecerse. La llegada de los centros comerciales en la década de los ochenta supone un gran paso en la configuración comercial urbana. La calle comercial que Jane Jacobs promulgaba en su libro de 1961 “Muerte y vida de las grandes ciudades”69 sucumbe a la zonificación de estos grandes complejos. Un artículo del periódico Vallecas de 1985 dice así: “en Vallecas hay de todo. Ya no hace falta desplazarse, o las consiguientes molestias para comprar un simple objeto por raro que sea.”70 Si bien tal afirmación resulta un tanto exagerada, sí que parece profetizar lo que el nuevo milenio preparaba para Vallecas. La construcción del PAU de Vallecas lleva consigo la radicalización de un sistema de zonificación anteriormente expuesto. La construcción del nuevo centro comercial de La Gavia se anuncia como uno de los grandes acontecimientos de la ciudad. El nuevo centro comercial se convierte en el más grande de todo Madrid. Su descomunal superficie llega a concentrar más del 78% del suelo terciario comercial edificado de todo el desarrollo.71 Semejante concentración terciaria deja agonizante el concepto de calle comercial. Los edificios residenciales pueden ahora prescindir de sus locales comerciales en planta baja para recrearse en expandir más si cabe los suelos abiertos privados para disfrute de los propietarios. Los recorridos también se ven modificados. La baja densidad del PAU acompañado de la zonificación obligan a crear un espacio público más adaptado al uso del vehículo privado. Más allá de la cantidad la clave de esta zonificación reside en la variedad. La diversidad de locales comerciales en La Gavia favorecen un uso del edificio 76
69. JACOBS, Jane, 1961. Muerte y vida de las grandes ciudades. Madrid: Madrid Capitán Swing. 70. Cita de artículo de prensa en el periódico Vallecas 1985. Encontrado en la obra: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. pp. 196 71. Dato consultado en: 1997. UZP-1.03 Ensanche de Vallecas Plan General de Ordenación Urbana de Madrid. p 442
22% 78% Fig 30. La zonificaciรณn comercial del ensanche vallecano y la gran variedad de espacios abiertos privados de los edificios residenciales. El 78% de la superficie comercial se concentra en el centro comercial de La Gavia.
mรกs prolongado que el de un mercado de abastos. Los grandes establecimientos de ocio hacen que los usuarios habiten este espacio durante mรกs tiempo. El centro comercial se ha consolidado como el gran hito de atracciรณn del barrio.
78
79
ESCALA MÉTRICA
0m
100 m
200 m
500 m
PARROQUIA D
PARROQUIA S
IGLESIA SAN PEDRO AD VINCULA
ERMITA VIRGEN DE LA TORRE
MERCADO DE ABASTOS DE PUENTE DE
CERRO ALMODÓVAR
ESCALA TEMPORAL
-66 millones de años
S. XV
1.000 m
DEL BUEN PASTOR
MERCADO DE ABASTOS DE VILLA DE VALLECAS
SAN RAIMUNDO
VALLECAS ESTADIO DE VALLECAS
CENTRO COMERCIAL LA GAVIA
Fig 31. Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el estudio histรณrico del รกmbito (Pasado) 1950
1960
1970
2005
1.2.
PRESENTE El imaginario colectivo vallecano configura la Vallecas del presente. Los símbolos del barrio se encuentran en las retinas de sus habitantes. Ante la situación excepcional por la que atraviesa el país la búsqueda de este imaginario se ha realizado por medios digitales. Se ha realizado un mapa de calor que representa las zonas más fotografiadas de Vallecas. Los datos se han obtenido mediante la herramienta Sightsmap1. El mapa de calor ofrece información relativa sobre el simbolismo de los distintos elementos de Vallecas. En la siguiente página se mostrará una axonometría de Vallecas con los ocho elementos más simbolicos. Posteriormente se detallarán los datos obtenidos
83
1. CERRO DEL TÍO PÍO 3. TRAMO ELEVADO M-30 2. PARQUE AMOS ACERO
0 km
1 km
2 km
-
+
8. ECOBULEVAR 7. CERRO ALMODÓVAR 6. IGLESIA DE SAN PEDRO AD VINCULA 4. CENTRO COMERCIAL LA GAVIA
5. VALLECAS 20
Fig 32. Topografía del simbolismo de los hitos vallecanos. Elaboración propia mediante los datos obtenidos de Sightsmap 5 km
El punto de mayor repercusión para el entorno vallecano es el cerro del Tío Pío. Su característica simbólica no la adquiere por la propia topografía del parque, tampoco de su función como zona verde, sino por lo que este terreno permite observar por encima de los edificios aledaños. Una vista panorámica de la totalidad de la ciudad de Madrid. Las excepcionales vistas del parque le convierten en un mirador y en punto de atracción de ciudadanos de toda la ciudad. Así pues, el mayor símbolo de Vallecas, son las vistas de Madrid que desde ella se tiene. Cabe destacar el caso de la promoción de viviendas de Vallecas 20. Es uno de los elementos más fotografiados de Villa de Vallecas. Este edificio residencial destaca por la diferencial formal que plantea a la homogeneidad del entorno. Tanto desde el punto de vista tipológico, bloque abierto frente a la predominancia de la manzana cerrada. Como desde el punto de vista de la escala, con una altura de 74 metros frente a los 24 metros de los edificios aledaños. Así como por el color, de tono oscuro frente a los tonos claros y cálidos del entorno. Las diferencias arquitectónicas confieren al edificio un carácter de símbolo visible a varios kilómetros. Existen otras situaciones similares en Vallecas a un nivel más modesto. La iglesia de San Pedro Ad Vincula cumple con una condición de tiempos medievales. Al ser el edificio más alto del antiguo casco histórico, se convierte en el elemento más visible del mismo. Dicha característica era usual de los poblados medievales para indicar a los ciudadanos la situación de la plaza principal del pueblo. Tanto la iglesia como el edificio residencial Vallecas 20 funcionan como puntos 86
Fig 33. Panorámica desde el Cerro del Tío Pío.
87
74 m
24 m
64 m
22 m
Fig 34. ComparaciĂłn de alturas de dos puntos de referencia perifĂŠricos con su entorno inmediato: Vallecas 20 y la iglesia de San Pedro Ad Vincula
de referencia del núcleo vallecano. Dicha característica viene dada por dos situaciones: la primera, las diferencias formales anteriormente mencionadas; la segunda, su condición de elementos singulares. El hecho de que ambos elementos sean únicos les otorga una virtud de reconocimiento indudable dentro de la ciudad. Duplicarlos sería un hecho suficiente para generar desorientación en el paisaje, perderían la condición de puntos de referencia del entorno periférico. Como se ha podido comprobar anteriormente, la propia función de la construcción en cuestión puede ser el factor determinante para convertirlo en hito urbano. Es el caso del parque Amós Acero y el centro comercial de La Gavia. Las actividades que albergan ambos espacios son suficientes como para conseguir situarlos entre los elementos más fotografiados de Vallecas. En el caso del centro comercial, como ya se ha comentado, su concentración de usos le confiere un protagonismo en el ensanche vallecano sin precedentes. Por otro lado, la situación del parque es más excepcional. Los múltiples eventos que asociaciones vecinales y culturales organizan en él le confieren una cualidad de atracción que de por sí no poseería. Dichas actividades son las que le convierten en uno de los parques vallecanos más emblemáticos. El parque se convierte en el escenario perfecto, como si de un teatro se tratase, para conciertos, obra de teatro o hasta espectáculos circenses. Otro ejemplo peculiar sería el Ecobulevar, situado en un desarrollo urbano al suroeste del casco histórico vallecano. Su singularidad, no solo a nivel de barrio sino a nivel de toda 89
la ciudad, le confiere un carácter simbólico extraordinario. La introducción de un elemento de acondicionamiento bioclimático, así como de condensador social, produce una situación totalmente novedosa en la configuración urbana. El entorno en el que se sitúa es igualmente sorprendente. El desarrollo, aislado del resto de la ciudad, le confiere una imagen insólita, como si de una nave espacial que busca la colonización de nuevos planetas se tratase. El análisis aporta resultados de lo más inesperados. Espacios que, en un principio pueden ser considerados como incómodos y desagradables, terminan conformando uno de los puntos más capturados de la zona. Es el caso del tramo elevado de la M-30 en el inicio de la avenida de la Albufera. Dicho elemento urbano produce un espacio público angosto y oscuro por el que los vallecanos deben adentrarse para llegar a la almendra central madrileña. Las protestas de los vecinos ante tal infraestructura han llevado a la administración municipal a estudiar el posible soterramiento del tramo de circunvalación y así crear una entrada al barrio periférico de la dignidad que se merece. Resulta interesante observar como un elemento cuyos vecinos aborrecen se convierte en una de las imágenes más representativas de una zona. No solo los elementos que enorgullecen a un pueblo forman parte de la imagen de este, también lo configuran los elementos que los avergüenzan. Se da el caso de un simbolismo negativo, asociado a un hecho urbano significativo por sus deficiencias en vez de por sus virtudes.
90
Fig 35. Bulevar de la Naturaleza
Las situaciones analizadas en este apartado han conseguido añadir al estudio situaciones extraordinarias a la concepción del hito periférico. Hasta ahora tales situaciones pueden observarse sin mayor dificultad en barrios céntricos de las grandes ciudades. Se puede afirmar que el pasado y el presente no aporta una gran distinción entre la ciudad central y la periférica.
91
ESCALA MÉTRICA
0m
50 m
100 m
TRAMO ELEVAD CERRO DEL TÍO PÍO
PARQUE AMOS ACERO
ESCALA TEMPORAL
1970
200 m
VALLECAS 20
DO M-30
ECOBULEVAR
ZOOM x5 Fig 36. Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el anรกlisis del simbolismo del รกmbito (Presente) 1975
2005
1.3.
FUTURO(S) En el siguiente apartado se realizará un recorrido virtual por Vallecas, en concreto, por su zona limítrofe con el ámbito rural. Aquel lugar del ámbito que aún a día de hoy es susceptible de transformarse en una parte más del ya extenso territorio que es la periferia. Muchos de los hitos que aquí habitan no han tenido aún la oportunidad de poder funcionar como un día fueron propuestos. Permanecen a la espera de que el tiempo se reanude en esta zona y el desarrollo continúe, o mejor dicho se densifique. Cada uno de los siguientes hitos no plantea una única visión del futuro periférico, sino todo un catálogo de posibles realidades que se producirán en otro tiempo.
95
0m
500 m
1.000 m
2.000 m
Fig 37. Recorrido virtual vallecano. 5.000 m
Fig 38. Panorรกmicas tomadas durante el recorrido virtual por Vallecas.
Mi travesía por el futuro de Vallecas o, mejor dicho, futuros; comienza en la parte sur del llamado Bulevar de la Naturaleza. Ante mí se encuentra una gran estructura metálica cuyos autores denominaban árboles de aire.72 Su presencia no se planeó como una situación permanente, sino más bien, como un suplemento a la carencia de arbolado propio de los nuevos barrios vallecanos. Una vez que la masa arbórea fuera lo suficientemente densa, estos artefactos se desmontarían destino a otro barrio prematuro. Más de una década después, parecen congelados en su entorno. Lo que pretendía ser un gran desarrollo urbano, ha quedado reducido a una única vía que parece condenada a permanecer así, aislada.
Fig 39. Polígono de la Atalayuela. La urbanización más ciudada para servir a la nada.
Doy la espalda al Ecobulevar para tomar la Avenida del Mayorazgo en dirección noroeste y giro a la izquierda en la calle Provisional de 102
72.
Fig 40. Los รกrboles de aire marcan el inicio de la ruta. Su carรกcter temporal ha desaparecido.
la Atalayuela Trece. Frente a mí se observa un inmenso barrio de descampados en el que apenas ha emergido alguna nave industrial solitaria. Decido tomar la calle Provisional de la Atalayuela Once en dirección norte. La soledad de los descampados contrasta con la exquisita urbanización con la que se ha trazado el barrio. Bancos de madera esperan solitarios a que en algún momento un peatón pare a descansar. Decido alejarme de la densidad urbana y explorar un poco más el borde, donde el ser humano y la naturaleza parecen estar en trifulca constante. Tomo la carretera de Villaverde a Vallecas en dirección oeste, camino hacia las grandes naves que distribuyen los alimentos a la región. Me inclino a bordear el espacio entre dos límites, el que impone la vía ferroviaria y el de la autovía estatal. Tras un muro aparecen torres de coches apresados, unos encima del otro en extraña configuración. Parecen evitar ocupar el extenso suelo del que disponen, como si su simple presencia fuese a mancillar un paisaje que, como bien apreciaron los artistas vallecanos, era inigualable. Pasado las torres de automóviles, cambio de rumbo hacia el Arroyo de la Gavia por el camino de Santa María. En mi recorrido, escombros se amontonan a los lados, restos de lo que una vez fue Vallecas, una ciudad fantasma de miles de habitantes. Poco a poco los vestigios de aquella ciudad van disminuyendo a lo largo del camino. Al atravesar un paso subterráneo, que salva la autovía M-31, los restos de la Vallecas imperial desaparecen. Da la sensación de haber atravesado una frontera, las ruinas de lo que una vez fue Vallecas dan paso a un paisaje 104
Fig 41. Paso subterráneo de la M-31.
de cardos, cerros y barro; un paisaje que recuerda a los vanguardistas vallecanos y a esa atracción que manifiestan por el territorio periférico. Todo sucumbe al poder de este paisaje. Las vallas que describen el perímetro de lo que un día iba a ser el parque de La Gavia, proyectado por Toyo Ito, no consiguen detener la fuerza de un paisaje tan crudo y salvaje como este. A su lado, el cerro de la Atalayuela parece haberse rendido a este panorama de secano. Es difícil distinguir sus límites, el montículo se funde con el entorno sin mostrar resistencia. Dirijo mi recorrido de vuelta al asfalto y al ladrillo. Accedo a la Avenida de La Gavia donde los cardos que pueblan los campos vallecanos se han sustituido por grandes grúas torre que ,estáticas en el horizonte, parecen sustentar el entorno; ese entorno paralizado del que ya se han convertido prácticamente en protagonistas. Giro a la derecha en la Avenida del Cerro Milano; las obras paralizadas pueblan esta parte de 105
Fig 42. Parque de la Gavia, Toyo Ito.
Vallecas como si, al igual que los árboles de aire, hubiesen renunciado a su carácter temporal para permanecer en un estado de crecimiento perpetuo. El recorrido me lleva hasta la Avenida de la Gran Vía del Sureste; el único tramo construido de lo que sería el mayor crecimiento urbano de la ciudad. Una vía tan ancha como el Paseo de la Castellana, pero con mayores lujos. Si la Castellana sirve a todos los madrileños, la Avenida de la Gran Vía del Sureste solo abastece a unos pocos miles de afortunados que pueden transitar más holgadamente aún por sus amplias aceras. La topografía central de esta gran vía rememora al Circo Máximo. Las carreras de cuadrigas se han sustituido por tímidos paseos familiares de los vecinos. Cuántos barrios madrileños pueden presumir de semejante monumento a toda una época de excesos y descontrol como fue la etapa precrisis. Sus extremos no son menos 106
Fig 43. Las grúas torre parecen sustentar el paisaje periférico.
sorprendentes. Abruptos terraplenes sobre el campo vallecano seccionan de cuajo la avenida más grande de Vallecas. La ambición vallecana se impone sin respeto alguno al terreno árido periférico con un resultado más inhóspito si cabe, pero mucho más espectacular. Coronando semejante hito a la especulación se encuentra el monolito periférico. Un edificio residencial cuya esbeltez y fachada oscura contrastan con la calidez del entorno. Como la Torre del Faro de Dreamland,73 Coney 107
Fig 45. El monolito vallecano, como el faro de Dreamland74,marca el emplazamiento del circo máximo.
Island; el monolito parece competir con otros hitos madrileños por anunciar la entrada desde el campo hacia la ciudad. Es el símbolo precursor de lo que es el nuevo Vallecas. El desarrollo urbano más ambicioso y descomunal de la capital.
A la izquierda. Fig 44: Perspectiva del circo máximo. Al final, Los Berrocales.
Mi travesía termina frente a un yacimiento árido. Trazas urbanas excavadas sobre el terreno, segmentan el espacio de Los Berrocales. Manzanas ortogonales homogéneas se expanden hasta el horizonte. La imagen recuerda a “La Ciudad del globo cautivo”74. Basamentos arcillosos se preparan para sustentar toda teoría e ideología, para suspender cualquier ley física y para deleitarnos con una nueva forma de 109
entender semejante paisaje. En este caso ya no hay globo que incubar. La parálisis que sufre la periferia es la falta de esencia de la cultura metropolitana, es decir, la ausencia de cambio.75 La egolatría de la periferia es tal, que la ha hecho introducir en un estado atemporal, en el que se globo cautivo del que Koolhaas decía que se alimentaba de las variaciones de las teorías urbanas ha perecido de inanición. La periferia se convierte en “La Ciudad del globo perecido”.
110
Fig 46. La ciudad del globo cautivo.
Fig 47. Los Berrocales. La ciudad del globo perecido.
111
ESCALA MÉTRICA
0m
200 m
500 m
1.000 m
GRÚA TORRE
CERRO DE LA ATALAYUELA
POLÍGO ATALAY DEPÓSITO DE COCHES
ESCALA TEMPORAL
-66 millones de años
1970
2005
2.000 m
PARQUE DE LA GAVIA
LOS BERROCALES
AVENIDA GRAN VÍA DEL SURESTE “CIRCO MÁXIMO”
ONO DE LA YUELA
Fig 48.Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el recorrido virtual del ámbito (Futuro(s))
2. C
CONCLUSIONES
Los tres análisis anteriores han conseguido aportar las diversas causas y efectos de los hitos periféricos generan en el entorno urbano. En el siguiente apartado se procederá a reunir estos resultados con el fin de poder encontrar relaciones entre los diferentes hitos que en un principio pueden parecer inconexos. A lo largo de la investigación se han detectado seis tipos distintos de causas que convierten a un elemento de la periferia madrileña en un hito urbano. Las causas detectadas son la siguientes: funcional, referido a aquellos elementos de la ciudad cuya función les acaba otorgando un estatus mayor respecto al entorno urbano; histórica, en el que los sucesos acontecidos en un lugar concreto le otorgan una condición singular al elemento en cuestión; geográfica, por el cual las propias características del terreno les conceden una importancia mayor respecto a otros puntos cercanos; arquitectónica, en el que las características formales, constructivas o estructurales les aportan una singularidad mayor; punto de observación, por el cual el título de hito se adquiere por ser un mirador de otros hitos urbanos; y finalmente simbólica, en el que la propia existencia de un hecho concreto le convierte en singular respecto a los elementos cercanos, esta característica puede ser adquirida también mediante leyendas y rumores de los habitantes de un lugar concreto.
116
Fig 51. Cerro Almodóvar, ejemplo de hito cuya causa es geográfica e histórica.
Fig 49. Iglesia de San Pedro Ad Vincula, ejemplo de hito cuya causa es arquitectónica.
Fig 52. Plaza de Toros de Vallecas, ejemplo de hito cuya causa es funcional.
Fig 50. Puente de los Tres Ojos, ejemplo de hito cuya causa es simbólica. Fig 53. Cerro del Tío Pío, ejemplo de hito cuya causa es ser punto de observación
117
CAUSAS DE LOS HITOS
Fig 54. Diagrama de clasificación de los hitos periféricos en función de sus causas.
Respecto a los efectos que dichos hitos producen en la ciudad, se han encontrado cuatro variantes. Los efectos encontrados son los siguientes: atractor social, se dice de aquel elemento que por sus características produce una concentración de usuarios mayor que los elementos urbanos más cercanos; condicionante urbano, por el cual la relevancia del elemento ha terminado por definir y determinar los desarrollos de la ciudad; punto de referencia, en el que las características formales del objeto destacan respecto a su entorno inmediato convirtiéndolo en un punto que favorezca la orientación por la ciudad; por último, constructor de imagen, referido a los elementos urbanos cuyas propiedades formales constituyen el imaginario colectivo que los habitantes de una zona poseen de la misma. Las diferencias entre constructor de imagen y punto de referencia residen en la singularidad. Los puntos de referencia son elementos irrepetibles cuya condición única les hace inconfundibles en el paisaje.
120
Fig 57. Tren de Vallecas, ejemplo de hito cuyo efecto es ser condicionante urbano.
Fig 55. Edificio Vallecas 20, ejemplo de hito cuyo efecto es ser punto de referencia
Fig 58. GrĂşas torre, ejemplo de hito cuyo efecto es construir la imagen de l paisaje perifĂŠrico.
Fig 56. Centro comercial la Gavia, ejemplo de hito cuyo efecto es ser atractor social.
121
EFECTOS DE LOS HITOS
Fig 59. Diagrama de clasificación de los hitos periféricos en función de sus efectos.
Las clasificaciones muestran conexiones atípicas. Tanto a nivel causal como a nivel efectivo las iglesias y los centros comerciales funcionan de forma similar. Ambos hitos tienen esta condición por la función que desempeñan y producen efectos similares, de atracción social principalmente. Respecto a los hitos que determinan el desarrollo urbano de una zona detectamos una variedad tipológica importante: un centro comercial, una infraestructura como un puente, un punto de peaje como Portazgo y una red ferroviaria. Se encuentra una mayor variedad también en aquellos elementos que funcionan como puntos de referencia para el entorno: un elemento topográfico, como el cerro Almodóvar, dos iglesias, como San Pedro Ad Vincula y la ermita de la Virgen de la Torre, un edificio residencial, Vallecas 20 y una infraestructura como es el tramo elevado de la M-30. Esta diversidad es intrínseca a los puntos de referencia, su singularidad hace susceptible esta variedad. La mayoría de los elementos poseen una causa funcional y un efecto de atractor social. También se observa una gran número de elementos que construyen la imagen de Vallecas y que poseen una causa relacionada con el simbolismo. Por el lado contrario, las causas menos repetidas son las de punto de observación, causa histórica y geográfica. Se puede afirmar que los criterios que determinan a un elemento como hito, tanto sus causas como sus efectos sobre la ciudad, son más variadas que las propuestas por los tres autores de referencia. A las causas históricas, simbólicas y funcionales se les debe añadir las causas arquitectónicas, geográficas y las de punto de observación. Respecto a los 124
efectos no se aprecian variaciones sustanciales con los propuestos por los autores de referencia. Para conocer en profundidad el funcionamiento de estos hitos será necesario añadir una nueva dimensión a la clasificación: la dimensión temporal. En los siguientes gráficos se mostrarán las causas y efectos de los hitos en relación a su época de actividad.
Pp 126-127: Fig 60. Diagrama temporal de los hitos periféricos en función de sus causas. Pp 128-129: Fig 61. Diagrama temporal de los hitos periféricos en función de sus efectos.
125
DIMENSIÓN TEMPORAL
CAUSAS DE LOS HITOS
DIMENSIÓN TEMPORAL
EFECTOS DE LOS HITOS
Analizando los diagramas anteriores se puede apreciar la abundancia de hitos existentes en la época actual, en relación con épocas pasadas. A pesar de ser una diferencia significativa, la causa más probable es el foco de estudio de esta investigación centrada principalmente en los hitos actuales. Al margen de situaciones producidas como consecuencia de la naturaleza del estudio, se puede observar una continuidad relevante de los hitos que construyen una imagen del entorno estudiado y que sirven de referencia para el mismo. Mayores son las interrupciones que se observan de los hitos cuyas causas son funcionales y cuyos efectos son los de atractores sociales principalmente. Se observa una reducción de actividad de las iglesias en las últimas décadas, la caída progresiva de feligreses reduce su relevancia como hitos sociales dentro de la ciudad. El papel condensador antes producido entorno a la iglesia termina siendo sustituido por el poder de atracción de los edificios comerciales. La fe ha sido sustituida por el consumo. Finalmente, para concluir la lectura de los diagramas temporales, se ha detectado una interrupción de la presencia de hitos de atracción social y condicionantes urbanos y cuya causa principal sea la propia función que dichos elementos desempeñan. Dicha interrupción corresponde a los años comprendidos entre la guerra civil y el fin de la posguerra, casi a finales de la década de los años sesenta. Dicho cese coincide con el crecimiento desmesurado de Vallecas por parte de los emigrantes rurales y la construcción de los poblados dirigidos y los núcleos de absorción.76
130
Fig 62. Calle en el poblado de chabolas cerca del cerro del Tío Pío en los años de la posguerra. Durante estos años Vallecas creció de forma desmesurada y caótica.
Los datos corroboran la relación intrínseca entre el desarrollo de Vallecas y la presencia de sus hitos. Dichos hitos condicionan los desarrollos, condensan las relaciones sociales y construyen una imagen de la periferia. Se han encontrado evidencias de estos sucesos en todos los tramos históricos a excepción del comprendido entre los años 1936 y 1956, comprendidos entre la guerra civil y el periodo de posguerra. Años en los que se produce un vacío de hitos funcionales y de atracción social. La inexistencia de hitos de este tipo acompañado de los desarrollos sucedidos en Vallecas y en la periferia durante estas dos décadas, concluyen que en épocas de necesidad y emergencia como las producidas por una guerra y el periodo de reconstrucción posterior son susceptibles de carecer de hitos que reúnan a la población, que la condensen y la organicen. El caos prevalece al poder de atracción de los hitos. 131
Si se comparan las situaciones observadas en esta investigación con los elementos del centro de las ciudades, se puede observar una diferencia entre los llamados hitos periféricos y los hitos céntricos. Todos aquellos elementos documentados en el apartado 1.3. Futuro(s) son exclusivos de un territorio con una capacidad de expansión prácticamente desconocida. La periferia tiene la capacidad de albergar este tipo de hitos a una escala difícilmente equiparable a las producidas en los hitos céntricos. Por lo tanto, la riqueza de hitos de la periferia es mayor, al menos en diversidad, de la que se puede producir en el centro de las ciudades.
Fig 63. Final de la Avenida de la Gran Vía del Sureste. Fin abrupto de la ciudad.
132
Más allá de los objetivos planteados en esta investigación, el estudio ha corroborado una hipótesis de partida. La ejemplaridad de Vallecas como foco principal de las dinámicas acontecidas en la totalidad de la periferia madrileña. La capitalidad de Vallecas en el sexmo al que pertenecía, ser la primera población periférica con comunicación mediante la red de metro con Madrid, ser el lugar de nacimiento de un movimiento de vanguardia artística que pone de relevancia precisamente la imagen de este paisaje, la evidente superioridad de tamaño desde principios del siglo XX respecto a otras poblaciones, así como de sus desarrollos chabolistas, y de sus planes de crecimiento urbano propuestos, con una superficie mayor incomparable a la de otras promociones en otros puntos de la periferia, la presencia de un estadio en pleno funcionamiento de renombre nacional, la construcción del mayor centro comercial de la ciudad de Madrid y la presencia del único tramo construido de los futuros desarrollos del sureste con una vía tan ancha como el Paseo de la Castellana para un menor número de usuarios son algunas de las características que verifican la relevancia de Vallecas en su entorno. En ningún sitio de la periferia se han dado dichas características con semejante intensidad. Vallecas sirve de precedente para el resto de barrios periféricos. Vallecas es a la periferia, lo que Coney Island es a Manhattan.77 Los hitos terminan siendo los verdaderos elementos constructores de la ciudad. Cuando el caos y la necesidad no lo impiden, estos elementos son el germen de nuevos núcleos, límites, caminos, paisajes y en definitiva de nuevas imágenes. Los hitos son el foco. indiscutible del territorio. 133
Fig 64. Luna Park (Coney Island, Nueva York) de noche a principios del siglo XX. Coney Island, germen de Manhattan.
134
Fig 65. Avenida Gran VĂa del Sureste, Ensanche de Vallecas. Vallecas, germen de la periferia.
135
1880-19 00
1960-1
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-200
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-19
00 20
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900
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AV .D
20
A
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LA
00 -19
E
LB
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RR
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M-3
0
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A DE
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ELE VAD O
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IA
TRA MO
RA
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MERCADO DE SAN ISIDRO
1880
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0-1
PRESILLA
0
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-194 0
<188
-190 0
0
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0-1 196
188
1880
0-1
-190
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0
PUENTE DE LOS TRES OJOS
MERCADO PUENTE DE VALLECAS
CAMPO DE FÚTBOL EL RODIVAL
CERRO DEL TÍO PÍO
1960-1980 0-1
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VILLA ROJA
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1960-1980
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1920-1940 ESTADIO DE VALLECAS
1960
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194 0-1
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196
AS
BOL
CHA
O DE
LAD POB (1950)
1900-192
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0-1
ALB
196
LA
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0
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1920-1940
196
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BL AD 0) O
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95
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0-1
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192 0-1 198 940 0-2 000
192 0-1
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196
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CAMPO DE FÚTBOL
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PARQUE AMOS ACERO
-
CA
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VA
LE
196 0-19 80
0-2 000
AB
CH
NC
IA
0-19 60
18
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-19 00
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O DE
AD BL PO 50) (19
AS194
OL
196 0-19 80
60 19
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1980-2000
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<18
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HUERTA DE HACHERO
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18
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00 -19
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ABO CH BL 0) ADO
0
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95
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0-20
1880-19 00
0
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19 40
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AD BL PO 0) 95 (1
LA
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-198 1960
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2000
1940
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40
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0-2 00
MERCADO VILLA DE VALLECAS
0 96
0
198
40 -19
0-1 194
0 96
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40 19
PARROQUIA BUEN PASTOR
20 19
19
1940 0
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980
98
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<1880
ABO
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1920-1940
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0
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DE
0-1 194 1960
PO
-20
0
00
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198
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95
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40 19
BL 0) AD
O
-1980
-196
1940
0
98
60 19
0-1 196
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0 -194
1920
PARROQUIA DE SAN RAIMUNDO
196 0-1
0
198 0-2 00
20
00
20
1960-1
2000-2020
20
00
60 0-19 194
-20
0
1960
0 96
-1980
0-1 194
98
980
-20
OL
AS
20
20 0-20
CH
AB
200
PO BL AD (19 O DE 50)
1960
-198
0
2000-2020
ECOBULEVAR
980
1960-1
PO (19 BLAD 50 O DE )
2000-2020
CH
AB
OL
AS
PARQUE DE LA GAVIA CERRO DE LA ATALAYUELA
20 -20
POLÍGONO DE LA ATALAYUELA
20
00
00
20
-20 20
00
0 96
20
0-1 194
60 -19
40
20
-20
19
20 0 96
20
0-1 194
-20
00
0
-202
2000
20 -20
00
20
0-1 194
96
0 20
020
-20
0-2
00
200
20
020
0-2
200
CANTERAS DE YESO
0 km
1 km
2 km
5 km
M X10
ERMITA VIRGEN DE LA TORRE
0 96 0-1 194
0
96 0-1 194
0
-200 1980
960
0-1 194 0-1 194 0 96
2000 1980-
-198
1960
198
0-2
000
0
0
2000 1980-
<188
1980 1960-
CERRO ALMODÓVAR “CERRO TESTIGO”
IGLESIA SAN PEDRO AD VINCULA
<1880
VILLA DE ALLECAS
1960
1900-1920
-198
0
0
-198
1960
0-2 1920-1
940
200
020
<1880
40
1920-19
20
00
-20
-20
20
20
20
00
LOS BERROCALES
LEYENDA
20
00
-20
20
CENTRO COMERCIAL LA GAVIA
00
-20
20
Frontera histórica
20
VALLECAS 20
A V .D
E
A
L
0-2
020
Poblado chabolista 1950
L
A
200
B
U
F
E
R
A
-
CA
RR
ET
ER
A
DE
Futuros desarrollos
VA
LE
NCI
A
Movimientos de los hitos Hitos desaparecidos
200 0-2 020
200
0-20
20
Recorrido Tren de Vallecas Recorrido Ferrocarril Eje vallecano
2000
-202
YESERA “LA INVENCIBLE”
0
M-30 Recorrido virtual Arroyo Abroñigal
AV. GRAN VÍA DEL SURESTE “CIRCO MÁXIMO”
HITOS EXISTENTES HITOS DESAPARECIDOS
Fig 66: Los hitos periféricos. Cartografía histórica de Vallecas y las transformaciones de sus hitos 10 km
3
3. BIBLIOGRAFÍA
DOCUMENTOS CONSULTADOS CABANERO, Alba, 2017. Se inaugura la Plaza de Toros de Vallecas. [en línea]. 27 septiembre 2017. Disponible en: https://www.madridiario. es/448559/efemeride-plaza-toros-vallecas. CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. S.l.: El Avapiés. FERNÁNDEZ DE LOS RÍOS, Ángel, 1876. Guía de Madrid : manual del madrileño y del forastero. Madrid: s.n. Encontrado en la obra: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. S.l.: El Avapiés GARCÍA GERMÁN, Jacobo, SORIANO, Federico y URZÁIZ, Pedro, 2019. (PAU)blados. , no. 377, pp. 50-105. GUERRA, Rafael, 1896. La Tauromaquia. S.l.: s.n. Encontrado en la obra: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. S.l.: El Avapiés JACOBS, Jane, 1961. Muerte y vida de las grandes ciudades. Madrid: Madrid Capitán Swing. KOOLHAAS, Rem, 2004. Delirio de Nueva York : un manifiesto retroactivo para Manhattan. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. LÓPEZ, Celeste, 2018. Aún menos creyentes. [en línea]. Madrid, 2018. Disponible en: https://www.lavanguardia.com/ vida/20180418/442678792299/espana-creyentes-religion-catolica-fesecularizacion.html. LYNCH, Kevin, 1966. La imagen de la ciudad. Buenos Aires: Buenos Aires Infinito. ORTEGA RUBIO, Juan, 1921. Historia de Madrid y los pueblos de su provincia. Madrid: Imprenta municipal. Plan General de Ordenación Urbana de Madrid, 1997. 1997. S.l.: s.n. ROSSI, Aldo, 2015. La arquitectura de la ciudad. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. 140
RUBIO MARTÍN, María José y ALCÁZAR PÉREZ, Miguel, [sin fecha]. Vallecas . S.l.: s.n. Encontrado en la obra: CASTELLANOS, Luis H. y COLORADO, Carlos, 1988. Madrid, Villa y Puente: historia de Vallecas. S.l.: El Avapiés SMITHSON, Robert, 2006. Un recorrido por los monumentos de Passaic, Nueva Yersey. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. UNESCO, 1972. Convención sobre la Protección del Patrimonio Mundial Cultural y Natural. 1972. S.l.: s.n.
141
PÁGINAS WEB CONSULTADAS Centro Nacional de Información Geográfica. [en línea].Disponible en: https://www.cnig.es/home Google Maps. [en línea]. Disponible en: https://www.google.es/ mapspreview MARTÍN MORALES, Vicente. Puente de Vallecas: apuntes históricos. [en línea]. Disponible en: https://puentedevallecasblog.wordpress.com/ Sightsmap. [en línea], [sin fecha]. Disponible en: http://www.sightsmap. com/#. Wikimedia commons. [en línea], [sin fecha]. Disponible en: https:// commons.wikimedia.org/wiki/Main_Page
142
REFERENCIAS DE IMÁGENES Fig 1: Madrid sin núcleo. Elaboración propia. Fig 2: Vallecas como ámbito de estudio dentro de la perferia. Elaboración propia. Fig 3: Vallecas, ámbito de estudio. Elaboración propia. Fig 4: Foros romanos. Elemento primario según Aldo Rossi. PIRANESI, Giovanni Battista., ca.1772. Veduta di campo Vaccino. 1772. S.l.: s.n. Fig 5: Centro comercial La Gavia. Elemento primario vallecano. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2011. Centro comercial La Gavia. Elemento primario vallecano. [en línea]. 2011. S.l.: s.n. Disponible en: http://www.idealista.com/news/ archivo/2010/11/03/0269414-las-inauguraciones-de-centroscomerciales-en-espana-se-situan-en-niveles-de-hace-20-anos. Fig 6: Silueta de Manhattan desde Jersey City. Punto de referencia según Kevin Lynch. BLAIR, Andy, 1974. Jersey City - Abandoned, bleak Central Railroad yards and Morris Canal pier ruins. The World Trade Center looks on across the Hudson. [en línea]. 1974. S.l.: s.n. Disponible en: https://www.flickr.com/photos/ wavz13/4062195580/in/photostream/. Fig 7: Silueta de Madrid desde el cerro del Tío Pío. Punto de referencia vallecano. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2019. Silueta de Madrid desde el cerro del Tío Pío [en línea]. 2019. Cerro del Tío Pío: s.n. Disponible en: https://planometromadrid.com.es/elparque-del-cerro-del-tio-pio/. Fig 8: Monumento de las tuberías. Nuevo monumento según Smithson. SMITHSON, Robert, 2006. Monumento de las tuberías. 1967. Passaic, Nueva Jersey: s.n. Un recorrido por los monumentos de Passaic, Nueva Jersey. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. pp 59. Fig 9: Parque La Gavia, Toyo Ito. Nuevo monumento vallecano. C., O., 2016. Parque de La Gavia [en línea]. El Mundo. 2016. Parque de La Gavia: s.n. Disponible en: https://estaticos.elmundo.es/assets/ multimedia/imagenes/2016/11/20/14796747292249.jpg.
143
Fig 10: Esquema del marco de referencias y relaciones entre los distintos conceptos de hito. Elaboración propia. Fig 11: Nacimiento del segundo núcleo vallecano en la antigua carretera de Valencia. Elaboración propia. Fig 12: Nacimiento del núcleo de Puente de Vallecas entorno al puente homónimo. Elaboración propia. Fig 13: Puente de los Tres Ojos. ANÓNIMO, [sin fecha]. Puente de los Tres Ojos [en línea]. Arroyo Abroñigal: s.n. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.files.wordpress.com/2018/10/puente_ tres_ojos_2.jpg. Fig 14: Movimiento del hito. Cómo el puente de Vallecas se traslado 450 metros y rotó 38º en la mente de los vallecanos.. Elaboración propia. Fig 15: Fragmento del mapa topográfico de Madrid de 1875, se aprecia el cerro Almodóvar como principal cima geográfica vallecana. Coordenadas (W 3°27’15” - W 3°23’15” / N 40°24’00” - N 40°22’03). IBÁÑEZ E IBÁÑEZ DE IBERO, Carlos, 1875. Hoja 559 del mapa topográfico nacional. [carte]. S.l.: s.n. Fig 16: El cerro Testigo. Origen de la nueva vanguardia vallecana. ANÓNIMO, 2008. Cerro Almodóvar [en línea]. 2008. Cerro Almodóvar: s.n. Disponible en: http://3.bp.blogspot.com/_ UOCdPRpoq14/SHEERA1DoOI/AAAAAAAAAhY/C5quPGhpxk8/ s640/cerroalmodovar.jpg. Fig 17: Ampliación de Puente de Vallecas y aparición de nuevos núcleos en el trayecto del Tren de Vallecas. Elaboración propia. Fig 18: Aparición de Entrevías y Pozo del Tío Raimundo junto a línea ferroviaria nacional. Elaboración propia. Fig 19: Tren de Vallecas iniciando su recorrido desde la industria La Invencible. ANÓNIMO, [sin fecha]. Tren de Vallecas iniciando su recorrido desde la industria La Invencible [en línea]. S.l.: s.n. Disponible en: https://puentedevallecasblog.files.wordpress. com/2018/10/maquinilla_2.jpg. 144
Fig 20: Los propios vallecanos desmantelan uno de sus hitos. BENÍTEZ GASAUX, A., 1931. Derribo de la «maquinilla» [en línea]. Diario Madrid. 1931. S.l.: s.n. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.files.wordpress.com/2019/01/maquinilla_ derribo.jpg. Fig 21: Campanario de la Iglesia de San Pedro Ad Vincula. Kilómetro 0 vallecano. ANÓNIMO, 2015. San Pedro Ad Vincula [en línea]. 2015. S.l.: s.n. Disponible en: https://commons.wikimedia.org/ wiki/File:Madrid_-_Villa_de_Vallecas_14.jpg. Fig 22: Ermita de la Virgen de la Torre, Patrona de Vallecas.Lugar de peregrinación. ANÓNIMO, 2017. Ermita de la Virgen de la Torre [en línea]. 2017. S.l.: s.n. Disponible en: https://www.archimadrid. org/index.php/oficina/madrid/2-madrid/9020998-la-virgen-dela-torre-patrona-de-vallecas-permanecera-en-su-ermita-hasta-elmes-de-septiembre. Fig 23: La situación de las dos iglesias históricas vallecanas, condensadores sociales vallecanos. Elaboración propia. Fig 24: Desarrollo de chabolas producidos en Vallecas a partir del año 1950. Elaboración propia. Fig 25: Relación de superficies de los desarrollos chabolistas producidos en la periferia de Madrid en el año 1950. Elaboración propia a partir de imágenes aéreas Ortofotos AMS (B) 1956-1957. Fig 26: Toros en Vallecas. ANÓNIMO, 1896. Plaza de Toros de Vallecas [en línea]. Pan y Toros. 1896. S.l.: s.n. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.files.wordpress.com/2018/09/1896_ plaza_toros.jpg. Fig 27: Vallecanos aglomerados entorno al campo Rodival. ANÓNIMO, 1946. Vallecanos aglomerados entorno al campo Rodival [en línea]. 1946. S.l.: s.n. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.files.wordpress.com/2018/10/rodival_2. jpg.
145
Fig 28: Estadio de Vallecas junto al descampado donde antes se situaba la plaza de toros. La transfusión ya se ha realizado. ANÓNIMO, 1927. Estadio de Vallecas y restos de plaza de toros [en línea]. 1927. S.l.: s.n. Disponible en: https://puentedevallecasblog.files. wordpress.com/2018/10/plazatoros_vallecas.jpg. Fig 29: Desarrollos residenciales desde 1990. Elaboración propia. Fig 30: La zonificación comercial del ensanche vallecano y la gran variedad de espacios abiertos privados de los edificios residenciales. El 78% de la superficie comercial se concentra en el centro comercial de La Gavia. Elaboración propia. Fig 31: Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el estudio histórico del ámbito (Pasado). Elaboración propia. Fig 32: Topografía del simbolismo de los hitos vallecanos. Elaboración propia mediante los datos obtenidos de Sightsmap. [en línea]. Disponible en: http://www.sightsmap.com/# Fig 33: Panorámica de Madrid desde el cerro del Tío Pío. Punto de referencia vallecano. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2019. Silueta de Madrid desde el cerro del Tío Pío [en línea]. 2019. Cerro del Tío Pío: s.n. Disponible en: https://planometromadrid. com.es/el-parque-del-cerro-del-tio-pio/. Fig 34: Comparación de alturas de dos puntos de referencia periféricos con su entorno inmediato: Vallecas 20 y la iglesia de San Pedro Ad Vincula. Elaboración propia. Fig 35: Bulevar de la Naturaleza. Modificación a partir de: ANÓNIMO, [sin fecha]. Ecobulevar [en línea]. S.l.: s.n. Disponible en: https://www.arquitecturayempresa.es/sites/default/files/styles/ n1000x540/public/imagenes/noticia/eco-bulevar_de_vallecas_ madrid._ecosistema_urbano_arquitectos.jpg?itok=JaKCb05o. Fig 36: Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el análisis del simbolismo del ámbito (Presente). Elaboración propia. Fig 37: Recorrido virtual vallecano. Elaboración propia.
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Fig 38: Panorámicas tomadas durante el recorrido virtual por Vallecas. Elaboración propia a partir de panorámicas de Streetview. Google Maps. [en línea]. Disponible en: https://www.google.es/ maps/preview Fig 39: Polígono de la Atalayuela. La urbanización más ciudada para servir a la nada. Modificación a partir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Fig 40: Los árboles de aire marcan el inicio de la ruta. Su carácter temporal ha desaparecido. Elaboración propia. Fig 41: Paso subterráneo de la M-31.Modificación a partir de panorámica de Streetview. Google Maps. [en línea]. Disponible en: https:// www.google.es/maps/preview Fig 42: Parque de la Gavia, Toyo Ito. ANÓNIMO, 2017. Parque de la Gavia, Toyo Ito [en línea]. 2017. S.l.: s.n. Disponible en: https:// vallecas.com/wp-content/uploads/2017/09/parque-la-gavia768x461.jpg. Fig 43: Las grúas torre parecen sustentar el paisaje periférico. Modificación a partir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Fig 44: Perspectiva del circo máximo. Al final, Los Berrocales. Elaboración propia. Fig 45: El monolito vallecano, como el faro de «Dreamland»,marca el emplazamiento del «circo máximo». Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2017a. Los Berrocales [en línea]. 2017. S.l.: s.n. Disponible en: https://youtu.be/pbBPP0zUb2A. Fig 46: La ciudad del globo cautivo. Modifiación a partir de: VRIESENDORP, M., 1978. La Ciudad del Globo Cautivo. 1978. S.l.: s.n. Aparece en: KOOLHAAS, R., 2004. Delirio de Nueva York : un manifiesto retroactivo para Manhattan. 1978. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. pp 295. Fig 47: Los Berrocales. La ciudad del globo perecido. Modificación
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a partir de: ANÓNIMO, [sin fecha]. Los Berrocales [en línea]. S.l.: s.n. Disponible en: https://aavvmadrid.org/wp-content/ uploads/2017/01/Los-Berrocales-no-queremos-un-nuevo-zombide-la-burbuja-inmobiliaria-1.jpg. Fig 48: Hitos existentes actualmente descubiertos mediante el recorrido virtual del ámbito [Futuro(s)]. Elaboración propia. Fig 49: Iglesia de San Pedro Ad Vincula, ejemplo de hito cuya causa es arquitectónica.. ANÓNIMO, 2015. San Pedro Ad Vincula [en línea]. 2015. S.l.: s.n. Disponible en: https://commons.wikimedia. org/wiki/File:Madrid_-_Villa_de_Vallecas_14.jpg. Fig 50: Puente de los Tres Ojos, ejemplo de hito cuya causa es simbólica. ANÓNIMO, [sin fecha]. Puente de los Tres Ojos [en línea]. Arroyo Abroñigal: s.n. Disponible en: https://puentedevallecasblog.files. wordpress.com/2018/10/puente_tres_ojos_2.jpg. Fig 51: Cerro Almodóvar, ejemplo de hito cuya causa es geográfica e histórica. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2008. Cerro Almodóvar [en línea]. 2008. Cerro Almodóvar: s.n. Disponible en: http://3.bp.blogspot.com/_UOCdPRpoq14/SHEERA1DoOI/ AAAAAAAAAhY/C5quPGhpxk8/s640/cerroalmodovar.jpg. Fig 52: Plaza de Toros de Vallecas, ejemplo de hito cuya causa es funcional. ANÓNIMO, 1896. Plaza de Toros de Vallecas [en línea]. Pan y Toros. 1896. S.l.: s.n. Disponible en: https:// puentedevallecasblog.files.wordpress.com/2018/09/1896_plaza_ toros.jpg. Fig 53: Cerro del Tío Pío, ejemplo de hito cuya causa es ser punto de observación. ANÓNIMO, 2019. Silueta de Madrid desde el cerro del Tío Pío [en línea]. 2019. Cerro del Tío Pío: s.n. Disponible en: https://planometromadrid.com.es/el-parque-del-cerro-del-tiopio/. Fig 54: Diagrama de clasificación de los hitos periféricos en función de sus causas. Elaboración propia.
148
Fig 55: Edificio Vallecas 20, ejemplo de hito cuyo efecto es ser punto de referencia. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2017a. Los Berrocales [en línea]. 2017. S.l.: s.n. Disponible en: https://youtu. be/pbBPP0zUb2A. Fig 56: Centro comercial la Gavia, ejemplo de hito cuyo efecto es ser atractor social. Modificación a partir de: ANÓNIMO, 2011. Centro comercial La Gavia. Elemento primario vallecano. [en línea]. 2011. S.l.: s.n. Disponible en: http://www.idealista.com/news/ archivo/2010/11/03/0269414-las-inauguraciones-de-centroscomerciales-en-espana-se-situan-en-niveles-de-hace-20-anos. Fig 57: Tren de Vallecas, ejemplo de hito cuyo efecto es ser condicionante urbano. ANÓNIMO, [sin fecha]. Tren de Vallecas iniciando su recorrido desde la industria La Invencible [en línea]. S.l.: s.n. Disponible en: https://puentedevallecasblog.files. wordpress.com/2018/10/maquinilla_2.jpg. Fig 58: Grúas torre, ejemplo de hito cuyo efecto es construir la imagen de l paisaje periférico. Modificación a partir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Fig 59: Diagrama de clasificación de los hitos periféricos en función de sus efectos. Elaboración propia. Fig 60: Diagrama temporal de los hitos periféricos en función de sus causas. Elaboración propia. Fig 61: Diagrama temporal de los hitos periféricos en función de sus efectos. Elaboración propia. Fig 62: Calle en el poblado de chabolas cerca del cerro del Tío Pío en los años de la posguerra. Durante estos años Vallecas creció de forma desmesurada y caótica. ANÓNIMO, 1960. Una de las calles sin asfaltar del barrio, sobre 1960 [en línea]. 1960. S.l.: s.n. Disponible en: https://www.publico.es/files/article_main//files/ crop/ Fig 63: Final de la Avenida de la Gran Vía del Sureste. Fin abrupto de la ciudad. Modificación a partir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. 149
Fig 64: Luna Park (Coney Island, Nueva York) de noche a principios del siglo XX. Coney Island, germen de Manhattan. Modificación a partir de: KOOLHAAS, R., 2004. Delirio de Nueva York : un manifiesto retroactivo para Manhattan. 1978. Barcelona: Barcelona Gustavo Gili. pp 40. Fig 65: Avenida Gran Vía del Sureste, Ensanche de Vallecas. Vallecas, germen de la periferia. Modificación apartir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Fig 66: Los hitos periféricos. Cartografía histórica de Vallecas y las transformaciones de sus hitos. Elaboración propia. Imagen de portada y contraportada: Elaboración propia. Imagen pp 4-5: Elaboración propia. Imagen: 0. Introducción. pp 8-9. Modificación apartir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Imagen: 1. Análisis. pp 40-41. Elaboración propia. Imagen: 2. Conclusiones. pp 114-115. Modificación apartir de: ALONSO, R., 2017. Sín Título. 2017. S.l.: s.n. Imagen: 3. Bibliografía. pp 138-139. Elaboración propia.
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AGRADECIMIENTOS Este trabajo de investigación no podría haber sido posible sin la tutela de Paco Arqués y Concha Lapayese. Gracias a su apoyo y por enseñarme a mirar la periferia, mi hogar, de una forma tan extraordinaria y apasionada. Agradezco esta oportunidad de poder poner en valor el territorio limítrofe de la ciudad. No hubiera sido factible sin las investigaciones previas de Rem Koolhaas, Aldo Rossi, Robert Smithson y Kevin Lynch. Ha sido todo un placer haber encontrado estos autores en mi camino por la periferia. Por último, esta investigación tiene una especial deuda con Isabel Bernal García y su excelente contribución a la expresión escrita de este texto con sus excepcionales recomendaciones.
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